十 二
Mingyu gruñó como respuesta, atacando la nívea piel del cuello del editor, las largas manos se ocuparon de empujar la tela de su playera hasta pasarla por la cabeza de Wonwoo y dejarla caer sobre la alfombra de la habitación, volviendo a atrapar sus labios entre los propios en un hambriento beso.
Wonwoo separó sus piernas para acomodar al castaño entre ellas, sus bocas no se separaron ni por un instante. Mingyu movió sus caderas circularmente, más lento de lo que Wonwoo hubiera deseado, haciendo que sus erecciones aún bajo la ropa se frotaran mientras sus lenguas jugaban peligrosamente.
El de piel canela descendió con húmedos besos por el pecho del editor, atrapando uno de sus pezones entre sus labios, succionando suavemente mientras las manos de Wonwoo se enredaban entre los cabellos castaños, jalando de ellos cuando la lengua de Mingyu bajó hasta su abdomen, mordiendo sobre el prominente hueso de sus caderas hasta dejar rojo tras su paso.
El mayor bajo sus manos de los mechones castaños hacia su nuca y finalmente empujó suavemente sus hombros, la desesperación de conocer el pecho de su novio nublando sus sentidos.
Mingyu detuvo sus acciones y se enderezó, ayudando a su novio cuyas exasperadas manos buscaban retirar su playera del pijama. Tomó las orillas de la misma y en un rápido movimiento se deshizo de ella arrojándola en algún lugar de la habitación.
Wonwoo no pudo evitar mojar sus labios cuando su mirada repasó cada uno de los bordes de los marcados músculos que estaban frente a él, una fina capa de sudor se encontraba ya abrazando la piel canela. El solo pensamiento de ser acorralado por los fuertes brazos de su novio envió una corriente de calor a su miembro.
Le tomó de la nuca para acercarle a sus labios, los largos y delgados dedos repasando los bordes del pecho ajeno, queriendo aprender cada uno de ellos. Sus uñas tatuando medias lunas sobre la piel cada que el castaño succionaba y mordía el labio inferior contrario.
Los gemidos de ambos quedan sellados entre sus besos, los dedos de Mingyu se cuelan bajo el pantalón de su novio, bajándolo de inmediato. Jugando con la suave piel de sus muslos, sacando agudos gemidos del mayor.
Mingyu acaricia hasta donde el bóxer le permite, dejando que la puntas de sus dedos entren peligrosamente bajo el, pero sin tocar aún la erección del editor. Wonwoo curva la espalda cuando el calor provocado por las caricias del más alto llegan a un lugar tan íntimo.
Sus bocas se separan al mismo tiempo que Mingyu se deshace de la última prenda en el cuerpo de su novio, admirando por un momento desde sus mejillas sonrojadas, sus labios entreabiertos y su cuerpo cubierto con manchas rojas. Mismas que Mingyu decide repartir sobre la pálida piel de los muslos de Wonwoo, provocando que el pecho de su novio se sacudiera de repente, un fuerte jadeo escapando por los rosados labios.
Antes de continuar Mingyu se estiró sobre la cama hasta alcanzar uno de los cajones de su mueble de noche, sacando una pequeña botella de lubricante y un condón.
Wonwoo casi grita cuando Mingyu envuelve su descuidada erección en su mano, masturbándole lentamente, sus dígitos, ya empapados de lubricante, acariciando su entrada por fuera. Mingyu apretaba con cuidado la base del miembro subiendo a la misma velocidad, su dedo entrando hasta el nudillo.
Su vista era nublada por puro placer, las manos de Mingyu haciendo maravillas sobre su cuerpo. La molestia de un segundo y tercer dígito fue prácticamente nula, el mayor concentrándose en la presión que ejercía el pulgar de su amante sobre la punta de su pene.
Mingyu avanzaba lentamente, asegurándose de tratar a su novio con todo el cuidado posible, como si un frágil material fuera el receptor de sus besos y caricias. Por lo tanto fue Wonwoo quién pidió entre gemidos que le penetrará.
—Amor... por favor~ —chilló, deteniendo la mano de Mingyu cuyos dedos se abrían paso entre sus paredes.
Su novio obedeció sin dudar, pronto los dígitos en su interior fueron reemplazados por la palpitante erección del menor, haciéndole gritar cuando se hundió por completo en su estrecha entrada, sus uñas pintando líneas rojas en la corpulenta espalda de su novio.
