-...Oh sí, Yugyeom, no tienes ni idea de lo horrible que es Jimin, en serio es que le odio tantísimo desde que somos novios...¿qué?...Ya, ya sé que antes también le odiaba, pero ahora es aún peor, ¿sabes?...¡Pues claro que no!...¿¡Que me relaje!? No sé para que te llamo, ¡adiós!

Jungkook colgó el teléfono de golpe y resopló.

Apenas tenía amigos con los que poder desahogarse y encima Yugyeom parecía no estar de acuerdo con él.

Aunque para ser sinceros...Jungkook era un auténtico insoportable a veces. Parecía no haber superado aún esa espinita de odio clavada tiempo atrás, antes de ser novios, y mucha gente realmente no podía creer que ambos jóvenes fuesen pareja, siempre molestándose el uno al otro y discutiendo.

Quien sabe...quizás esa era la forma que tenían de demostrar su amor y preocupación por el otro.

Insultos en vez de elogios, golpes en vez de abrazos...sí, definitivamente no eran una pareja común. Pero Jungkook escondía un secreto bajo llave. En el mismo cajón donde guardaba su antiguo diario del odio, en el que escribía todo lo malo sobre Jimin antes de ser novios, tenía ahora un nuevo diario, llamado LoveBook, dónde antes de acostarse, escribía todo lo que amaba sobre Jimin.

El mayor, a diferencia del BurnBook, no sabía de la existencia de este nuevo diario, pues a Jungkook le avergonzaba demasiado, pero no podía evitar escribir cosas sobre Jimin, fueran buenas, o malas.

Jungkook se aseguró de que Jimin no estuviese por ahí en esos momentos y sacó la llave del cajón donde escondía ambas libretas.

Abrió el diario y tomó su bolígrafo:

Amo cuando Jimin me hace enfadar sólo para luego poder disculparse con mimos.