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Capítulo 19


Saliendo de la estación de policías conversando tranquilamente y de lo más amigable con uno de los tipos que se lo había llevado de la cafetería, Yoongi se despidió y se dirigió hacia su mejor amigo, que le esperaba recargado frente a su auto.

—No tenías que esperar por mí todo el tiempo —anunció.

—Quería, en caso de que decidieran finalmente dejarte ahí adentro —se encogió de hombros—. Ayer todo se veía muy complicado, pero parece que me preocupe por nada.

—Era mi palabra contra la de ese imbécil y a diferencia de él, yo tenía pruebas concretas —expuso—. Además, no actuar tan arrogantemente y no hablarles como si fueran mis empleados exigiéndoles y ordenándoles ayudó —sonrió leve.

—Es un idiota aterrado —negó—. Lamentablemente, aunque mostró su verdadero rostro, tiene las influencias y poder de su padre apoyándole —le recordó el alfa contrario.

—Lo sé —asintió y observó la estación—. Su abogado ya estaba viendo la manera de absorberlo de todos los cargos —contó no muy feliz.

—Tengo la sensación que saldrá libre de todo —expresó Namjoon con desagrado.

—Ya sabes cómo es ese tipo de gente, por eso estábamos nosotros en el ejército —chasqueó su lengua—. Lástima para él, Jimin no estará solo en caso de que busque venganza, difícilmente le dejaré hacer cualquier cosa mientras lo atormento —expresó con una sonrisa malvada.

—Como no podrá ir por ti, definitivamente irá por tu chico —comentó y le observó—. Aunque tal vez envíe personas detrás de ti, tú fuiste el que lo humilló frente a toda la cafetería y quién le enfrentó —indicó.

—Que lo intente entonces, encantado lidiaré con ellos —aceptó con una sonrisa ladina—. Y de paso, le recordaré quién es el que manda aquí.

—Por supuesto —correspondió y observó al otro alfa revisar su celular mientras se alejaba de su auto—. Parece que algo resultó de todo esto —observó divertido.

—Algo así —sonrió y se acercó abriendo la puerta del auto—. Jimin no ha dejado de hablarme para saber cómo estoy y cómo va el asunto de Taemin. Taehyung, por otro lado, se queja por no haberle dicho antes y a la vez me agradece por haber salvado a mi omega.

—¿Tienes una buena relación con él? —preguntó antes de subirse detrás del volante.

—Podrías decirlo, somos hermanos y ambos sentimos ese instinto por proteger a Jimin desde que lo conocimos, por lo que hay amor y rivalidad, más aún cuando nuestros familiares nos están comparando constantemente porque yo soy un alfa y Tae un beta —contó una vez se subió también.

—¿Tus padres también los trataron con diferencia? —indagó colocándose el cinturón de seguridad.

—Te diría que no, pero pensando en la atención que me pusieron luego de descubrir que soy un dominante, estoy seguro de que Taehyung lo sintió y por eso se alejó un poco de mí antes de entrar en el ejército —contestó—. Y desde que Minnie y él siempre estaban juntos y mis padres me prohibieron acercarme a mi omega, alejarse fue inevitable —se encogió de hombros.

—Ayer se veía bastante preocupado cuando me fue a buscar para contarme que te habían llevado —contó.

—Si, gracias por convencerlo de no llamar a mi padre —le observó—. Si él se hubiera enterado, otra vez habrían intentado meterse en mi vida al ver que estaba relacionado con Jimin.

—Algo me dice que no lo habrías permitido en esta ocasión —indicó comenzando a manejar.

—No, ya no soy un chiquillo que no sabía lo que estaba ocurriendo —expresó—. Si intentan alejarme de mi Jimin, ellos serán los que nunca lo volverán a ver —juró con frialdad.

—La madre de SeokJin no nos quería juntos cuando comenzamos a salir —comentó Namjoon.

—¿Qué hiciste? —preguntó, observándolo.

—No mucho —sonrió con un aire malvado—. Le expresé mi amor a mi pareja y le demostré como no la necesitaba en su vida, hoy en día llama de vez en cuando y Jin le corta cada vez que menciona la relación tóxica que tiene conmigo —rió bajo.

—¿Cómo lograste que te creyera a ti antes que a su madre? —preguntó curioso.

—Dándole y proporcionándole todo lo que deseaba, mostrándole que para mí no hay nadie más que él y permitiéndole la libertad que requiere a momentos —se encogió de hombros—. A veces, dejar que tenga malas experiencias le permite ver que nosotros somos lo mejor que tendrán en su vida, en especial cuando apareces como su héroe para salvarlo.

—Pero difícilmente nos consideraría como héroes —comentó con un resoplido divertido.

—Cierto, pero ¿quién dijo que ellos necesitan uno? —le observó fugazmente—. A veces, un villano que da todo por él es lo que realmente quieren personas como nuestros chicos.

