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23 Cupcakes


En el centro de la fuente, rodeado de sus destrozados leones blancos y sin oportunidad de escapar está Grandfather, completamente cubierto en tinieblas riendo emocionado — ¡¡¡ No los dejaré huir !!! — grita extendiendo sus garras para atrapar a Nigel Uno

Uno no huye va a su encuentro, atrapando la garra desde su muñeca, el luminoso guante logra retenerlo — Entonces ¿Estás listo? — cuestiona con seriedad

Y el villano se carcajea — No he vivido 150 años por nada — amenaza el viejo alzando su puño contra él

Para Cinco las cuentas no salen, sin embargo, este no es momento de distracciones, ya que el villano logró impactarle el puñetazo al chico o eso parece ya que incluso si este retrocede varios metros Uno sigue de pie, sujetando el brazo de Grandfather, Chad dispara a la cabeza de la oscura figura y Cinco nota como el joven calvo se esfuerza por inmovilizarlo, así que apoya al niño rubio, el pequeño que hasta hace pocos segundos era muy chico para su arma ahora la sostiene firmemente, disparándole al anciano

— Dickson — reclama Grandfather forzando el agarre de Uno — Maldito traidor, al menos tú deberías ser fiel a quien te salvó la vida — masculla tirando de sí, tratando de volverse de nuevo esa masa espesa

— Ese no fuiste tú — refuta fieramente Chad, reactivando en la memoria de Cinco a ese chico que vio hace años, aquel líder supremo que admiraban

— Crío ingrato — gruñe el anciano insistiendo en agrandarse, no obstante los constantes disparos del grupo parecen no solo debilitarlo también reducen su tamaño, desesperado se separa de las sombras y sale como un joven no mayor de 20, un disparo en el hombro lo tira bruscamente siendo seguido por Nueve

El joven pelirrojo de chaleco negro intenta huir, pero Wally dispara varios pinchos luminosos, bloqueando el paso — ¿No dijiste que solo éramos unos niños? ¿Cuándo has visto a un adulto huir de niños? — se mofa el preadolescente de alborotado cabello rubio corriendo a él

La grotesca forma que forcejea con Uno quiere proteger al adulto, reduciendo bruscamente su tamaño hasta ser tan delgada como su dueño, ocurre todo tan rápido que los chicos no pueden apuntarle y riendo se zafa del joven calvo yendo directo a Grandfather, el adulto brinca al techo aprovechando la sorpresa, decidido a fugarse por arriba, de nuevo Nueve dispara siguiéndolo con la vista, el tirano corre sobre el techo adhiriéndose a este únicamente por su sombra

Uno brinca al muro y se impulsa alcanzándolo rápidamente, entonces el villano cada vez más viejo sonríe lanzándose sobre él, sujetándolo — Aún me quedan sus sombras — ríe tirando de ellas, aferrándose al joven

Escépticos ve como sus sombras se jalan notoriamente, como si tras ellos un enorme foco se moviera frenético estirándolas violentamente, la terrible sensación sacude a Cinco, que al sujetarse de su arma siente algo desgarrarse dentro de ella, jalándola sanguinariamente como si la separarán en partes, todo su cuerpo se escalofría angustiosamente sin poder dejar de temblar, y no es la única, todos lo sienten, incluso Chad, que aun mientras crece a su verdadera edad cae al piso desesperado por retener su sombra

— Lo sé — contesta Uno, desactivando sus guantes y reteniendo el rostro del cincuentón

— ¡¡ ¿Qué? !! No ¡¡¡ BASTA !!! — gruñe el mayor mirando como caen, quedando bajo el chico, desesperado espera detener la caída extendiendo brazos desde su sombra, que delgados y débiles con dificultad logran asirse del techo, sin poder afirmarse desaparecen dejándolos caer bruscamente —, ¡¡¡ NO !!! — grita avejentándose en sus iracundos intentos de retener su sombra

Uno se torna completamente oscuro perturbando a los chicos, que aún temblando tratan de entender qué pasa cuando los filosos cuernos negros de las sombras crecen en la frente del joven calvo — ¡¡¡ Nigel !!! — lo llaman aterrados

Estruendosamente las doradas puertas de la entrada se abren y sorprendidos e indefensos ven entrar al serio joven de uniforme negro — ¡¡ Nigel Uno !! — llama con potente voz, y el chico reacciona, sus cuernos se reducen y sus dorados ojos enfocan al soldado de alebrestado cabello castaño intenso

