
chapter twenty. our life
𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐆𝐑𝐎𝐖𝐒
꒰ ۫₊˚ɞ chapter twenty .˚ׅ🏹 ຊ ҂
❝ our life ❞
━━━━━ೋ ೌ ೬ ೂ━━━━━
—No puedo hacer que se duerma— soltó Alden en un quejido.
Abrí uno de mis ojos con sueño y le miré mientras intentaba arrullar a Adam, quien simplemente lo miraba con los ojos muy abiertos.
—¿Le hablaste con tu voz extraña?— pregunté y negó —Que extraño, nunca puede dormir cuando te escucha hablar así.
—Mi voz de bebé le gusta— se quejó, sentándose junto a mi.
—Si supiera hablar diría lo contrario— señalé, levantándome para sentarme junto a él.
Tomé a Adam en brazos, le arrulle un poco y él comenzó a calmarse.
—Le caes mejor tu— señaló el rubio, recargando su mejilla sobre mi hombro.
—Siempre— sonreí victoriosa.
—¿Ya se durmió?— frunció su ceño, parpadeando varias veces al darse cuenta que Adam había caído rendido.
—Sí, eso creo— susurré para no despertarlo.
Alden cayó rendido a la cama, soltando un suspiro de cansancio haciéndome reír en el proceso.
Me levanté para colocar al pequeño en la cama, acomodando las sábanas para recostarme sobre el pecho del rubio y seguir durmiendo.
—Somos buenos padres— señaló, escuchando cómo su corazón latía en su pecho.
Sonreí y asentí —Somos buenos padres— repetí.
Acomodé mi cabeza mientras él dejaba pequeñas caricias en mi cabello y después de un rato, ambos caímos en un sueño profundo.
Terminé de bajar las escaleras, admirando la bonita escena frente a mis ojos.
Sonreí cuando vi a Adam en la silla para bebés mientras comía puré de manzana. Alden intentaba cocinar en la estufa y le daba una mirada al pequeño de vez en cuando.
—¿Preparaste el desayuno?— inquirí, besando la cabecita de Adam.
Alden asintió —Un desayuno quemado es mejor que uno bonito y bien preparado.
Fruncí mi ceño riendo, —Creo que me lo voy a tatuar.
Me acerqué hacia él para saber lo que cocinaba, colocando mi mentón sobre su hombro por más alto que fuera, incluso tuve que pararme de puntillas.
—No tengo idea de lo que es, pero se ve bien— sonreí alejándome para preparar los cubiertos.
—No hay mucho últimamente, se están repartiendo las provisiones— informó él —En algún punto tendremos que salir a buscar.
Relamí mis labios asintiendo —No hay dónde buscar, Daryl ha salido a cazar tres veces está semana y solo ha traído unas cuantas ardillas.
—Le preguntaré a Maggie si conoce algún lugar, tal vez podamos ir en un grupo.
Asentí de acuerdo, limpiando las mejillas de Adam al verlo completamente empapado del puré.
—Creo que debería ir con Daryl a buscar provisiones, si llegáramos a encontrar algo sería un milagro.
Asintió dejando ambos platos de comida y suspirando frustrado, haciéndome mirarle con preocupación, coloqué mi mano sobre la suya para darle tranquilidad.
—Estaremos bien, encontraremos algo— le sonreí.
Me devolvió la sonrisa, tomando mi mano y besando mis nudillos.
Suspiré, viendo el gran muro de Alexandria ser reconstruido por algunos habitantes, otros intentaban borrar los grafitis de los susurradores, mientras cada uno hacía su parte.
—Ro— llamó Carol, haciéndome detener mi camino hacia la salida —¿Puedo hablar contigo unos minutos?
Asentí, girándome completamente hacia ella, frunciendo mi ceño cuando me entregó una zanahoria pequeña hecha de metal o algo así.
—¿Me hiciste una zanahoria?— inquirí con ironía, riendo por aquello pero borrando mi sonrisa al ver que Carol no lo hacía.
—La hizo Henry— aclaró.
—Oh.
—La encontré en la caja de sus cosas, supuse que sería para ti porque siempre te llamaba zanahoria.
Asentí —Sabía que odiaba que me llamarán así y de todos modos lo hacía— recordé con una sonrisa.
—Hay... otra cosa más— agregó —Sabes la mala relación qué hay entre Maggie y Negan ahora que ella regreso, las cosas están tensas así que el consejo autorizó que sería mejor llevárselo a otro lugar.
Asentí levemente —¿Quieres que yo lo llevé, verdad?
Asintió rápidamente —Quien mejor que tú para hacerlo, solo si no tienes algo que hacer.
Relamí mis labios —De hecho estaba por salir con Daryl a cazar pero esta bien, iré.
Sonrió —Gracias.
Asentí viéndola irse, observando la zanahoria con delicadeza, tal vez podría conseguir una cadena en el camino.
—Te quiero dar las gracias por sacarme de ahí— mencionó Negan —Habrás notado que las cosas con Maggie están un poco tensas, no me molesta tener un perfil bajo por un tiempo pero, es inevitable que nuestros caminos se crucen.
Le miré, sin decir palabra alguna.
—Se me ocurre que tal vez podrías hablarle por mi, para suavizar las cosas y tener una convivencia tranquila dado a los sucesos recientes, sé que probablemente no quieras pero... sería un gran favor.
—Maggie tiene sus razones— encogí mis hombros caminando —Además dudo que mi influencia la haga cambiar de parecer.
—¿Por qué aquí?— se detuvo frente a la casas
—Es un hogar— seguí caminando, abriendo la puerta frente a mi para dejar el conejo sin vida en la silla.
—Veo que trajiste mis cosas.
Asentí —Carol me ayudo, ella dijo que el consejo votó por tu expulsión, lo que tú quieres simplemente no pasará, es imposible y sé que es algo horrible de parte de una hija pero no puedo hacer nada, lo siento.
Suspiró, observándome a los ojos una vez más y mostrándome una cálida sonrisa que me extraño.
—Gracias.
—El conejo es para ti, puedes quedártelo y hacerlo un estofado— sonreí levemente, caminando nuevamente hacia afuera.
—Si quieres venir a comer del delicioso estofado que tengo en mente eres bienvenida— informó.
—Lo pensaré— confirme cerrando la puerta detrás de mi.
Coloqué la flecha en el arco, preparando mi puntería cuando una gran ola de vomito cruzó por mi garganta, haciéndome escupirlo en el suelo, entre los arbustos.
—Carajo— me queje, aclarando mi garganta —Lo siento, es mi culpa.
—No, no lo es, si pude atraparla— señaló Daryl a la zarigüeya.
Suspiré aliviada —Que alegría, algo es mejor que menos— sonreí levemente.
Daryl asintió —¿Estás bien? ¿Qué fue todo eso?— señaló los arbustos.
—Ah, uhm, he estado vomitando las últimas semanas— encogí mis hombros —Creo que es la falta de comida.
—¿Estás segura?
Asentí —Claro, no he comido nada estable desde que volvimos con Maggie y sus amigos, no es nada.
—Creo que deberías consultarlo con ella— comenzó a caminar y le seguí.
Fruncí mi ceño con una sonrisa y me coloqué a su lado —¿Te estás preocupando por mi, Daryl Dixon?
—No empieces, por favor— pidió haciéndome reír.
—De acuerdo, no lo haré, pero ¿Por qué debería consultarlo con ella?— le miré ahora confundida.
—¿No has pensado en un melocotón?
—¿Un qué?— cuestione, aún más confundida.
—En un embarazo— soltó, haciéndome borrar mi sonrisa.
Mi corazón se aceleró por alguna razón y sentí un eterno escalofrío pasarme por mi columna al juntar todas las piezas.
—Oh, mi Dios— musité.
—Mi intención no era asustarte— admitió con una sonrisa burlona.
—No es eso es solo que... creo que podrías tener razón— sacudí mi cabeza —Tal vez solo este sugestionando, sigamos.