—Ahora, eso suena como nosotros —sonrió.

Namjoon soltó una risa baja, no negando nada.

—Por cierto, no quiero arruinar el momento ni nada, pero Hoseok me informó que tu madre está en la empresa —comentó.

El alfa pelinegro frunció el ceño.

—¿Hace cuánto?

—Me avisó poco antes de que salieras de la estación de policía —respondió—. Nuestra amigable recepcionista le contó que fuimos a la estación —informó.

Yoongi chasqueó su lengua.

—Deberías de ir pensando seriamente en despedirla —se quejó con molestia—. Nunca está en su lugar de trabajo cuando debería de estarlo y por si fuera poco, cuando lo está, no trabaja correctamente —gruñó.

—Lo sé, la había estado aguantando porque es la prima de SeokJin y él me había pedido el favor, pero no seguiré permitiendo esto —respondió—. No es bueno para la imagen de mi empresa, pero no puedo despedirla si no consigo un reemplazo antes.

—Bueno, su presencia es necesaria cuando logra presentarse —bufó.

—¿Vas a seguir con el teatro de que estás saliendo con Hoseok? —preguntó Namjoon.

—No tengo mucho interés, pero no quiero que interrumpa lo que he avanzado con Jimin —respondió—. Supongo que veré según sus intenciones —anunció y observó el resto del viaje a través de la ventana.

Taehyung chasqueó su lengua con molestia cuando observó a su mejor amigo encogerse suavemente de hombros al sentir la atención de las personas en el campus.

—¿Qué? ¿No tienen nada mejor qué hacer? —gruñó hacia el par que caminaba cerca de ellos, observando descaradamente a Jimin mientras murmuraban entre ellos.

—Tae... —musitó el omega tirando de su mano al reconocer a las mejores amigas de Yu-Na.

—¿Desde cuándo mirar está prohibido? —respondió burlona Jisoo, deteniéndose con Jennie.

—¿Estás contento con lo que lograste para conseguir tu minuto de fama? —cuestionó la otra omega, Jennie.

—¿Qué estás diciendo? —estalló Tae, levantándose de la mesa.

—¿Qué? Todos saben que alguien como Taemin no estaría con... Él —observó a Jimin—, teniendo a una omega como Yu-Na a su lado —argumentó Jisoo.

—Pero decir que te intentó violar fue ir demasiado lejos —negó Jennie.

—¿Qué? ¿Acaso crees que Jimin fingió todos lo hematomas que tiene en su cuerpo? —exclamó Jungkook apareciendo y parándose de forma amenazadora detrás de ellas, consiguiendo que ambas se sobresaltaran.

—Bueno, él...

—¿Él qué? —interrumpió el omega dominante, cruzando los brazos sobre su pecho—. Será mejor que cierren sus bocas sucias y salgan a hacer lo único que saben, lamerle el culo a su amiguita dándole ánimos —se burló.

—Esa estuvo buena —se rió Taehyung sin poder evitarlo, dándole los cinco a su amigo.

Indignadas, ambas omegas se retiraron rápidamente.

—No debieron de haber hecho eso —suspiró Jimin, observando a sus amigos.

—No es justo que algunos intenten juzgarte solamente porque no tienes una familia con dinero como el imbécil de Taemin —gruñó Taehyung.

—No, no lo es —aceptó—. Pero discutir con ellos solo es perder el tiempo —expresó.

—No sentí que perdía el tiempo al ponerlas en su lugar —sonrió Jungkook—. Descuida, nosotros te defenderemos de esos idiotas.

—No pueden morder a cada persona que me mire —indicó divertido.

—No, pero podemos ladrarles y realmente morder a los que son lo bastante idiotas para acercarse y molestarte como las amiguitas de Yu-Na —argumentó el beta, revolviendo suavemente su cabello.

—Deja eso —gruñó apartando su mano—. ¿Has sabido algo de Yoongi hyung? —preguntó sin poder contenerse.

—Bueno, según tenía entendido, hoy iba a presentar su denuncia contra el imbécil de Taemin y llevaba las pruebas para ello —respondió.

—No quiero ser pesimista, pero considerando los padres de Taemin, será algo difícil de que todo esto llegue a una parte —comentó el rubio omega.

—Lo sé, intenté decírselo, pero no me escuchó —respondió Taehyung—. ¿Por qué esa cara triste? —preguntó observando a Jimin.

—Porque Hyung se metió en problemas solo por ayudarme, si no lo hubiera hecho, no lo habrían ido a buscar ayer —expresó preocupado.

—Si soy sincero, me alegro de que Taemin hubiera decidido meterse con él —comentó Jungkook, consiguiendo la atención de los otros dos—. Cuando fue a la cafetería, me dio la impresión de que no sabía que iba a estar ahí y cuando lo vio, su ego simplemente no pudo soportarlo y lo acusó —expresó—. Pero si te hubiera atacado a ti, habría sido algo difícil para ti defenderte.