Se quedaron un momento así, disfrutando de la sensación de estar unidos, se besaron con lujuria nuevamente, esperando a que Wonwoo se acostumbrará al tamaño de su amante.
Las embestidas iniciaron lentas, cada movimiento haciéndoles jadear debido a la caliente sensación. La velocidad aumentó cuando las caderas del editor se encontraron con las de su novio a la mitad.
Las manos de Mingyu viajaron hasta las caderas ajenas, afirmándose a ellas cuando la velocidad tomó un ritmo salvaje, elevándolas.
Wonwoo tenía los ojos cerrados y la boca entreabierta dejando sacar agudos gemidos que inundaron la habitación, el nombre de su novio mezclándose entre sus jadeos repitiéndolo una y otra vez.
Mingyu abusó de la zona erógena de su novio hasta que las piernas de Wonwoo comenzaron a temblar anunciando lo cerca que estaba de su orgasmo, su mano recorrió el cuerpo bajo suyo y tomo su erección, masturbándole siendo ayudado por la fricción que sus cuerpos juntos creaban. Sacó su miembro y entró con fuerza un par de veces más hasta sentir el cálido líquido salir de la longitud de su novio, manchando de blanco ambos vientres. Su interior se apretó de tal manera que Mingyu no soportó mucho hasta que se corrió con fuerza.
Los fuertes brazos envolvieron a Wonwoo, el rostro de su novio jadeando sobre su cuello, ambos se quedaron así unos momentos disfrutando de los espasmos de placer que sacudían sus cuerpos.
La nariz del menor recorrió su mejilla, el editor volteó a verle con una cansada sonrisa, acercándose para repartir cortos besos sobre sus hinchados labios, el castaño acariciando el costado de Wonwoo, repartiendo sus caricias por el rostro de su amante.
—Bebé~ ...estoy todo sudoroso —Wonwoo se quejó sin muchas ganas pues siempre disfrutaba de las muestras de cariño del menor.
—Mh... no importa—sus risas se fundieron en un beso más largo, Mingyu salió del interior de Wonwoo, levantándose de la cama y desechando el condón en el bote de basura del baño, regresando con un poco de papel para ayudar a limpiar a su novio.
Cuando Mingyu volvió a la cama, Wonwoo ya le esperaba con los brazos abiertos, su cuerpo acurrucándose casi de inmediato en su fornido pecho, acariciando las pequeñas marcas que aun aparecían sobre la piel.
Mingyu levantó el rostro del mayor de la barbilla, besándole un par de veces antes de dejar caer su cabeza sobre la almohada.
—Te quiero— Wonwoo murmura con voz somnolienta pero honesta, Mingyu se alegra de la oscuridad del cuarto y del estado de somnolencia de su novio pues así no es visible lo alto que sus pómulos llegaron cuando sonrió al escuchar esas palabras salir de sus adictivos labios.
—También te quiero, mi amor—plantó un beso sobre el cabello de Wonwoo y después de unos momentos en silencio y suaves caricias el sueño les venció.
~ ✩ ~
—¿Mingyu?— una voz femenina le llamo, el sol sobre sus ojos le obligó a mover su rostro hacia un lado, apenas enfocando a la persona que estaba parada de frente a él —¿Mingyu? — le llamaron nuevamente.
—¿Nayoung? —fue todo lo que pudo pronunciar, la voz quedándose atrapada en su garganta.
—¿Qué estás haciendo Mingyu? —el castaño se puso de pie lentamente, su vista aún borrosa pero caminando lentamente hacia ella, tratando de enfocar su rostro sin mucho éxito —Lo estás echando todo a perder— por el tono de su voz Nayoung parecía molesta.
—¿De qué hablas?—apenas pudo visualizar como los hombros de Nayoung caían en un rápido movimiento de fastidio.
—Éste es mi juego —se dio la vuelta alejándose de Mingyu.
—¡Nayoung!— un grito ahogado apenas salió de sus labios, tratando con todas sus fuerzas de seguirla pero sus piernas parecían no responder.
—¡Y son mis reglas!—fue lo último que pudo escuchar antes de que la figura de Nayoung se perdiera entre el follaje del mismo prado dónde se encontraban la última vez que soñó con ella.
