Capítulo 36: Planificaciones EVERYWHERE.
Ya regresamos de nuestras merecidas vacasiones en Hawaii, allí aprovechamos para ver los primeros asuntos de la boda... Ah, y adivinen qué: Hoy apenas llegamos empezamos a planificar todo. ¿Y por qué? Como Hawaii es mundialmente conocido porque a los artistas les gusta casarse en sus bellas playas, había una gran lista de parejas que quería casarse allí, justo en esa playa tan especial que fue para nosotros. Y cómo nosotros queríamos casarnos lo más pronto posible, la fecha va a ser el 25 de mayo, si, en un mes y algo más.
Las parejas normales tienden a organizar todo para al menos unos seis meses de anticipación; nosotros no, es por ello, que hoy estamos como locos.
En este mismo momento, Lars está con dos teléfonos en cada hombro, con dos conversaciones al mismo tiempo para dejar listo el asunto de decoración del lugar y blah blah blah.
- Lars, mi amor, ¿no necesitarás ayuda con el teléfono?
- Ah, esperen los dos. -se dirige a mi- No, cariño estoy bien, tú por mientras ve chequeando las cosas que ya tenemos en las lista, ¿si?
- Está bien.
Corrí hasta la habitación en dónde guardo mi colección de terror y entre las cosas del escritorio encontré un pequeño cuaderno. Saqué un lápiz de mi estuche y revisé la lista:
*Lugar LISTO.
*Recepción LISTO.
*Reservaciones de éstos LISTOS
*Anillos LISTOS. (los compramos hoy y son de calavera también solo que de oro y con más diamantes)
*Trajes LISTOS (creo que llegarán por correo esta semana).
* Fecha LISTA
* Tipo de boda: ... Supongo que le daremos un estilo thrasher, ¿no? A fin de cuentas no somos niñas afeminadas.
* Presupuesto VARIABLE... usaremos las ganancias por las ventas del disco... Mierda, agradezco la fama que tenemos ahora.
*Decoradores, sirvientes en recepción, banquete, etc. EN PROCESO... espero que Lars y su capacidad de hablar por dos teléfonos a la vez sirva de algo.
* Invitados y cortejo PENDIENTE.
* Luna de miel ( ͡° ͜ʖ ͡°) ... ¿Por qué mierda Lars dibujó esa cara pervertida ahí? Bueno, eso queda pendiente todavía.
* Invitaciones... llegarán mañana.
* Vestuario de asitentes... Mientras más thrasher mejor, ok no, con tal de que se pongan un puto terno negro y que las chicas con un vestido negro, creo que estaría bien.
* Algún cura que nos case... PENDIENTE.
Lancé el cuaderno a la mierda y suspiré... Ah, ¿cómo mierda vamos a planear todo en un mes? Si lo hacemos bien, entonces que nos den un premio al matrimonio organizado en menor tiempo... Oh, esperen, creo que hay gente que lo ha hecho en un día solamente, bueno, ya no importa... Ignoren mis pensamientos idiotas que suelo tener cuando estoy nervioso y estresado.
Me dirigí hacia el living, donde estaba Lars colgando por fin los dos teléfonos.
- ¿Y cómo vamos con las planificaciones?
- Como la mierda. -contesté acercándome a él y lo abracé en busca de "consolación".
- ¿Nos faltan demasiadas cosas? -asentí- bueno, recuerda que esta noche llegarán nuestros padres para que todos viajemos mañana a Hawaii a ver las cosas que nos faltan.
- Pero es mucho...
- No importa, creéme, Flemming Rassmusen llamó hace unas horas y nos felicitó por el gran éxito que ha tenido la venta del disco... Tenemos dinero, y mientras haya dinero; estaremos más que contentos. -me devolvió el abrazo y besó mi frente.
- Está bien...
Pasaron dos días y hemos estado de manera psicótica planificando los dos. En este mismo momento estamos en Hawaii, en un hotel. Nuestros padres se alegraron bastante con la noticia de nuestro futuro matrimonio. Oh, bueno, mi padre quedó algo shockeado al principio cuando mi madre le explicó todo, porque él no tenía ni la menor idea de que tenía (o tuve alguna vez) una banda de metal.
De todas formas lo aceptó, por la fuerza y casi amenaza de mi madre, pero lo importante es que lo aceptó.
Mis padres y mis suegros nos han ayudado mucho en cuánto buscar gente que contratar, a elegir que cosas van a haber, cómo va a ser la decoración, etc, todo de forma fácil, económica y sin gastar de más... Eso sonó como de comercial televisivo, no obstante, esa es la verdad.
Lars y yo nos encontrábamos en nuestra habitación de hotel, chequeando lo que teníamos hasta el momento.
- ¿Ya llegaron las invitaciones? -consultó mientras leía la lista.
- Si -me levanté de la cama y le enseñé un paquete que contenía las invitaciones- , aquí están.
- Y la pregunta del millón... ¿A quiénes vamos a invitar?
- Excelente pregunta, mi amor, pues... -fruncí el ceño, tratando de pensar- ... ¿Pueden ir los de Exodus?
- ¿Incluyendo a Gary?
- Incluyendo a Gary. -me puso una cara asesina cuando dije eso- ¿Qué? En estos meses demás que ya me superó, ¿no? Yo no creo que en medio de la boda se levanté y diga que se oponga.
- Tienes razón... Bueno, pueden ir... Supongo que invitaremos a los de Anthrax también, ¿no? Ellos son muy buenos amigos nuestros.
- Claro, ¿y a los de Slayer?
- También. De hecho, todas las bandas amigas que tengamos podrían ir.
- Obvio, de todas formas, ni se te ocurra mencionar a "Mecagué", ¿ok?
- Oh, cariño, dudo que vayan a sabotear nuestra boda, ¿o si? -crucé los brazos y asentí- Yo me llevo muy bien con ellos.
- Yo no.
- Créeme, cuando es una instancia formal, Mustaine se porta muy bien, y si él se porta bien, sus compañeros también.
- Hmm... lo dejaremos pendiente, ¿ok?
- Como digas, cariño... ¿Metallica?
- ¿Después de la gran traición que nos hicieron?
- ¿Traición? ¿Cuál traición?
Mierda, olvidé que nunca le conté lo de Spastik Children a Lars.
- Nada, es que... ¿Recuerdas las cosas feas que me hizo James? -traté de distraerlo.
- Oh claro, a él lo mantendremos lejos. ¿Y a Cliff? Él siempre fue bueno con nosotros.
Si supiera que por su culpa nos reemplazaron...
- Hmm... Creo que lo dejaremos pendiente también.
- ¿Y por qué? ¿No que quería reencontrarte con todos tus amigos? Cliff era uno de ellos.
- Lo sé, lo sé... aún así... tengo la sensación de que nos reemplazaron.
- Ah, ¡pero qué dices, precioso! Cliff nunca haría eso ni en un millón de años.
Oh, dulce e inocente palomita...
- De todas formas lo consideraré, ¿ok?
- Ok.
Tocaron el timbre.
- ¡Lars, hijo mío, ven, por favor! -gritó mi suegra desde afuera.
- Ya vuelvo, cariño, seguro ya terminaron de ver el asunto de la recepción.
- Ok... -murmuré mientras abría la caja con las invitaciones.
- ¿Podrías rellenar las invitaciones por mientras?
- Al tiro...
Salió de la habitación y yo fui a buscar un lápiz para completar las invitaciones. Sé que Lars no va a volver hasta un buen rato más, así que me senté en el suelo, apoyándome en la cama mientras escribía una por una en las invitaciones.
Ok, puse los nombres de todos nuestros familiares cercanos y bandas amigas que conozcamos. Y cómo había dicho antes: "Mecagué" se queda pendiente... Sentí una gran nostalgia al recordar todos los buenos momentos con Metallica, Lars tenía razón, yo no podía no invitarlos... Escribí las invitaciones para James y Cliff, pero las guardé en otro lugar... En caso de que a última hora me arrepienta de mi "odio" hacia ellos y les envíe las invitaciones.
Metí todas las invitaciones en sobres, y la lengua me quedó hecha mierda después de sellar tanto papelerío. Puse todas esas mierdas en un bolso, agarré una cantidad indeterminada de billetes, me dirigí a una oficina de correos y envié todas las invitaciones a las respectivas direcciones. Creo que me la pasé al menos una hora con la pobre mujer que realizaba todo el papeleo y estuvo un buen rato dándome estampillas de diferentes logotipos.
Creo que lo único divertido de eso fueron las putas y coloridas estampillas. Al regresar al hotel, Lars me abrió la puerta y me miró extrañado:
- ¿Ocurrió algo malo, amor? -yo negué- A todo ésto, ¿dónde fuiste?
- A enviar por correo todas estas putas invitaciones, y me quedó la lengua hecha mierda después de sellar tanto sobre. -le enseñé mi lengua dañada.
- Oww, pobrecito... Supongo que con un beso se te pasará, ¿cierto? -yo sonreí- Ay, si eres tan lindo...
Situó sus manos en mis caderas y me dio un beso lleno de ternura, oh mi bello novio Lars... ¡lo quiero tanto!
Ambos nos quedamos abrazaditos, caminamos un par de pasos adentro de la habitación, y cerré la puerta. Volvimos a nuestro adorable abrazo, dándonos besitos cortos de por medio, mientras él me acorralaba contra la puerta.
- Y dime, Lars, mi amor, mi vida, mi todo... -le susurré delicadamente al oído.
- ¿Si?
- ¿Qué te gustaría hacer para nuestra luna de miel?
Él rió pícaramente, y al cabo de unos segundos de silencio habló:
- Darte duro contra la pared.
- Oh, eso no, tontito.
- ¿Qué? Si igual te gustaría.
- Si, si, pero yo no me refería a eso... yo me refería a que dónde podríamos pasar ese momento, que qué cosas vamos a hacer lo tengo bien claro, mi amor.
- Oh, bueno... ¿a dónde sugieres tú?
- Hmm... pues...
Después de un bueen rato discutiendo los dos -ya que los dos tenemos ideas tan locas y opuestas- terminamos determinando que nuestra luna miel será en un crucero de lujo por el Caribe, oh sí, perras.
Bien, otra hora más como locos buscando a un asistente de viajes que nos ayude en cuanto a reservaciones y más mierdas con respecto a nuestra futura luna de miel.
Al día siguiente, ya descansando un poco con respecto al futuro, estandos los dos acostaditos en la cama todavía, abrazados... esperando a que algo interesante pasara, o recordar algo que todavía nos quedara pendiente.
- Amor... -dijo él.
- ¿Si?
- ¿Nos falta mucho?
- Pues... lo de recepción aún no está terminado.
- Aparte de eso...
- ¡Mierda! ¡Nos falta nombrar el puto cortejo!
- ¿El qué?
No le respondí, me levanté de la cama casi corriendo, tomé el cuaderno y empecé a buscar página por página hasta dar con la lista del cortejo, que por supuesto, estaba incompleta. Se lo lancé junto con un lápiz y dije:
- Ándame dictando la lista, ¿ok?
- Ok... A todo ésto, ¿qué es esta mierda?
- El cortejo son las personas que están encargadas de ciertos aspectos en las bodas, cariño.
- Oh... ya veo.
- Si, ve dictándome cada uno de los participantes y yo te digo si lo tenemos o no.
- Ok, ok... Mierda, que debemos nombrar como a seis madrinas.
- Oh, no te preocupes por ello, amor mío, deberías agradecer que tengo miles de tías por parte materna. Eso, ya está listo.
- ¿Seguro?
- Pensé en eso ayer, sólo falta confirmar y listo.
- ¿Seguro, seguro?
- Sí, querido, sí.
- Ok, ¿y tenemos padrinos? Necesitamos dos.
- Tener varias tías implica tener muchos tíos, si, estamos listos con eso... creo que ya estamos listos con el cortejo, ¿no?
- Hmm... Ok... ya tenemos todo... ah, no, nos faltan dos personas.
- ¿Ah? ¿Qué? ¿Quiénes?
- Pues nos faltan "El paje de los anillos" y "La dama de las flores".
Hice un facepalm.
- ¡Sabía que alguién nos faltaba!
- De hecho, Hamster, son dos.
- ¡Ahhh! -me acosté a su lado, cambié de página y revisé la lista de invitados, viendo si alguien podría servir, nope, solo niños- Espera, tengo una idea.
- ¿Cuál?
- Ya vuelvo...
Me levanté y corrí hasta el teléfono que estaba en la habitación de hotel, y agradecí que Lars no me escuchara hablar ahora ya que tal vez llamar a éstas personas me haga perder toda la dignidad que me queda. Deseé que estos bastardos no hayan cambiado su número telefónico:
- ¿Aló? -contestó alguien en la línea- Habla Gar Samuelson, si usted es cobrador, desde ya le digo que Mustaine no está, si eres una de sus tantas novias, ya viene en camino.
- ¡No! Gar, ¿está Junior por ahí?
- ¿Quién eres?
- Eso no importa, ¿es posible hablar con él?
- La identidad es lo primordial, señor.
- No quiero cobrarles, hijos de puta. De hecho, les conviene, así que tráeme al enano de Junior al teléfono.
- En camino...
En unos segundos, llegó David a atender:
- ¿Si?
- Junior, requiero de tu ayuda y que dejemos las diferencias de lado con tu banda.
- ¿Quién eres?
- ¿No sabes quién soy?
- Tú voz de marica me suena... Ahmm... espera... -se quedó en silencio- ¡Ah, ya sé! ¿Eres Kirk?
- Sipis.
- ¿Arreglar nuestras diferencias? ¿Qué carajo dices? ¿Qué cagada se mandaron ahora tú y Lars?
- Bueno, arreglar nuestras diferencias no. Aparentar que no existen por un segundo, sí.
- Ok, ¿qué necesitas?
- En primer lugar, ¿a ti y a tu banda no les tincaría viajar a Hawaii?
- ... -no dijo nada.
- ¿Hola?
- Ah, si, te escuché... ¿Qué mierda van y vamos a hacer nosotros en Hawaii?
- Los invitamos a nuestra boda.
- Ah... -volvió el silencio incómodo- ¿Cómo?
- Boda, los invitamos a ustedes, los de Megadeth, a nuestra boda.
- Oh... Habíamos oído de que Lars y tú eran novios pero... nunca creí que eso fuera verdad...
- Bueno, cordialmente los invitamos a nuestra boda en Hawaii. ¿Quieres algo más formal?
- ¿Y la invitación?
- Ah, bueno... no nos alcanzaron las invitaciones. -mentí vilmente.
- Ah, ok... Creo que sí, sería bonito ir a Hawaii, siendo que es un lugar muy bonito... Vayan a buscarnos al aeropuerto ese día, soquetes.
- Oh, por su puesto.
- Y que en recepción sirvan algo bien rico de comer, y que los recuerdos de la boda sean lindos, eso.
- Oh, David, lo será, relájate.
- Excelente.
- Pero requiero tú ayuda.
- ¿Ah?
- Mientra tus compañeros estarán de invitados ordinarios, yo quiero asignarte un puesto mucho más priviligiado.
- ¿Oh, me estás dando favoritismo?
- Si quieres tomarlo de esa forma, adelante.
- ¿Y qué puesto quieres darme?
- "El paje de los anillos".
- ¿El qué?
- El "junior" que camina al "altar" y lleva los putos anillos, creí que se entendía bien por el nombre.
- ¿Y por qué quieres que sea yo?
- Porque eres el niño o "junior" perfecto, si sabes a qué me refiero.
- ¿Solo porque no sea tan alto como el Colorado y porque me digan Junior te da la impresión de que llevaré sus putos anillos homos?
- Oh, vamos, hijo de puta, no sabes lo importante que será para mí ese día. Te pago lo que quieras ese día, pero por favor, ayúdanos con eso, ¿si?
- Ok, ok... Págame lo que nos vamos a gastar de viaje, please.
- Ningún problema.
- Ok, ¿sólo para eso llamabas?
- Si, la boda es el 25 de mayo.
- ¡¿En un mes?!
- Si.
- Ok, ¿no necesitan nada más?
- Ah... ¿No tienes alguna novia, por cierto?
- Pues... si, ¿por qué?
- ¿Podrías llevarla para que lleve las flores?
- ¿Es enserio?
- Si, estamos escasos de gente, y por favor, lleguen días antes a la boda para que tú y tu novia asistan a los ensayos. ¿Si?
- Está bien... Suena un buen trato.
- Excelente, gracias por aceptar. En serio, gracias.
- De nada.
- Bueno, ya me tengo que ir.
- Chao.
- Chao, recuerda llegar como tres días antes, ¿si? ¡Gracias!
Colgué la llamada y regresé a la cama, me acosté junto a Lars.
- ¿Y...? -dudó.
- Ya los conseguí.
- ¿Así de rápido? -asentí- ¿Y a quiénes conseguiste?
- Eso es un sorpresa, mejor que te enteres y traumes el día del ensayo de boda, a que te traumes ahora.
- Hmm... -me miró con confusión- Ah, lo que digas, cariño.
Ambos nos dimos un beso, esperando a que las horas pasaran o mejor aún, que los días volaran.
Ya falta muy poquito...
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[Aviso: Lamento si el capítulo resultó algo aburrido o no tenga mucho contenido, estuve haciendo trabajos para la escuela casi toda la semana y he estado preparando nuevos proyectos para escribir aquí, en Wattpad - que son muchos y no sé por cuál empezar- agradezco su comprensión y que disfruten del fanfic, porque pronto llegará a su final]
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