🍒Capítulo VII
↪Uk.
El despertador de mi teléfono sonó con aquel repetitivo pitido que llegaba a ser tan molesto, estiré mi brazo con cierta pereza y con un simple movimiento de pulgar de abajo hacía arriba apagué la alarma, agarré el teléfono de una y miré mejor la hora, las 7:30 de la mañana, un sábado, se me hace tarde la verdad, no entiendo como hay gente que se despierta como las 8 o 9 de la mañana, pero bueno...
Me senté en la cama, encendí la luz del techo y tardé un par de parpadeos en acostumbrarme en esta, realmente sentía mis parpados pesados, la semana de clases fue realmente agotadora.
Me bajé de mi cama y lo primero que hice fue hacerla; colocar las mantas, las almohadas, los cojines y la colcha, siempre tuve esa manía, si la cama no está hecha parece que toda la habitación estuviera desordenada, ¿no os pasa?
Me dirigí al armario mientras intentaba estirarme un poco, saqué unos pantalones beige, una camisa blanca y un jersey en un tono marrón, de zapatillas unas deportivas blancas sin más, ni sabía de que marca eran, solo sé que me costaron demasiado para ser unas simples zapatillas blancas, según Francia la moda no tiene límites de precio... pero 54 euros para unas zapatillas es demasiado de verdad.
Salí de mi habitación y fui al baño, se escuchaba alguna que otra voz en el piso de abajo, seguramente mis padres. Entré a la habitación y cerré la puerta, dejé la ropa sobre la encimera del lavabo y encendí el calentador, demasiado frío para ser septiembre, ¿será culpa del cambio climático? a saber.
Aunque hiciera tanto frío encendí el agua de la ducha dejando que saliera el agua fría, no sé, nunca me gustó eso de duchas calientes donde todo el baño se llena de vapor y al abrir la puerta te choca el frio del exterior, siento como si me fuera a ahogar por el humo, quizás cosa del asma, aunque España solía decir que eso era porque soy muy delicado, ¡No es mi culpa que él se duche con el agua a punto de evaporación!
Dejando los pensamientos atrás me quité el pijama de cuadros que tenía junto a la ropa interior y los calcetines, dejándolo todo en el cesto de la ropa sucia, fui a la ducha, iba a entrar cuando me detuve enfrente del espejo, estaba despeinado y tenía algo de ojeras de no haber dormido bien el resto de la semana por haber estado organizando las cosas de bachiller y haciendo los deberes... ya hasta nos habían puesto exámenes por lo que había tenido que estudiar cada noche también... Suspiré y estiré levemente la piel de mis mejillas dejando notar más el tono morado que tenían las ojeras, debería dormir más y no madrugar tanto... creo...
Bajé la vista hacía mi cuerpo, no lo había notado porque realmente nunca me miraba al espejo desnudo o mientras me cambiaba pero así viéndolo de frente realmente era muy... bajo en forma. Estaba delgado, se me notaba levemente la clavícula, pero he estado comiendo incluso de más últimamente... Sé que no es bueno eso de estar comparándose con otros ya que los metabolismos no funcionan igual y cada cuerpo funciona diferente pero es raro, Italia también estaba delgado pero él tenía cierto músculo, mis compañeros el año pasado ninguno estaba tan delgado incluso había alguno que otro con cierto cuerpo deportivo, ¡No es que lo supiera por nada raro! ¡Son cosas que uno veía en los vestuarios a la hora de deporte! ¿Francia también se compararía así? No, si ella es a la que las demás chicas de la clase envidiaban, lo máximo que le han dicho es que es demasiado alta pero así se ve linda... ¿le molestará que yo sea más bajo que ella? Dios... Uk deja de pensar en eso anda.
De una vez entré a la ducha, pero igualmente esos pensamientos de comparación no se iban, ahí estaba yo, bajo el agua helada comparando mentalmente mi cuerpo con los de los demás hombres que había visto, ni si quiera mis hermanos eran así, Irlanda todavía tenía 12, la verdad, no puedo compárame con un niño de 12 años... Gales tenía... ¿15? y él si tenía cierto músculo, claro, él hacía deporte... pero no, a ver, ya, que son menores a mi, no me puedo comparar con alguien menor a mi... a ver... Italia también seguía esa línea, si es que era el alto rubio de telenovela... dios... ¿sus hermanos? a ver, Portugal y España... la verdad solo los vi así para una comparación reciente una vez que fuimos a la playa el año pasado, Portugal pues... el cuerpo normal de un adolescente de 16, la verdad, no hay mucho que decir, y supongo que España también aunque él no se quitaba la camisa, aww... ese día fue divertido, habría que repetirlo el siguiente verano.
