𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐆𝐑𝐎𝐖𝐒
꒰ ۫₊˚ɞ chapter ten .˚ׅ🏹 ຊ ҂
❝ the calm before ❞

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—Veo, veo algo... café— dije, esperando la respuesta de Alden.

—Los troncos de los árboles.

Negué con la cabeza —Los caballos— reí al ver su expresión de indignidad.

—Espera, ¿qué pasa si pierdo?— inquirió con una sonrisa de lado.

—Tendrás que ayudarme con mi exposición en la feria.

Justo hacía allá íbamos, en un diferente grupo al de Tara y los demás.

—Claro que te va a ayudar— interrumpió Enid, quien venía con nosotros —¿Verdad que sí, Alden?

Miré al mencionado, quien asintió sin pensarlo dos veces.

—Pero claro que voy a ayudarte, cuando me desocupe con la mía, iré a verte.

—Vomito arcoíris— Enid fingió arcadas, haciéndome reír.

—Volvamos al tema— pedí —¿De quién era el turno?

—Antes de empezar, ¿Quién va ganando?— inquirió Alden, confundido.

Infle mis mejillas en un intento de recordar, pero solo no podía.

—¿Pero qué pregunta es esa? Obviamente voy ganando— declaró Enid con orgullo.

—Y yo voy perdiendo— formé puchero, mientras la castaña se reía de mi —En segundo lugar va Alden.

—¿Qué veo, un rival?— dijo ella, haciéndome reír a Alden y a mi.

—Creo que tendremos que detener el juego un momento— dije al ver la escena frente a mi.

—¿Qué? No, no, voy ganando y tengo que ganarle a este rubio— señaló Enid.

—Sé que te gusta jugar y ganar pero...— le señalé lo que sucedía frente a nosotros.

Me quedé callada cuando Tara nos grito a los tres en busca de ayuda, tomé el arco de la parte trasera del carruaje y tomé flechas para ayudarles, mientras tanto Enid sacaba el cuchillo de su funda y Alden igual tomaba su arco.

Cuando me di cuenta ya llevaba al bebito en brazos, mientras Tammy se hacía cargo de los caminantes que nos rodeaban. Este sollozaba sin parar, mientras lo arrullaba y le peinaba el poco cabello que tenía.

Alden se colocó junto a mi, sonriéndole al pequeño en mis brazos, este pareció tranquilizarse ya que, detuvo sus sollozos y nos miraba a ambos con curiosidad.

—Pero que bonito eres— hable al bebé sonriéndole.

—No lo había visto bien— señaló Alden, acariciando la mejilla del nene.

—Yo menos.

—Gracias, chicos— hablo Tara, llegando junto a nosotros.

—¿No han tenido noticias de Henry?— pregunté preocupada.

Henry se había escapado, otra vez, por lo que Connie y Daryl habían ido por él.  Daryl había prometido traerlo con vida al verme dispuesta a ir con él a buscarlo, dijo que en la feria lo vería y henos aquí.

—No, sabemos lo mismo que ustedes pero Daryl y Connie fueron por él, estará bien.

—Sí, tienes razón— musité.

Y con una sonrisa le entregue el bebito de vuelta a Tammy.

—Esto es tan... extraño— dije, caminando por las calles del Reino.

Todo este lugar parecía como lo era antes, personas hablando con otras y riéndose, algunas acomodando sus puestos y otros simplemente llegando.

Alden asintió de acuerdo —¿Qué quieres hacer primero?— tomó mi mano, entrelazando nuestros dedos.

—Saludar a Carol y al Rey.

Ambos llegaron a nuestro lado y con una sonrisa, Carol me abrazó.

—¿Y Henry?— preguntó ella, después de saludar a Alden.

—¿Aún no llega? ¿Qué hay de Daryl?— pregunté —Prometió que lo traería hasta aquí.

Ella me miró preocupada —¿Dónde están exactamente?

—Bueno... no lo sé, aún no.

—¿Qué ha estado pasando?— cuestionó Ezekiel al verme preocupada.

Titubee un poco —Se escapó de Hilltop, justo antes de venir aquí— solté, llevándome miradas preocupantes de ambos —Pero Daryl y Connie fueron por él, estoy segura que probablemente ya vengan para acá.

—Si, Ro insistió en ir— apoyo Alden.

Asentí levemente volviendo la mirada en ambos adultos.

—Bueno... si Daryl fue a buscarlo entonces va a estar bien— aseguró Ezekiel, colocando su mano sobre el hombro de Carol al verla preocupada.

