Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo IX

Luna

Llevo varios días pensando en el aniversario de Katy y Alan. Ha dejado el listón muy alto y no sé qué regalarle a Derek. Sé que no es una competición pero ahora cualquier cosa en comparación con el crucero me parece poco. Katy me cede su idea de la pulsera de plata y sé que es un detalle que a Derek le gustaría pero no quiero copiarla. Quiero que sea algo original mío.

La clase termina antes de darme cuenta y recojo mis cosas.

— Señorita Miller, quédese un momento, por favor — me pide la profesora Rogers.

Mierda, seguro que va a llamarme la atención. Llevamos un mes de clase y ya estoy en las nubes.

— ¿Ocurre algo? — Pregunto precavida.

— No, no ocurre nada. Sólo quería felicitarte, has sacado la mejor nota de la clase en el examen.

— Oh — menos mal que era eso, — muchas gracias.

— Por lo que sé hasta ahora, eres una de los pocos alumnos que está interesada en trabajo de campo. Aún es pronto, pero ¿has pensado en qué te gustaría trabajar cuando termines la carrera?

— Creo que es obvio, ¿no? Me gustaría participar en excavaciones, aunque sé que es muy difícil. Seguramente termine trabajando en algún museo.

— ¿Eso tendría algo de malo? — Pregunta cruzándose de brazos.

— No, es un buen trabajo y seguro que tan apasionante como cualquier otra labor paleontológica.

— Me alegra oírlo, porque aquí, en Seattle, hay un museo famoso por sus exposiciones... y sus excavaciones — me insinúa levantando una ceja. — ¿Te gustaría trabajar ahí?

— Dicho de esa forma sería todo un honor. Puede que busque trabajo cuando me falte poco para terminar la carrera.

— Mi hermana trabaja en ese museo, te haré saber si buscan becarios — dice mientras sale por la puerta del aula.

No tenía pensado empezar a trabajar ya, pero si puedo optar a un puesto de trabajo de mi campo no estaría mal para meter la cabeza y darme a conocer.

Aprovecho la hora de comer y llamo a mis hermanos.

— Hola preciosa, ¿cómo estás?

— Muy bien, comiendo ya por fin, qué hambre tengo.

— Buen provecho — dice Sam.

— Gracias. ¿Vosotros qué tal?

— Bien, todo tranquilo, con lío como siempre pero sin novedades.

¿Sin novedades? ¿Desde cuándo mis hermanos dicen eso?

— Me alegro. Quería preguntaros, ¿qué os parecería si empezase a trabajar?

— ¿Quieres trabajar? — Pregunta Tom.

— Luna no es necesario, nosotros podemos pagarte la carrera, tú céntrate en estudiar y sacar buenas notas — me pide Sam.

— Eso estoy haciendo. Una de mis profesoras, la que imparte Técnicas de Excavación, me ha dicho que he sacado la mejor nota de la clase en el primer examen y me ha dicho que su hermana trabaja en el museo paleontológico más famoso de Seattle. Me ha insinuado que contará conmigo si buscan becarios. ¿Debería aceptar o rechazarlo si se da el caso?

— Yo aceptaría — responde Tom. — No tienes que hacerlo si no quieres pero no estaría mal empezar a conocer el área y darte a conocer también a ti en el mundillo. Además, los trabajos de becarios para compaginar con la universidad suelen ser de pocas horas.

— Eso sí, muy mal pagados — aporta Sam — pero estoy de acuerdo con Tom. No lo pienses por ahora pero si se da la oportunidad, acéptala.

— Lo tendré en cuenta. Tengo que colgaros ya, gracias por todo. Os quiero chicos.

— Y nosotros a ti — me dicen antes de colgar.

Estoy terminando de comer cuando alguien se sienta a mi lado.

— ¿La mejor nota de la clase en el primer examen y en el primer curso? Tienes que pertenecer a Alpha Sigma Tau.

Me giro y me sorprendo al ver a Leyla a mi lado, sonriéndome de forma demasiado amable.

— Te lo agradezco, pero no estoy interesada en formar parte de ninguna hermandad. Pero agradezco el ofrecimiento — respondo intentando ser amable.

— No te lo estaba ofreciendo — comenta — te estoy reclutando.

— Lo siento pero...

— Leyla — Bekah corta su frase y se sienta en mi otro lado.

— Bekah, hola — parece que la cara de Leyla ha cambiado.

— Espero que no estés reclutando a Luna, porque es una amiga, una de las buenas — le advierte Bekah.

— Disculpadme.

Leyla se levanta de la mesa y se marcha.

— ¿Qué ha sido eso? — Pregunto mirando a Bekah.

— Tu salvación — dice riendo.

— Gracias, no sabía cómo salir de ese lío sin que jurase venganza hacia mi persona — le digo riendo.

— Leyla es mi cuñada. Sí, lo sé, Mich es mi hermano, pero no es tan malo como parece. Le advirtió a Leyla que me dejase en paz a mí y a mis amigas, y me caes bien Luna, no quiero que te eches a perder por juntarte con gente como Leyla.

