TaeHyung continúo sin separarse de JungKook incluso hasta el día siguiente, cuando no tenía más opción que dejarlo para ir a sus respectivas clases.

Sin ganas, fue junto con JiMin a sus clases de dibujo, y como tantas otras, el profesor sólo puso un montón de objetos en una mesa y les dijo que dibujaran lo que quisieran de ese montón.

TaeHyung optó por un simple florero, mientras JiMin quería un reto al intentar dibujar unas viejas zapatillas.

—¿Cómo te fue con tu fonoaudióloga?— preguntó el más bajo.

TaeHyung desvió un momento su vista de su hoja para mirarlo.

Dudó un momento en decir la verdad o no, pero al final terminó suspirando un poco para finalmente hablar.

—Algo bien. — respondió.

—¿Cómo es "algo bien"?

TaeHyung no sabía como decirle, tendría que hablar mucho y sólo la idea lo cansaba.

Ante la falta de respuesta, JiMin se giró para mirarlo.

—Larga historia. — dijo TaeHyung. — No quiero hablar. — añadió, por lo bajo, volviendo a concentrarse en el sombreado de su florero.

JiMin asintió, no le iba a insistir, aunque quería más detalles, siempre podría pedírselos a JungKook.

Pasaron otro rato en silencio, tiempo en que JiMin ya había terminado su par de zapatillas, y TaeHyung frunció un poco los labios con envidia, él no había terminado su florero y era muchísimo más simple que aquel par.

JiMin se acercó a él, viendo su hoja y cómo estaba yendo su trabajo.

Antes de que pudiera echarlo por el fastidio que le daba que alguien mirara tanto su trabajo, JiMin rió por lo bajo, de forma aguda.

TaeHyung notó la mirada perdida de su amigo, y las mejillas enrojecidas, supo que estaba recordando algo.

Antes de que pudiera preguntar, JiMin se giró hacia él con una sonrisa boba en el rostro.

—Tae, ¿te puedo contar algo?— dijo, hablaba muy bajo, sólo para que él pudiera escucharlo.

El castaño lo miró con atención, JiMin mordió su labio, con una sonrisa, antes de soltar la bomba.

—Tuve mi primera vez... con Yoonie.

TaeHyung al principio no supo cómo reaccionar, pero comenzó a sonreír sin darse cuenta, y sólo bastó con una ligera risa de JiMin para que él también comenzara a reír, haciendo que varios compañeros lo miraran raro, y tuvieran que cubrirse la boca para intentar callarse a sí mismos.