La puerta se cerró de un portazo por la fuerza de la castaña, se tiró a una gran y gigantesca cama para escuchar las declaraciones de la pelinegra.

—Suéltalo todo —sonrió cogiendo una almohada y apoyando su cabeza en ella mientras tenía su mirada fija en una de sus mejores amigas.

Irene con vergüenza asintió sentándose a su lado y bajando la cabeza ¿por dónde debía empezar? Sería complicado de narrar pero necesitaba ayuda y no estaba loca para pedírsela a sus menores y menos a Wendy que era la mejor amiga de Seulgi.

—Seulgi y yo casi tuvimos sexo, bebí algo de alcohol y terminé siendo llevada por ella a mi casa...le dije que durmiera conmigo y nunca antes me había sentido tan...caliente con ella —murmuró con la cara algo roja y Jennie solo la miraba con los ojos abiertos.

—A ver, ¿llegaron a hacer algo? ¿Te metió su amigote?

—¡Ya te dije que no Jen! ¡Todo fue muy espontáneo! ¡Ella fue quien me detuvo!

—Bueno...solo te sugería, Seulgi es conocida por estar muy dotada —levantó y bajo las cejas Jennie haciendo que Irene explotara en un color rojo carmesí.

—¡No lo entiendes! ¡Es como mi hermana por Dios! Ella...y yo no puede haber algo entre nosotras, nunca, además no me gustan las chicas. —la más mayor desvió la mirada y Jennie solo bufó y restándole importancia con la mano.

—Nunca digas nunca. Seulgi te quiere, no tienes de que preocuparte seguro que te entiende y no se alejará de ti o algo así. —le brindó una dulce sonrisa para asegurarle que la situación estaba bien y tranquilizarla.

Irene al ver la sonrisa de Jennie se relajó más, quizás tenía razón y estaba montándose una película por una noche que fue un...¿error? Debía dejar de darle vueltas a ese tema y hacer como si nada, seria lo mejor. Miro a los ojos de la otra coreana que le recordaban a un gatito y recordó del rumor que había ido rondando en la fiesta, ella y su pareja habían terminado.

—Y...¿qué tal con Kai? No me dijiste que estabas de novia con él.

—Ya no hay un nosotros, le quería sí ,pero me preocupaba lo que me dijeran mis padres, todos en el instituto en general y le terminé. —bajo la mirada un poco triste.

—Lo siento Jen...siempre pensé que te gustaba o había algo entre tú y Lisa. —dijo la pelinegra con tranquilidad lo que no se esperó fue que estaba palabras fueran como un detonante de nervios hacia Jennie.

—¿Qué? ¿Lisa? ¿Yo? So-somos amigas, eso solo amigas y listo, ¡Lisa es mi pequeño bebé! No hagas esas preguntas —se cruzó de brazos y fingiendo haberse molestado con la pregunta, Joohyun solo se rió de la expresión de la pequeña y la abrazo.

👀

Las dos mejores amigas se miraban fijamente, Wendy se atragantaba con la galleta que se estaba comiendo mientras que Seulgi solo estaba un poco sonrojada.

—Déjame entender ¡CASI FOLLAS CON TU CRUSH Y DIJISTE QUE NO! ¡SABÍA QUE ERAS TONTA PERO NO TANTO!

—¡NO QUERÍA APROVECHARME! —le tiró una almohada a la cara y Wendy rápidamente le devolvió el golpe.

—¡NO ES VIOLACIÓN SI ELLA QUIERE! —la chica con cara de oso se acercó para taparle la boca, sus padres la matarían si se enteraban de lo que hacía su hija cada vez que salía de fiesta.

—¡Cállate! Como te iba diciendo...ella estaba borracha no quería que pensara que me aproveche o la viole, la quiero Wendy y no quiero tener solo un polvo más con Irene ella no es una más —dijo Seulgi dejando con la boca abierta a su mejor amiga y esta se quedo mirándola pensativa unos cuantos segundos.

—De acuerdo, tranquila Romeo. Solo hazte la loca así ni se vuelve incomodo ni dañas tu relación con Irene unnie.

—¿Así de fácil?

—Sí así de fácil, ahora háblale a Myoui Mina y dile que te pase el contacto de Momo —cogió el móvil de Seulgi y la misma se lo quitó.

—Quieta ahí loca, nunca le he escrito y no quiero que se piense que es para mi ¿dónde está el chico con el que ayer...?

—¿Do Kyungsoo? Fue muy rico y todo pero no fue lo mejor —levantó los hombros significando esto que le daba igual, Seulgi solo pudo poner sus ojos en blanco.

Las ganas de echar a la canadiense de su casa eran cada vez más grandes pero optó por usarla para que fuera su profesora de física y química como había prometido. Pasadas las horas de estudio que habían sido como un dolor de cabeza, Seulgi volvió a encender su teléfono móvil metiéndose en su red social favorita viendo como le saltaba a la vista una historia subida por Irene con Jennie sonriendo, ahora comprendía a que Kim se refería la señora Bae para ir a comer ¿Irene seguiría con Jennie? ¿Podía llamarla para preguntarle si estaba con dolor de cabeza?

—Escríbele —la apoyó Wendy al ver el dilema que tenía su amiga, sus expresiones eran demasiado obvias.

—Bien...aquí voy.

Abrió el chat que tenía con Joohyun y con miedo le escribió.

Baechu🐰💖

Valee🥰

Hey, unnie 💘

¿Puedo llamarte?

Me aburro :(

Ven a mi casa y vemos
películas con Wendy :D

✔️✔️

Unnie?

✔️✔️

Seulgi se quedó sin habla, la había dejado en visto y en mayúscula. Wendy que veía la mirada triste de su amiga se acercó lentamente y pasó un brazo por su hombro mientras leía la conversación, hizo una mueca al ver el resultado y sintió compasión por la pobre chica.

—¿No quieres comer algo? La comida sube el ánimo —cogió alguna de las galletas que estaban sobre la cama de matrimonio de la rubia y ésta negó.

—No quiero comer nada, tengo miedo no hambre.

—¿Bailamos música de la Beyoncé? ¡Muéstrame nuevos pasos de baile! —cogió y buscó entre los cajones de su habitación un altavoz para poner la playlist de su mejor amiga.

La música comenzó a sonar y Wendy trataba de imitar los gestos serios y sexys de Seulgi cuando ella bailaba, se sentó encima de ella y comenzó a tratar de hacer un baile sexy que causó la risa de la rubia.

—Enserio necesitas que te de clases de baile —se rio levantándose imitando la ridícula coreografía que acababa de elaborar Seugnwan.

Tocaron repetidas veces la puerta pero el ruido y las risas de ambas chicas hicieron que la persona que tocaba ya harta abrió la puerta levantando una ceja algo.

—Seul, te esperan en la entrada y Wendy recuérdame no volver a darte mucho azúcar —soltó el señor Kang negando con la cabeza.

—Oh vamos Donghae no seas así estas celoso de mis maravillosos pases de baile —se encogió de brazos la canadiense.

—Bueno, mejor que Seulgi ya bailas —asintió con la cabeza el mayor.

—¡Papá! —dijo y salió por la puerta para ver la persona que estaba en la entrada.

El ver a Irene, con el pelo algo mojado y las mejillas sonrojadas apoyada en sus rodillas recuperando el aliento mientras sujetaba una bolsa en una de sus manos puso a Seulgi nerviosa, pero si hace unos minutos la había dejado en visto. La pelinegra levantó la cabeza y en cuanto la vio se tiró a sus brazos, la abrazó como si no la hubiera visto en años.

—¿Por qué has venido? Está lloviendo mucho...

—Tu sudadera, se me olvidó dártela, lo siento —la mayor sacó la bien planchada y tendida sudadera dándosela en las manos algo temblorosa.

—Se me había olvidado que la tenías podrías habértela quedado, te sentaba increíblemente bien —le sonrío y le dio otro abrazo.

Al separarse Irene y Seulgi se dieron una mirada profunda tratando de descifrar que pensaba la otra en ese momento, un portazo y un grito saliendo de la habitación de Seulgi interrumpió el contacto visual.

—¡Irene unnie! Ven únete a nuestra fiesta

—Seungwan se suponía que tendría que volver a casa para estudiar

—¡Solo será una hora! Luego te llevo en coche si quieres, Seulgi quiere mostrarte nuestro baile ¿verdad? —dijo Son llamando la atención de Kang que estaba perdida en sus pensamientos.

La pelinegra terminó accediendo a la oferta, entró en su habitación y comenzó a reír como loca al ver la "fiesta" que tenía el dúo montada. Se sentó al borde de la cama viendo como hacían bailes ridículos con la música a tope. Las miradas entre Irene y Seulgi eran más que notorias para Wendy que quería tirarse por la ventana al notar la gran tensión que había entre esas dos.

—Estoy agotada —se sentó Kang al lado de Irene y cerró los ojos.

Irene observó el rostro de Seulgi de cerca y no pudo evitar reprimir una sonrisa porque estaba tan adorable con los ojos cerrados, esos pensamientos hicieron que recordara la frase de Jennie: "nunca digas nunca".

—Unnie...

—¿si? —respondió desviando rápidamente de su rostro a Wendy que había cogido una botella de agua como micrófono.

—Nosotras nunca estaremos mal, pase lo que pase estate siempre a mi lado

—Eso ni lo dudes Seul —dicho eso apretó la mano de la rubia y acarició sus nudillos haciendo que la propia rubia esbozara una sonrisa por la respuesta de su unnie.