—Sí, tienes razón, de seguro no tardan en llegar— Carol sonrió —¿Los veo después?

Alden y yo asentimos viéndolos irse a ambos.

—Nosotros siempre hemos estado unidos... y siempre lo estaremos— sonreí asintiendo, con la mirada fija en el Rey, quien daba un discurso frente a todos —Luchamos para volver a estar juntos, crecimos y aunque el cruce en el rió ya no está, construimos un puente entre nosotros.

Aplaudí al igual que los demás, mientras Alden colocaba su brazo en mis hombros para acercarme más.

—Está es la prueba de que debemos unirnos, no contra un enemigo en común, sino por el bien común... así que coman, beban, comercien y diviértanse porque hay mucho tiempo perdido por recuperar.

—De hecho sí, y mucho— agregó Enid, junto a mi.

—¡Que empiece la primera feria anual de reunificación intercomunicaria!— gritó Jerry, para que todos pudiésemos escucharle.

—¡Jerry, lo cambiamos!— recordó el Rey, haciéndome reír ligeramente.

—¿En serio? ¿Ya no se llama de esa forma?

—Es demasiado, olvídalo, ¡Que empiece la feria del nuevo comienzo!

Gritó, y varias palomas salieron disparadas al cielo, entre aplausos y risas, me encaminé hasta la entrada del Reino.

—Quiero ir con ellos— comenté a Alden, cuando vi al grupo de Carol, quienes iban a salir en busca de Henry.

—Si tú vas, yo iré contigo.

Sonreí —Alguien debe quedarse a cuidar de Enid, que no coma muchos dulces o se convertirá en ardilla con rabia.

Alden rió, tomando mi mano —Y alguien debe cuidar de tu puesto.

—Lo sé, lo sé, pero Henry es mi hermanito.

—Y me odia— recordó sonriendo.

Asentí —Un poquis.

Dije, riendo cuando él plantó un beso en mis labios, tomándome por sorpresa y ambos giramos la mirada cuando las puertas del Reino fueron abiertas mostrándose no solo a Daryl, sino a Henry, Michonne y Connie.

Sonreí con alivio, jalando de la mano al pobre Alden hasta ellos.

En cuanto tuve oportunidad, abracé a Henry con fuerzas, haciéndolo soltar un quejido mientras escondía su rostro en mi hombro.

—¡No vuelvas a asustarme así!— recrimine, con los ojos cristalizados y dándole un merecido zape.

—Perdón, perdón, no volverá a pasar.

—Más te vale— amenace.

—¿Estamos bien, hermana?

Asentí separándome —Estamos bien.

Fruncí levemente mi ceño cuando fulminó con la mirada a Alden, quien retrocedió un poco haciéndome reír.

—Hola, Michonne— le saludé, dándole leve abrazo también, luego mi mirada fue a ese sombrero tan familiar —¿Judith?

Michonne asintió y la pequeña de cabello castaño y pecas me sonrió, me incliné un poco para quedar a su altura y cuando estuve apunto de hablar, ella se lanzó a abrazarme sorprendiéndome por completo.

—Sí, te recuerdo— dijo ella, como si supiera exactamente lo que iba a preguntarle.

—También te recuerdo— admití, separándome de ella y acomodando su sombrero.

—El plan era traer a Henry— escuché la voz de Tara, la cual mire cuando llego —Solo a Henry.

Miré a la chica: Lydia, jugar con sus dedos en su regazo y mirándonos a todos, queriendo desaparecer en ese instante.

—Reúnan a los lideres— pidió Michonne —Hay mucho de que hablar.

Y miré nuevamente a Lydia, sonriéndole antes de despedirme de los demás.

—Por favor, dime que soy el primero— sonreí a Henry cuando llegó junto a Lydia al puesto de arqueria.

Negué con la cabeza —Si hubieras llegado más temprano quizá.

—Rayos, tendrá que ser para la próxima.

—Si es qué hay próxima feria— contesté.

—La habrá, bueno eso quiero creer— se sentó, sosteniendo el palo que utilizaba como arma.

—¿Quieres participar?— pregunté a Lydia, al verla un poco incómoda —Por ti lo haré gratis.

Ella titubeó un poco, abrazándose a sí misma.

—Lo que sea que Henry te haya dicho de mi, es mentira, no muerdo y tampoco soy una salvaje— señalé, haciéndola sonreír.

—Sí, está bien— aceptó, sonriendo un poco.

—Bien, toma el arco y apunta al dianas, solo para ver qué tal tu puntería y luego... puedo decirte todo lo que quieras sobre la historia de los arqueros, obviamente sacada de libros y te la voy a leer porque mi memoria es fatal como Henry a las cinco de la mañana.

—¡Hey!— se quejó él.

—¿Es mentira?— le miré y reí cuando negó con la cabeza.

—Ustedes parecen hermanos de verdad— señaló Lydia.

—¿Este de aquí? Solo es mi responsabilidad, aunque creo que él me cuida más a mi que yo a él.

—Eso es cierto.

Miré cuando lanzó la flecha, dándole centímetros al centro.

—Eso estuvo bien— choqué los cinco con ella.

—Sí, ella es la mejor— comentó Henry, haciendo las mejillas de Lydia teñirse de rojo.

—Te dije que algún día pasaría— recordé a Henry, desacomodando su cabello.

—¿Qué cosa?— pregunto confundido.

—No te hagas mosca que no te funciona— sonreí —Los dejaré solos, mi puesto parece tan aburrido qué hay muy poco público así que quede con Alden en vernos.

—¿Ya están juntos?

Sonreí levemente sonrojándome —Que te interesa.

Lydia rió ligeramente y me despedí de ambos, alejándome para dejarlos solos.

Agradecí en voz baja a Alden cuando me entrego la manzana de caramelo de uno de los puestos, con Luke siguiendonos el paso. Me parece que él y Alden pasaron demasiado tiempo juntos, ya que ahora parecen uña y carne.

—Sé que técnicamente perdí la apuesta— dijo Luke, quien caminaba en medio de nosotros.

—No sé por qué dices "técnicamente", la perdiste— contesto Alden.

—¿Me puedes ayudar a hacerlo entrar en razón?— me pidió Luke.

Fruncí mi ceño —No tengo idea de qué están hablando— admití.

—Tocaré la guitarra antes de la película esta noche y quiero que "Una noche con Luke" sea "Una noche con Luke y amigos", pero mi amigo no quiere presentarse conmigo.

Asentí entendiendo, sonreí —Por favor, no puedes dejarlo solo en el escenario— miré a Alden y él a mi —Lo harás, quiero escuchar a mi novio cantando.

—¿A tu novio?— señaló con una sonrisa.

Caí en cuenta de lo que había dicho y mis mejillas se enrojecieron demasiado rápido. Nos detuvimos a medio camino, aclaré mi garganta lo más que pude.

—Se me escapó, pero sí, eres mi novio— titubee aclarando mi garganta —Al menos, eso creo. ¿Lo eres?

—Lo soy— choco los cinco con la manzana.

Reí levemente, volviendo a caminar junto a Luke.

—Ayy que lindos, son adorables— nos abrazo a ambos de los hombros —¿Podemos volver a nuestro asunto?

—Claro, perdón, novia, Luke perdió la apuesta.

—No, olvida la apuesta, era confusa, ya quedó atrás— me señaló —Se nota que ella quiere oírte cantar, me doy cuenta.

—Sí, lo acabo de decir en voz alta— señalé, frunciendo mi ceño con diversión.

—Canta para ella— reí por lo bajo al escuchar su propuesta y al ver un poco más convencido a Alden —¡Canta para ella!— canturreó haciéndonos reír más.

Él se adelantó tomando mi mano y una vez que dejamos a Luke atrás me abrazo de los hombros.

—Por favor, ¿Lo vas a pensar?— insistió Luke.

Le mire en busca de respuesta pero solo inclinó la manzana en forma de un tal vez, me giré a Luke.

—Lo hará— no emití ni un sonido para que Alden no pudiera escucharme.

—Te dije que lo haría— le dije a Luke quien sonreía victorioso.

—Lo entiendo y gracias Ro, pero, ¿Enserio quieres empezar con una balada?

—¿Por qué no?— le cuestionó Alden.

Me crucé de brazos viendo a ambos encima del escenario, con una sonrisa burlona en mi rostro.

—La gente necesita esperanza, la piden a gritos— Alden me miró en busca de ayuda —No, no, se la merecen.

—No puedo creer que me convencieras— reí observándolo.

—Solo hazlo y ya, te prometo que cuando termine solo me burlaré de ti... un poco por el resto de nuestras vidas.

—¿Qué está haciendo allá arriba?— Enid llegó a mi lado.

