~~Dos años después~~

—Tae Hyun, terminamos.

—¿Ahora por qué? —no sé cuantas veces he escuchado esas palabras en este año—. Beom, no armes otra escenita, ya estoy harto.

Pensé que como otras veces él me diría una de sus estúpidas razones por la cual merecía terminar, pero no, está vez se quedó callado. Beom Gyu y yo llevamos un poco más de un año de relación, si eso se puede llamar a lo nuestro.

Durante este tiempo puedo decir que lo conozco muy bien.

—¿No vas a responder? —inquirí un poco molesto— Genial, entonces quedemos así. —declaré está vez levantándome del asiento para tomar mi chaqueta.

Pensé que bromeaba, que tan pronto cuando diera un paso se aferraría a mi y me pediría disculpas. Pero eso nunca ocurrió, voltee a verlo y él se mantenía con la mirada pérdida en la mesa, me sentí un poco preocupado pero aún así no volví a mi lugar.

Cuando salí del establecimiento mi corazón se oprimió con fuerza. ¿Era real? ¿De verdad hemos terminado nuestra relación? No podía creerlo, en serio. Volví a casa sin dejar de sentir esa molestia en mi pecho.

Sinceramente le había tomado aprecio a Beom Gyu pero aún no podía decir que sentía algo más por él.

Porque no era así, yo amaba a Soo Bin y aunque tenga una relación con ese idiota de Yeon Jun, eso no cambiaría lo que siento. Está bien, quizá mañana a Beom Gyu se le pase su mal humor.

Durante el resto de la noche me la pase tocando la guitarra y luego cerca de la una de la madrugada fui a darme una ducha. Después de cambiarme revisé mi celular, no tenía llamadas o mensajes ridículos de Beom. Decidí ir a dormir, tenía que estar en la universidad temprano.

—¡Maldición! —corrí desesperado por todo el departamento— Estas muerto, Choi Beom Gyu. ¡Agh!

Miré el reloj en la pared sólo quedaba media hora para llegar a clases. Generalmente Beom Gyu siempre llegaba temprano para despertarme o a mi nariz llegaba el aroma de un delicioso desayuno, pero tanto hoy, como los siguientes días fueron distintos.

—Sunbae —Eun Bi mi compañera de clases se hizo a un lado para que pudiera ir a mi puesto—. El profesor Lee me dijo que lo espera en su oficina al finalizar el periodo.

—¿Para qué? —dije molesto, sorprendiendo a Eun Bi— lo siento, estoy de mal humor.

—Lo he notado. Y no sé específicamente para qué pero escuché que está relacionado con el recital de la universidad.

—Recital... —suspire— no estoy interesado en participar.

Ella se encogió de hombros al momento llegó el profesor de álgebra y comenzó las clases. En ningún momento dejé de pensar en Beom.

Y entonces recordé el ultimo día que lo vi.

Terminamos.

Sacudí mi cabeza desechando la idea de que Beom no estaba actuando como otras veces. Al terminó de las clases, me dediqué a tomar mis cosas sin dejar de ser interrogado por Eun Bi.

—¿Beom Gyu sunbenim está enfermo? No ha venido a verte.

—No lo sé —respondí—, iré con el profesor.

Recordar a Beom Gyu me ponía de muy mal humor, y ocasionaba esa molestia tan fuerte que no podía respirar bien. Salí sin despedirme de Eun Bi. Crucé los pasillos que conducía a la sala de profesores, y fue ahí cuando vi a Beom, tuve intenciones de acercarme pero me detuve al ver como aquel chico pelinegro se le acercó para...

—¡Choi Beom Gyu! —grité, sus ojos se abrieron sorprendidos pero la desvío al instante a la persona a su lado.

Mis piernas caminaron por si solas hasta ellos, y por supuesto que fulmine con la mirada a ese chico de finos rasgos.

—¿Qué sucede, Kang?

