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—¿Yeji, puedo saber que estas haciendo? — pregunté al escuchar un sonido de algo cayéndose. Me solté del agarre de Jungkook y entre al cuarto de Navegación.

Yeji y Baekhyun estaban solos dentro de la habitación como dos niños pequeños manipulando cada cosa que veían.

— ¿Baekhyun, no se supone que estabas mal? — Preguntó Jungkook a pareciendo detrás mío.

— A sí es, pero estaban demorando a si que decidí venir por ustedes, pero me desvíe al ver al navegador salir de esta habitación. — dijo observando las tablas náuticas.

— Juguemos a los piratas. — ofreció Yeji con una sonrisa extravagante.

— No vamos a hacer nada que después no podamos arreglar. — dije un poco fastidiada.

— Me parece una buena idea Yeji. — dijo Baekhyun con una sonrisa volteando a verla. Esta sonrió más. — A fin de cuentas, somos jóvenes, debemos disfrutar del tiempo que nos queda sin arrugas.

— Baekhyun tiene razón, además a él le queda poco tiempo — dijo Jeon en son de burla y todos reímos. Menos Baekhyun.

— O el alcohol te a afectado o fueron todas tus pajas en nombre de _____ las que te lavaron la cabeza — Mis ojos se abrieron de repente y volteé a ver a Jungkook con un rostro totalmente aturdido.

— Esta bromeando ______, no le creas — se defendió Jungkook un poco nervioso acercándose a Baekhyun — No aguantas ninguna, eh.

Hubo un corto silencio en el cuarto.

— ¿Y si jugaremos a los piratas? El alcohol se me a bajado un poco, no haré estupideces lo juró. — dijo Yeji con aegyo.

Silencio.

— Bien, yo seré el rey. — dijo Baekhyun.

— Yo el corsario. — dijo Jungkook.

— Yo seré la princesa secuestrada. — Todos volteamos a ver a Yeji con una cara de: "¿Wtf?" — ¿Qué? — se encogió de brazos — dejenme soñar.

— Yeji queremos poner algo de acción, no cursilerías. — se escuchó venir de Baekhyun.

— Aish, que falta de romanticismo. — se quejo Yeji. — Esta bien, entonces yo seré la arqueóloga.

— No tienes remedio.

— Bien, entonces yo seré la navegante. — dije caminando hacia la deriva.

— ¿Están listos para la aventura? — Dijo Baekhyun al mando.

Listo, ya empezamos.

— ¡Si, señor! — respondieron Jeon y Yeji al unísono.

Pues ni modo, a meternos en los personajes.

— Capitán Byun, veo una tormenta aproximándose hacía nuestro barco, será mejor sacar las velas para que el viento nos arrastre más rápido hacía la otra orilla y evitar posibles inundaciones y perdidas de botines. — Dije elevando la voz mientras miraba por los enormes vidrios negros de la habitación.

— Entendido navegante leprechaun. — Respondió Baekyun y lo mire con cara de pocos amigos.

— ¡Capitán! — medió grité.

— Lo lamento, es la costumbre. — continuó simular mover el timón.

— Compañeros. Eh descubierto algo nuevo sobre la isla que estamos por visitar. — Dijo Yeji con una hoja en blanco sobre sus manos.

Esto se estaba poniéndose divertido.

— ¿Qué es señorita Hwang?

— Hay oro escondido en el corazón de la isla, pero desde hace asientos de años que esta siendo protegido por muchos animales desconocidos y evitar que alguien pueda tomar su riqueza y llevárselos. — dijo Yeji.

— Suena interesante. — Espetó Baekhyun. — Navegante leprechaun- digo _____ — Lo miré ya resignada, este solo se limitó a reír. — Necesito que usted y el corsario Jeon vallan a fuera y saquen las velas. Tenemos que cruzar aquella tormenta con rapidez como manda la Navegante le- digo ______.

— ¡Si, capitán! — Soltamos Jeon y yo y salimos de la caseta de navegación.

Al salir empezamos a reír de lo que estábamos haciendo.

— Jajajaja la última vez que jugamos a los piratas con Yeji fue con nuestro primo HyunJin hace 10 años. — Dije.

— Pues valla que tuviste una buena infancia, yo me la pasaba jugando videojuegos encerrado en mi habitación. — soltó una risa — _____ yo-

— No digas nada, habláremos de eso otro día, adem- — un estruendo me interrumpió. Aquel sonido venía de adentro.

Jungkook y yo nos miramos algo asustados y entramos nuevamente a la habitación.

— ¿Qué hicieron? — pregunté de inmediato.

— Bueno — dijo Yeji soltando una risa nerviosa y rascándose la nuca — yo solo quería saber la utilidad de esto y accidentalmente ... lo rompí. — Señalo una palanca floja.

— Dios mío Yeji, rompiste uno de los frenos — Dijo Jungkook algo exasperado.

— Esta bien, podemos pagarlo. Si juntamos el dinero entre todos. — Dijo Baekhyun relajado mientras apoyaba sus brazos hacía atrás sobre una de las encimeras que contenían muchos controles y botones.

De pronto todas luces del yate se encendieron y seguidamente algo empezó a temblar debajo de nosotros.

En nombre de nuestro Dios y Rapero J-Hope esperó que este animal no haya encendido el yate.

— Baekhyun, por favor dime que no te apoyaste sobre el botón de encendido. — dijo Jeon ya sacado de onda.

Baekhyun se estabilizó en su lugar y volteó hacía atrás verificando en donde se había apoyado.

— No me digas que este botón rojo es la cabeza de todos estos controles. — Dijo Baekhyun asustado. — Por que si es así ... Amigos será mejor bajarnos de esta madre antes de que algo exploté.

Antes de que pudiera decir algo más empezamos a correr hacía la salida, pero reaccionamos muy tarde cuando el yate empezó moverse con un poco de rapidez alejándonos de la orilla.

Nos agarramos de las proas del yate para evitar caernos.

Jeon entró a la habitación y seguidamente Yeji y Baekhyun lo seguieron, por ende yo también tenía que hacerlo.

Todos buscábamos con desesperación algo con qué detener esta cosa, pero literalmente nadie sabía nada sobre yates. Entonces algo se me vino a la cabeza ...

Me acerqué a donde antes Baekyun estaba parado y busque aquel botón que había presionado por equivocación.

Lo encontré, gracias Dios. Estaba por precionarlo pero Jeon me detuvo.

— ¡No _____! — Gritó y gire a verlo. — Ese no es el botón de apagar, ese sólo es para encender el motor y ponerlo en marcha, el verdadero debe tener otro color o escrito la palabra Off.

— ¡Tengo que intentarlo Jeon, tal vez si sea y te estés equivocando! — Dije alterada tratando de controlar mis impulsos.

— ¡Tengo miedo! — gritó Yeji al sentir como el yate aceleraba más su velocidad.

— ¡_____, hazme caso por favor, no hagas nada de lo que después te puedas arrepen-...

Lo presioné.

Un sonido alarmante resonó por toda la habitación más unas luces rojas que se encendían y apagaban constantemente, y es entonces donde el pánico aumento en nosotros.

— ¡Te lo dije! — gritó furioso Jeon.

— ¿Y ahora que vamos a hacer? — dijo Baekhyun estupefacto y asustado en su lugar.

— ¡Lo lamento! Creí que funcionaría. — dije a punto de llorar.

Empeore las cosas, y no tenía excusa para poder remediar lo que cause. Las luces rojas seguian parpadeando junto aquel sonido alarmante. La velocidad se aumentaba cada vez más.

— ¡Saltemos! — gritó Baekyun llamando nuestra atención.

— ¡No! La temperatura del agua esta bajo 0° y estamos demasiado lejos de la orilla como para llegar nadando sin que una hipotermia nos ataqué. — Grito Jeon.

A estas alturas, ya debemos estar fuera de la cuidad o del país por la velocidad del yate.

— ¡Siganme¡ ¡pero sujetándose de algo para que no se caigan! — Gritó Jeon caminando hacía la salida.

El movimiento brusco del yate nos impedía caminar con normalidad por lo que teníamos que sujetarnos de las paredes para poder llegar hacía donde Jeon nos dirigía. No hicimos preguntas y simplemente seguimos a Jungkook.

Bajamos de la segunda planta y Jeon abrió como una especie de puerta en el piso que guiaba a un tipo de zotano que tenía el yate.
Bajamos por la escalera de esta y llegamos a una planta más oscura y con muchos cables y cajas alrededor.

— ¡Cada yate debe contar por lo menos con dos botes de rescate en su interior, supongo que estos deben estar aquí.! — Tenía que gritar para que pudiéramos escuchalo ya que por la bulla del yate se nos complicaba oír todo correctamente.

— ¡Deben ser esos! — Gritó Baekhyun señalando detrás de nosotros.

Giramos a ver y si, eran los botes que Jungkook decía.

— ¡Alguien tiene que regresar al cuarto de navegación y abrir la puerta que da al mar!

Todos nos miramos, pero nadie se ofrecía a regresar.

— ¡Iré yo! — me ofrecí mientras subía por las escaleras. Sentí que alguien me tomaba por los tobillos y baje la mirada para ver de quien se trataba.

— ¡No tardes, y por favor regresa! — dijo Yeji con los ojos brillosos a punto de llorar.

Me dolía verla así.

— Te lo prometo. — dije y continúe subiendo.

Al llegar a la superficie sentí gotas caer sobre mi cuerpo entonces me di cuenta de que estaba lloviendo y posiblemente una tormenta este cerca de nosotros, por estos lugares las tormentas abundan más, y tranquilas, no eran.

Corrí como pude hacía la segunda planta y entre al cuarto de navegación ...

¡¡¡DEMONIOS, SI SOY UNA ESTÚPIDA!!! ¡¡¡OLVIDÉ PREGUNTARLE A JEON CUÁL ES EL MALDITO BOTON O CONTROL QUE DEBÍA MANEJAR!!!