—¡Nayoung!— Mingyu no podía estar seguro si la había llamado en su sueño o en el momento en que se encontró a sí mismo sentado sobre su cama, una capa de sudor en su frente y un espantado y somnoliento Wonwoo tomándole del brazo.
—Gyu, ¿estás bien? —casi se derrite cuando se cruzó con la preocupada mirada de su novio, sus ojitos apenas pudiendo quedarse abiertos.
—Sí... sí, estoy bien, sólo fue una pesadilla, no quise despertarte— su mano acarició la mejilla de su novio, quién recargo el peso de su cabeza sobre ella.
—No te preocupes, no es algo que puedas controlar, anda vamos a descansar—Wonwoo se dejó caer en el colchón, llevando al mayor consigo, pareció mágico la manera en que Mingyu durmió de nuevo, su rostro enterrado en el cuello de su novio y abrazándose a su pecho. El aroma de Wonwoo fue todo lo que necesito para alejar a sus fantasmas.
~ ✩ ~
La mañana siguiente era domingo y Mingyu debía presentarse a trabajar más tarde de lo normal. El chef se encontraba en la ducha mientras su novio veía la televisión en el cuarto, vestido únicamente con la playera que le habían prestado la noche anterior y su ropa interior.
El celular de Wonwoo comenzó a sonar con una alarma que había olvidado apagar. Se puso de pie y se acerco hasta el mueble de la televisión en donde había botado el aparato la noche anterior.
La alarma fue silenciada y el celular volvió a ser colocado en uno de los estantes del mueble. Wonwoo notó como había un par de cuadros con fotografías colocados unos sobre otros en el mismo espacio.
Mingyu quizás tardaría otro rato en la ducha, y supuso que no había nada de malo con ver algunas fotografías del pasado de su novio.
El primer cuadro le hizo sonreír instantáneamente, Mingyu tendría unos cuatro o cinco años, usaba una gorra roja y un puchero que hacía notar sus mejillas redondas, silenciosamente tomó su teléfono para fotografiar aquel cuadro, era demasiado adorable.
Pasó por otros tres marcos de fotografías, la primera de la adolescencia de su novio, la apertura del restaurante y otra con sus padres. Tomó el último cuadro entre sus manos, Mingyu y Minghao sonreían hacia la cámara, por el ángulo la foto parecía haber sido tomada por el más alto, el fondo no era muy claro pero era una especie de parque o bosque, un lago apenas se notaba sobre la cabeza de Minghao, sin embargo una tercera persona se encontraba entre ellos.
Una chica casi tan alta como Minghao, cabello castaño que sobrepasaba sus hombros, sus facciones eran delicadas pero bien trazadas, una tímida sonrisa que apenas dejaba ver sus dientes en el tierno rostro.
Era hermosa. Y por alguna razón ese pensamiento le hizo sentir un malestar en el estómago. Pero él ni si quiera sabía quién era ella, podría ser sólo una amiga, incluso un familiar, ¿Verdad?.
Mientras Wonwoo se debatía entre sí mismo le fue imposible escuchar como la llave de la ducha era cerrada y a los pocos minutos Mingyu salió por la puerta del baño, vestido en jeans y una playera blanca, la toalla revolviendo su cabello mojado.
—¿Wonwoo? — le llamó al verlo estático, mirando, casi asustado, algo que se encontraba entre sus manos, algo que Mingyu no lograba ver.
Wonwoo saltó del susto al escuchar la voz ajena, el marco resbalándose entre su agarre. El estruendo del vidrio rompiéndose contra el suelo le hizo dar un paso atrás.
—¡Cuidado! —Mingyu se acercó apresuradamente a su novio, no quería que algún vidrio terminará encajado en la planta de sus pies descalzos.
Mingyu abrazó las caderas ajenas y le elevó, los brazos de Wonwoo enredándose rápidamente en sus hombros, camino hasta la cama para sentarlo, no escuchó las disculpas de su novio mientras su prioridad fue revisar que ningún vidrio se hubiera colgado entre su pálida piel.
—Estoy bien, no pasa nada—Wonwoo le aseguró, tomando su muñeca, al fin obteniendo la atención de los ojos preocupados de Mingyu —. Lo siento mucho, debí ser más cuidadoso... bueno, de hecho no debí meterme en cosas que no me importan, pero me dio curiosidad ver tus fotos, eras tan tierno de pequeño — subió las manos hasta sus mejillas, apretándolas y sacando un quejido vergonzoso de los labios del chef.