Asintió, observándome como si me estuviera analizando.
—No sigas— pedí —Solo me estás asustando más.
—No dije nada.
—No, pero lo haces con tu mirada— señalé.
—Creo que vi una farmacia derrumbada cerca, podríamos buscar lo que necesitas para asegurarte.
—Es que no es un embarazo— aclaré con nerviosismo —Creo.
—Ajá— siguió caminando.
—¿A dónde vas?— inquirí.
—A la farmacia, puedes esperar si quieres, volveré en un segundo.
Me crucé de brazos, sentándome en una roca que vi.
—Bien, te esperaré.
Fruncí mi ceño al ver la habitación hecha un desastre cuando me adentre una vez más, después de aquella misión con Daryl.
—¿Alden?— inquirí adentrándome más, observando al rubio con confusión.
—¡Algo malo está pasándome!— grito saliendo del baño —He vomitado dos veces, creo que estoy embarazado.
Reí, llevándome una miradas confundida.
—¡No es gracioso!
Lo tomé de los hombros —Alden, eres un chico, tu no puedes embarazarte.
—Cierto, soy un chico, ¿Y cómo explicas los mareos, el cansancio y todo eso que acaba de pasarme?— me cuestionó.
—Bueno...-
—¡Estoy embarazado!— gritó más alto.
—¡Shhhh!— sisee —Despertarás a Adam.
—Lo siento, ¡Estoy embarazado!— susurro en un hilo de voz.
—Tu no estás embarazado, yo lo estoy— solté.
—Con razón— encogió sus hombros.
Luego de unos segundos proceso aquello que le había dicho, su rostro se había vuelto pálido y su expresión se había aligerado, estaba tan impresionado que temía que se desmayara.
—¿Q...qué?— cuestionó muy bajo.
Suspiré con nerviosismo —Según la prueba que me hice cuando salí con Daryl a buscar provisiones, lo estoy, como de cuatro semanas.
Chillé de la emoción cuando me tomó de la cintura, cargándome y dándome vueltas mientras festejaba con carcajadas que se me contagiaban.
—¡Aún no explicas mis síntomas!— me aclaro y reí.
Me bajó del aire y se colocó de cuclillas para besar levemente mi vientre poco maduro.
—Oh, mi Dios— musito —Esto es lo segundo mejor que me ha sucedido.
Fruncí mi ceño —¿Y cuál es lo primero?
Regreso a mi, poniéndose de pie —Haberte visto ese día en el Santuario, desde que te vi caminar, desde el día en el que visitaste mi puesto y te vi, supe que serias importante por menos caso que le hicieras a mi presencia.
—Eres tan tierno que me harás vomitar arcoíris— sonreí cuando unió nuestros labios.
—Entonces por eso estuve vomitando, quizá fue una señal— señaló frunciendo levemente su ceño.
—Tal vez lo fue.
Sonreí sin abrir ojos, aún cuando Alden dejó varios besos en mi hombro como forma de despertarme, mientras con su mano había estado acariciando mi vientre toda la noche.
—Estoy despierta— afirmé, sobando mi ojo y sonriéndole.
—Ya lo sabía— besó mi mejilla.
—¿Y Adam?— me pregunté preocupada.
—Está dormido, por fin pude hacer que se durmiera— sonrió victorioso.
—Es un milagro— aplaudí intentando no hacer tanto ruido.
—¿Cómo te sientes? ¿Tienes nauseas? ¿Hambre? ¿Algún antojo?— comenzó a cuestionarme.
Le miré asustada —Me siento bien, solo tengo un poco de hambre.
Asintió levantándose rápidamente —¿A dónde vas?— le inquirí frunciendo mi ceño.
—Hacer el desayuno, si tienes hambre debes comer.
Sonreí aún más —Bien, pero antes de que te vayas debo decirte algo.
Asintió levemente, sentándose en la orilla de la cama, mientras me levantaba con lentitud.
—No hay que decirle a nadie aún, hasta que Alex me haga una revisión y si se puede, un examen prenatal, solo tú y yo.
