- por supuesto que conozco este lugar de hamburguesas.— nos paramos al frente del local. Creí que casi nadie lo conocía.— yo salí con la chica que trabaja aquí. Se llama Lucía. Muy sexy.

- okay, sin comentarios.— entre y el detrás mío.

Pedimos dos hamburguesas de las normales. Queso y carne. Nada fuera de lo ordinario. Me alegraba que Roger tuviera camioneta pues así no teníamos que caminar hasta aquí. Estaba un poco lejos de la tienda de música pero es que me encanta una buena hamburguesa de aquí con unas papas a la francesa grandes y refresco.

Y luego me quejo de que estoy gorda. Pero no importa, solo se vive una vez. Pero por ejemplo en mi casa, nunca hay comida chatarra. Mi papa no compra porque no le gusta, ni a mi hermana. Los dos siempre están comiendo ensalada o cosas así nutritivas. No me quejo, me encanta, es muy rica la ensalada pero cada que quiero un poco de comida chatarra, tengo que comerla a escondidas. Y luego conocí este lugar, de hamburguesas ricas y baratas. Venía  aquí con mi mamá cuando era su cumpleaños. A ella le encantaban también las papas a la francesa de aquí.

Roger quizá termine siendo mi amigo, vaya alguien a quien contarle mis problemas y al que invite a comer hamburguesas conmigo. Por algo se apareció en mi vida de repente, y por el lo vuelvo a ver. Siempre he pensado que la gente que está en tu vida está pro algo. Y este chico rubio no será la excepción.

- ¿a dónde vas?— Roger abrió la puerta para salir del local. Creí que comeríamos aquí y todo ello.— hay aquí muchas mesas y no hay nadie

- vente baquetas, vamos a comer a el parque cerca de aquí.— acepte y lo seguí.

Como dije, aquí estaba lejos de donde vivía y todo eso entonces no conocía pero él dice que cuando pasamos en la camioneta por aquí, él vio un parque cerca que le llamó la atención. Así que acepte, en fin ya estoy aquí y mejor disfruto todo lo que está por venir el día de hoy.

El parque si estaba muy lindo, y lo que más me gustaba es que estaba solo. Como dije, me estrés a un poco el ruido. Por eso no quería ir a McDonalds, preferí un lugar calmado, y este lo era. Inclusive tenía un río. Que genial estaba aquí. Definitivamente este será mi nuevo lugar de paz.

Nos sentamos en el pasto y sacamos de la comida. No lo dude dos veces y empecé a comer de mi hamburguesa. Roger solo me miraba comerla y me hacía sentir incomoda.

- ¿piensas comer tu hamburguesa?— dije con comida en la boca.— o solo me veras comer todo este rato.

- es que te ves muy chistosa.— me limpie la boca con una servilleta y baje la hamburguesa.— no, sigue comiendo. Disfruto de verte hacerlo.

- olvídalo, me da miedo el que me veas comer.— me limpie las manos y me recargue en el árbol detrás mío.— y bien... ¿Puedo saber al menos tu apellido?

- Taylor.— reí. — ¿qué tiene de chistoso mi apellido?

- es nombre de chica. Roger Taylor, vaya que buen nombre.— este se recarga en el mismo árbol y se pone a un lado mío.— muy bien, Roger Taylor. Ahora ya sé tu nombre.

- y tú eres Emma...

- Beach.— ahora el se ríe.— bueno te dejo reírte de mi apellido. Playa, lo entiendo.

- Emma Beach, lindo.— empezó ahora sí a comer su hamburguesas.— Wow sí que son buenas aquí. Buena elección.

- que te dije, se de comida.— saque mi libreta y me senté enfrente de él.— okay ahora no te muevas.

- pero ni siquiera hemos acabado de comer Emma.— me fui gateando a donde está y le quite la hamburguesa. Empecé a peinar de su cabello y me quedé viendo a sus ojos.

- sí pero, ya me llego la inspiración.— que pena con el que me quede viéndolo tanto tiempo. No podía evitarlo, me gustaban sus ojos. Este me tomó de la cabeza para acercarme a él y fue ahí cuando reaccione y me quite de inmediato.— bien, si. Estas perfecto así. No te muevas.

- no lo haré.— y se pone de perfil, viendo hacia el río.— ¿de lado está bien?

- si...

Y así fue como empecé a dibujar de su rostro. Me di cuenta de las lindos rasgos de su rostro. Su nariz era linda de lado, su sonrisa también... Y quisiera poder hacerle justicia a sus ojos. Pero como éste era un dibujo a lápiz, el color de sus ojos no podría ser representado debidamente. Su cabello era genial, com o todos los chicos de este año lo quieren tener. Se ve que se lo cuidaba demasiado. O así lo tenía tal vez.

Y creo que lo termine, así que deje el dibujo en el pasto y me acosté.

- ¿qué te parece?— deje que el lo tomará, no quería ver su expresión al verlo.— si lo odias, no digas nada.

- ¿estás loca? Me encanta.— sonreí, claro que él no podía ver eso ya que estaba sentado el.— dibujas demasiado bien, Emma. Hablo en serio.

- gracias Rog.– me levante y este también detrás mío.— espero y me califiquen bien.

- por supuesto que así será, y todo es porque dibujaste al hombre más guapo de todos.— le di un codazo y este me lo regresa.

Ya que estábamos a la orilla del río yo caigo a él rió por el codazo.

- ¡Roger!— este apenado me toma de la mano para poder ayudarme a parar. Pero yo lo jale y ahora caemos los dos.— ahora pareces un perro mojado.

- ¿ah sí?— me empieza a lanzar agua y yo a él.

Nos acercamos más al río para estar literal dentro del agua, nadando. El agua estaba fría pero no nos importó pues estábamos pasando un buen rato ahí jugando. Este me tomó de la cintura y me detuve para que ya no lanzará agua.
No puedo creer lo que voy a decir pero quería besarlo en ese momento. Me acerqué a él par hacerlo y este se voltea a ver a otro lado.

- quizá debemos volver, antes de que se oscurezca.— lo mire muy confundida. Este quito sus manos de mi cintura y empieza a caminar para salir del río.

- okay... Creo.— dije para mí.

Debería irme acostumbrando a no gustarle a los chicos. Huh.