19. Buskashi.
Después de haber peleado verbalmente con Bill nos hicieron realizar una pintura con las bases del estilo de Salvador Dalí y Pablo Picasso, esto como parte de los juegos; al finalizar Eliezer y Valeria nos representaron ante tres de los magnates para dar explicaciones y definir la obra.
Al final nos dijeron que pasamos de ronda pero nadie prefirió saber más, pues ambos llegaron tensos.
Sumado a eso el ambiente pesado que ya se vivía por la discusión hizo que al instante de que llegaran nos viniéramos a nuestras habitaciones, Ivana no vino conmigo porque dijo que quería descansar y a mí me está comiendo el pensamiento estar molesto con Bill, a decir verdad no me gusta discutir con él.
Iré a verle.
Su habitación es la última de hecho es la más cercana a la de Ivana, he salido y todo está muy callado, no veo a ninguno de los muchachos por aquí, eso me alivia un poco.
He llegado hasta su puerta, he tocado de una manera un poco suave, no sé si me escuche pero creo que lo hará.
— ¡Voy! —. Grita y me alivia que al menos verá quien es— ¿Qué quieres? —, por primera vez en tanto tiempo su mirada es de molestia.
—Bro, necesitamos hablar.
— ¿Dé qué? —. Alza la ceja derecha de tal forma que me intimida un poco.
—De lo que pasó hoy...
—No hay nada de qué hablar —, alega interrumpiéndome—, ya tu demostraste lo que eres realmente por ende prefiero no hablar con un doble cara como tú —, concreta e intenta cerrarme la puerta en la cara pero pongo mi muñeca derecha antes de que lo haga.
— ¿Existe la necesidad de ofendernos? Llevamos una vida siendo amigos y ¡¿vas a tirar nuestra amistad a la basura por una simple pelea?! —. Aunque lo digo calmadamente me da un poco de coraje su actuar.
—Te recuerdo que tú fuiste quien de principio me ofreció golpes, tú eres quien está matando una amistad por una chica —. Dice con tanta serenidad que me sorprende que no se haya alterado.
— ¿Enserio no puedes entender mi posición?
—No, no la entenderé, pero te perdono—, eso no lo esperaba—, sin embargo necesito que te vayas, quiero descansar —. Concreta y de improviso estira su brazo derecho que es el más cercano a mí y me empuja para poder cerrar completamente la puerta.
Lo hizo, literalmente me cerró la puerta en la cara, podría intentar llamarle pero preferiría dejarlo quieto y no empeorar las cosas, por lo que me iré a mi habitación.
•
Después de ir a hablar con Bill me fui a dormir, ha llegado la hora del desayuno, todos ya se han bañado, le di los buenos días a Ivana.
El ambiente entre el grupo esta tan tenso que el silencio ha prevalecido hasta ahora que vamos en dirección al comedor.
Como todos los días hay una mesa vacía porque falta un equipo, tomamos asiento sin inmutarnos pues aunque parezca mentira esto se ha vuelto algo normal, ya no nos da tanto temor, por alguna razón nadie del equipo actúa extrañado, es como si nuestra mente obviara ese hecho y solo se empeñara en alertarnos para sobrevivir.
El ambiente sigue tenso, rompiendo así el orden que siempre hemos tenido cuando nos sentamos, por lo que en este momento estamos ubicados de la siguiente manera: Mason y Violeta al lado de Valeria e Ivana junto a mí en el lado derecho, al lado izquierdo están Bill, Eliezer, Vicktor, Rocci y Oliver, justamente en ese orden, por primera vez hemos cambiado un poco nuestros puestos.
Nos han traído el menú de hoy y todos han estado revisándolo en silencio. Sin embargo la mirada de Vicktor sigue perdida y aunque simula que le hecha una ojeada al menú sé que no lo hace.
Justamente llegan las meseras y cada uno pide lo que le parece conveniente, por lo que no puedo preguntarle lo que quiero.
•
He esperado que todos pidan y rompiendo el incómodo silencio que inunda este momento aprovecharé para preguntarle.
— ¿Cómo amaneciste hoy Vicktor? —. Me he robado las miradas de los muchachos quienes pasan ahora su vista a Vicktor.
—Eh, bien —, es lo único que responde y lo ha hecho en un tono triste, por lo que preferiría no preguntar más.
—Has pasado la noche llorando como un marica. ¡¿No?! —. Lo que ha dicho Ivana me ha dejado frío y creo que a todos pues la miramos con desdén.
—Cállate Ivana —, es lo único que me sale decir para adelantarme a los demás.
—Como siempre la puta insensible, ya no me sorprende —, comenta Bill mirándole de reojo y no quiero refutarle nada.
—Al menos no soy una chillona de mierda como lo son tú y Rocii —, replica Ivana en un tono calmado pero sé que esto se saldrá de control en cualquier momento.
—Cállense todos —, ordena Eliezer con voz autoritaria—, hoy no dejaré que peleen por sandeces, enfoquémonos en los juegos y aclaro, si es un juego individual seré yo quien participe —, dice y lo miramos buscando una explicación a su repentina decisión—, solo quiero jugar —, afirma en un tono tan calmado que parece que le hace gracia.
—Si el juego es de dos participantes yo también jugaré —, asegura Bill y se le ve tranquilo, algo que me preocupa.
—Entonces está decidido —, comenta Valeria al parecer para evitar que alguien replique y se arme otra discusión.
Sin embargo quiero preguntarles el porqué de su decisión pero en este instante han llegado las meseras con los platillos.
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Comimos en silencio y petrificados como si mantener la incomodidad del ambiente fuese de vida o muerte, pues absolutamente nadie se atrevió a decir una sola palabra, las miradas solo cruzaron de un lado a otro en busca de un atrevido que cortara el hilo de tensión, pero no fue así.
Hace segundos nos trajeron hasta las habitaciones y como siempre nos indicaron que nos dirijamos al pasillo donde se ubica la pantalla para así recibir notificaciones.
— ¡¿No va a hablar nadie?! —. El grito de Ivana rompe el silencio—. Me aguante en el comedor para no incomodaros pero ya que hemos llegados aquí os diré, soy todos unos maricas excepto Adán—. Las miradas atizan a mi novia pero a este punto nada me sorprende y estoy empezando a perderle la paciencia.
—Vamos de nuevo —, comenta Eliezer rodando los ojos—. Según tú. ¿Por qué somos maricas? —. Concreta haciendo énfasis al decir maricas.
—Por favor, no alarguemos esto...
—No, Adán déjame responderlo —, traté de calmarlos pero Ivana me interrumpió—, andáis lloriqueando por la pérdida de compañeros cuando hay equipos completos que han muerto pero como no son ustedes no les afecta, solo luchen si quieren seguir con vida.
—Ja, doble moralista —, después de unos incómodos segundos de silencio Violeta es quien toma la palabra—, ¡¿crees que es fácil mantener la cordura?! Sabemos que han muerto quizás más de cien personas, pero evitamos pensar en ello para mantenernos más tranquilos, además no estar triste por quienes murieron no significa que no nos sintamos mal por lo que pasa aquí dentro, y si fuera así tu serias la última en tener derecho a decirlo —, al decir esto último he visto como ha apretado los puños y su mirada es de furia.
—Te ríes de nosotros, nos ofendes, te crees superior, luego vienes pides perdón y vuelves a repetir el ciclo una y otra vez, ya nada de ti sorprende Domes eres una desestabilizada —. Complementa Rocci antes de que algún otro hable.
Miro inmediatamente a Ivana, hay un destello de rabia y tristeza en sus ojos, quisiera saber que pasa por su cabeza, probablemente está teniendo un momento de bipolaridad pero a este punto ni eso me afecta.
—No tengo porque seguir escuchándolos —, dice Ivana después de dar un largo gruñido que parecía traer consigo furia y va directo a las habitaciones.
Al final la ignoramos y dejamos ir dirigiéndonos finalmente al pasillo donde está la pantalla, hemos llegado y se enciende automáticamente como si sintiera nuestra presencia.
—Buon giorno. ¿Come state? Espero que estén bien, es mi labor indicarles cual es el juego de hoy, como sabrán me llamo Pierre D'amico y fui el líder del equipo Cavallinos Rampantes, hasta que los eliminaron—. La cara de este tipo es cuadrada, sus mejillas son rellenitas y su mirada es frívola, trae puesto un saco; no puedo ver más allá pues solo muestran su torso—. Antes de comenzar a explicar les comento que el equipo eliminado en el juego de ayer fue Seu te pego de Michel Teló —. Concreta y sorpresivamente la pantalla se apaga.
—Me voy —, volteo a ver quién ha dicho eso y noto que ha sido Oliver porque todos los demás lo están mirando también—, así como escucharon, me voy a mi habitación —. Afirma y nadie parece entender.
— ¿Qué pasa? ¿Por qué te vas? —. Rocci es la primera curiosa mientras los demás esperamos respuesta.
— ¡¿No lo ven?! Solo quiere ir detrás de Ivana como un jala bolas —, este comentario de Vicktor me recuerda a Palme, a decir verdad no me sorprendería que fuera por eso que quiere irse a su habitación—. Anda, ve y corre detrás de ella, nada te detiene o ¿tú lo harás Adán? —. Todos me están mirando y yo solo niego con la cabeza, dudo mucho que ella quiera hablar con él en este momento.
—No tengo porque estar escuchando sus acusaciones, además me siento muy mal para discutir con ustedes —, Oliver ha hablado fuerte y comenzado a caminar hacia las habitaciones marchándose, nada más lo miramos salir, nadie está dispuesto a perder su tiempo.
—Dudo mucho que Ivana quiera hablarle —, comenta Eliezer con cierto tono de ironía y los demás devolvemos la mirada a la pantalla que como siempre por arte de magia se ha reencendido.
—He vuelto mi amici, la dinámica del juego de hoy es la siguiente, un dúo de jinetes de dos equipos diferentes competirán en un campo de quinientos metros con el objetivo de conducir el boz (Una cabra sin cabeza ni extremidades) hacia la cancha contraria, sin importar lastimar el caballo del adversario—. Hace una pausa y se ve como toma agua—. Ganará el que lo logre primero o por default sí el caballo de alguno de los dúos muere en batalla, como en varios juegos anteriores habrá ronda eliminatoria para ver qué equipo sale de competencia, el único grupo con el que se hará una excepción es el equipo Lost, pues si sus representantes pierden se eliminaran automáticamente; les daré cinco minutos para que elijan representantes, arriverderci.
Nuestras miradas instantáneamente pasan a Bill y Eliezer, pensé que estarían nerviosos, en especial mi mejor amigo sin embargo está tranquilo y seguro, algo que al contrario de tranquilizarme me inquieta, por alguna razón no me gusta.
—Ya sabemos que tenemos que hacer, así que tranquilos no nos vean con esas caras —, comenta Eliezer y sonríe.
—Esperamos que todo salga bien —, dice Violeta con un tono inseguro algo que tampoco me cuadra.
—Saldrá bien —, asegura Bill—, no veas así Adán, todo saldrá bien —, ha comentado eso viene a mí y me abraza inesperadamente.
Su abrazo es cálido pero a la vez trae consigo un aire de nostalgia que no me gusta, no quiero soltar a mi mejor amigo, el miedo se apoderado de mí, pensar que de este juego depende su vida y la de Eliezer me aterroriza. Me ha soltado y me muestra una sonrisa tímida, luego pasa a abrazar a los demás quienes están extrañados aunque le reciben con los brazos abiertos es como si esto fuera una despedida.
—Buena suerte muchachos —, les dice Rocci quien es la última a la que Bill ha abrazado.
—Gracias —, contestan los chicos al unísono y se escucha como la puerta de entrada se abre, han venido a buscarlos.
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Después de que se llevaron a los chicos nos hemos sentado en el suelo juntos en un círculo a esperar que enciendan la pantalla, lo hemos hecho por primera vez en todo el tiempo que llevamos aquí. Los minutos se han hecho eternos porque nadie ha hablado haciendo un poco tenso el ambiente.
— ¿Qué sienten chicos? —. Valeria es la primera en romper el hielo con su pregunta que no entendí muy bien—, es decir, ¿Qué creen que va a pasar? —. Explica al parecer porque los demás tampoco entendieron muy bien.
—Tengo miedo por ellos —, comenta Violeta robándose mi atención y noto su voz quebradiza algo que no me gusta—, chicos no había dicho nada pero últimamente he estado soñando de forma continua que un ser de aura oscura nos comienza a acechar.
— ¿Qué quieres decir con eso? —. Pregunta Vicktor que aunque no ha refutado de mala manera se nota que no le cree completamente.
—Voy a simplificarlo...
La pantalla se ha encendido interrumpiendo a Violeta y con ello quitándole nuestra atención, nos levantamos para poder ver mejor, muestran un campo de futbol pero de proporciones más pequeñas a lo normal; no hay un magnate hablando ni nada, solo el lugar.
—He vuelto para decirles que equipos serán los primeros en jugar y explicarles con más detalle las reglas —, ahora sí aparece en pantalla el mismo hombre que desde el inicio dio explicaciones—, serán quince minutos de juego en los que como dije anteriormente trataran de conducir el boz a la cancha contraria, los dúos de jinetes tienen doscientos metros de área propia cada uno, los otros cien son del medio del campo y la línea de saque. Al inicio ninguno tendrá el boz, pues este estará en el medio, para que los equipos corran hacia el y no haya desventajas, la única regla es que no pueden lastimar a algún participante del equipo contrario pero sí al caballo, sin más nada que agregar les informo que a petición del líder Luis Velásquez su equipo Lost contra Pain del líder Bill Herstensin será la primera batalla —. Segundos después de que termina de hablar se ha apagado de nuevo la pantalla.
En este instante nuestras miradas pasan de un rostro a otro, se nota cierto tono de angustia en las caras de cada quien, han llegado a mi mente las ganas de buscar a Ivana para que venga a ver lo que puede ser el último juego de los chicos, pero pensándolo bien solo lo haré si pierden pues no estoy de ánimos para recibir una mala respuesta.
La pantalla se ha reencendido, a través de ella nos revelan el campo, los de Pain están posicionados en el lado derecho a unos ciento cincuenta metros del boz e igualmente Bill y Eliezer están a la misma distancia solo que en el lado izquierdo.
Un participante de cada dúo tiene en alguna de las manos una especie de lanza con púas que están ubicadas del medio hacia abajo y que en la punta presentan una bola de hierro que supongo es para empujar el objetivo.
Eliezer por su parte parece ser quien dirigirá el caballo, pues está mirando fijamente hacia el frente con una tranquilidad imperturbable algo que hace que me dé un poco de miedo a decir verdad, además sostiene una sonrisa maliciosa, por su parte Bill a quien nos reflejan por solo segundos se ve serio, me sentí raro cuando enfocaron sus ojos pues parecía reflejar un destello de odio en ellos, algo que puedo asegurar que nunca vi en él.
Un alarmante sonido junto con el llamado a la preparación resuena por la sala porque están a punto de comenzar, empuñan las lanzas y los caballos se ven preparados para correr.
¡Criuch!
El segundo sonido pareció más bien algún tipo de crujido distorsionado pero ha sido el que ha dado inicio al juego; los caballos corren desenfrenados, si no lo estuviera observando sería imposible creerlo, los animales parecen ir a la misma velocidad solo que en sentidos contrarios, se ven exquisitamente coordinados.
No sabía que Eliezer montara también caballo parece un profesional pues lo hace con mucha clase y estilo.
En este instante los dúos de jinetes están a menos de un metro del boz, por alguna razón han frenado sus caballos y los chicos (los de Pain también son hombres) se miran como si estuvieran en el viejo oeste y a punto de tener un enfrentamiento armado.
Ambos dan el paso para llegar al objetivo. Bill extiende de frente la lanza y el otro chico también, ambos le dan al lado que tienen más cercano pero ninguno empuja el objetivo, por alguna razón todos vuelven a mirarse las caras, para ahora chocar lanza contra lanza haciendo que estas suenen y empezando un enfrentamiento como si se tratase de dos espadas.
Estacazo tras estacazo, intentan darse pero ni Bill ni el chico del otro equipo cede, no sé si es que no recuerdan o que no quieren pero a ninguno se le ha mirado con ganas de lastimar al animal.
Choque, choque y choque de lanzas pero ninguno en estos segundos ha cedido, en este instante el chico de Pain ha tirado un bastonazo a la pata delantera izquierda del caballo de los chicos haciendo que este relinche aunque solo lo ha rozado porque Eliezer se ha alejado un poco.
— ¡Aaaaah! —. El grito de Bill se ha escuchado claramente y ha comenzado a mover la lanza como puede tratando de lastimar a los chicos contrarios que solo le esquivan.
No entiendo porque dejan que esto pase si dijeron que no se podía lastimar a nadie del contrario.
¡Esta vuelto un psicótico está descuidando su defensa y Eliezer puede perder en algún momento el control del caballo!
Bill ha pelado un intento de punzada, y va a caerse junto con su lanza...
La lanza del equipo contrario detiene su caída porque se la han puesto en el cuello y esta es la que lo sostiene, puedo ver que lo está lastimando, muy probablemente si resbala un poco le atraviese la garganta.
Una lagrima rueda por mi mejilla involuntariamente, miro a mis compañeros por un momento y todos están tan expectantes y con un gesto tan desesperado como el mío.
—Non siamo come loro, non siamo asesino di gente... —, dice en italiano el chico que sostiene la lanza en el cuello de Bill.
No entiendo porque no nos han traducido.
—Dijo que no son como ellos, que no son asesinos de personas —, aclara Valeria pero todos hacemos caso es a lo que pasa.
El silencio es abismal, la escena sigue igual, es como si el tiempo se hubiera paralizado, si Eliezer mueve el caballo probablemente Bill termine de caer y su cuello terminará directamente incrustado en la punta de la lanza.
En un movimiento brusco quien sostiene el arma la suelta y al mismo tiempo mi mejor amigo cae al piso pero por suerte lo hace de cara al gramaje, separado de las lanzas.
El jinete de los de Pain se acerca a ellos y le da el suficiente espacio a su compañero para que con un solo estirón agarre uno de los instrumentos mientras Bill se levanta y el animal esta inerte, Eliezer solo mira al parecer paralizado, por primera vez desde que lo conocí este chico muestra un gesto entero de miedo algo que me preocupa.
¡Maldita sea, van a perder!
El chico de Pain que tiene la lanza, sin bajarse del caballo sube la mano y parece que está agarrando impulso, Eliezer no reacciona.
Tira el arma...
Esta cae en el estómago del animal como una jabalina en el gramaje de un campo, la sangre sale a borbotones, haciendo que el caballo relinche y mi amigo pierda el control.
Eliezer cae y Bill se ve aturdido tratando de levantarse, el caballo está literalmente al lado de ellos moviéndose como loco pero milagrosamente sin tocarlos.
Una patada del animal va directo a la cara de Bill que se levantaba y ahora termina tumbándolo por completo, inmediatamente este pisotea desenfrenadamente a Eliezer haciendo que su cuerpo, sea un montón de carne siendo magullada mientras tanto la sangre sale a borbollones.
Los de Pain cuando comenzó todo se alejaron lo suficiente para no salir lastimados.
Yo desde que comenzó todo el descontrol estoy llorando.
Bill mi hermano, mi mejor amigo, ese bromista incansable ha muerto, algo me decía que esto terminaría mal pero no merecía morir así, nadie merece morir aquí, maldita sea.
— ¡Aaaaaah maldita seaaaaa! —. Ya no puedo aguantar más mis gritos de dolor, los chicos también están llorando pero en silencio, ya no vale la pena seguir pensando que sobreviremos.
Aun así con las lágrimas que tengo y todo el dolor iré a decirle a Ivana que los chicos han muerto pues aunque he gritado, ni ella, ni Oliver han salido...
Nota de autor: Oooh, se acerca la navidad y llevaba varios días sin actualizar pero acá está un nuevo y doloroso capítulo. Cada vez hay más perdidas, los personajes que amamos están muriendo :(.
Tomando el tema del capítulo de hoy. ¿Que creen que esta pasando? ¿Oliver e Ivana donde estarán? ¿Qué presentimiento tienen sobre eso? Como siempre, gracias por leerme :)
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