— Muchas gracias, no sé cómo agradecértelo.

— Viniendo en Halloween. Van a montar un fiestón. Dile a tu novio y a sus amigos del campus que vengan también. Llévate este cartel, si no te dejan entrar, enséñalo, lleva mi marca.

Miro la parte de atrás y es cierto, lleva la marca de Bekah. Se despide y se marcha no sin antes agradecérselo de nuevo. Miro el cartel y la verdad es que se lo curran mucho en publicidad.

Hablaré con Anna y Derek a ver si les apetece ir a la fiesta.



Por fin es viernes y he quedado con Derek para ir a cenar. Hemos cogido mesa en un restaurante italiano que hemos visto en internet y tiene buena pinta, sobre todo cuando nos ponen los platos delante y no puedo evitar babear.

— Luna, he estado pensando en nuestro aniversario — empieza Derek.

— Yo también. Me gustaría hacer algo especial...

— Lo sé, a mí también — me corta y le dejo continuar. — Una vez te prometí que te llevaría a conocer París, y quiero cumplir mi promesa.

Abro mucho los ojos y me quedo sin palabras. ¿Un viaje a París? No me lo esperaba, ni se me había ocurrido a mí que fuese un regalo.

— ¿Te gustaría venir a París conmigo? — Pregunta cogiendo mi mano por encima de la mesa.

— Sí, ¡sí! Claro que sí. Pero con una condición.

— ¿Cuál? — Pregunta.

— Es un regalazo pero quiero que el hotel lo paguemos a medias. Así también tendrá una parte mía.

— Me parece bien, un regalo colaborativo, es más que justo. Pero los billetes de avión los pago yo.

— Hecho.

Me levanto, él hace lo mismo y nos besamos sellando el pacto.

No me lo puedo creer, ¡nos vamos a París!

— Voy a mandar un mensaje a mis hermanos, seguro que ellos pueden ayudarnos con la organización.

Luna

Sé que mañana es domingo, pero necesitamos vuestra ayuda profesional.

Tom

Cuenta con nosotros.

— Arreglado, mañana por la mañana si quieres les llamamos.

Y eso hacemos, Derek viene por la mañana a la residencia y llamamos a mis hermanos.

— Me tenéis en ascuas — dice Tom. — ¿Qué tenéis en mente?

— ¿Dónde está Sam? — Pregunto.

— Liado, hoy no podía atenderos pero ya estoy yo para rescataros.

— Quiero llevar a Luna de viaje a París por nuestro aniversario — suelta Derek y Tom se queda boquiabierto.

— Vaya, eres de los que cumple sus promesas — seguro que Tom se acuerda de cuando Derek me lo prometió en el aeropuerto cuando volvíamos de la inauguración.

— Sí, las cumplo. ¿Podéis buscarnos una buena oferta?

— Claro que sí. Decidme cómo queréis el hotel, los vuelos y demás y yo me encargo.

— Yo creo que sería mejor coger hotel sólo con desayuno y quizá cena. Si vamos a París es para hacer turismo así que no vamos a atarnos a los horarios de comidas de un hotel. ¿No te parece? — Propongo.

— Me parece perfecto — responde Derek.

— Vuestro aniversario es este mes pero yo os recomiendo, aparte por la poca antelación, que viajéis en Navidad. Hay muchas ofertas en esa época y París en Navidad tiene que ser precioso — la idea de Tom es muy buena y la aceptamos. — Me pongo a ello. Estamos en contacto.

Una vez que colgamos, llamamos a Anna que está en la cafetería del campus y nos reunimos con ella en el parking. Vamos al centro comercial a comprar nuestros disfraces de Halloween, ambos han aceptado ir a la fiesta. Yo me cojo un disfraz de caperucita y Derek, como no podía ser de otra manera, de lobo feroz. Anna se ha cogido un disfraz de supergirl malvada que le queda como anillo al dedo. Una vez terminamos decidimos dar una vuelta por el centro comercial y no puedo evitar entrar en una tienda de vestidos y me compro uno largo, de color gris y un poco de brillantina para cuando celebremos nuestro aniversario.


Por la noche Derek nos deja en la residencia y llamo a Tom según cerramos la puerta.

— Hola preciosa, ¿qué ocurre?

— Quiero añadir algo más al viaje. Derek se ha ofrecido a pagar él los billetes de avión pero yo quiero regalarle algo más aparte de pagar el hotel a medias. ¿Alguna idea?

— Louvre y cena en un barco en el Sena — aporta Sam.

— Oye, pues no es mala idea. Una cena en un barco tiene mucha clase. Y el Louvre es obligatorio visitarlo — digo contenta

— Nos ponemos manos a la obra y tranquila, tu regalo no lo mandaré cuando os envíe el presupuesto del viaje. Eso lo tratamos entre nosotros — dice Tom poniendo un dedo sobre sus labios.

— Top secret. Os quiero.

— Y nosotros a ti.

— Va a ser un viaje de aniversario increíble — dice Anna cuando cuelgo. Cuánta razón tiene.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro