Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

59. En el alma del sueño (Hypnos)

En el alma del sueño descansa, profundamente, la paz: la paz de una eternidad acortada a un par de horas dónde el mundo se vuelve pequeño y el dolor se deshace entre sábanas de seda; la paz de un momento perfecto que se desvanece apenas los rayos de Eos vislumbran el amanecer que se alza sobre el universo; la paz de un instante convertido en un sempiterno mundo al que estamos destinados pero que quizá no merecemos.

En el alma del sueño habita la amargura: la amargura de la soledad que acecha las almas que se quedan encerradas sin remedio y para siempre en el abismo del olvido; la amargura de la añoranza transformada en deseos reptantes y carentes de camino que amenaza con traer el caos; la amargura de la vida humana que permanece insatisfecha todo el tiempo y que se arrepiente de cosas vanas e inevitables.  

En el alma del sueño vive el deseo: el deseo, irremediable, de la infinitud de su abrazo entre la eternidad escrita con ilusiones en cada poro de su divina piel; el deseo de perderse dentro del inmenso laberinto que preside al abismo tormentosamente dulce del mundo perfecto en el que él es rey; el deseo incumplido entre las penumbras de una calle sin faroles dónde la incertidumbre se convierte en tranquilidad. 

En el alma del sueño crece le melancolía: la melancolía de las plegarias nacientes de los espíritus mortales que yacen vacías y carentes de plenitud e insaciables de atención; la melancolía de su ansiada presencia al momento en el que su madre cubre el mundo y el silencio rodea todo cuanto existe; la melancolía de su dorada mirada que observa rastros de amargura dolorosa entre los rostros extrañamente conocidos. 

En el alma del sueño hay cariño: el cariño impoluto de un ser divino para con seres sin ninguna importancia que caminan en dirección al funesto destino escrito desde arcanos tiempos; el cariño que preside a la evaporación momentánea del desasosiego, traída en una tenue atención cifrada entre cálidas sabanas y cómodos lechos; el cariño de la imposibilidad de su disposición y al mismo tiempo el dolor de su marcada ausencia.

En el alma del sueño existe lo sublime de su semblante; lo melifluo de su abrazo; lo impasible de su finitud; lo profundo de su mirada; lo inefable de su melodía; el arrebol de sus mejillas.

En el alma del sueño...

Permanece...

La benevolencia de un dios.


😴😴
Hace tiempo publique uno de Thanatos y ahora les traigo uno de Hypnos.

Espero que les haya gustado.

Dan R  

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro