Jungkook y una anciana llevaban ya más de una hora sentados en un banco del parque. Jungkook se mantenía de brazos cruzados y ceño fruncido, observando como un pequeño grupo de jóvenes jugaba al baloncesto.

La vieja no hacía más que asentir constantemente a las quejas de Jungkook, que le demostraba su enfado hacia aquel grupo.

-...y ves al bajito? Al maldito enano de allí, el que va sin camiseta. -la vieja volvió a asentir- ¿Qué se cree ese idiota, eh? ¿¡Que estamos en un maldito local de striptease!? Por favor, ¡esto es un parque público, hay niños y niñas mirando! ¿¡Es que ya nadie piensa en los niños!?

La vieja miró al joven sin camiseta.

-Es un joven muy apuesto, no creo que nadie se vaya a ofender porque vaya sin camiseta, además es verano muchacho, hay chicas en bikini por la calle, dirigiéndose a la playa.

Jungkook bufó y puso sus ojos en blanco.

-Oh, por supuesto que es muy apuesto señora, ¡es mi novio! Por eso no puede ir simplemente desnudándose por ahí, hay muchas víboras deseosas de morderle.

La vieja pareció quedar sin aire en el cerebro al oir que aquel era su novio, pero finalmente no fue eso lo que la dejó sin aire, sino que...

-Pero muchaho, ¡¡llevas una hora insultando a tu novio sin piedad!!

Jungkook rodó su vista para luego volver a mirar el torso desnudo de Jimin, bañado en sudor debido al ejercicio físico y el abrasador sol.

Yoongi encestó una canasta más y Jimin corrió a abrazarle.

-Joder que puto asco, me hace a mi eso así de sudado y lo mato. -se quejó de nuevo Jungkook. -Además, ¿por qué le abraza? Tan sólo metió una canasta, no es para tanto.

La vieja rió.

-Ya veo lo mucho que lo quieres.

-Cada vez le odio más, en serio es insoportable, ¡¡OH!! PERO SERÁ...- Justo en aquel momento Jimin derramaba una botella de agua sobre su cuerpo- Eso no está bien, no está nada bien. Señora, ha sido un placer desahogarme con usted, pero ahora mismo debo ponerle límites a mi estúpido novio, buenas tardes.

La vieja rió y se despidió con la mano mientras Jungkook se dirigía con paso firme hacia Jimin y sus amigos, en la cancha de baloncesto, en la que el sol pegaba con fuerza.

-Hola bombón...-comenzó a decir Jimin cuando le vio.

-Cállate idiota, ¿que crees que haces echándote agua de ese modo?

-...no vengas al sol que te derrites. -terminó su frase Jimin algo desconcertado. - ¿Pero de que hablas?

-¿Qué de que...¿¡que de qué hablo!? Uuyy, no sé...¿de que le estás dando un espectáculo visual a todo el parque quizás? Park Jimin tápate esa gloriosa tableta de chocolate ahora mismo, nos vamos de aquí, y dios mío, ni se te ocurra tocarme hasta que no te duches, ¿entendido?

Los chicos y Jimin quedaron impresionados ante lo que acababa de decir Jungkook, hasta que comenzaron a reir a la vez.

-Jimin, creo que tu perra está en celo, deberías controlarla -dijo Namjoon divertido.

-O ponerle un bozal para que no le muerda a quien se te acerque. -añadió Yoongi, quien sabía perfectamente lo mal que le caía al menor por el sólo hecho de ser el mejor amigo de Jimin.

-Muy bien, reíros, pero ya veremos quien ríe el último.

Jungkook dio media vuelta y se largó de aquel parque. Era hora de preparar su contraataque.