Love Academy.

Por: el autor Gaster Fanfics.

Notas: antes que de nada les daré un par de detalles para una lectura más comprensible.
________________________________________ = cambio de escena.

—Detente perro.= personaje hablando.

El tipo se la comió toda= acción

"Sé que escuchas mis pensamientos muchacho ñam ñam ñam" = pensamientos

SPLASH= igual efecto de sonido perron

Capítulo: 2 

Mi primera amiga.

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—Oye perezosa, ¿Estás bien? —Pregunto el muchacho.

—Sí, gracias Mazama-san... sin ti no sé... que habría pasado —la perezosa hablo nerviosamente.

—¿Mazama-san... po-podrías acom-acompañarme... a mi cuarto, por favor?—pregunto la perezosa.

—Está bien perezosa... vamos —el castaño aceptó, regularmente la habría rechazado, pero acababa de pasar por algo fuerte, y nada le costaba ayudar al único animal que le agradaba.

La chica lentamente se levantó de su escritorio, se tambaleó ligeramente con un paso delicado y lento hacia el castaño, sus piernas temblaban y se notaba el esfuerzo, y era muy, notable que  le costaba mantener el equilibrio. En un punto simplemente perdió el equilibrio, el castaño alcanzó a atrapar a la chica.

—¿Estás bien? —El muchacho atrapó a la perezosa y la ayudo a recomponerse.

—S-sí... gracias Mazama-san —la perezosa agradeció nerviosamente al muchacho.

—No puedes caminar mucho, ¿verdad? —Pregunto sarcástico el chico.

—Yo, no puedo... solo déjame, aquí —la perezosa dijo con tristeza.

—¿Cómo llegas a tu habitación? —El castaño preguntó con curiosidad.

—Los sensei... me... ayudan —dijo la chica.

—Ok, entonces yo te llevo —el chico dijo con simpleza.

—¿En-en serio? —La perezosa pregunto muy sorprendida.

—Sí, vamos, pero solo esta vez pero no te acostumbres, es cosa de una vez el chico se puso de cuclillas delante de la muchacha— Vamos, sube.

La perezosa se vio indecisa, pero al final acepto, la perezosa se subió lentamente a la espalda del muchacho, se agarró a su espalda para evitar caer. Una vez listo, el castaño se levantó y comenzó a dirigirse a la entrada.

"Valla es realmente ligera, había leído que los perezosos eran débiles, pero no pensé que tanto, jamás me interese mucho por la especie en específico, no eran una amenaza considerable, y por su carácter suelen ser vagos y pacíficos, quizá debo investigar más" Pensó el castaño.

Cuando ambos salieron del salón, el profesor se acercaba a ellos con el fin de llevar a la chica a su habitación, al verlos él maestro sonrió.

"Así que ellos dos finalmente encontraron alguien, según sus perfiles e historial educativo, supuse que ambos estarían solos, pero les basto una semana para juntarse, espero que sigan llevándose bien" el profesor pensó feliz mientras observaba al dúo alejándose.

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Al llegar a los dormitorios de hembras, el muchacho entró cuidadosamente al edificio, luego de preguntar a la perezosa dónde se encontraba su habitación, el castaño se dirigió al segundo piso. Al llegar a la puerta, cargo a la chica con un solo brazo y abrió la puerta con el otro.

Entrando en la habitación de la chica, se encontró con una sorpresa, el cuarto estaba repleto de equipos deportivos.

—Oye perezosa, ¿estás segura de que esta es tu habitación? —Pregunto el castaño, algo confundido.

—Sí, lo es —la perezosa respondió tranquila.

—Muy bien —el chico se encogió de hombros y  camino hacia la cama de la chica, el muchacho la dejo delicadamente en esta.

—Ok nos vemos mañana —dijo el muchacho acercándose a la puerta, hasta que la perezosa lo detuvo hablando.

—Mazama-san, gracias... ¿Mañana podrías, venir por mí? —Pregunto la chica.