El viejo sonríe al ver su insignia en el brazo de aquel audaz soldado, que avanza a ellos apuntando con una de las largas armas negras del británico — ¡¡¡ Steve, mátalos a todos !!! — grita Grandfather emocionado, exigiendo a su sombra un último esfuerzo — ¡¡ La niña primero !! — señala a Cinco

— ¿Quién te crees para ordenarme? Eso se acabó viejo — sonríe el recién llegado colocándose sus asombrosos lentes negros, disparando la poderosa descarga de luz iónica a la oscuridad

El impacto sacude completamente al anciano — ¡¡ Malditos niños ingratos !! — vocifera maltrecho, hinchándose de cólera y resistiéndose a su captor logra empujarlo —, ella es importante ¿cierto? ¡¡Sí, sí ya lo veo!! ¡¡ Es idéntica a esa mocosa !! — ríe corriendo hacia Cinco, en forma de un gigantesco alacrán negro, tétrico y viscoso, que deja residuos de si tras él

Steve dispara continuamente, mas no logra detenerlo aun cuando impacta cada tiro, Fanny, Hoagie y Chad también lo intentan, buscando interponerse en su camino, sin embargo Grandfather corre a ellos totalmente desquiciado, salpicando el denso cuajo que lo recubre arrojándolos violentamente fuera de su camino, Tres dispara frente él y de un coletazo la avienta recubierta de la pesada substancia

—. ya te maté una vez y me encantará hacerlo de nuevo — afirma Grandfather sonriente, llegando ante la adolescente, demasiado veloz para esquivarlo la atrapa entre sus mandíbulas yendo directo al hueco que da a la ciudad

— ¡Hey vejete! — lo llama Cuatro brincando a él, la morena y el rubio disparan a toda potencia despedazando al "animal" , que no detiene su avance, aún salpicado por el piso, el pedazo que retiene a Cinco va solo en cuatro rasgadas patas, escurriendo y desbaratándose al correr, el revoltoso rubio le cae encima a la vez que lo atraviesa terminando en el piso batido de la espesa sustancia, sin poder levantarse

Uno ha corrido tras ellos intentando sujetar a la bestia y Nueve se lanza contra las tenazas que aprietan a la menor, esperando poder sujetarla antes que lleguen al precipicio, no obstante es al viejo a quien atrapa pues se separa del cuajo, aventándolo con todo y la chica por el hueco

Cinco logra reaccionar al ver la fachada del edificio, e instintivamente extiende la mano tratando de afirmarse de lo que sea, siendo la mano de Nigel Uno quien la sujeta apenas sosteniéndose de la orilla del piso

— ¡ Eres mío ! — abre sus dorados ojos el cuajo tratando de devorar al chico en su des-concentración

Pero una fuerte mano afirma al joven calvo — ¡¡ Chad !! — sonríe Uno

Y el otro lo mira enfadado — No me tientes a soltarte — musita Steve, levantándolos con esfuerzo

— ¡¡ Malditos !! — grita el cuajo buscando rodearlos,notando al fin que no puede moverse

Nueve sujeta firmemente a su dueño, aprisionando su frente con el iluminado guante — Tal vez duela — se jacta activándolo

Chad corre hacia Uno y Cinco, para ayudarlos a subir y — Llegue primero — ríe el ex general sorprendiendo al rubio, que sujeta la otra mano de Cinco jalándola arriba

— ¿Es en serio? ¿Te parece buen momento para alardear? — sonríe Dickson desinteresado de las bromistas presunciones del mayor

Cinco en cambio se levanta impresionada por el resplandor que rodea a Nueve, y es sobrepasada por Uno que va al revolucionario, hasta que — ¡ F*ck ! — exclama este separándose rápidamente del anciano

— ¿Qué? — pregunta el británico moviéndolo para ver y

— Creo que era cierto lo de los 150 años — el enmascarado señala con seriedad al piso, los restos secos y desbaratados del anciano se disuelven cual cenizas frente ellos

— Tal vez es mejor así — musita Uno, mirando en su brazo la diminuta sombra desaparecer cuando los primeros rayos de sol iluminan el cielo

— ¿Realmente derribaras la torre? — pregunta Jenny yendo a ellos, justo Hoagie la detiene, y ella lo mira confundida

— La fuente sigue aquí — le recuerda Tres levantándose para ir por Wally

Que aún se sacude la masa negra — ¿Qué carajos es esto? — gruñe el australiano, cada vez más crispado de no terminar de sacarse los pedazos de esa cosa

— Sombras — sonríe Steve, casi divertido con su torpeza

— ¿No eras su aliado? — se extraña el revoltoso rubio de verlo ahí, con ellos, tan tranquilo de ver "a su querido abuelo" derrotado

— ¿Qué?... No, siempre he estado del lado de Nigel y Nueve, somos amigos desde niños — sonríe el mayor, con cierta burla de la perplejidad del puberto

La pre adolescente japonesa y su novio miran al revolucionario, que sólo les pide silencio antes de volverse al británico — ¿Las regresaras? — le pregunta con un tono calmo y amistoso que lo hace sonreír

Uno deja de ver el punto donde Grandfather desapareció y mirándoles extiende el brazo ante ellos — Vamos — susurra intrigando a los chicos, las sombras se liberan por el cuarto e incluso el cuajo que retenía a Wally se dispersa en varias siluetas que salen por el hueco a la ciudad, son tantas y tan rápidas que agitan una fuerte corriente al irse.

El sol comienza a salir tras las montañas que rodean la ciudad, una vista hermosa y esperanzadora para Cinco, que mira con satisfacción al joven de lentes obscuros, agotado él exhala pendiente de su sombra — Ve... Monty debe extrañarte — pide señalando la tercera torre, camino que la reacia sombra sigue

— Espera ¿Eso es.. esa... era la de tu padre? — confundida Abigail lo mira, atenta a su reacción

— Sí — Nigel asiente algo avergonzado

— Con razón actuabas raro — exclaman Chad y Nueve al unísono, incómodos al notarlo

— ¿Qué haremos con él? — pregunta Tres, obviamente preocupada tensa al revoltoso rubio

— Nada — la respuesta del británico los deja impactados —, él no recuerda nada, ahora es solo mi padre y otro civil más — asegura yendo a la salida

— ¿Qué? Cómo si alguien te fuera a creer que pudiste borrar sus recuerdos — exclama Wally intentando confrontarlo al pararse frente él, Uno sonríe levemente al enseñarle su guante

— Esa es un arma muy poderosa — la inquietud de Tres es clara, cimbrando en su compañero, que recapacita la situación

Fanny se acerca a ellos con Hoagie, expectantes, por su lado Steve no luce ni interesado

— Tú la conoces bien ¿cierto? Es una versión miniatura de la cámara de destitución del KND — explica a grandes rasgos Uno dejándose rodear por los chicos

— Imposible, solo son rumores, nunca encontré los planos o alguna pista de su ubicación, más allá de menciones en un par de reportes— refuta la asiática incrédula extendiéndole la mano, claramente pide ver el guante y eso concierne a Nueve

— Claro que no, los planos aún los tenía su creador — Nigel le entrega la prenda a la atónita Kuki, parece tener ya los quince y sigue creciendo aceleradamente

— Espera ¿Zero aún los guardaba? ¿Creí que Grandfather le había...? — Jenny se detiene dudando si debe preguntarlo pues los chicos lucen confundidos

— Sí, pero ocultó cientos de archivos en el sistema de emergencia, para resguardar los datos, nos costó mucho hallarlo — explica Nueve llegando a su lado, Chad en cambio va por Rachel, checando su pulso ya que sigue inconsciente —, estará bien — asegura el enmascarado, instando al británico a salir —, si vamos a explotarlo debemos salir pronto.

— Tengo algo más importante ahora — sonríe Uno volteando a ver a la morena, a espaldas de él

Abigail sostiene su descargada arma mirándolo insegura — Lo suyo es más urgente ¿No crees? — pregunta entregando el aparato e intentando alejarse, así que él le toma del brazo —, quiero verlo caer — sonríe ella con cierta seguridad

Casi intrigado Uno levanta su ceja sobre los lentes obscuros, vacilando?, mas las doradas puertas se mueven alertándolos, todos apuntan veloces cuando un soldado de visor transparente se asoma — ¿Quién ganó? — ríe abriendo la puerta

— Diablos — suspira Nueve, bajando su arma al reconocerlo

El pelinegro se acerca — Que lastima, esperaba que al menos tú murieras — bromea mirando alrededor

— Si muero solo me pondré otra máscara — responde el enmascarado compartiendo una de esas extrañas interacciones con Uno

— Creí que habías caído — interviene Chad, a la par que el grupo se relaja comenzando a salir

— No, casi, pero me salvó un amigo del General — responde el soldado sacándose el protector facial sonriéndole a Uno

— ¿General? — duda el británico

— Sí ¿O es Comandante? o ¿Prefieres Dictador? — le insiste el joven en broma

Su rostro cuadrado de rasgos europeos y marcada mandíbula llaman la atención de Abigail, ese cabello negro de esponjado copete clásico solo pueden ser de alguien — Patton... tú eres Patton Drilovsky ¿Cierto? — pregunta interrumpiendo los juegos del chico