—¿Kang? —dije un poco extrañado— ¿Por qué has no has ido a verme en estos días?

—¿Por qué debería hacerlo? —replicó molesto, lo note por como su expresión cambio repentinamente.

—Ya entiendo sigues enojado. Pensé que se te pasaría después de unos días pero tu humor está peor.

—Estoy bien. Si ya no voy a buscarte, ni espero por ti, es por el simple hecho de que tú y yo ya no estamos relacionados. ¿No recuerdas? Terminamos.

Ahora fui yo el sorprendido.

—¿Creíste que era una broma? — mi silencio fue la respuesta— Tae Hyun, lo que dije ese día es verdad. Ya no quiero seguir siendo yo quien se esfuerza por mantener lo "nuestro", estoy cansado. Hemos estado así por más de un año, sin contar los que llevo conociéndote y tratando de ser alguien importante en tu vida, pero no lo logre. Tú sigues amando a esa persona, y nunca me verás a mí, por eso decidí terminar y hacer mi vida.

Beom Gyu tomó la mano del chico que hasta ahora había ignorado, y le sonrió.

—Espero que alguna vez te des cuenta de la realidad y comiences tu vida con otra persona que si corresponda a tus sentimientos, te cuide y te valore. Tae Hyun, fue agradable estar contigo de verdad pero me confíe demasiado, y ahora...

—Olvídalo, ya entendí. —le interrumpí, todo me había tomado por sorpresa que de seguir escuchando me hubiese puesto a llorar—. Debo irme.

Salí corriendo de la facultad sintiendo como mis lágrimas caían.

No sé por cuanto tiempo corrí, ni mucho menos me fijé en donde estaba pero cuando me detuve sentí la lluvia caer sobre mí. Hacia frío, y ya estaba totalmente empapado. Trate de calmar mi respiración pero era difícil, lo que dijo Beom Gyu me había afectado.

Finalmente se había cansado de mí.

¿No era lo que yo más quería?

—Eres un idiota, Beom Gyu. —susurré apretando mis puños con fuerza.

Iba en mi auto después de una sesión de fotos, estaba cansado, pero esa tarde le prometí a Soo Bin que pasaría al supermercado para comprar algunas cosas y hacer la cena para él.

Cuando me detuve por el cambio de luz del semáforo vi a lo lejos una figura conocida, pensé en seguir de largo pero la lluvia era fuerte y Tae Hyun estaba temblando de frío.

Toqué la bocina un par de veces, él se detuvo, y me miró por la ventanilla.

—Sube —pensé que se negaría pero al final lo hizo— te tocará secarlo después.

Él se quedó en silencio, perdido en quien sabe qué mientras veía por la ventana.

—Oye, necesito pasar por un lugar antes de ir a casa ¿me acompañas?

—No creo ser de mucha ayuda, además estoy empapado.

—Eso no es problema, tengo una muda de ropa, puedes cambiarte.

—No me pondré tu mugrosa ropa.

Suspire— Tampoco te obligare, pero igual debes ir conmigo.

—Tomaré un bus, déjame en la parada.

Y antes de que se sacará el cinturón de seguridad acelere.

—¡Qué haces! Ahora tendré que caminar para coger el bus.

—No lo harás. Escucha Tae Hyun, me caes mal, pero no soy tan desconsiderado como; para dejarte en la lluvia, solo, con frío y viendo lo mal que estas.

—¡¿Quién dice que estoy mal?! Me siento perfectamente bien.

—No hace falta que lo digas, lo expresas inconscientemente. Mírate, tus ojos están hinchados y rojos. Y te subiste a mi auto sin ningún problema. Eso es raro.

—No me pasa nada —dijo más calmado—. ¿Dónde está la ropa?

—Listo, ¿a dónde vamos?

Quité la vista del celular en cuanto oí la voz de Tae Hyun, lo voltee a ver y casi estallo de risa en cuanto vi lo ajustado que le quedaba mi jean.

