9 años después.

Jungkook estaba sentado en la cama de su celda mientras golpeaba uno de sus pies contra el suelo y sus manos se restregaban en su cara cada ciertos segundos.

Estaba nervioso, ansioso y desesperado, pues hoy finalmente luego de 9 largos años encerrado sin siquiera poder ver la luz del sol ya que lo tenían completamente aislado de los demás reclusos, hoy por fin era el día que lo pondrían en libertad. Por la mañana lo habían llevado a la enfermería para realizarse los estudios correspondientes y verificar que al estar encerrado bajo la oscuridad por tanto tiempo esto no haya afectado su salud y pueda salir al exterior sin problemas.

Los segundos se hacían eternos ya que si bien sabía que ese día quedaría libre, no sabía la hora, el único que lo sabía era Taehyung quien fue informado de su horario de salida por si deseaba estar presente y esperarlo.

No iba a mentir, se sentía bien haber cumplido con su condena aunque en el fondo el sabe y siente que 10 años encerrado jamás compensarán el daño que le hizo a miles de personas. Se sentía diferente, a pesar de ya tener 39 años, se sentía como si fuera apenas aquel muchacho de 17 años que era puro e inocente antes de destruir su vida. Se sentía en paz consigo mismo y lo aliviaba el hecho de que allá afuera lo único que lo esperaba era paz y el gran amor de Taehyung y Minsuk.

Estos 9 años a pesar de solo poder ver a Minsuk 12 veces al año y a Taehyung 24, no habían sido tan difíciles como esperaba, el hecho de saber que estaba pagando por todos sus delitos hizo que su estancia en la cárcel fuera más amena, pues esperaba y sabía que merecía un castigo mucho peor. Y con el apoyo de su hijo y su novio, todo había sido mucho más ligero.

El que se le permitiera ver crecer a su hijo fue el mayor de los regalos para él, agradecía a la vida haber podido estar aunque sea un poquito presente en la infancia de Minsuk, pues el hecho de que lo viera tan pocas veces al año lo hizo darse cuenta lo rápido que pasaba el tiempo, pues con cada visita de su hijo este cada vez estaba más grande. Hoy Minsuk ya era todo un niño de 10 años de edad, muy inteligente e igual de tierno que su padre Taehyung pero físicamente completamente idéntico a él.

Le daba escalofríos de emoción el saber que en unas cuantas horas nunca más volvería a separarse de ellos. Los segundos parecían horas y si pronto no lo sacaban de aquella celda, se volvería loco con tanta emoción y felicidad que tiene en su corazón.

Taehyung en esos 9 años no lo había dejado solo, había estado para él en todo momento, siempre puntual a las horas de visita y apunto de llorar cuando le informaban que era hora de retirarse.

Durante ese tiempo en sus visitas de pareja, hace 5 años les paso algo inesperado... habían tenido un susto de un posible embarazo lo cual llevo a Taehyung a tomar una gran y pesada decisión sobre su vida.
Luego de aquel susto después de que él menor confirmo que solo se trataba de una falsa alarma, tomó una decisión muy grande en su vida la cual fue operarse para ya no traer más vida al mundo y Jungkook lo apoyo en todo momento en su decisión, aunque sabía que ambos aún estaban jóvenes y podrían tener más hijos, sabía que no tenía derecho a decir nada pues tomando en cuenta lo traumatizante que había sido el embarazo de Minsuk para el menor y eso sumándole también que la situación de ambos no era la más favorable para seguir trayendo niños al mundo, entonces sabía que era lo correcto por hacer y apoyo a su chico en todo. Han pasado 4 años de eso y puede decir que fue la mejor decisión que Taehyung pudo tomar.

Tuvo un miedo muy grande de que en esos 9 años Taehyung se cansara de esperarlo y verlo solo 2 veces al mes, pero nada de eso paso. Su pequeño siempre se mantuvo leal a él, demostrándose ambos que su amor podría con todo.

Ahora ambos estan felices esperando comenzar desde cero y aprovechar al máximo la segunda oportunidad que la vida las dio.

La hora se llegó, Jungkook ya se encontraba firmando sus papeles de salida del reclusorio y sus tramites para comenzar ahora con su libertad condicional.

Lo pasaron a un cuarto donde Seokjin personalmente lo esperaba para colocarle en su rodilla el chip que jamás durante los próximos 10 años podrá quitarse, esto para tenerlo monitoreando durante sus próximos años de condena en el exterior.

Las reglas fueron claras: Tiene permitido moverse un kilómetro a la redonda de donde estará situado su hogar esto con sus debidos cuidados y con ropa especial para ocultar su rostro, pero no podrá salir por más de 40 minutos al día de este o caminar más allá de lo permitido o de lo contrario su chip comenzaría a darle toques eléctricos en su pierna hasta que este monitoreé que volvió a su hogar. También la casa y los alrededores siempre estarían custodiados las 24 horas por oficiales suecos, los cuales claramente no invadirán de forma directa su casa para no causarle incomodidad tanto a su pareja como a su hijo quien apenas es un niño.

Pareciera que sería igual como estar en la cárcel, pero la verdad es que el pensaba que la vida que le esperaba era el paraiso pues el simple hecho de ya poder estar con su familia sin ser separados ya era la mayor recompensa.

Otra de las condiciones que le pusieron es que nunca más podrá volver a casarse legalmente con Taehyung, pues sus nuevas identidades tienen que ser lo menos expuestas ante los registros civiles o cualquier cosa legal y pública. Minsuk tendrá la oportunidad de por primera vez en su vida de ir a un colegio normal, pues toda su vida su educación la recibió por medio de maestros privados para exponerlo lo menos posible a la gente.
Y Taehyung y Minsuk cada que salgan siempre serán custodiados por un oficial para garantizar su seguridad.

Le dolía demasiado que por culpa de las decisiones que el tomó y los errores que cometió, tanto su esposo -por que si, el seguía refiriéndose a Taehyung de esa manera- y su hijo nunca podrán llevar una vida normal.

Lo saco de sus pensamientos el oficial Seokjin al llamarlo por su nuevo nombre, el cuál solo un reservado grupo de personas lo sabía.

—Todo listo, señor Arvid. Oficialmente es un hombre libre —le dijo, Jungkook sintió una sensación inexplicable ante esas palabras.

Se puso de pie y tendió sus manos a Kim, donde este comenzó a retirarle las esposas.

—Lo siguiente que hará es que lo pasaré a un cuarto de salida donde podrá reencontrarse con el señor Ando y su hijo Finn. Después de eso una camioneta blindada y custodiada los llevará a un aeropuerto donde un avión privado del gobierno los sacará del país hoy mismo —y sin más lo tomó de uno de sus brazos para comenzarlo a llevar hacía su nueva vida.

Cada paso que daban para Jungkook se le hacía eterno, pues sabía que cada vez estaba más cerca de su familia.
Después de unos momentos para los que Jungkook parecieron horas, ambos llegaron frente a una puerta.
Seokjin lo soltó y sin mas tomó la perilla de la puerta, abriéndola y dándole el paso a Jungkook.

Minsuk y Taehyung se pusieron de pie al escuchar la puerta ser abierta, pues llevaban encerrados en ese cuarto aproximadamente 2 horas esperando a que les trajeran a Jungkook.

—¡Papá! —gritó con alegría el niño pelinegro al verlo, corriendo hacia él.

Jungkook con lágrimas en sus ojos abrió sus brazos y recibió en ellos a su hijo, abrazándose ambos con fuerza.

—Mi amor, mira que grande estas ya —le dijo Jeon mientras sentía como las lágrimas salían de sus ojos, sintió como Minsuk comenzó a sollozar en su hombro y solo pudo abrazarlo con más fuerza para consolarlo.

Taehyung veía la conmovedora escena mientras las lágrimas bajaban por sus mejillas. Había esperado tanto por este momento, se sentía muy diferente a sus visitas mensuales pues sabía que esta vez nadie separaría a Minsuk de su papá.
Todos estos años después de cada visita de Minsuk a Jungkook era sumamente difícil después de que terminarán, pues su corazón no resistia al como Minsuk comenzaba a llorar sin querer separarse de Jungkook cada que se lo llevaban.

Era muy difícil tenerle que explicar a un pequeño niño por que no podía estar con su papá y por que este estaba encerrado sin poder salir de aquel lugar sin tener que divagar tanto en el pasado de Jungkook.

Salió de sus pensamientos cuando vio como Jeon comenzó a acercarse aún con Minsuk en su brazos. Taehyung sonrió en medio de su llanto y terminó por acortar la distancia que los separaba y abrazo con fuerza al amor de su vida.

—Por fin estamos juntos, Jungkookie —susurró Kim escondido en el cuello del pelinegro, este asintió sin asimilar que por fin los tenía en sus brazos sin miedo a ser separado de ellos.

Ambos se alejaron un poco para verse a los ojos, dándose cuenta en los orbes contrarios que su amor estaba más fuerte que nunca. Ambos unieron sus labios por unos segundos, sintiendo miles de sensaciones mágicas antes de separarse y sonreírse. Jungkook dejo un beso en la cabecita de Minsuk, antes de los tres unirse en un abrazo lleno de amor y esperanza.

Una nueva vida los esperaba allá afuera, una vida por la cual habían esperado tanto tiempo. La vida que Taehyung siempre había anhelado junto a Jungkook por fin era una realidad que estaba al alcance de sus manos.

La vida que las decisiones equivocadas les había robado.

-Nana.☁️

me apure en terminarlo para celebrar con este extra los 16k de wawas!!!

lit tenía como un mes sin escribirle nada al extra y hoy en la mañana lo termine JSKAJAJ no se como de repente me viene en minutos la inspiración q no tuve x meses

espero les guste 🫶🏻

ahora si sin más me despido de este fic q me dio muchos dolores de cabeza pero igual le tengo muchísimo cariño, gracias por todo el apoyo a LD ♡