Agarré el gel de baño y la esponja, empezando a enjuagar mi cuerpo mientras los pensamientos seguían, ojalá poder simplemente distraerme con cualquier cosa como hace España, seguro él ni si quiera hubiera pensado en algo así, no le importaría, es tan despreocupado que a veces da rabia... pero la verdad tampoco le culpo, ojalá poder ser así de... "no me importa nada", dios... ya veras como eso le traerá problemas en un futuro. El idiota... ahg... a ver, se le quiere, sí, es mi amigo, pero a veces va tan de pasota que acaba en malas, como cuando se comió algo caducado y dijo que no iba a pasar nadar, que solo era un dolor de estómago... acabó en el hospital el idiota, ¿y quienes le tuvimos que acompañar? Pues yo e Italia, tú di que sí. O cuando le dio por tirarse rampa abajo con el skate y casi le atropella un camión, encima se acabó rompiendo un brazo porque no pudo frenar a tiempo y su única solución para no ser atropellado fue saltar del skate, si es que era imbécil, ¿Quién lo llevó al hospital ese día? pues yo... creo que tengo más recuerdos suyos en el hospital que en cualquier otro sitio. ¿Cómo había acabado pensando en todo eso? no lo sé, lo típico de que saltas de un pensamiento a otro, quién sabe, como las trapas de una serie que empiezan yendo a comprar algo y terminan salvando al mundo, pues con los pensamientos pasa lo mismo, ¿no?
Una vez enjuagado agarré el champú y seguí lavándome el pelo aunque mi mente ya se había perdido en recuerdos con el español.
Realmente nos conocemos de pequeños, hay más recuerdos de lo que pensaba... pero la mayoría sigue siendo en el hospital... mira que es torpe... Es curioso porque aun con un brazo roto o algo así él seguía riendo, siempre se ríe de sus desgracias, supongo que es su forma de sobrellevarlas, haciendo humor de eso, reírse y cuando se ríe las pequitas que tiene se remueven dando una imagen como si estuvieran bailando, y cuando llega a ese punto de llorar de tanto reír y se le iluminan sus ojos verdes con cierto tono de marrón, o cuando se pone a jugar con el piercing de su lengua...
Ese piercing, ¿no le molestará al comer? o al lamer algo... no sé, como los típicos helados estos cilindros que se lamen o chupan... debería preguntárselo, tampoco sé si el piercing tocará el helado o no...
Y ahí, ese momento donde tu mente es tu peor enemiga, lo que iba a ser solo imaginarme como sería si él lamiera el polo para ver si el piercing tocaba o no este, un intento de imaginación automático más que deseado, pasó a algo más subido de tono.
— ¿Por qué quieres saber eso Ruru? — Comentó aquel reflejo del español que mi mente había creado en un escenario imaginario, arrodillado frente a mi en una cama cualquiera mientras su mano se dirigía de mis mejillas hacía el cierre de mi pantalón. — Si tanto te interesa podrías probarlo por ti mismo... — Incitó mientras baja el cierre y...
— ¡AH! — Sacudí mi cabeza en busca de librarme de aquella ilusión, únicamente logrando que el champú de mi pelo cayera en mis ojos. — SHIT! —Llevé mis manos a estos, intentando sacarlo como reflejo.
— Uk! — Comentó una voz femenina desde fuera tras unos leves golpes en la puerta — Are you okay honey?
— Y-Yes Mom! — Conteste — I only got shampoo in my eyes!
— Flush your eyes with cool water! — y tras ese consejo escuché como sus pasos se alejaban.
Dios, no sé que me alarmó más, el champú en los ojos, mi madre o esa escena que generó mi mente por toda la cara... deben de ser las hormonas Uk... cálmate dios, si tú estas con Francia... pero nunca te has imaginado a ella así... ¡Bueno pero de una no deberías tener esos pensamientos dios! ¡Deja de hablar solo que pareces loco!
— ... — Apoyé mi cabeza contra la pared de la ducha, suspirando y dejando que el agua que caía enjuagase mi pelo. — Fucking imagination...
Eché mi cabeza para atrás dejando que esta ves el jabón no cayera por mi rostro, abrí con cuidado y molestia los ojos intentando enjuagarlos, una vez esto cumplido terminé de enjuagar mi pelo, estaba dispuesto a cerrar el grifo de una vez y salir de la ducha cuando me di cuenta de un último problema... y no pienso especificar de que hablo.
— This must be a joke — Suspiré con molestia, donde un pequeño cabezazo contra la pared de la ducha.
Una vez todo solucionado, ya sí que sí, el baño limpio y ordenado y yo vestido y peinado salí de aquella habitación, seguramente rojo cual tomate por culpa del último inconveniente, ¡y no! antes de que penséis eso no me masturbé, solo esperé a que pasara y ya... solo que tardó más de lo previsto.
— ¡Por fin sales! ¡Poco más y se hace de noche! — Contestó Gales mientras entraba con su ropa al baño, sin esperar ninguna respuesta ante su queja y cerrando la puerta de una, generando un portazo que me espantó.