—En eso Kook tiene razón, mejor mi hermano que tú —apoyó Tae—. Él sabe cómo lidiar con esos imbéciles y ellos no pueden aprovecharse de él por su estatus como alfa o situación económica —le recordó.

—Me sigue sabiendo mal —refunfuñó a pesar de que el omega sabía que sus amigos tenían razón.

—Si quieres, puedo ir a verlo y así saber cómo le fue —expresó Taehyung, consiguiendo inmediatamente que esos ojos turquesa le observaran.

—¿En serio? —preguntó esperanzado—. Me gustaría ir yo, pero tengo un examen y otra clase por delante —explicó bastante decepcionado al respecto.

—Puedo, no tengo más clases y a diferencia de ustedes, no trabajo luego de la universidad —le guiñó un ojo.

—Solo porque sigues en el nido de tus padres, quienes te ayudan —resopló Jungkook tirándole su mochila.

—Tal vez —rió—. Pero el dinero que junté en vacaciones ya se me está terminando, así que tal vez busqué trabajo al terminar este semestre —expresó.

—Dile a Hyung que lamento haberle metido en problemas —pidió Jimin cuando su amigo se levantó.

—No, porque estoy seguro de que ya se lo habrás dicho —resopló y desordenó su cabello por última vez antes de alejarse dejándolo con Jungkook.

Saliendo del campus, Taehyung fue directamente a la empresa en la cual trabajaba su hermano mayor.

Aunque no quisiera admitirlo, si Yoongi no hubiera vuelto cuando lo hizo, es probable que Jimin habría terminado con algo peor que solo hematomas cubriendo su cuerpo.

Y la forma en que su amigo observaba a su hermano ahora, como un puto héroe, cosa que hasta para él era en ese momento, solo confirmaba sus sospechas de que su enamoramiento por el alfa había vuelto.

Por eso iba al lugar de trabajo de su hermano, para averiguar si lo que sospecho hace tantos años, que Yoongi también podría estar interesado en su amigo, era verdad o algo que solo se imaginó ante la atención que le ponía este a Jimin.

Si lo estaba, bien por él, no le importaría menos que ambos estuvieran juntos, pero si no lo estaba, entonces tendría que dejar de actuar tan estúpidamente atento porque solo estaría ilusionado a su mejor amigo.

Y no dudaba de que Yoongi era alguien inteligente, por lo que no se creería ese cuento de que su hermano no se habría dado cuenta de los obvios ojitos de corazones con los cuales le observaba Jimin cada vez que estaba cerca.

Bajándose del taxi, Taehyung entró en el edificio y se detuvo automáticamente al contemplar a su madre conversando con su hermano, quien estaba siendo cómodamente abrazado por... Otro hombre.

—Querido, que sorpresa que estás por aquí —comentó su madre al observarle.

—Solo estaba de paso —respondió sin dejar de observar a la otra pareja.

—Viniste a conocer la pareja de tu hermano, ¿no? Tampoco soportaste la curiosidad —rió suavemente.

—¿Pareja? —repitió arqueando una ceja.

—Sí, también fue una sorpresa para mí —sonrió—. Pero es motivo de celebrar, le iré a contar esto a tu padre —anunció feliz—. ¿Vienes conmigo?

—No, como dije, solo estaba de paso, debo volver a la universidad —anunció y le regalo una sonrisa a su madre.

—Está bien, nos vemos en casa entonces —se despidió agitando su mano en general antes de salir de la empresa.

—Sabes, si estabas saliendo con alguien, debiste de habérselo dejado saber a Jimin desde un principio —expresó con enojo—. Te agradezco lo que has hecho por él hasta ahora, pero será mejor que le des algo de tiempo porque ha malinterpretado todas tus malditas acciones y ahora debo de explicarle esto —gruñó alejándose antes de que Yoongi pudiera decir algo más.

—Yo... —pronunció Hoseok, alejándose—. ¿Hice mal? —preguntó arrepentido.

—No, solo una terrible coincidencia —espetó no muy feliz, no dudando de las palabras de su hermano.

—Lo siento, solo quería ayudar —expresó, tomando su mano.

—Lo sé, y lo agradezco —le observó, apartando su mano—. Pero para la otra, no quiero que hagas nada, toda esta farsa ya se acabó —expresó.

—Pero... Tu madre.

—Yo lidiaré con ella. Sé que no lo hiciste con malas intenciones, pero a veces, no ayudar, también es una forma de hacerlo —expresó alejándose, su mente comenzando a planear como intervenir para que Taehyung no le contara nada a Jimin y arruinara todos sus avances.

Chasqueando su lengua con molestia, le llamó por teléfono, siendo completamente ignorado.

Ahora, ¿qué debería de hacer con la situación?

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