—Si sueltas tu risa juro que te golpeo. —y ante esa amenaza me las aguante. No por miedo pero tampoco quería pelear con él.

—Vamos, debo comprar unos ingredientes para la cena.

Él asintió y se adelantó, verlo caminar un poco abierto me hizo reír. En verdad era gracioso, fui tras él sintiendo la mirada de varios chicos sobre Tae Hyun, parecía que en cualquier momento reirían.

—Oye, llamas mucho la atención.

—¿Yo? Creo que es por ti.

—No, es por ti. Seguramente Beom debe protegerte cada vez que salen.

—Beom Gyu es un idiota —dijo con una sonrisa que pronto desapareció—. Date prisa, quiero llegar a casa y cambiarme está cosa.

Así que ese es el problema. Su molestia tiene nombre y apellido. Sonreí, y fui por un carrito de compras, me entretuve en la variedad de productos, escogiendo lo más fresco para está noche.

Olvidé por completo que Tae Hyun estaba a mi lado.

—¿Puedes conseguir unas cosas por mi?

—Me dijiste que te acompañe, y solo eso haré. Ve a conseguirlas tu mismo.

Jamás había perdido la paciencia tan rápido y antes de que le dijera un par de cosas, él me interrumpió.

—¿Qué necesitas?

—Confío en tu gusto por el vino. Soo Bin mencionó que tienes buen paladar para eso.

Bufó— Eso es algo que sólo él puede saber.

—Si, si, ahora ve...

Cuando lo vi alejarse aproveche para llamar a Soo Bin y decirle que llevaría a un invitado a cenar. Él se molestó pero al final aceptó diciendo que esperaba que no fuera una chica, sino me mataría.

El chico de ojos grandes definitivamente me cae mal, pero por una vez en la vida seré bueno con él.

No sabía si estaba haciendo bien o no pero a estas alturas no creía que Tae Hyun tuviera los mismos sentimientos hacia Binnie. Ha pasado tiempo desde que ha estado en una relación con Beom Gyu.

—Listo ¿algo más?

—¿Por qué eres tan desconfiado? Te dije que haría una cena para Soo Bin y su familia. ¿Crees que me fijaría en alguien como tú?

—Por favor, no me hagas golpear tu rostro, no quiero que Binnie se enoje conmigo.

—Es bueno que seas considerado.

—¿Por qué la invitación? —preguntó un poco confundido. Esto no era nada normal entre nosotros, aún lo considero una amenaza para mi.

—Eres parte de la familia.

Aquello lo hizo fruncir el ceño, pero aún así me ayudó con las bolsas de compras. Al instante salió Soo Bin con Sky y se lanzó a mis brazos. Lo besé, y después de escuchar un carraspeo él se alejó.

—¡Hyung! —Soo Bin me miró— ¿eres el invitado de Yeon Jun?

—¡Dijiste que él lo sabía! —exclamó, yo sólo me encogí de hombros.

—No importa, hyung. Sabes que eres bienvenido a mi casa, vamos.

Soo Bin le retiró las bolsas de comida y me las dio para llevárselo adentro. Definitivamente no podía creerlo, sólo un segundo y ya se olvidó de mi.

—¿Necesitas ayuda? —Huening Kai se asomó por la puerta.

—Sí, gracias.

—Son diez dólares por cada bolsa.

Odiaba su manera inocente de actuar. Este niño seguramente se hará millonario con mi dinero.

—Yo puedo sólo.

—Como quieras —espetó, alejándose.

Huening Kai, un niño totalmente astuto.

—Querido, espero que no te hayamos causado problemas.

—No, lo hago con gusto, madre. —vi a la señora Kim sonrojarse y me dio la sensación de ver a Soo Bin de esa manera.

—¿Estas bien? —me pregunto un poco extrañada.

—Si, sólo que... Soo Bin y usted se parecen tanto.

—Oye, a mi madre déjala en paz —Kai se acercó a ella y la abrazo posesivamente— ¡Hyung, tu novio está coqueteando con nuestra madre!