El muchacho suspiró y respondió— Creo que fui claro, cuando dije que sería cosa de una vez.

—Por favor... —La chica suplico con tristeza.

—Ya veremos... duerme bien —dijo el castaño saliendo de la habitación.

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Ya en su habitación el joven se cambió el uniforme, por algo más cómodo, él chico se sentó a hacer su tarea, después de terminar, se estiró y comenzó con a hacer su cena.

"Me pregunto si la perezosa está bien... genial, ahora me preocupo por ella, aunque por su carácter dócil y la aparente historia dudo que lo de aquella vez se repita, supongo que si estoy con ella esta escuela no estará tan mal" el castaño pensó con una pequeña sonrisa en el rostro mientras finalmente acababa su cena. Dejando los platos en el fregadero, el muchacho finalmente decidió ir a acostarse.

—Nos vemos mañana perezosa —el castaño se acomodó y finalmente se fue a dormir con una sonrisa en el rostro.

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Mientras tanto en el cuarto de la perezosa. La rubia estaba sentada en su cama mientras quitaba algo de musgo de su cabeza, para comer, la perezosa aún llevaba su uniforme mientras observaba el techo hundida en sus pensamientos.

"Supongo que finalmente tengo aún amigo, luego de años, finalmente no tendré que estar sola, intentaré no darle muchos problemas a Mazama-san... ¿Debería llamarlo por su nombre?, ¿o es muy pronto?, ¿quizá deba darle un brazalete de amistad?, espera... Mazama-san ¿sabe mi nombre?, es decir, siempre me llama perezosa, no me molesta, pero... ¿Es por qué él se siente cómodo llamándome así o no sabe mi nombre?, esa cosa que uso Mazama para alejar a los lobos, me cayó en el cabello, huele a vinagre y cítricos, me gusta el olor" la perezosa siguió pensando hasta que finalmente el sueño le ganó.

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Jin se encontraba terminando su entrenamiento fisco diario, él muchacho entraba en su habitación, al entrar se dirigió al baño y se dio una rápida ducha, luego de su baño este comenzó a cocinar su desayuno, al terminar comenzó a comer, era algo simple, solo huevo revuelto y un poco de tocino.

Al acabar empezó a lavar los platos de la cena y los del desayuno. Cuando el chico se estaba vistiendo, el castaño salió de su habitación, "supongo que... debería ir por la perezosa, ¿no?"

El muchacho continuo con su camino, mientras seguía pensando "bueno, supongo que iré por ella" el chico pensó mientras se dirigió a los dormitorios de hembras.

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Al llegar a los dormitorios, el muchacho se dirigió a la habitación de la perezosa, este toco la puerta— ¡¡oye perezosa, vámonos!! —él chico grito.

—Espérame Mazama-san... ahora voy —la perezosa hablo atreves de la puerta.

Luego de unos tres minutos la puerta finalmente se abrió. El castaño algo desesperado suspiro— bueno, vamos —el chico se puso de cuclillas y levantó a la perezosa; él castaño se dirigió hacia su salón de clases con la perezosa a cuestas.

 
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Bueno, espero les haya gustado este corto capítulo, he de aclarar que el siguiente capítulo será de, al menos, de 1500 palabras, pero tenía que sacar este ahora para no retrasarme con las otras historias que estoy escribiendo.

Pero bueno, si tiene alguna duda o sugerencia para era historia, no duden en comentarla.

Si encuentran una falta de ortografía les agradecería si me corrigieran.

O quizá tiene alguna crítica o aspecto que podría mejorar de la historia, no teman decírmelo.

Recuerden que las historias se pueden editar.

Ok, después de este pinche relleno no me queda más que despedirme.

Lávense las manitas, tomen agua y ¡¡¡Gaster Fuera!!!

Editado:sábado 16 de septiembre de 2023

Palabras:1018

Editado:sábado 7 de septiembre de 2024

Palabras:1162