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16. El hombre de en medio

Aquí estoy a punto de jugar la primera ronda con Bill de compañero. Me ofrecí para representar al equipo en esta oportunidad porque ya no tengo nada que perder; Gabriel, mi hija, mis padres, mi mejor amigo, mi felicidad, mi vida entera se ha ido en un abrir y cerrar de ojos, no creo que tenga algo a lo que aferrarme, sin embargo tampoco me dejaré vencer fácilmente.

¡Eso no, si pierdo al menos lo haré dignamente!

Bill por su parte se ha ofrecido supongo que por mí, no es muy posible que tenga otras razones y como mínimo debo jugar de la mejor manera posible.

Hay dos jugadores del equipo Pain, un chico en la esquina derecha del lado izquierdo y otro en la esquina derecha del lado derecho.

Dos de Vortens, un chico en la esquina izquierda de ese mismo lado y una chica en la izquierda de la derecha. Bill y yo somos los que inicialmente estaremos en el centro.

Esto es un tipo de cancha de fútbol sala cerrada por paredes de concreto, el piso es de caoba, todo tiene más de diez metros de separación tanto de esquina a esquina como de aquí del centro.

—Corre a la esquina a donde corra la otra chica —, susurra Bill en mi oído ahora que estamos a segundos de comenzar.

— ¡Ya! —. El grito que resuena en la sala nos indica que comenzó el juego y debo correr.

Dude por unos segundos pero haré lo que me dijo Bill, la chica que estaba en la esquina izquierda del lado derecho, corre a su lado más "cercano" que sería la esquina de enfrente.

Lo hace de manera veloz y sé que aunque lo intente no podré llegarle, paro de correr por un segundo, miro a las demás esquinas, Bill ya ha ocupado la puerta izquierda del lado derecho y la chica casi ocupa la suya.

Me quedan dos opciones, comienzo a correr a la más cercana la cual es donde estaba la chica anteriormente, hay un chico de Pain corriendo hacia allá, es lento, quizás corre a la misma velocidad que yo pero esta un metro más cerca, no creo que pueda llegar, no sé cuánto tiempo me queda.

Doy dos zancadas y casi tropiezo, estoy a menos de tres metros de la puerta, el chico también, sin embargo si sigo corriendo lo más probable es que llegue primero así que lo voy a intentar, voy a lanzarme hacia la puerta.

Tengo todo el impulso de la corrida, me falta menos de dos metros, cierro los ojos, seré como una pequeña ballena saltando a un vacío, espero que valga la pena.

Vamos...

Siento como vuelo por unos segundos, me lancé como si fuera a nadar, pegare la boca del suelo, el chico de Pain me ve boquiabierto es como si todo pasara en cámara lenta.

Mierda...

He caído dando una vuelta que me ha terminado metiendo en la las rejillas a menos de dos segundos para el final, me duelen las manos, pegue la frente por del puto suelo y siento que mis rodillas se han dado un golpe de lleno, pero valió la pena.

Ha sonado el contador de tiempo, se ha acabado el maldito minuto.

Lo he logrado.

Los dos del equipo Pain perdieron ellos fueron sacados primero por los guardias supongo que a una sala aparte. A los de Vortens y a nosotros nos están devolviendo a nuestros complejos habitacionales donde están la mayoría de los compañeros; a Palme y Vicktor se los llevaron a tipo de sala de espera.

Primero nos dejan a nosotros pues donde nos residenciamos los del equipo Lost es una de las primeras. Los guardias que nos escoltaban abren inmediatamente la puerta y Bill pasa junto a mí, ambos caminamos con dirección al pasillo donde está la pantalla.

A pocos pasos de donde están los chicos Bill se ha frenado, gira hacia mí y me abraza inesperadamente—, lo lograste —, susurra en mí oído con un tono de cansancio pero que también denota alegría. Estoy sonrojada, ahora que lo ha notado se separa y seguimos caminando sin decirnos nada.

Llamamos la atención de los chicos, Valeria nos sonríe, Eliezer camina hacia Bill abrazándolo ahora que ha llegado a él, Adán junto con Ivana vienen para luego hacer lo mismo.

A mí nadie me esperaba, quien podría hacerlo también murió.

Estoy aquí parada junto a Bill un poco triste porque mientras a él lo abrazan a mí ni un gesto me dan.

— ¡Ven aquí Rocci! —. Bill me sorprende al decir esto estirando su mano derecha para que me una al abrazo conjunto que tiene con sus amigos, se la tomo aunque apenada pero al final me he unido.

Poco a poco los demás del equipo se han acercado primero Valeria, luego Mason y Violeta, por ultimo Oliver, todos estamos convergiendo en un abrazo en equipo.

Después de aquel encuentro con Rocci tengo un mal presentimiento con respecto a lo que pasará, no sé si es la tristeza que aún me invade o esta situación irreal que he vivido este último tiempo.

De algo estoy seguro y es que si hoy a alguno le toca morir lo hará con la cabeza en alto, rendirse no es una opción.

Eso demostraron los primeros participantes del nuestro equipo quienes fueron Rocci y Bill, ella principalmente hizo un esfuerzo magistral por lograr pasar de ronda.

Sinceramente no esperaba menos, sé que es una guerrera, me estoy encariñando por su forma de ser, en un principio al llegar se mostraba quebradiza, débil, endeble, no parecía tener autoestima siquiera, pero con el paso del tiempo ha demostrado tenerlo y también un ego muy aguerrido. No es el tipo ruda o déspota como Ivana, tampoco es un poco clasista como las miradas que da Violeta o tiene aires de falsa líder como Valeria.

Rocci es la muestra de que se puede luchar contra todo y que la esperanza es lo último que muere. En el fondo la admiro, no creo tener la entereza para soportar tanto como lo ha hecho ella.

Nos han aislado a todos los que aún no participamos en una sala, sin nada más que nosotros, un aproximado de treinta personas encerradas viendo los juegos. A todos nos han entregado camisetas como cuando jugamos el partido de futbol.

Hay una imagen con un dibujo y el nombre del equipo, el de nosotros está en medio, es una mano con hilos como si fuera la de un titiritero, lo demás de la camiseta está dividido en franjas negras y vinotinto.

La primera ronda ya pasó pero aun ninguno de los mandatarios se ha mostrado en pantalla para decirnos como ha quedado todo y que coño harán ahora.

#Preparando para traducir del portugués al español.

Mis audífonos han avisado y aparece el mismo tipo que desde principio nos dio instrucciones. Ese de cara pulcra y ovalada, una corta barba, fornido y que va vestido con una camisa a cuadros.

—Bueno ahora que se han jugado las rondas del primer lote, les enseñaremos como quedo la tabla de eliminados hasta ahora —. Pausa sus palabras y nos aparece una tabla con la información.

• Pain• (Bill Herstensin): -2

•Cavallinos Rampantes (Pierre D' Amico)-2

Seomteughan• (Jin-hu-sei): -2

Seu te pego• (Michel Telo): -1

Orisa Iku• (Didier Kante): -1

Kalte Biere• (Ken Müller): -1

BarnesKillers• (Barnes Gray): -1

—Por los momentos el equipo Pain es el más probable para ser eliminado —, comenta el portugués apareciendo de nuevo en pantalla—, pero no sabemos quién será pues no es el que haya perdido más personas de forma general sino en este juego en específico; los jugadores de la próxima ronda tendrán un intervalo de 10 minutos para prepararse, y podremos continuar el juego, suerte.

La pantalla ha vuelto a ser apagada y los que estamos aquí nos miramos las caras, el silencio imperaba pero ahora comienzan a murmurar.

—Tengo hambre —, comenta Palme girándose hacia mí.

A veces dice pinges de estupideces.

—Marico me dan ganas de comerme una pizza —, agrega y solo puedo mirarlo. ¿Cómo puede pensar en comer en estos momentos?—. Sé que es algo loco pero me dio ansiedad.

—Loco te la pasas todo el día serio y aquí vas a decir esa vaina —, reprocho porque no me aguante.

—Existen probabilidades de que muera ¡¿porque no puedo decir que tengo hambre acaso?! —, lo atizo con la mirada pues ni él, ni yo perderá—, es verdad —, completa encogiéndose de hombros.

Le quito mi atención, ahora miro que a pocos metros de nosotros entre toda esta gente hay un chico moreno, flacucho y de estilo pandillero tiene una camiseta con la palabra Vortens atrás; su voz resuena por la sala, es marcadamente venezolano porque habla como los del barrio allá en Caracas eso es algo que no se puede negar, pero lo que sí se niega es que todos los de "calle" hablemos así.

—Ese es venezolano donde vaya —, puntualiza Palme —, nosotros cambiamos nuestro acento por un español más neutral pero esa forma de hablar la reconoceré hasta que me muera.