—Won~ ¿Por qué tuviste que ver esa justamente?
—Tus mejillas era tan gorditas—dijo enternecido, aún sin soltar sus mejillas a pesar del gesto de reproché en el rostro de su novio.
—Me costó mucho deshacerme de ellas, ahora soy más guapo, ¿no?— aún con sus mejillas apresadas, enarcó una de sus cejas adornando una prepotente mirada.
—Claro que lo eres —el de cabello oscuro dejó un rápido beso en sus labios y por fin soltó su rostro, mirando a sus espaldas el vidrio en pedazos —Disculpa el desastre, y lo de tu foto.
Mingyu observó por primera vez al suelo, reconociendo de inmediato la fotografía en el piso. Abrió su boca para decir algo, pero al voltear el rostro se encontró con la mirada de culpa de Wonwoo y lo único que hizo fue tomar su mano.
—No importa, es sólo vidrio—dijo antes de atraer su mano a sus labios y besar sus nudillos.
Y aquella frase pareció levantar un peso en sobre sus hombros que ni si quiera sabía que tenía hasta ese momento.
~ ✩ ~
—¿¡Hiciste qué!?— La voz de Minghao llenó el lobby del bistro vacío, a excepción de ellos dos, al estar tan cerca de la hora de cierre.
—Rompí el cuadro de la fotografía, pero él dijo que estaba bien, que sólo se trataba de vidrio ¿Por qué te exaltas tanto?—Wonwoo miró al mejor amigo de su novio con extrañeza.
—A ver, no, creo que no te estoy entendiendo—Minghao sacudió su cabeza un par de veces—me dijiste que rompiste el cuadro de una foto en dónde aparecíamos Mingyu y yo junto a una chica— Wonwoo asintió —; cabello castaño, largo, no parecía que sonreía mucho— Wonwoo asintió ante cada dato, como un testigo que corroboraba lo que había visto —. ¿Y él dijo que solamente era vidrio?— el editor rodó los ojos, perdiendo la paciencia con el saucier —. Wonwoo, eres mi héroe.
—¿Eh? —la última vez que reviso, hacer un desastre con vidrio en la alfombra de tu novio no contaba como ser un héroe en el diccionario de Wonwoo.
—Hyung, esa chica era Nayoung— Minghao le dijo con emoción, como si fuera una pista importante que en realidad no le decía nada.
—¿Quién es Nayoung?— Minghao frunció el ceño y su sonrisa desapareció.
~ ✩ ~
—Creo que será mejor que Mingyu te lo explique—fueron las palabras que rondaban por su cabeza mientras iba sentado de copiloto en el auto de su novio, el lunes Wonwoo partiría a Busan así que decidieron cenar en una pequeña cafetería cerca de la casa del mayor.
Mingyu hablaba acerca de cómo Woozi parecía ser el único que dominaba la técnica del perfecto croissant en todo Seúl, Wonwoo asentía sin escuchar las oraciones completas y acariciando el dorso de la mano libre del castaño con su pulgar.
El auto se estacionó frente al condominio dónde vivía el mayor. Wonwoo supo que si no se atrevía a preguntarlo ahora el tema seguiría rondando por su mente en todo el viaje a Busan.
—Gyu— le llamó con voz pequeña, su novio le miró, tratando de descifrar su mirada, sabía que algo le ocurría desde que salieron del bistro.
—¿Mh? ¿Qué pasa? Haz estado pensando en algo durante toda la noche— Wonwoo asintió y Mingyu cerró los labios, permitiéndole que prosiguiera.
—¿Quién es Nayoung?—Mingyu separó sus manos entrelazadas, jugando con sus propios dedos y eso levantó todas las alertas en la cabeza de Wonwoo.
—¿Quién te habló sobre ella? —Mingyu miraba hacia el frente, las tranquilas calles de Seúl parecían casi vacías el domingo por la noche.
—Yo... le conté a Minghao...—el castaño no le dejo terminar, echando la cabeza hacia atrás, soltando un gruñido de frustración.
—Sabía que tarde o temprano iba a meter sus narices en-... —Wonwoo le interrumpió de inmediato.