— Dios... que mal educado... — Reproché, pero bueno, según mi madre Gales esta pasando por la época "no es una etapa mamá" que yo nunca tuve, así que... mal por él... supongo.
Fui a mi habitación y agarré el teléfono sobre mi cama, al encenderlo pude ver 2 cosas, la primera la hora, las 8:02 am, y la segunda unos mensajes por el grupo de WhatsApp que tenías pues... Francia, Italia, Portugal, España y yo... ¿Quiénes van a ser?
Desbloqueé el teléfono y entre a la app, estaban hablando de quedar mas tarde a dar una vuelta, bueno, lo estaban hablando Francia e Italia.
France.
¿Qué dicen tus hermanos?
Italy.
Nada, están durmiendo, que ayer salieron
de fiesta y llegaron borrachos
Seguro se negaran por la resaca.
France.
Nada pues quedamos los 3 y ya otro día
los 5.
Spainita.
Q eres?
la agenda de Uk para hablar x él?
Italy.
¿Cuándo te has despertado tú?
France >Respuesta Spainita.
Te voy a regalar un diccionario por tu
cumpleaños.
Spainita.
Lo usaré pr liarme los porros 😔👌
Decidí ignorar la "pelea" que se iba a formar, conociéndolos duraba un rato, guardé el teléfono en el bolsillo de mi pantalón y bajé a la cocina.
— Buenos días — Saludé a ambos de mis padres mientras me dirigía a la nevera, sacando el cartón de leche de esta.
Mi madre se acercó, dándome un beso en la mejilla a la par que me saludaba de vuelta.
— ¿Vas a salir? — Comentó mi madre, Escocia, mientras servía café en tres tazas, supongo que una de esas era para Gales y las otras dos para ellos.
— Están hablando de ir a dar una vuelta los del grupo, pero España y Francia se han puesto a pelear así que a saber. — Reí levemente al imaginarme la de barbaridades que se estarían diciendo ahora mismo a la par que sacaba una taza y una bolsa de té negro.
— ¿Quiénes son "los del grupo"? — Preguntó mi padre, Inglaterra, no sé, os los presento por si os interesa.
— Pues los de siempre — Contesté con ironía mientras echaba agua a la taza con la bolsita del té, recibiendo algo del vapor que soltaba en la cara.
— ¿Quiénes son "los de siempre"? — Volvió a contestar.
— Hay Ingla... no seas así... pues Francia y los hijos de Castilla, ¿Quiénes van a ser? — Contestó mi madre, agradecido la verdad.
— ¿No te juntas mucho con esos 3? — Volvió a preguntar.
— Son mis amigos de toda la vida... no sé. — Dije, sin siquiera mirarle.
— Reino Unido Edwin... — Replicó. — Mira a tu padre cuando te habla. — Sin más me tuve que girar, viendo a los ojos sobre mis gafas y las suyas. — No me gusta que te juntes con los hijos de Castilla. — Dijo sin más.
— ¿Por? — Pregunté.
— Todo el barrio sabe que de esos tres solo se libra el mayor — Hizo una pequeña pausa. — No quiero que mi heredero se junte con drogadictos.
Vale... sé que lo drogadicto claro que no iba para mí, pero fue molesto escucharlo.
— No fuman cuando yo estoy enfrente... —Comenté.
— Igual. — Sentenció, solo me giré a ver a mi madre la cual se acercó a mi, besando mi frente.
— Ya sabes, mientras me mandes un mensaje cuando llegues y vuelvas antes de las 10 todo perfecto. — Me aclaró con una sonrisa, la cual le devolví.
Terminé de preparar mi té y salí de la cocina junto a la taza, no di ni dos pasos lejos del arco cuando escuché de nuevo las voces.
— Ya te digo yo que como uno de esos dos hippies fumetas le pegue lo homosexual a mi hijo voy a casa de Castilla y le rompo las piernas.
— Inglaterra... Uk ya tiene 17 años, déjale hacer lo que quiera...
Solo subí las escaleras, ya conocía ese ambiente tan incomodo que se llegaba generando desde como... 14 años... en esta casa.
— ¡Oh! ¡Irlanda! — Detuve el menor nada más me lo crucé a mitad de escaleras.
— ¿Sí? — Respondió con alegría, llevaba una falda de cuadros.
— ... Ve a cambiarte anda... — Comenté, su rostro de felicidad cambió al instante.
— Pero me gusta la falda — Comentó en un tono triste, lo sé, tiene 12 años, y que sea un chico no significa que no pueda usar falda... pero...
— Papá no esta de humor.
Y nada más esas palabras salieron de mi boca el menor subió corriendo las escaleras, dirigiéndose hacía su habitación lo más rápido posible... era triste ver como entendía tan rápido ese tipo de cosas aun siendo un niño.
2489 palabras.
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