Okay _____, calmate, respira hondo y busca por ti misma el control para abrir la puerta trasera.
Busque en cada rincón de la habitación aquel maldito control pero ninguno era el que yo buscaba, sin importarme lo que podría ocasionar empecé a mover y presionar cada control y botón que veía con la esperanza de que algunos de ellos sea el indicado, pasaron unos minutos hasta que vi una palanca a lado de la puerta, me acerque y leí lo que traía escrito. "Puerta de Emergencia" Su pongo que era este, lo baje y todas la luces se apagaron de por sí y la embarcación detuvo su andar. Salí de la habitación para verificar si había funcionado y efectivamente lo había hecho, la puerta de en donde Jeon y los demás se encontraban se estaba abriendo.

— ¡Bien!

Baje hacía aquella pequeña puerta que guiaba a abajo e intenté abrirla pero ciertamente no lo hacía.

¡Carajo, esto no me puede estar sucediendo ahora! Seguí intentándolo hasta que por fin se abrió.

Rápidamente baje y me dirigí hacía la abertura que daba la vista al mar, pero nadie estaba ahí ni los botes ni los chicos. Empecé a sentir pánico de que me hayan dejado.

Volví a subir hacía arriba y me asome por la proa buscándo a mis amigos y hermana. Pero no los encontraba, ¿les habrá pasado algo? No estúpida, no pienses eso.

— _____ — Escuché a penas audible. — ¡_____! — escuché un poco más fuerte por estribor.

Caminé hacía ese lado y ahí estaban los dos botes que habíamos encontrado con los chicos a bordo.

En uno estaban Baekyun y Yeji y en el otro se encontraba solo Jeon.

— ¡Tienes que saltar ______! El yate a llegado a su límite y explotará en cualquier momento.

No.

No, no puedo hacerlo. Yo, no puedo nadar.

Me quedé estática en mi lugar intentando procesar las palabras que había dicho Jeon "Saltar" ¿y si me ahogaba y moría mientras me hundía en lo profundo del mar? No, definitivamente no podía hacerlo. No tengo el valor suficiente para hacerlo.

— ¡______¡ — gritó Yeji — ¡Hermana escuchame! — mis ojos empezaron a picar — Te lo suplicó por favor, salta. Yo estaré esperándote abajo ¿si?

De inmediato Yeji se lanzó al mar nadando exactamente hacía donde yo estaba.

No puedo creer que este siendo tan cobarde y que Yeji tenga que hacer esto para poder darme ánimos.

— ¡HERMANA POR FAVOR SALTA! — ella rió amargamente. — ¡E-EL AG-AGUA EST-TA MUY F-FRÍA!

Las lágrimas caían por mis mejillas, un dolor se profundizó en mi pecho y me di cuenta de algo, ¿enserio estaba haciendo pasar a mi hermana por todo esto? ¿Qué dirán mis padres de esto cuando se enteren?

— ¡______! Salta por favor, Yeji y yo te estaremos esperando aquí abajo. — Y seguidamente el también se tiro al mar.

Respiré profundo y cerré los ojos, confió en que Yeji y Jeon me sujeten cuando caiga al agua.

Me sujete del ultimo fierro para después poner mi pie derecho en el primer fierro de la proa y seguidamente poner el izquierdo en el segundo, levante mi pierna derecha por el aire cruzando al otro lado de proa y de inmediato lo estabilice en el primero, repetí el mismo acto con la pierna izquierda y sin darle más importancia a mi falta de experiencia salté al mar. Mi cuerpo se estrecho contra el agua y al momento también se hundió en ella, con desesperación salí a la superficie y busqué a Yeji quien ya se encontraba sujetándome por la cintura para que no me hundiera, detrás de ella venía Jungkook y con ayuda de ambos logré subir a uno de los botes.

Todo había pasado tan rápido que no había percatado que Jungkook ya estaba a bordó conmigo y Yeji con Baekyun en el otro bote.

— Tranquila, ya estamos a salvó, eres una mujer muy valiente. — dijo Jeon poniéndome su chaqueta por la espalda. — Ahora solo tenemos que alejarnos del Yate, o si no esta explotará con nosotros.

No estaba muy atenta a lo que decía, mi cuerpo solo temblaba de frío y se concentraba en provocar algo de claro en mi sistema.

Pasaron algunos minutos de lo sucedido y yo aún no podía creer que haya saltado al agua, el problema no era la altura, si no el temor de no poder reaccionar ante la corriente del agua y hundirme muy en el fondo hasta quedarme sin vida. Es un trauma que tengo desde los 10 años, cuando HyunJin me empujó a la piscina de casa de sus padres sin saber que yo no podía nadar, me trague mucha agua y desde ese día jure no volver a meterme al agua.

Mire al otro bote y Baekhyun se encontraba remando con uno de los remos mientras Yeji estaba sentada en medio tratando de conseguir calor con la casaca que le había dado Baek.

Un estruendo sonó detrás de nosotros y caímos en cuenta que era el Yate que ya había explotado tal y como Jeon lo había dicho, pero ya estábamos lo suficientemente lejos como para que pudiera llegar hasta nosotros.

— Se los dije — dijo Jeon con elegancia mientras remaba.

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