—No, no, no fue así, yo le conté que me sentía culpable por haber destrozado el vidrio de la foto, después de todo él también aparecía en ella y cuando le describí la imagen él se veía muy sorprendido que tú hubieras estado tan tranquilo, creí que era extraño y él dijo que la chica en la foto era Nayoung, parecía muy emocionado y cuando le dije que no la conocía su semblante cambio por completo ¿Por qué? —Mingyu permaneció en silencio, el volante siendo más interesante de repente.
El único sonido que atravesó el silencio durante unos segundos fue la voz del locutor que sonaba en la radio, anunciando las 11:00 pm.
—Won... es una larga historia y mañana tienes que levantarte muy temprano, prefiero que descanses— Mingyu levantó los seguros de las puertas del auto.
—¿Cómo voy a descansar así? Solamente quiero saber quién esa persona ¿Por qué te pones así?— La ansiedad le estaba haciendo hablar más rápido y alto de lo normal, ésta persona parecía ser importante para él y ahora su novio no quería contarle nada acerca de ella. Wonwoo tuvo mucho miedo, no quería perder a Mingyu.
—Después Wonwoo...
—Después, ¿Cuándo?
—Cuando regreses de Busan —Mingyu pareció asustarse de igual forma al escuchar como Wonwoo perdía la paciencia, buscó su mirada para tranquilizarlo—. Lo prometo— Wonwoo se detuvo, respirando hondo para calmar los latidos de su asustado corazón —. No es un tema del que me guste hablar, pero... quiero que lo sepas, y si tarde en contarte de ella, es porque yo también necesito tiempo para ordenar mis ideas—la mano del editor se encontraba de nuevo envuelta entre las de su novio.
—Está bien, lo entiendo, hablaremos cuando tú lo decidas—el editor le regalo una sincera sonrisa, dejando un casto beso sobre sus labios —.Te quiero— susurró aún con los ojos cerrados y sus labios apenas rozando los contrarios, Mingyu sonrió y le besó de nuevo, esta vez por más tiempo y moviendo sus labios.
—También te quiero, nunca lo dudes, te voy a extrañar— era la primera vez que permanecían separados por tanto tiempo desde que iniciaron su noviazgo, incluso desde que se conocieron.
—Y yo a ti, ¿Quién va a cocinar para mí todos los días? —Mingyu soltó una carcajada.
—O sea que lo único que vas a extrañar de mí es que te alimente— Wonwoo rió, arrugando la nariz.
—Claro que no~ —canturreó.
—Te voy a llamar todos los días—Wonwoo asintió y le besó una última vez antes de salir del auto agitando su mano en señal de despedida.
Cuando Mingyu se aseguro de que su novio había entrado y la luz de su departamento se había encendido puso en marcha el auto, manejando hacia su hogar.
Nunca creyó que hablaría de Nayoung con alguien más que no fueran sus amigos, pero Wonwoo lo valía todo.
~ ✩ ~
Minghao jugaba con las llaves del bistro en la mano, mirando hacia el suelo, inmerso en sus pensamientos. Mencionar a Nayoung fue un accidente, cuando escuchó a Wonwoo hablarle de lo tranquilo que su amigo había respondido cuando su fotografía favorita había sido dañada, una sensación de alivio le embargo. Mingyu había permanecido sujeto de Nayoung por tanto tiempo que saber que al fin su corazón se estaba abriendo lo suficiente hacia el editor como para olvidarle le pareció algo increíble.
Pero jamás se imaginó que Mingyu olvidaría, o evitaría, hablar de alguien que había sido tan importante en su vida por los últimos años, y mucho menos con su nuevo novio.
—¡Minghao ya no puedo más! ¡Ráscame el brazo! —Soonyoung salió por las puertas traseras del establecimiento, su antebrazo siendo presionado por su mano, plástico adherible pegado a su piel protegiendo el nuevo tatuaje de la cabeza de un tigre blanco.
—¡Que ni se te ocurra! —Woozi salió detrás de él unos segundos después, su sudadera puesta únicamente hasta el cuello. Soonyoung había intentado durante los últimos días que alguien rascara su brazo a escondidas de su novio, aún cuando su tatuador le había especificado que no era una buena idea, pues la piel en donde la tinta había sido aplicada aún no debía regenerarse.
—Soonyoung, yo mismo pague el tatuaje, no pidas que haga más por ti— Minghao le miró aburrido, Woozi le obligó a pagar el nuevo tatuaje que cubría la pequeña e inocente travesura que había hecho. Fue un alivio que la piel de Soonyoung no fuera infectada al haber descuidado el primer tatuaje que Minghao había creado y que soportara lo suficiente como para ser completamente tapado unas semanas después.
