Meliodas se encargó de la crianza de sus hermanos pequeños y de la gran responsabilidad que eso llevaba. Los alimentaba y aseaba siempre con mucho cuidado cada que veía que estos estaban inquietos.

Ni siquiera dejaba que Cusack y Chandler los tocaran, pues tenía miedo de que ellos se aprovecharan de su inocencia.

Pero los cuidados especiales de Meliodas no bastaron para que Cusack se obsesionara con el pequeño Zeldris, a quien se llevaba sin decirle nada.

Al poco tiempo el rubio dio por perdida la crianza de Zeldris, pues no quería pelear contra el peli rosa para quitárselo. Así que sólo se enfocó a cuidar de Estarossa, a quien veía como alguien que tendría mucho potencial en un futuro... El pobre Meliodas nunca se imaginó que estaría cuidando de alguien que ni siquiera era su verdadero hermano y que al verdadero lo estaba dejando a un lado...