Solo sonrío mientras sigo mirando al chamo, está tomado de la mano con una hermosa rubia de ojos apagados de color azul, y aunque hablan entre ellos, él creerá que está en una pelea de gallos porque su conversación la escucha toda la gente, quienes poco a poco comienzan a mirarlo como pidiendo que baje la voz.

— ¿Pueden dejar de mirarnos? —. Pregunta ahora que al parecer ha sentido el peso de las miradas de los demás, ellos dejan de hacerlo y siguen hablando entre sí.

—Me cae bien, voy a acercármele —, comenta mi primo y antes de que pueda decirle algo ha comenzado a caminar por lo que tengo que seguirlo.

Estamos atrás del chamo pero no se ha dado cuenta hasta este instante en que la rubia se ha percatado de nuestra presencia.

— ¿Qué paso? —. Pregunta de forma tranquilo quedando de frente a Palme—, habla pues —, agrega extrañado porque mi primo solo lo mira.

— ¿Cómo te llamas? —. Mi primo ha engruesado la voz haciendo que suene más tosca al parecer para intimidarlo.

— ¿Ah? —. Eso es lo único que el flacucho contesta pareciendo igual de confundido que la rubia y que yo.

— ¿Cómo te llamas? —. Palme inquiere de nuevo con el mismo tono de voz.

— ¡¿Pero tú eres loco?! —. El chamo alza un poco la voz y parece estar alterándose—. ¿Pa' qué coño quieres saber eso? ¿Me vas a sacar de aquí? —. Al decir esto Palme suelta una larga carcajada que resuena por la sala haciendo que todos nos miren.

Cada día está más esquizofrénico.

—Eso fue gracioso —, comenta mi primo sosteniéndose el pecho de tanto reír; no entiendo nada—. Me llamo Palme —, concreta estirándole la mano al flaco que solo la recibe aunque se ve aun confundido.

—Soy Jeiberson y ella es Scarlet —, aclara más tranquilo—, ¿Y este? —. Pregunta ahora que me ha notado.

—Tengo nombre y es Vicktor —, informo molesto.

—Bueno perdón por acercarme así, solo quería intimidarte pero al parecer no lo hice —. Comenta Palme con una sonrisa, tenía tiempo que no lo veía hacer eso.

Hoy esta raro y eso no me gusta.

—Mano intimidarme ¿yo? Nojoda en mi barrio mataban en mis narices y ni me asustaba—, comenta con tanta tranquilidad que si no fuera venezolano, no lo creería.

Tristemente los latinos estamos muy acostumbrados a la violencia y muchos crecemos en un ambiente plagado de ello, a veces terminamos en esos rumbos; mi hermano fue un vívido ejemplo de ello.

Palme sonríe con tranquilidad y no sé de qué, mientras la rubia parece estar pensativa.

—Bueno ¿Que querían? —. Pregunta el flaco.

—Nada solo hablar de Venezuela —. Informa Palme y no entiendo a qué se refiere—, nosotros somos de Caracas y ¿tu?

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Palme y Jeiberson estuvieron hablando de su vida y experiencias en Venezuela, mientras yo solo me limitaba a escuchar por su parte la rubia parecía una niña que antes de dormir escucha los cuentos de su abuela, estaba embobada quizás le parezca en cierto punto irreal todo lo que contaron los chicos.

Se nota que es europea por lo que no creo que haya vivido ni siquiera la cuarta parte de lo relatado por ellos, por lo tanto para ella imaginárselo debió ser como estar en una especie de libro de fantasía oscura mezclado con terror.

El guardia ruso que desde siempre ha sido quien les da las indicaciones a los participantes en espera, está en la puerta de entrada a la sala y con su presencia ha aparecido un silencio pasmoso que solo aumenta la sensación de miedo que ya había, pero que estaba escondida en esta calma momentánea.

Han vuelto para encerrarnos con más pesadumbre.

— ¡Se acabó el tiempo! —. Ha dado un grito violento que resuena por la sala, sus facciones han cambiado y parece estar molesto— ¡Los participantes de Vortens, Lost y Norowareta vengan a mí porque serán los primeros en jugar esta ronda! —. Informa en otro grito furioso.

Miro a Jeiberson y a la rubia quienes comienzan a caminar con nosotros hacia la entrada que está a unos diez metros de donde inicialmente estábamos. La chica está asustada por lo que ha agarrado el brazo de su compañero, ahora las miradas entre nosotros cuatro pasan del uno al otro, porque sabemos lo que esto significa.

Tendremos que enfrentarnos.

Estamos a punto de comenzar.

Esto es un tipo de cancha de fútbol sala cerrada por paredes de concreto, el piso es de caoba, todo tiene más de diez metros de separación tanto aquí de esquina a esquina, como del círculo central.

Hay dos jugadores del equipo Norowareta, una chica en la esquina derecha del lado izquierdo y un chico en la esquina derecha del lado derecho.

Estoy en la esquina izquierda de este mismo lado y Palme en la esquina izquierda de la derecha. Jeiberson y la rubia son los que inicialmente están en el centro.

Palme me ha hecho señas para que corra a su esquina aunque me parece algo arriesgado.

— ¡Ya! —. El grito que resuena en la sala nos indica que comenzó el juego y debo correr.

Corro con todas mis fuerzas, Palme va hacia la esquina derecha del lado derecho. Me percato de que Jeiberson corre hacia el mismo lado que yo, tiene que recorrer la misma distancia.

En este momento parece que va llegar primero pues no da pasos comunes sino más bien zancadas.

— ¡Corre nojoda! —. Me grita Palme que no ha llegado a su esquina y ha comenzado a correr con todas sus fuerzas con dirección a la esquina a la que voy.

Parece querer detener a Jeiberson para que no llegue.

Corro, corro sin mirar atrás, me he adelantado un poco más pero no parece que lo lograré.

Miro de reojo hacia atrás y veo a Palme haciendo un esfuerzo descomunal por alcanzar a Jeiberson, no creo que llegue siquiera a tocarlo.

No entiendo que hace.

¡Dios perderemos ambos y nos eliminaran!

Devuelvo mi vista al frente, he sentido un poco el mover del suelo pero ni siquiera puedo voltear atrás, ahora un estruendo resuena en mis oídos.

Echo un vistazo de reojo para ver que pasó. Palme y el otro chico ambos están en el suelo.

Dudo por un momento pero solo me quedan unos cuatro pasos para llegar a la puerta, lo he logrado.

Entro en ella y el tiempo ha terminado, los únicos que están afuera son ellos dos.

Nos están devolviendo a nuestros complejos habitacionales donde están la mayoría de los compañeros.

Al primero que dejan es a mí pues donde nos residenciamos los del equipo Lost es uno de los complejos iniciales. Los guardias que nos escoltaban abren inmediatamente la puerta y pasó.

Lo he logrado, pero no es la sensación de tranquilidad que debería tener, es amargura, frustración, tristeza lo que siento.

Lagrimas comienzan a rondar por mis mejillas, quisiera poder sollozar y gritar, sin embargo no puedo, es como si la desgracia me persiguiera, Palme va a morir de eso no tengo duda.

Había aguantado para no mostrarme débil en todo el camino hasta aquí pero ahora siento que mis piernas tiemblan y caigo de rodillas, se me ha escapado un grito involuntario.

El mundo acaba de perder sentido.

Escucho unos pasos como si vinieran de lejos.

Mis brazos solo pesan, mi vista se nubla poco a poco, aun siento caer las malditas lágrimas.

— ¡¿Vicktor estas bien?! —. El grito de Rocci se siente a lo lejos, ni me molesto en responder, solo escucho sus pasos cada vez más cerca.

Ahora mi vista vuelve un poco a la normalidad y veo su rostro, su noble mirada apagada en esos ojos marrones, ese largo cabello negro parece una sombra, siento sus dedos secarme las lágrimas pero no quiero decir nada.

En silencio parece que también lo ha entendido. Por lo que me abraza, haciendo que mi rostro caiga en su hombro derecho, pasando ahora su mano izquierda por mi espalda suavemente en forma de consuelo.

Estoy abatido.

Las lágrimas solo siguen corriendo y mi vista se vuelve a nublar.

—Palme se ha sacrificado por mí —. Susurro en su oído...

Nota de autor:  :( Esta perdida me duele es el personaje más guerrero a mi parecer entre todos los que hay. 

El personaje que escribí para demostrar que aunque cometas un error siempre hay la posibilidad de redimirte, ojalá haya logrado transmitirles ese mensaje.  Ahora quisiera saber que piensan que pasará con los chicos. 

¿Saldrá otro líder?  

¿Podrán mantener viva la unión? Gracias por leerme y no olvides dejar tu corazón negro.

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