En que familia vine a meterme.

Estar con ellos me hizo olvidar de mis problemas por un momento. De acuerdo lo admito, Choi Beom Gyu ocupaba mi mente. No sé si lo que dijo esa tarde era verdad, o si es otro de sus trucos para hacerme sentir mal. Miré a Soo Bin siendo abrazado por Yeon Jun, los dos se veían muy felices, imaginé las veces que Beom Gyu hacía eso cuando irrumpía mi departamento con cualquier tonta excusa.

Desvíe mi mirada al verlos besarse, extrañamente no dolía tanto como antes. La señora Kim se disculpo con nosotros para retirarse, me ofreció quedarme pero yo lo rechacé, quería estar solo. Cuando fui al baño sentí la mirada de Huening Kai sobre mi hasta que entre. Vi mi rostro un poco cansado, y efectivamente mis ojos se veían algo hinchado y rojizos.

—¿Mal de amores? —su voz me hizo saltar del susto. Huening Kai estaba recargado a un lado de la puerta y en cuento me vio se acerco a mi—. Hyung, te ves fatal.

—No es de tu incumbencia.

—Lo sé, pero tal vez podría ayudarte.

—¿Qué podría saber un niño como tú? —repliqué algo burlesco, alborote su cabello y en cuanto iba a bajar las escaleras Huening Kai me tomo del brazo y me metió a su habitación.

—No vuelvas a decirme niño —dijo acorralándome contra la pared. Escuché claramente cuando puso seguro.

—Kai, no estoy para bromas. Debo irme -pedí de manera tranquila, no quería enojarme con él pero la situación meritaba que lo regañara.

—¿Acaso ves que me esté divirtiendo?

—Huening Kai... —insistí pero cada vez que trataba de empujarlo él se apegabas más a mi cuerpo.

Poco a poco sentí su respiración mezclarse con la mía, hasta que el menor colocó su pierna en medio de las mías. Eso me sorprendió, y con todas mis fuerzas lo empuje.

—¿Estas loco? ¡¿En qué estabas pensando, Huening Kai?!

—Hyung, usted me gusta — dijo directamente mientras se ponía de pié.

—¿Qué?

—Me gusta. He dicho que me gusta.

Cuando menos lo esperé tenia los labios del menor sobre los míos. Puse mis manos en su pecho para alejarlo pero él las tomo apegandolas a la pared. ¡¿De donde sacó tanta fuerza?! No me gustaba para nada lo que estaba sucediendo, así que, en ese momento no me importó y mordí su labio inferior, fue así como me soltó y esta vez fui yo quien lo apego a la pared.

—Kai, lo siento pero no puedo corresponderte.

—Lo sé, hyung. Sé que amas a otra persona, y la verdad no me importa, porque se que él no te va a corresponder. Por eso aceptaste a Beom Gyu hyung, pero él no te hace feliz.

—No sabes nada, Kai.

—Claro que sí. Mi hermano ama a Yeon Jun, y él no lo dejará por ti.

Me quedé en silencio tratando de asimilar sus palabras, pero mi agarre en sus muñecas se hicieron cada vez más fuerte, casi al punto de lastimarlo.

—Estas en lo cierto, pero Soo Bin no es el motivo.

Una sonrisa amarga se formó en mis labios, a la vez que mis ojos se llenaban de lágrimas.

—Amé a Soo Bin en su momento, pero ese ya no es el caso —y podía asegurarlo porque justamente mis lágrimas ya no eran por él, me resultaba extraño e increíble que comencé a reír—. No es Soo Bin

—¿Hyung?

—Kai —lo llame con sutileza—, no puedo corresponder a tus sentimientos porque me gusta alguien más.

El menor bajó la mirada.

—Beom Gyu. Me gusta Beom Gyu.

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Espero les haya gustado ambos capitulosss!! Nos vemos mañana!! ❤❤