—Eres cruel, pero justo— Soonyoung le miró con respeto, Woozi terminó de colocarse la sudadera y rodando los ojos tomó a su novio de la mano, cargando ambas mochilas en el brazo.
—¿Te pasa algo? Has estado más serio de lo normal desde hace un rato— Joshua le preguntó, saliendo del restaurante de la mano de Seungcheol.
—Creo que hablé de más— Minghao hizo una mueca, suspirando cuando Jun le arrojó su bufanda en la cara, seguramente la había olvidado en la barra de nuevo, la enredo en su cuello y prosiguió —. Por accidente mencioné a Nayoung frente a Wonwoo— sabía que no obtendría una reacción de sus amigos, pues ellos, al igual que él una horas antes, creían que Wonwoo estaba al pendiente de aquello —. No tenía ni idea, Mingyu no le había contado nada sobre ella —la sorpresa en los rostros de todos fue evidente, incluso del siempre serio Woozi.
—¿Qué? —preguntó Seungcheol —¿Cómo le pudo ocultar eso?— Minghao se hundió de hombros
—Ni si quiera ha podido hablar con nosotros acerca de ella, todo lo que sabemos fue lo que Minghao nos dijo, la verdad no me sorprende tanto —Jun murmuró, buscando las llaves de su auto entre la basura de su bolso.
—Igual no es algo que le ocultas a tu pareja—dijo Joshua.
En ese momento su móvil vibró, la pantalla iluminando con un nuevo mensaje de Mingyu, "genial".
💩 Gyu 💩
Wonwoo me dijo lo que pasó... hablemos mañana.
Minghao soltó un quejido, echando su cabeza hacia atrás, Jun le arrebató el celular y les mostró el mensaje a todos mientras él cerraba las puertas del restaurante sin ánimos.
—Fue un gusto conocerte Hao —Seungcheol se burló mientras caminaba junto a su novio hacia su motocicleta
—Nos vemos mañana, perdedores. Tú no Minghao, tú ya estás muerto— Woozi se mofó caminando hasta la puerta del copiloto de su auto —¡Soonyoung, basta! —gritó antes de entrar cuando descubrió a su novio rozando su tatuaje contra la puerta del auto.
—¿Gustas que te lleve a tu casa? Quizás sea la última vez que te vea, hasta podemos besarnos para que hayas realizado todos tus sueños antes de morir —Jun pasó un brazo por sus hombros, una mueca coqueta en su rostro, Minghao bufó y se sacudió su brazo, pero de igual manera azotó la puerta de la camioneta de su amigo cuando entró.
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¡Hola! ¡Al fin pude publicar! Como les dije estas últimas dos semanas fueron muy pesadas, el capítulo lo pude escribir de pedacitos en pedacitos cuando tenía tiempo libre, lo único que escribí seguido fue el porno, porque obviamente no podía ser interrumpida 😏
No quiero asustarlas pero /les susurra/ ya se viene lo chido 👀
El final de la historia está acercándose cada vez más, ya estoy planeando la división de los capítulos que van a seguir y fue cuando me di cuenta que ya quedan muy pocos lol. Me emociona terminar proyectos pero igual me pone triste, te encariñas mucho con los personajes y quisiera alargarme más pero no quisiera que la historia se alejara de al trama principal ni hacer capítulos sólo de relleno.
Como pueden ver el Meanie está justo como me gusta, bien rellenitos de azúcar pero lo único que les puedo decir es que no tomen nada por seguro.
Es apreciada cualquier idea de parejas que les gustaría que escribiera, yo shipeo todo 😉, excepto el JiCheol, no me maten pero creo que han notado que nunca los hago pareja, pero para mí son tan amigos, y su amistad es tan bonita que no los puedo ver románticamente, lo siento 😬
La canción es de mis favoritas de los Arctic Monkeys y la estuve escuchando en repetición durante el proceso del capítulo, tiene vibra sensualona 😏
Gracias por todo su apoyo, sé que siempre se los digo pero nunca me deja de asombrar lo pendientes que están de la historia y lo mucho que esperan por el capítulo, gracias por cada comentario, por cada visita, por cada voto 💖 ¡USTEDES SON LO MEJOR! 💖
Hasta la siguiente actualización~ 🌵
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