Asintió nuevamente, levantándose y tomando de mis mejillas para dejar un cálido beso en mi frente.
—Solo tú y yo.
—Todo parece ir bien— aseguró Alex, el único doctor que teníamos ahora en Alexandria.
Respiré con nerviosismo, sosteniendo la mano de Alden en todo momento.
—No hay señales de que haya algo malo, nada de nada— nos sonrió a ambos —¿Qué tienen?
Ambos le mirábamos con el rostro paranoico y nervioso al mismo tiempo, era entendible, estábamos aún procesando todo.
—Ah, no es nada es solo que...—
—Somos padres primerizos— señale rápidamente mientras él asentía a todo lo que decía.
—Claro, es entendible— Alex sonrió —Solo te daré unas pastillas prenatales para que te vaya bien durante los nueve meses.
Asentí de acuerdo, tomando la botella con una poca cantidad de pastillas y, una vez que logro explicarme todo, salimos de la enfermería, aún atareados.
—Bien, ahora que estamos seguros ¿Qué sigue?— se preguntó Alden, adentrándose a la cocina con Adam en brazos.
Encogí mis hombros —Ya puedes decirle a Maggie— sonreí cuando festejó —Pero nada de escándalo, hay que dejar que la noticia sea tranquila.
—Como ordenes— dejó un cálido beso en mis labios.
—Lo digo en serio— advertí señalándolo.
Asintió, —Así será— aseguró, tomando mi mano y saliendo de la casa conmigo siguiéndole.
Buscando entre la comunidad, encontramos a Maggie organizando algunas cosas junto a Carol, quien nos saludó al vernos.
—Maggie, hay algo que debemos decirte— comencé.
Ella se giró a nosotros —Esperen, no me digan, no me digan— pidió haciéndonos reír.
Fruncí mi ceño cuando vi al rubio reír con nerviosismo.
—Es una buena noticia— agregué —Yo...-
—¡Está embarazada!— gritó haciendo que no solo Carol, sino Hershel y el pequeño Adam se asustaran ante su grito repentino.
Maggie se quedó estática en su lugar, cerré mis ojos, negando levemente cuando ella se lanzó a abrazarme, sorprendiéndome en ese momento.
—¡Pero que buena noticia!— chilló ella, abrazando ahora a su querido amigo.
—Felicidades— felicitó Carol abrazándome al igual.
—Sí, gracias, Alden, por gritarlo— le miré en desaprobación.
—Lo siento, me puse nervioso— admitió, aceptando en abrazo de Carol.
—¿Vas a tener un bebé?— Hershel se preguntó abrazándome.
Asentí —Así es.
—¿Va a ser niña o niño?
—No lo sabremos aún hasta que nazca— le sonreí cuando asintió.
Suspiré con cansancio, dejándome caer en la cómoda cama.
—Sigo sin creerlo— mencioné a Alden, mientras él imitaba mi acción.
—Seremos padres— sonrió y asentí.
—Otra vez— reí —¿Cómo crees que reaccione Adam?
Pensó, —Creo que le encantará tener un hermanito o hermanita.
—O ambos, podrían ser gemelos— bromee y me miró asustado.
—¿Qué?
—Nadie puede saber— encogí mis hombros admirando su rostro asustadizo.
—¿Qué vamos a hacer con tres hijos?— se cuestionó —Uno era otra cosa pero, ¿Dos? Adam se va a volver loco.
—¡Solo es una broma!— solté —Una parte de mi dice que solo es uno.
Suspiró aliviado —No juegues con eso por favor— pidió tomando su frente dramáticamente.
—También dice que es niño, pero lo sabremos cuando nazca.
Asintió besando mi vientre nuevamente —Espero ese momento con ansias.
—Yo también— admití con una gran sonrisa.
━━━━ AUTHOR'S NOTE:
Uffa si seguía agregándole cosas jamás terminaría este capítulo 😭
Amo esto, basta, Rolden>>>>
Espero les guste y doy por finalizada la temporada 10 <3
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro