CAPÍTULO 10: Una Promesa Que Cumplir.
El poder de ambos se siente en el aire, suelo y sus alrededores. Lexserron camina lentamente hacia Andece, el príncipe camina hacia él quedando ambos a cinco metros del otro.
Lexserron: Ya no necesito está vestimenta.
Lexserron baja una de sus espadas bruscamente, su chaqueta azul es destruida en pedazos. Luego Lexserron se inclina hacia al frente y junta sus brazos en X para que después los apriete contra su cuerpo.
Hefesto: La pose de pelea de Lexserron.
Juno: Esa energía que emerge de su cuerpo es increíble.
Volcano: Sí.
Lucifer: Es increíble sentir el poder de una Deidad, hace mucho tiempo que no sentía algo así, tanta energía que quiere estallar de ira.
Blacktel: El Capitán hace tiempo no se enfrenta con alguien con un poder así. La única vez fue en La Era De La Extinción.
Halley: Hades y Poseidón.
Alrededor de ellos empieza a fluir muchas ráfagas de viento que convierten por una parte la arena como pequeñas olas.
Andece: (Tengo que encontrar la manera de dejarlo mal herido)
Lexserron: Espero que no te vayas a morir tan rápido, ya que quiero jugar un rato.
Ares: Otra vez veré a Lexserron en acción.
Sin ningún tipo de aviso la Deidad se arroja y el príncipe lanza un ataque directo con su arma, pero de repente si fuera un truco maravilloso la Deidad se convierte literalmente en viento, desapareciendo luego del ataque que termina estrellándose a varios metros de ellos, emergiendo una gran explosión de arena.
Andece: ¿Qué diablos?
Repentinamente la Deidad aparece en su espalda y le lanza una estocada, Andece logra esquivar el ataque por los pelos para responderle con un lanzamiento directo de su hacha, pero vuelve a desaparecer convertido en viento. En menos de dos segundos Lexserron vuelve atacarlo por la espalda, lanza su estocada y Andece salta hacia al frente logrando así salvarse.
Andece: Por poco.
Adad: Bien hecho.
Blacktel: Mmm. Mira con detenimiento la pelea
Lexserron arroja y apretando con fuerza la base de Las Destructoras De Los Cielos Celestiales, un ataque en equipo con ambas armas y Andece alcanza a crear un resistente escudo de cuarzo, las armas al impactar se genera una violenta ráfaga de viento junto con una explosión de arena enorme.
Hefesto: Ya no salen los puñetazos invisibles.
Odiseo: No, esos poderes mágicos ahora se encuentran en las dos armas, la habilidad son la energía y la resistencia de las espadas.
Andece crea la hacha nuevamente, quedando listo para el combate.
Andece: Es mi turno.
El Demonio se arroja y con la base de su propia hacha, lo golpea en todo el lateral izquierdo del rostro siendo impulsado Andece a ese lado y su rival a la derecha, la Deidad lo mira lanzando en cuestión de menos de un segundo varias estocadas feroces las cuales el Demonio más ágil las esquiva, luego decide responder lanzando estocadas con la hacha y entre las armas se impactan los fuertes golpes, generando ondas de energía y las características ráfagas de viento en estos combates.
Xavier: Es maravilloso, ojalá un día tenga la oportunidad de enfrentarme a una Deidad.
Adad: Y la tendrás. Todos vamos a tener esa oportunidad si queremos darle fin a la guerra.
Ambos guerreros admirables siguen con el choque de sus armas.
Lucifer: Energía poderosa sale de cada golpe, fuerza y gota de sudor... Ojalá estuviera allá para apreciar mejor el combate.
Halley: Andece, Lexserron. Maldita sea, lo único que quiero evitar es la muerte de ellos, debemos hacer algo.
Catalán: Ayudaremos.
Halley: Debemos esperar un momento, estén preparados, a mi señal tratamos de hacer lo posible en derribar a Lexserron.
Ninguno de los dos se detiene de agitar sus armas, la velocidad es admirable y es un espectáculo increíble.
Andece: ¡Aaahhh!
Andece por fin detiene los ataques ya que con su otro brazo, le pega un puñetazo en la cara a su rival el cual retrocede y se le queda mirando, ninguno de los dos se ataca ya que de repente Lexserron suelta sus armas que quedan flotando en el aire y de un momento a otro empiezan a girar en su propio eje, la energía genera un aura azul alrededor de los brazos de Lexserron.
Ares: Sus puños llevan la experiencia de combate a puño limpio, él dejó en el basurero a varios Titanes que no aguantaron la energía de su poder, Cronos fue golpeado y aniquilado por completo gracias a su ayuda. Aniquiló a varias razas, él mismo se título con su energía tan voraz como El Segundo Más Fuerte.
Reinquer: Va a pelear a puño limpio. Interesante, supongo.
Andece: ¿Vamos a pelear a puño limpio tan rápido? Bien, eso me llama un poco más mi atención.
Andece clava la base de su hacha en la arena, el Desierto del Sahara no deja de sacudirse por los vientos, pero aún así los brazos del príncipe envueltos por un aura naranja, deja en la base de su arma la marca de su propia mano, ya listos para el enfrentamiento a puño limpio.
Lexserron: Espero que resistas, no te preocupes, seré lo más delicado posible.
La Deidad violentamente se arroja lanzando un puñetazo mortal, Andece se cubre con su brazo derecho recibiendo todo el impacto y luego se cubre con el izquierdo para protegerse del otro puñetazo fuerte, impresionantemente resistió exitosamente los puños de Lexserron.
Adad: Al parecer quería probar si podía resistir los golpes, los aguanta perfectamente.
Andece con una sonrisa le impacta un puñetazo en toda la cara a su rival, pero él responde de la misma manera y ambos retroceden, pero Lexserron ataca con un golpe en el estómago, luego lo empieza a golpear rápidamente, levanta su brazo izquierdo y embiste Andece, empezando a girar en el aire y resiste cayendo de pie. Lexserron gira para recibir una patada en la cara, Andece se pone de pie y sin dudarlo se arroja contra éste.
Lexserron: Veamos si puedes resistir ésto.
Levanta sus brazos y antes que lance su ataque mortal, recibe un puñetazo directo en el estómago y él queda perplejo ante la velocidad de Andece.
Lexserron: ¿Ah...?
Andece: Está pelea necesita emoción, los Dioses y mi clan nos están viendo. Si me quieres muerto, ataca de una vez en serio... Porque yo atacaré para dejarte mal herido, entonces prepárate.
Lexserron: Bueno. Entonces prepárate también.
Lexserron agarra el rostro de Andece.
Halley: (!)
Con su otro brazo y puño libre, le impacta tres golpes en el rostro para luego con el último golpe, lo arroja contra la arena, Lexserron atrae una de sus espadas y lanza un ataque directo a su rival que aún se encuentra en el suelo, afortunadamente Andece gira a la derecha esquivando el choque y luego al levantarse, le pega una patada en toda la cara a la Deidad que retrocede. Andece salta cayendo atrás de su rival que arroja otro ataque con su espada, el cual fue amortiguado por el brazo izquierdo del Demonio y él con su otro brazo libre, le impacta un codazo en la quijada lanzando a Lexserron contra el suelo.
Catalán: ¡Bien hecho!
Halley: Bien, Andece. Se nota que más o menos le estás pegando suave, lentamente se va debilitando.
Juno: Ahora está contra las cuerdas.
Zeus y Lucifer: Genial.
Andece: Creí que era una pelea solamente a puño limpio, ¿Acaso te da miedo? Ya que veo que utilizaste tu espada.
Lexserron: Vamos a ver, voy a cerrarte esa boca.
La Deidad deja su espada en el suelo causando un pequeño hundimiento, luego se arroja contra su rival que no para de provocarlo, empezando a lanzar una lluvia de puñetazos los cuales fueron atravesados por un puño de Andece, recibiendo todo el golpe en la quijada, doblando el cuello de Lexserron, pero eso no detiene todo los puñetazos que se siguen arrojando, Andece empuja a la Deidad con su mano que no para de arrojar ataques y termina cayendo solo al suelo, dejando así sus ataques tan intensos.
Lexserron: Oh... Eso fue un ataque estupendo.
Lexserron agarra su rostro y se acomoda el cuello de nuevo, se escucha el tronar de los huesos, empezando a sobarse lentamente la parte trasera de él.
Lexserron: Tengo que admitir que eso dolió un poco.
De repente Andece lo golpea en la cara con el mismo puño y uno extra con el otro, luego rápidamente la intensidad de los ataques aumentan, el Demonio empieza a golpear cara y pecho para ir terminando con solo patadas en las piernas, tratando de derribar a la Deidad.
Ares: ¡Planea destruir sus piernas para que no pueda seguir!
Andece por último lo lanza al suelo con un puñetazo en toda la quijada.
Andece: Con esto creo que ya basta.
Blacktel: ¡Bien hecho, señor!
Del cuerpo de Lexserron empieza a salir humo y de repente la arena se hunde brutalmente.
Andece: (!)
La Deidad se levanta rápidamente lanzándose contra el Demonio, lo golpea repetidas veces en el rostro, pero entre tanto golpes, Andece logra atacar con un puñetazo directo en la cara y ambos retroceden para empezar a chocar sus puños con fuerza, las ráfagas de viento salen de ellos sin parar.
Xavier: ¡Diablos! Son grandes choques de energía.
Andece le impacta una patada en el estómago a su rival, lanzándolo hacia atrás.
Lexserron: ¡Ya me cansé de esto!
Lexserron atrae sus dos armas y se lanza contra el Demonio, empieza a lanzar ataques los cuales son esquivados, entre estos ataques uno va directo a las piernas, pero Andece se salva ya que saltó, se crea atrás de él una tormenta de arena por haber esquivado la estocada.
Lexserron: ¡ESTRELLA SÓNICA!
Le arroja una estrella de luz y Andece atrae su arma, la transforma en un escudo y se cubre del ataque que se transforma en una explosión de ráfagas de viento, luego se lanza y golpea la cara de la Deidad con su escudo, la transforma de nuevo en un hacha y entre los dos chocan sus armas fuertemente, pero de repente el Demonio lanza un ataque directo y la Deidad al esquivar el ataque, su hombro derecho alcanzó a ser cortado, siendo liberado sangre dorada de su cuerpo.
Lucifer: La sangre de las Deidades son de color doradas, su sangre es como un beneficio para las maldiciones Humanas.
Andece le pega una patada en el pecho y de éste sale un poco de sangre ya que la herida está cerca del impacto, luego Lexserron con un poco más de odio le pega con una de sus espadas en el rostro, genera otro impacto pero en el estómago, Lexserron lanza un ataque que arroja la hacha de las manos de Andece, dejándolo desarmado. Pasan menos de cinco segundos y lanza un ataque por los laterales con ayuda de sus armas, el Demonio con fuerza agarra ambos brazos e intenta alejarlos de él, el suelo se hunde mientras Lexserron trata de abrazarlo fuertemente con sus brazos y Andece resiste en alejarlo con la fuerza muscular, el suelo se agrieta y la arena cae por las aberturas, las ráfagas de viento ahora mueven la arena como olas mucho más grandes y todos sienten esa energía tan gigantesca.
Xavier: ¡Resiste! ¡Vamos Capitán, usted puede!
Las grietas son más grandes por la energía liberada, Andece trata con todas sus fuerzas alejar los brazos de su rival que empieza a superarlo, hasta que por fin con un cabezazo en toda la cara de la Deidad, lo aleja y luego sin ningún aviso una de las espadas corta el hombro del príncipe, luego recibe un impacto potente en el estómago por una de las espadas siendo lanzado fuertemente contra el suelo, causando una inmensa explosión de arena.
Andece: Se sostiene el hombro Demonios... Ambos tenemos heridas en nuestro cuerpo. A pesar que te golpeó muchas veces, pudiste resistir los ataques.
Lexserron: Sí, qué lástima que haya acabado este combate.
Zeus: Acaba con él.
El guerrero lanza un ataque con ambas armas y todo se genera en una enorme explosión de arena, dejando a todos en silencio.
Volcano: ¿Qué pasó?
Apolo: Mató por fin a Andece.
Asclepios: No, aún siento su energía.
Zeus: ¿Ah?
Luego que el polvo desaparece, todos ven con asombro que los brazos de Lexserron fueron detenidos por una cadena de hierro.
Andece: ¿Eh?
Lexserron: ¿Qué demonios es esto?
Adad: Tienes una fuerza realmente formidable, me había equivocado en mis cálculos de subestimar esa energía.
Andece: ¿Adad?
Halley y los demás aparecen frente a Lexserron, mientras todos quedan asombrados ya que el Clan De Los Cinco Sangrientos decide ayudar a su Capitán.
Andece: ¿Chicos? ¿Halley?
Ares: (!) ¡¿Van a enfrentarlo entre todos?! Se levanta bruscamente ¡Eso es una descarada trampa!
Zeus: No, hijo... Lexserron usó sus armas mientras el combate era a puño limpio, es justo que ellos se hayan metido en la pelea para ayudar.
Adad: ¡Traga tierra!
Adad jala las cadenas hacia adelante y derriba a Lexserron al suelo, luego con todas sus fuerzas lo eleva por los cielos y lo estrella fuertemente contra la arena, causando una gran explosión que destruye más los alrededores.
Adad: Ya saben, es dejarlo mal herido, no matarlo.
Xavier: ¡Por fin me voy a enfrentar a un Dios!
Xavier se arroja muy emocionado con uno de sus puños listo, pero de repente la Deidad le lanza un ataque rápido con una de esas armas que al parecer por el momento no logra percatarse.
Ares: ¡Lexserron! ¡Acaba con esos bastardos!
Xavier logra esquivarlo a tiempo, se dispara por los cielos ráfagas de viento y le impacta una patada directa en la cara, luego cae de pie frente a Lexserron para golpearlo en la cara con un fuerte puñetazo, un codazo certero en el estómago y un puñetazo en toda la quijada. Lexserron responde golpeando en la cara y lanzando a Xavier lejos de él con un puñetazo en el estómago.
Lexserron: ¡ESTRELLA SÓNICA!
La Deidad arroja el ataque desde la espada, Xavier se cubre recibiendo todo el ataque junto con una fuerte explosión que sacude un poco los suelos. Lexserron de repente es atacado por Blacktel, que le corta la espalda.
Lexserron: Escupe sangre dorada Maldito...
Este guerrero arroja una estocada y Blacktel se cubre con ayuda de su espada, siendo lanzado hacia atrás por el impacto y luego el Demonio se lanza con varias estocadas, afortunadamente la Deidad comienza a esquivar los ataques rápidamente.
Ares: Lexserron se va adaptar muy bien a sus contrincantes. Si se enfrenta con uno o más al mismo tiempo, junto con ataques diferentes, sólo es cuestión de tiempo que pueda aprenderse los ataques y responder de una manera letal. Lexserron sí que es increíblemente fuerte.
A pesar de los ataques lanzados de Blacktel, ninguno ha logrado tocar a Lexserron.
Lexserron: Es mi turno.
Una ráfaga de viento lanza repentinamente a Blacktel hacia atrás, levanta su mirada y el Dios con sus dos espadas las empieza agitar rápidamente, arrojando sus letales estocadas sin parar.
Blacktel: ¡Diablos! ¡Es muy rápido!
Blacktel no puede esquivar más ataques, decide cubrirse con su espada siendo arrojado por los choques contra la arena, generando una inmensa explosión.
Blacktel: Es increíble... Esquivé más de tres mil estocadas en menos de diez segundos...
Lexserron: ¿Eso es todo?
De repente las cadenas de Adad lo golpean fuerte el rostro del Dios, luego brazos y piernas.
Reinquer: Uno por uno.
Adad lanza dos ataques con la cadena que les arrebata las armas a su rival, luego la cadena vuelve atacar, pero Lexserron se la envuelve rápido en su brazo derecho y la jala en su dirección, lanzando Adad contra él mismo pegándole un puñetazo fuerte en toda la cara, sin embargo, a pesar del duro impacto, el Demonio se mantiene de pie.
Lexserron: ¿Ah? Ya me acordé de ti. Eres Adad, El Demonio Que Jamás Ha Caído.
Adad: Sí, será divertido ver como lo intentas.
Lexserron: ¿Quieres morir?
Adad: Lo haría por mi Capitán, pero eso será en otra ocasión, en este momento el objetivo principal es dejarte muy mal herido.
Lexserron lo golpea en el estómago lanzándolo contra la arena, pero logra mantenerse firme y se detiene con sus fuertes piernas.
Adad: Fue un golpe muy fuerte en verdad.
Lexserron: Denme una pelea increíble como hizo Andece... ¡¡AAAAHHHH!! ¡¡OBLITERACIÓN DEL VIENTO!!
Alrededor de la Deidad aparecen grietas de luz y de su cuerpo empieza un huracán de puñetazos de viento, que son arrojados logrando escuchar un zumbido agudo y a la vez irritante, como si fuera un fuerte silbido.
Blacktel: ¡Cuidado!
Blacktel se levanta y con su espada empieza atacar a los ataques de Lexserron, empezando a cortarlos a gran velocidad. Luego los ataques son arrojados contra Xavier que aún se encuentra en el cielo flotando.
Xavier: ¡Fabuloso!
El Demonio responde los ataques lanzados contra él con sus puños, empezando así un fuerte choque junto con ráfagas de viento disparados por todos lados. Adad es el siguiente y se cubre con sus brazos, recibiendo fuertemente todos los impactos y aún así se mantiene de pie. Catalán es el siguiente, pero él planea responder de una manera increíble.
Catalán: Pondré fin a tus ataques... ¡TORMENTA DE ORO-AVARICIA ETERNA!
Atrás de él emerge del suelo un gran ejército de personas cargando grandes bolsas llenas de oro, y éstos se arrojan a la parte de al frente del Demonio creando un fuerte escudo con las grandes bolsas.
Catalán: ¡Oye! ¡Dame esa bolsa de oro!
Un condenado del Cuarto Círculo le lanza una pesada bolsa de oro a Catalán, él la agarra y se eleva a la punta del escudo creado, luego cae en picada en dirección contra Lexserron el cual no reacciona rápido y con una increíble fuerza, Catalán lanza una embestida desde arriba a su rival chocando fuertemente contra la cabeza y cuerpo generándose una grandísima explosión de arena, los puñetazos de viento por fin son destruidos. Por el impacto sale volando varias monedas de oro relucientes, capaz de sumergir a una persona a la Avaricia, algunas monedas caen en la mano izquierda del Demonio.
Catalán: El castigo a los Humanos que cayeron en la Avaricia... No todo es dinero. Destruye las monedas con su mano
Ares: Lexserron... ¡No te rindas!
Una onda de energía manda a volar a la gran bolsa de oro junto con Catalán, luego de repente el Demonio recibe un golpe certero en la cara y es lanzado contra la arena. El Clan De Los Cinco Sangrientos se reúnen con Catalán.
Catalán: Es muy difícil derrotarlo con ataques que no hacen mucho daño, si lo herimos demasiado y usamos mucha fuerza, lo podíamos matar por error.
Blacktel: No debemos olvidar que el objetivo es dejarlo solo mal herido.
Adad: Podemos hacer un ataque combinado.
Xavier: Evitando mucha energía, hagamos el ataque característico de nosotros.
Lexserron: ¡Vamos! ¡Vengan y peleen!
Lexserron lanza un puñetazo contra la arena, y de éste emerge cascadas de lava que rodean el lugar del combate.
Lexserron: Les doy la oportunidad para que hagan lo mejor posible en dejarme fuera del combate.
Xavier no duda en ser el primero en atacar, lanzándose contra la Deidad que lo mira fijamente.
Xavier: ¡PRESIÓN DE CINCO SEGUNDOS!
El Demonio empieza a golpear repetidas veces a la Deidad sin detenerse.
Reinquer: M... Ese demonio se ganó mi atención.
Los golpes se detienen e inicia el ataque de todos con sus mejores técnicas.
Xavier: ¡Ya!
Catalán aparece frente a Lexserron y le impacta dos fuertes puñetazos en el rostro.
Catalán: ¡Ya!
Adad y Blacktel se arrojan en dirección a las piernas.
Blacktel: ¡Con fuerza para derribarlo!
Adad: ¡Está bien!
Entre los dos le pegan un puñetazo directo a las piernas, luego retroceden y Blacktel desde su espada lanza una esfera de oscuridad, causando una gran explosión.
Juno: (!)
Todos miran con detenimiento la explosión y sale caminando Lexserron, él tiene sus dos espadas pero de repente las piernas de él se parten, el crujido de los huesos y chorros de sangre es lo que se escucha, la Deidad cae arrodillado frente al clan.
Juno: ¡No!
Ares: ¡Lexserron!
Volcano: Lograron romper sus piernas.
Zeus: Diablos...
Lucifer: El Clan De Los Cinco Sangrientos son muy poderosos de lo que creía, y eso que en este momento no usan todo su poder. Con razón va a ocurrir lo siguiente.
De repente el pecho de cada Sangriento recibe un corte, siendo lanzado chorros de sangre y caen al suelo, excepto Adad que se mantiene en forma de lagartija.
Adad: Casi lo logras...
Blacktel: Esa estocada no la vi venir...
Lexserron: Esto.... Halley... Ira... ¡¡AAAAHHHH!!
La Deidad se levanta con todas sus fuerzas, sus piernas siguen desangrándose y las espadas empiezan a girar a su alrededor, con sus dos manos se acomoda los huesos de sus piernas.
Lexserron: ¡¡AAAAHHHH!!
Lucifer: (!) Se acomodó los huesos con sus manos, interesante y doloroso.
Hefesto: ¡Sí!
Juno: Logró ponerse de pie.
Reinquer: El Clan De Los Cinco Sangrientos están en el suelo, los tiene a su merced y matarlos de una vez es una oportunidad la cual se está presentando.
La Deidad agarra sus espadas y se acerca a ellos.
Andece: A pesar de tanto daño ya en su cuerpo, aún sigue de pie.
Halley: Te puedo curar, pero necesito tiempo para que Hoja Sagrada haga lo suyo.
Andece: Ve ayudar a mi clan, por favor.
Halley: Pero...
Andece: Ni ellos ni yo pudimos derribarlo para dejarlo fuera de combate. Quizás tú puedas salvar lo que queda de él.
Halley: Ah... Está bien. Lo intentaré.
Lexserron levanta sus armas y sus músculos se vuelven firmes.
Lexserron: Por fin van a morir.
Blacktel: Hazlo de una vez, al menos dejamos varias heridas en tu cuerpo y una es grave.
Lexserron: Fue un gusto haber peleado con todos ustedes.
El Clan De Los Cinco Sangrientos ven como el rostro de Lexserron se ilumina en el lateral izquierdo, él gira para esa dirección y ve varias lanzas siendo arrojados contra él.
Halley: ¡LANZAS ERRANTES!
Lexserron: ¿Halley?
Las lanzas van a toda velocidad y él con sus espadas las empieza a destruir, generando múltiples explosiones. Cuando todas fueron destruídas, Lexserron se da cuenta que el Clan De Los Cinco Sangrientos se alejó de él a tiempo.
Lexserron: ¿Ah?
Ares: Es la segunda vez que lo ataca.
Lexserron: Maldita traidora... ¡Ya me cansé de esta estúpidez!
Sin piedad se arroja contra su hermana de otra madre, lanza las estocadas que son esquivados al instante.
Halley: El Lexserron que yo conozco no me atacaría, yo te ataque porque tú no estás aquí.
Lexserron: ¡Cállate!
Lexserron con ayuda del viento arroja varios puñetazos junto con una estocada, también fueron esquivados sin mayor esfuerzo mientras se levanta más estallidos por todas partes.
Halley: Yo no quiero lastimarte, Lexserron.
Lexserron: ¡Tú decidiste traicionar a los Dioses y mereces morir por eso!
Lexserron arroja de nuevo varias estocadas, pero entre sus ataques una patada es arrojada y conecta contra su rostro, siendo lanzado contra la arena, pero logra detenerse con sus pies quedando perplejo.
Lexserron: No vi ese ataque.
Reinquer: Ella tiene la misma velocidad que Lexserron, pero aún así logré ver el ataque.
Halley: No olvides que soy parte Deidad, tú me enseñaste a defenderme, me enseñaste el uso de ataques físicos a gran velocidad. Te estás enfrentando a alguien que es casi igual a ti.
Lexserron: ¡Vamos a ver si eres capaz de esquivar mis violentos ataques!
Se lanza con ira y empieza arrojar un sinnúmero de estocadas, pero ella grandiosamente los esquiva rápidamente.
Halley: Yo conozco a Lexserron desde hace mucho tiempo.
Lexserron: ¡Tú no conoces mi pasado!
Halley: Claro que sí. Tú antes eras un guerrero que supongo que se quería convertir en una Deidad, y sí es así, no me importa si nunca me lo contaste, tal vez tenías tus razones.
Lexserron: ¡Tú no conoces mi pasado! ¡Yo... Yo...!
Zeus: Ohhh, le va a decir la verdad.
Lexserron: ¡Yo... Yo...! ¡¡AAAAHHHH!!
Lexserron le impacta un golpe a Halley, ella sale volando contra la arena, pero logra detenerse con sus pies, Lexserron se impulsa contra ella arrojando una estocada desde el lateral izquierdo y la Humana logra protegerse con Hoja Sagrada, arrojándose una fuerte ráfaga de viento.
Halley: Ya basta, Lexserron. Tú eres un gran hombre, eres el único que me ayudó cuando mi padre murió y mi madre se tuvo que ir.
Lexserron: ¡No soy lo que tú crees!
Halley: ¡¿Por qué lo dices?! ¡Si yo te conozco perfectamente!
Lexserron: ¡No! ¡Yo... Yo...!
Halley: ¡¿Yo qué?!
Lexserron: ¡¡Porque yo asesiné a tu madre!!
Halley: (!)
Blacktel: ¡¿Qué?!
Reinquer: Lo dijo.
Zeus: En algún momento tenía que hacerlo.
Halley: ¿Cómo... Cómo qué asesinaste a mi madre...?
Lexserron: Yo...
Cuando había nacido mi madre tuvo que irse a la Era De La Extinción, tu madre era una gran amiga de la mía entonces me cuidó y me entrenó para ser un guerrero formidable para la época que se estaba viviendo, cuando naciste y lo supe a susurros me puse demasiado feliz, te consideré al instante una hermana, pero... Cuando me convertí en una Deidad y las voces de tu nacimiento se esparcieron por toda la Ciudad Celestial, Zeus me afirmó que todo era un plan y cuando tu padre murió, me dijo que de alguna manera obligó al Demonio llegar donde estaban ustedes y acabara al menos con uno, ese fue tu padre. Tu madre regresó a los cielos y me habló mucho de ti... Te nombraron Halley Orian Drims Wly. Apellido de tu madre y padre, eras conocida como un Híbrido muy poderoso entre un ser de luz y un Humano. Yo... Yo... Zeus me pidió asesinar a tu madre y básicamente me obligó hacerlo, él sabía que tu madre volvería a la Tierra a buscarte. No tuve elecciones, quedé destrozado y lo guardé en silencio junto a este poder... Luego me mandó a cuidarte y a entrenarte para ser una Deidad sin corazón, afortunadamente me encariñé mucho contigo y no seguí con el procedimiento.
Lexserron: Lo siento mucho... Aleja su arma y sus ojos están volviendo a su estado normal
Halley: Lexserron... Pasó mucho tiempo y hasta ahora me lo dices...
Lexserron: No quería perderte... Me juré a mí mismo protegerte de todo peligro y cuidarte como una hermana... Zeus... Zeus me obligó hacerlo.
Zeus: Bien, ahora tiene más motivos para matarme.
Lexserron: ¿Ah...? ¿Halley...?
Xavier: Está volviendo de nuevo.
Zeus: Yo literalmente me cansé de la charla, en vez de haber fuertes combates sólo estoy viendo una pelea de sentimientos. No van a parar los ataques hasta que mueran.
El Dios aprieta de nuevo su puño con luz y por última vez Lexserron pierde la consciencia, la Deidad con un ataque de sus armas en forma de X arroja hacia atrás a Halley.
Lexserron: Lo... Lo siento... ¡Voy a matarte!
Lexserron se lanza arrojando varias estocadas las cuales son esquivados por Halley, pero sin mayor esfuerzo logra impactar una patada en el estómago a su hermana.
Juno: ¿Ah?
La cara de Halley está llena de lágrimas y a la vez una expresión de furia.
Halley: Te perdono... Pero... Tengo que salvarte a la fuerza... ¡Tú perdóname a mí!
Halley empieza a golpear sus piernas y lanza una estacada directa desde arriba, Lexserron se cubre y el impacto genera ráfagas de viento, luego ve como su hermana empieza a lanzar estocadas y patadas al mismo tiempo, él logra responder las estocadas, sin embargo, no se cubre de las patadas. Los últimos ataques logran hacerlo retroceder, pero aumenta su poder de golpe, arrojándose contra Halley nuevamente.
Blacktel: ¡Ahora!
El Clan De Los Cinco Sangrientos entren juntan sus brazos, creando como un tipo de cadena con ellos.
Clan De Los Cinco Sangrientos: ¡ATAQUE COMBINADO-CIRCULOS DEL INFRAMUNDO!
El Clan De Los Cinco Sangrientos se lanzan contra Lexserron, lo embisten con gran fuerza muscular y lo empiezan a estrellar contra varias colinas de arena, terminando su recorrido estrellando al poderoso guerrero contra una enorme la cual colapsa y se genera una explosión monstruosa.
Adad: ¡Ahora! ¡El siguiente ataque!
Los cuatro apuntan con su brazo derecho a los escombros de la colina.
Clan De Los Cinco Sangrientos: ¡PENTAGRAMA DEL FIN!
Ellos crean un enorme pentagrama demoníaco y lo arrojan contra Lexserron, chocando y causando una inmensa explosión siendo arrojado de él almas de condenados de casi todo los círculos, los suelos se agrietan por todas partes y las nubes grises son más constantes.
Halley: ¡No!
Blacktel: Tranquila, ese ataque no lo mató.
De repente una estocada sale lanzada del polvo cortando el pecho de Blacktel y el brazo derecho de Adad.
Blacktel: (!)
El Demonio choca con la arena y Adad con todas sus fuerzas logra mantenerse de pie.
Adad: Yo voy a seguir de pie...
Luego Lexserron sale disparado contra Catalán y Xavier.
Xavier: ¡Vamos, Catalán! ¡No podemos rendirnos tan fácilmente!
Catalán: ¡Está bien!
Xavier le impacta un puñetazo en el rostro y Catalán una fuerte patada, lanzando a Lexserron contra la arena fuertemente y ellos dos de repente reciben un corte en sus espaldas, siendo derribados sin ningún aviso.
Xavier: ¿Qué...? ¿Qué ocurrió...?
Blacktel: Mi cuerpo...
Cada miembro del clan son rodeados por una línea blanca, ésto paraliza sus cuerpos.
Ares: ¡Sí! ¡Los estás derrotando, Lexserron!
Zeus se levanta de su silla y de un momento a otro sus músculos crecen, siendo lanzado pequeñas ráfagas de viento y el suelo se agrieta.
Odiseo: ¿Pasa algo, señor Zeus?
Zeus: No, me levanté por la emoción de la pelea que por fin se va a poner buena, estará terminando... O tal vez está empezando por fin.
Lexserron se lanza contra Halley la cual se queda inmóvil.
Halley: Ahora es tu turno en atacar.
Andece: ¡Halley!
La poderosa Deidad se arroja con un ataque de manera horizontal, se genera un gran estallido de arena y todos quedan perplejos al lograr apreciar como sólo la punta de la arma atravesó la cintura de Halley.
Halley: ¿Ah?
Lexserron: ¡Ah! Perdón, Halley... ¡Ah!
¡Yo te voy a controlar!
Juno: Trata de controlar su cuerpo con ayuda de lo que queda de consciencia.
Lexserron: Halley...
Halley: Lexserron...
Lexserron: Si llego a morir... Quiero que me perdones por ésto, por haber ocultado la verdad todo este tiempo y de no haberte protegido como tenía que haber hecho... ¡AAAAHHHH! ¡¡Muere!!
La Deidad levanta su otra arma y arroja una letal estocada desde arriba, Andece de repente detiene el ataque con Ala de Ángel y se genera una nueva explosión de arena por todas partes.
Xavier: (!)
Apolo: ¡Andece!
Catalán: ¡Capitán!
Andece: Volví, Lexserron. Y está vez no planeo retroceder, está vez voy a pelear en serio.
El príncipe le pega una patada en el rostro lanzándolo hacia atrás, luego sujeta la base de la katana y a punta a Lexserron.
Andece: ¡ATAQUE DE MIL IMÁGENES!
Se arroja la gran cantidad de ataques contra la Deidad, que reacciona a tiempo empezando a esquivar los ataques sin parar y luego de unos segundos, los dos se arrojan impactando una fuerte estocada, que los lanza hacia atrás al mismo tiempo mientras se genera en sus pies varios cráteres.
Andece: Halley, préstame la otra katana... ¿Ah?
Una aura de luz ha rodeado a Halley, dejando paralizado su cuerpo.
Halley: No me puedo mover... Oh, no...
Reinquer: Sólo queda él de pie, si una de sus espadas alcanza a cortar a Andece, quedará paralizado y al merced de Lexserron. Todos van a morir si ocurre eso.
Andece: Agarra Hoja Sagrada Lo haré, aquí vamos.
El Demonio fusiona las armas creando la lanza que arroja un destello oscuro, ésta se envuelve en oscuridad y en pequeños rayos rojos que chocan y chocan contra el suelo sin detenerse, lanzando a la vez fuertes ráfagas de viento por todos lados.
Lucifer: La Arma Más Poderosa se adaptó a él.
Hefesto: Wow... Es increíble.
Halley: No sabía que la lanza iba a crearse en tus manos.
Andece: Yo tampoco, tuve mucha suerte. Voy acabar con esta pelea. Lexserron, hazme un favor, luchemos hasta que uno de los dos no pueda más y nuestros cuerpos ardan de dolor por nuestro poder.
Lexserron: Lo mira fijamente Te voy a callar esa maldita boca de una vez. OBLITERACIÓN DEL VIENTO.
Una tremenda tormenta de puñetazos sale disparado de su cuerpo, dos tornados rodean las armas de la Deidad junto con un aura azul que ha envuelto sus brazos.
Zeus: Inicia la verdadera contienda.
Lexserron se lanza a gran velocidad contra Andece, luego que él haya esquivado los puñetazos de viento, esquiva un ataque de las espadas saltando hacia atrás, una gran explosión sale disparada por todas partes, luego la Deidad arroja otro ataque y Andece se cubre con su arma, resistiendo el choque, pero Lexserron lo levanta del suelo con fuerza, pegándole una patada en el estómago que lo arroja contra la arena múltiples veces.
Lexserron: Subamos la velocidad, ¿Qué te parece?
Este monstruo divino choca sus espadas para afilar sus hojas y luego se arroja, lanzando sin detenerse ni una sola vez estocadas y el Demonio desesperado logra cada estocada esquivar, repentinamente una estocada viene directa y es amortiguada por la lanza, siendo lanzado hacia atrás Andece por el impacto.
Lexserron: Sólo te estoy haciendo retroceder, ¿Para qué usas la lanza entonces? Si ni siquiera sabes al parecer usarla con perfección.
Vuelve a lanzarse, pero está vez Andece a punta con la lanza y la agita una sola vez.
Andece: ¡ATAQUE DE MIL IMÁGENES!
Millones y millones de lanzas son arrojadas sin detenerse, Lexserron destruye algunos ataques con sus espadas y otros varios los esquiva sin mayor esfuerzo.
Volcano: Es una tremenda lluvia de lanzas.
Lucifer: Nunca creí verlo luchar de esa manera, más que todo utilizando la única arma que me puede matar. Aún quieres rescatar a esa Deidad de su destino, te deseo suerte en eso, pero aún así te voy a matar. Es muy aburrido seguir diciendo eso, ¿No lo creen?
Lexserron se acerca lo suficiente y Andece le impacta un golpe fuerte con la lanza en todo el rostro, lanzando a su rival contra una montaña de arena que se desploma enseguida, los puños invisibles vuelven hacer acto de presencia, pero son destruidos por una estocada de la lanza. La Deidad ocasiona una gran explosión de arena con su cuerpo formidable, todos los gramos de arena son envueltos en luz y se lanzan como balas, Andece los destruye cuando se atreve acercarse a él, logrando así golpearlo en la quijada y luego con una fuerte patada en el estómago, logra derribarlo nuevamente contra la arena.
Lexserron: Se levanta Buenos golpes.
Juno: Hay un enorme flujo de poder en los brazos de Lexserron, su seriedad aumenta cada segundo.
El cuerpo de la Deidad absorbe los puños invisibles.
Andece: Esto debe funcionar.
Andece empieza a darle vueltas a la lanza que se encuentra clavada en el suelo, ésta es envuelta por un aura roja y luego la desprende del suelo y se arroja contra la Deidad.
Andece: FRAUDE ETERNO.
La punta de la arma toca el pecho de Lexserron que a la vez lo hace retroceder un poco, pero eso no fue lo único que ocurrió, en el lugar donde la hoja tocó, dejó un punto rojo brillante. Lexserron sin saber que ocurrió, eso no le impide lanzar un ataque mortal con sus armas, sin embargo, queda sorprendido al ver que ninguno de las dos estocadas tocó a Andece, ni siquiera se movió del lugar.
Lexserron: ¿Qué?
Andece: FRAUDE ETERNO, tus ataques serán un fraude rotundo, eso significa que ninguno ataque que arrojes me tocará, es algo así como la Maldición De La Lujuria de Xavier.
Lexserron: ¡Maldito!
Lexserron lanza varios ataques sin detenerse mientras grita de ira, pero ni siquiera a pesar de esa energía, ha dado en el blanco y sólo ve como Andece permanece en el lugar sin temer a nada, el Demonio sin avisos empieza a golpear a Lexserron son sus patadas.
Zeus: Aún pelea para dejarlo mal herido. La única forma para que pase es que Lexserron sufra un daño mortal, aunque eso es muy lógico en estás circunstancias.
Reinquer: No puede hacer eso muy bien, tal vez pierda el control y lo termine matando.
Zeus: Exactamente.
Ares: Confiemos en Lexserron. No olviden que él nos mantuvo unidos luego de la muerte de nuestros hermanos. Vamos, hermano... No se te vaya a ocurrir morir.
Andece: Lexserron, la única manera para deshacer ese ataque magio, es cortar mi brazo izquierdo ya que en él esta el punto rojo.
Andece le pega un golpe muy fuerte en el estómago a Lexserron con la lanza, pero de repente la Deidad le pega un codazo en el rostro y con toda su voluntad alcanza a cortar casi por completo el brazo de su enemigo, los chorros de sangre salen disparados a los cielos.
Andece: (!) Esa voluntad...
La Deidad derriba a su enemigo con una fuerte patada en el estómago, luego se lanza contra Halley la cual no puede hacer nada y arroja un ataque directo con ambas armas, pero una estocada las detiene y es Blacktel que atacó, luego recibe dos puñetazos en el rostro por Xavier y Catalán, siendo lanzando hacia atrás y deteniéndose con sus pies.
Adad: Usamos todas nuestras fuerzas para levantarnos.
Blacktel: Te vamos a tener a salvo.
Catalán: Vamos a proteger a Halley, Capitán.
Lexserron: ¡Ustedes ya me tienen cansado! ¡Tantas veces que los derribo, siguen y siguen poniéndose de pie!
Andece: Es la fuerza de proteger, Lexserron.
Lexserron: ¿Eh?
Andece une su brazo nuevamente usando el poder de la Inframundita.
Andece: La enorme voluntad tuya te mantiene de pie, Lexserron. Admito que siempre serás fuerte, de eso no hay duda. Pero estás utilizando mal tu poder, atacando al clan incorrecto.
Lexserron: No me importa para nada eso.
Andece: Lo sé... Por eso seguiré atacando para dejarte mal herido.
Andece se arroja y Lexserron con su espada derecha la envuelve en electricidad, luego la arroja a toda velocidad contra el Demonio el cual inclina su cabeza hacia la izquierda esquivando el ataque, pero...
Andece: ¿Qué?
La espada se eleva y luego cae en picada, se dirige a toda velocidad hacia Andece y a pesar que se empieza alejar la arma lo sigue sin detenerse, atravesando montañas de arena que estallan en pedazos.
Ares: Un arma que sigue el objetivo, eso sí no lo ví venir de él.
Andece luego se eleva y en pleno cielo da una vuelta entera hacia atrás, esquivando la embestida de la arma que sale impulsada hacia las nubes y decide caer en picada en dirección a Lexserron, pero la arma lo sigue y choca contra la arena causando una explosión, está de pie frente a Lexserron, pero no lo ataca, decide volverse a elevar y entre el polvo la espada sale de repente dirigiéndose al rostro de la Deidad, aún así la espada alcanza a elevarse a gran velocidad cortando simplemente una pestaña.
Andece: ¡¿Qué?!
Lexserron: No decidas atacarme con mi propia arma, es un desperdicio de tiempo.
Lexserron carga con electricidad la otra espada y la arroja a toda velocidad, ahora el Demonio debe lidiar con dos armas teledirigidas y a pesar de eso, Andece no teme y al elevarse sobre las nubes arroja una estocada en forma horizontal que impacta con las puntas de las armas siendo arrojadas contra la arena, ocasionando dos grandes explosiones. Andece cae a toda velocidad lanzando una embestida desde arriba con la lanza, pero la Deidad la alcanza agarrar con su propia mano derecha y el choque generó un cráter junto con ráfagas de viento, Lexserron pone los pies de Andece contra la arena y luego con su otro brazo libre, le pega un puñetazo en toda la cara soltando la lanza y chocando con la arena.
Lexserron: Bien. Rompe un poco la lanza con la fuerza de su mano Nada de armas. Arroja lejos la lanza
La Deidad sin pensarlo dos veces le pega un fuerte puñetazo en la cara a Andece, lanzándolo nuevamente a la arena y él se levanta esquivando los ataques lanzados por su enemigo, le conecta un puñetazo fuerte en el estómago a Lexserron, él responde golpeando el rostro y el Demonio responde de la misma manera, los dos levantan sus puños para atacarse, sin embargo, es la Deidad que ataca primero pegándole un puñetazo directo al pecho donde abre su herida mortal, Andece rápidamente con sangre saliendo de su cuerpo golpea la herida mortal de la Deidad que retrocede mientras aguanta el dolor que su cuerpo está dejando de ser resistente, al mismo tiempo ambos aprietan sus dientes y puños, y empiezan a chocar sus golpes contra sus cuerpos a gran velocidad.
Andece y Lexserron: Escupen sangre
Halley: Ese ataque los estará debilitando poco a poco... Sus heridas están volviendo hacer efecto y al mismo tiempo sus cuerpos están dejando de ser resistentes.
Andece y Lexserron: ¡¡AAAAHHHH!!
El aumento de fuerza es constante, ambos empiezan a chocar sus puños con muchísima fuerza y en sus pies se genera un gran cráter que hace aberturas en la arena, a pesar de los ataques rápidos y violentos ninguno de los dos logra dar en el blanco, hasta que... Los dos al mismo tiempo arrojan un puñetazo directo impactando en el rostro de cada uno, escupiendo sangre al mismo tiempo junto con el lanzamiento por todos lados de ráfagas de viento.
Lexserron: Atrae sus espadas ¡Voy a destruirte!
Andece: Atrae la lanza y se da cuenta de la grieta que tiene Se va a romper... No estoy seguro si soportara otro ataque.
Lexserron: Ten todo mi poder.
Lexserron arroja una gran cantidad de estocadas que impactan rápidamente con la lanza, Andece se cubre y resiste los choques. La Deidad arroja una estocada potente la cual rompe La Arma Más Poderosa, aún así el Demonio agarra la base de las katanas y con velocidad clava ambas en los hombros de su rival.
Lexserron: ¡¡AAAAHHHH!!
Lexserron rápidamente con un ataque de ambas espadas, arroja lejos de las manos de Andece las katanas, pero él con dos patadas igualmente rápidas, lanza lejos las espadas de las manos del Dios.
Andece: ¡Lexserron!
El Demonio le pega un fuerte puñetazo en la quijada y Lexserron se lo devuelve pegándole un cabezazo, los dos retroceden y al verse con furia, se arrojan agarrando las manos del otro y empezando hacer fuerza para empujarse, el suelo empieza a hundirse junto con varias ráfagas de viento.
Andece: ¡Lexserron, ya detente!
Lexserron: ¡Cállate! ¡Eres un bastardo que acabó con mis hermanos!
Andece: ¡Lo sé! ¡Lo siento por eso!
Lexserron: ¡¿Ah?!
Andece: Sé que es muy repentino que yo siendo un ser cruel y frío pida perdón, pero es que esta guerra y está pelea no tiene sentido alguno... No debemos causar más daño entre nosotros.
Lexserron: Ellos... Los Humanos se merecen su castigo por no haber respetado lo que tienen, son solamente basuras del universo. Ellos pagan su castigo y yo soy su verdugo.
Andece: No puedo contradecir porque estaría mintiendo.
Lexserron: ¡Jamás sabrás cuánto soporté en la oscuridad! Cuando comencé a cuidar, proteger y a entrenar a Halley me sentí muy feliz... Como un hermano...
Andece: Y lo haces perfectamente, sólo que estás atacando a seres equivocados. Quiero tu ayuda para acabar con toda esta masacre.
Zeus: No va a funcionar de nada.
Lucifer: Hijo, así hables y hables con él, no vas a poder salvarlo con palabras.
Lexserron: Demonios, no sé qué pensar... Sólo... No sé...
Andece: Tienes una gran voluntad que ni siquiera un Dios la va a destruir, ¡Lexserron, detente de una vez!