—Le convencí de hacerlo, tendré este recuerdo por toda mi vida y me reiré— Alden me miró indignado —Solo un poquis— señalé, antes de que protestara.

—Déjame capturó su humillación con la cámara que intercambie— dijo Enid antes de tomar una fotografía de ambos.

La sacudió y cuando se secó pude verla mejor.

—Tenla, si algún día puedes imprimirla en un cuadro gigante y ponerla en la entrada de su puerta, te lo agradecería— dijo Enid.

—Te aseguró que lo haré— sonreí negando con la cabeza.

—Falta una de nosotras, puedes ponerla en la entrada.

Preparo nuevamente la cámara y contando hasta tres tomó la fotografía, con el flash cegándome por unos segundos.

Enid refunfuño —Salió borrosa, iré por otro rollo para tomar más, cuida.

Asentí levemente tomando la cámara que me entregó.

—Si puedes toma más fotos para reírme contigo luego— pidió Enid, caminando de reversa.

—Aquí te espero— le dije.

Solté una risilla cuando chocó con una mujer de cabellos rubios, le pidió disculpas y luego corrió.

—Te dije que vendría y así lo hice— dije a Siddiq, mientras me acercaba para abrazarlo con una sonrisa.

—Por un momento creí que no lo harías, ¿Qué tal te va con la feria?— inquirió, comenzando a caminar conmigo tomada de los hombros.

Suspiré —Todo va de maravilla.

—¿Y con ese galán también? No me presentaste al afortunado— sonrió.

—Alden está en el escenario porque va a cantar una canción con Luke— señalé, devolviéndome para tener la vista algo lejos del escenario.

—Se ve que le está echando ganas— asentí como respuesta —No tiene idea de lo que está haciendo, ¿Verdad?

Fruncí mi ceño —Bueno... lo intenta.

—Antes de que lo olvide, tengo algo que decirte— le miré para prestarle atención —Rosita está embarazada.

—¿En serio?— asintió —Eso es genial, felicítala por mi, pero, ¿Eso que tiene que ver conmigo?

—Que soy el padre de ese bebé.

Es como si el tiempo se hubiera detenido de pronto, me quedé paralizada y una gran sonrisa se formó en mi rostro, chillando de la emoción abracé a Siddiq felicitándolo miles de veces.

—¡Por Merlin! Serás padre, Siddiq ¡Serás padre!

Él rió, separándose de mi abrazo —Lo sé, es algo muy difícil de procesar.

Quité el mechón de cabello de mi rostro —Esa es una buena noticia, felicidades otra vez, a ambos.

—Y queremos que seas madrina también, sé que es algo pronto, pero Rosita está de acuerdo con eso.

—¿La madrina?— inquirí y sonreí aún más cuando asintió —Aceptó ser la madrina de ese niño o niña, todo es tan... irreal.

Asintió de acuerdo —Tienes razón, todo esto, las comunidades juntas... parece un sueño o algo sacado de un libro.

Me crucé de brazos —Apuesto a que nunca imaginaste esto.

—No, pero ahora que sucede debemos agradecer— me sonrió —Te dejo, me parece que el puesto de enfermería ya debe estar lleno, por cierto, ¿Has visto a Enid? Quedamos en vernos ahí, pero no la he visto.

Negué —Bueno, fue a buscar más rollo para la cámara, debe estar entre los puestos.

—Gracias— palmeo mi hombro una vez más antes de irse.

El sol comenzaba a ocultarse y mientras veía el mini concierto de Luke y Alden, miré a mi alrededor en busca de Enid, más me preocupe más cuando no la vi por ningún lado.

—Esa fue la peor vergüenza, todos me miraban y ni siquiera canto tan bien.

Sonreí a Alden —Estuviste genial, no logro encontrar a Enid ¿Pudiste verla desde arriba?

Negó levemente —No, de hecho me preguntaba lo mismo.

Encaminándonos hacia las puertas del Reino, cuando estas fueron abiertas me quede estática en mi lugar al ver las expresiones de aquellos.

—Siddiq— llamé, sosteniéndolo mientras él temblaba y sollozaba —¿Qué pasó?

Este solo negó con la cabeza, mientras escondía su rostro en mi hombro sabía lo que había sucedido y mi corazón se había partido en pedazos.

━━━━ AUTHOR'S NOTE:

Chau, me largo a llorar.

Sin antes decir, el capítulo de las picas me dolerá para toda la vida ¡Tara no merecía morir, Dios santo! 😭

Ahora si *se va llorando*