En la escuela Yeonjun iba dos grados arriba, pero cuando tocaba la hora del receso podía encontrarse con Beomgyu.

Llevó a su amigo Soobin para que jugara con ellos, y Beomgyu llevó a su amigo Hueningkai.

—¡Juguemos a las escondidas! —propuso el pequeño Huening— ¡Yo cuento!

—No vayas a hacer trampa —advirtió Beomgyu.

—¡Ok!

Soobin, Yeonjun y Beomgyu corrieron a esconderse en cuanto Kai empezó a contar. A Soobin dificultandosele la tarea por su altura, y Yeonjun teniendo éxito a la primera, escondiéndose detrás de un gran arbusto, hasta que llegó Beomgyu a esconderse en el mismo lugar.

—¡Fuera de aquí Gyu!

—Shuuu no grites ¿crees que Soobin ya encontró un lugar?

—Nueve... ¡Diez! Ahí voy —avisó Kai, riéndose mientras buscaba. Justo en detrás del tobogán se encontraba Soobin— ¡Te encontré!

—¡Seguro hiciste trampa! —lo acusó Soobin.

—¡Mentira!

Beomgyu y Yeonjun veían la discusión desde su lugar. Era un excelente escondite, tanto que salieron por su cuenta después de quince minutos de no ser encontrados.