Lexserron le pega un puñetazo directo en la cara, lanzándolo contra el suelo, estrellándose varias veces hasta llegar a Halley y su clan.
Halley: ¡Andece! ¡Halley, muévete!
Blacktel: ¡Señor!
La Deidad atrae sus espadas que son envueltas por electricidad, sus brazos por un huracán de viento y se lanza a toda velocidad a su rival que está en el suelo,
Ares: Es increíble... Tanto poder no destruye el cuerpo de Lexserron.
Reinquer: Ahí viene los últimos golpes de la pelea.
Andece se levanta y ve a su clan y amada sin poder moverse.
Andece: Soy el único que puede pelear ahora mismo, no puedo ir por las Katanas porque arriesgaría la vida de ustedes.
Xavier: ¿Entonces?
Andece: Mira a Lexserron Chicos... Quiero que me perdonen por no haberlo derrotado anteriormente.
Adad: Andece... ¿Qué planeas hacer?
Andece: Halley... Quiero que ahora tú me perdones y sí esto sale mal, la verdad lo siento mucho por no haberte protegido mejor de lo que esperaba.
Halley: No... Andece... Yo puedo hablar con él.
Andece: No. Ya no funcionará hablar con él... Sólo me queda este movimiento... Aquí vamos.
Andece se arroja contra Lexserron.
Halley: ¡¡Noooo!!
Andece: ¡EJÉRCITO ESPECTRAL!
El príncipe lanza un gran ejército de espectros y entidades oscuras, pero éstos caen ante la brillante luz de la Deidad.
Andece: ¡Bien!
Andece lanza un puñetazo que impacta con el pecho de su enemigo, Lexserron le impacta una patada en el estómago lanzándolo hacia atrás, pero también él retrocede por el golpe del Demonio.
Andece: ¡¡Allá voy, Lexserron!! ¡¡Aaaahhhh!!
Lexserron: ¡¡¡Acabaré contigooo!!!
Los brazos de Andece son envueltos por un poder enorme y ambos al soltar un gran y monstruoso grito, se arrojan contra el otro y Lexserron lanza un ataque desde ambos lados con sus espadas y Andece... De repente un gran destello junto con una gigantesca explosión cubre gran parte del Desierto del Sahara, dejando perplejos a todos por el levantamiento de la arena por las ráfagas de viento. Luego del pasar de unos segundos, el polvo y la arena empieza a desaparecer lentamente.
Lucifer: ¡¿Qué pasó?!
La delgada línea de luz que envolvía al Clan De Los Cinco Sangrientos y Halley ha desaparecido.
Blacktel: Capitán...
Todos quedan impresionados cuando toda la arena desaparece.
Ares: (!) No... Cae arrodillado
Juno: Increíble...
Reinquer: ¡¿Qué?!
Zeus: Baja sus brazos No lo puedo creer...
Halley: Cae arrodillada Andece... Lexserron...
Todos ven a la Deidad con sus brazos al frente luego de lanzar el ataque, Andece por otro lado está frente a él e inclinado hacia atrás ya que esquivó los mortales ataques, pero sus brazos han atravesado el cuerpo de Lexserron, más específicamente el corazón y un pulmón izquierdo.
Lexserron: Escupe chorros de sangre
Andece: Lexserron... Lo siento...
Los músculos de Lexserron disminuyen y la primera herida de su pecho se abre, empezando a salir sangre dorada y mira a Andece con una leve sonrisa. Lexserron ha vuelto, pero ya es muy tarde.
Lexserron: Lo siento Andece... Ataque a todos sin ningún motivo... Ataque a los que son buenos... Sólo... Sólo me sentí traicionado... No sentí que era yo... Escupe sangre
Andece: Zeus te hizo algo en tu cabeza, despertar ese enorme poder de golpe fue la perdida de la consciencia... Tú no tienes la culpa de nada...
Lexserron: Claro que sí... Merezco el castigo. Abraza Andece
Andece: ¡¿Qué haces?!
Lexserron al abrazarlo, ocasionó que los brazos de Andece lo atravesarán aún más.
Lexserron: Quiero que me hagas una promesa... Quiero que mates a mis hermanos porque no impidieron esto y solamente me usaron como una marioneta... Acaba con el desgraciado de Zeus... Y asesina a tu padre que busca impedir por completo ese amor... Supe todo muy tarde y ahora lo entiendo perfectamente...
Su cuerpo se empieza agrietar.
Andece: ¡Lexserron!
Lexserron: H-Halley... Perdóname por no protegerte... Por no haberte dicho la verdad... No le mientas Andece... No la traiciones... No le guardes la verdad... Sé que serás grandioso... Ahora tienes una promesa que cumplir... Sonríe con lágrimas
El cuerpo de la Deidad se destruye en mil pedazos y sus cenizas doradas caen en la arena, Andece queda con sus brazos elevados. Lexserron ha muerto.
Andece: Lexserron... Fuiste la Deidad con más voluntad que he conocido en toda mi vida...
Ares le pega un puñetazo a una pared la cual colapsa, causando una gran explosión.
Ares: ¡AAAAHHHH! ¡Hijo de...!
Ares destroza el espejo de un sólo golpe, desconecta a las Deidades de la Tierra. Lucifer deja de ver lo que ocurre y desaparece en las tinieblas.
Andece: Demonios...
Sus músculos y poder desaparece.
Andece: Lo siento... Halley...
El príncipe cae de espaldas al suelo mal herido, Halley y el Clan De Los Cinco Sangrientos corren hacia él, ella sostiene con sus manos la herida de su pecho la cual es mortal.
Halley: No te vayas a morir... Andece, no...
Catalán: ¿Ah?
Varios helicópteros llegan al lugar que esta con grandes cráteres, aberturas en la arena y montañas colapsadas. A penas ven la situación rápidamente bajan una camilla, suben al Demonio en ella y sostienen la herida mortal, dándole oxígeno para tratar de mantenerlo vivo.
Soldado Japonés: ¡Nos vamos a Japón! ¡Rápido!
Algunos helicópteros aterrizan y otros van en dirección a Japón mientras el Clan De Los Cinco Sangrientos los siguen, Halley se acerca a la camilla la cual está colgando del helicóptero y sostiene los bordes de la camilla.
Halley: Aguanta, aguanta.
La poderosa Deidad Del Viento ha caído, mostrando a todos su tremenda voluntad que ni siquiera los Demonios lograron quebrarla. El combate ha terminado, la muerte de Lexserron es el inicio y tal vez el final de La Guerra De Los Siglos, ya que el mensaje fue muy claro para todos... La muerte será inminente. Ahora ellos cargan con la promesa que Lexserron les pidió, el cual es terminar con las tres amenazas existentes.
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