Cinco avanza segura, tal vez el rostro del pelinegro es algo diferente, porque claramente es mayor y ha dejado atrás los redondeados rasgos infantiles, pero definitivamente tiene que ser él — ¿Eh? ¿Patton? — duda el joven soldado extrañado, aun si no es del todo correcto de alguna manera encontrar a sus amigos así reconforta a Abigail — No, lo siento, Drilovsky sí aunque me llamo Jared, a mi madre le gustaba más... — el joven parece pensarlo ante la atónita morena que lo mira expectante — Oye... sí, mi padre quería llamarme Patton, ahora que lo dices... — él sonríe como si recordara algo importante — Estaría bien ¿no es así? Llamarme Patton — parece decidir sonriéndole a la apiñonada pecosa

— ¡A mí qué me preguntas! — se molesta Jennifer avanzando para salir

— Bueno porque aún no sé tu nombre — Jared la sigue con suma atención

— Jennifer Hale — responde Hoagie asombrando a ambos

— ¡No le digas mi nombre a cualquier extraño! — se queja Jenny tan estridente como siempre

— Ya, Jenny ¿verdad ? ¿O prefieres Jen? — le coquetea el pelinegro

La asombrada chica de difusas pecas lo mira incrédula — ¿Que? no te tomes esas libertades conmigo — conteniendo la sonrisa acelera el paso, igual de emocionado Jared la acompaña feliz de por fin poder hablar con ella

— ¿Y? entonces ¿General o Dictador? — retoma el tema Tres, cuestionando al británico

— Ninguno — musita Uno tranquilamente, apenas mirándola yendo a la salida

— ¿En serio? — duda ella tomando a Wally de la mano, el revoltoso rubio sonríe afirmándose de ella y manteniéndose pendiente del joven calvo

— Sí, verás para las personas no habría diferencia si soy yo o mi abuelo, sentirían que siguen viviendo en una dictadura, deben escoger a quien los gobierne — asevera Uno intentando ayudar a Chad con Rachel

— Pensé que era un golpe de estado, el que gana toma el control ¿cierto? — murmura la rubia, al parecer recobrando la conciencia

— ¿Quieres gobernar? — le cuestiona el sonriente joven calvo, tensando al resto que miran a la adormilada rubia

Ella se apoya en Chad, mirando levemente al británico — No, quiero descansar ¿sabes? Cuidar un campo fuera de la ciudad — musita agotada

— El viejo campo de fresas estaría bien — le sonríe Nigel

— Espera no puedes solo destrozar el mundo e irte así — exclama el australiano, reclamando molesto

— Exacto — lo apoya Nueve, abrazando a Uno por sobre los hombros —, tú sabes cómo funciona todo, y tirar a la cabeza no siempre hace al cuerpo caer — la emoción del mayor es clara en su voz —, no te preocupes, no estarás solo — ríe avanzando con él a las escaleras

— ¿No iremos en el ascensor? — pregunta Chad aún llevando a la rubia

— Lo siento, el de este piso fue dañado, usemos el abajo ¿bien? — el joven calvo se detiene esperando la respuesta de su compañero

— Ah... pero mi equipo... ¿Estará bien dejarlos aquí? — duda Tres preocupada y mirando a sus desmayados amigos

— Sí, mi escuadrón viene hacia aquí — responde Drilovsky, esperándolos al filo de la escalera —, están más que equipados, no te preocupes — le sonríe despreocupado

— ¿Qué? ¿Tu equipo está bien? — se extraña Wally

— Sí, nuestros científicos son unos genios ¿Cierto Presidente? — insiste Jared, bromeando con sus mayores en rango

— Ok ¿Qué cargo quieres? — responde al fin Uno haciendo reír al soldado y al revolucionario, sobrepasando sus risas se escuchan las fuertes pisadas de un grupo subiendo las escaleras

La resistencia entra en guardia, sin embargo los ex oficiales sonríen viendo al grueso escuadrón de animados soldados que llegan — Señor, estamos tomando los edificios de gobierno — saluda el joven soldado a Uno, al igual que el resto, pero la mayoría suben sin detenerse —, ¿A qué hora dará el anuncio? Las cámaras están listas — insiste demasiado sonriente

El británico luce extrañamente indeciso — ¿Y bien? — lo afirma Nueve

Uno mira a Chad, que atónito procura no sonreír de más — Primero saquen a los heridos, eso es más urgente, oficialmente la familia Uno sigue al mando — ordena al fin el calvito volteando hacia el soldado, que lo ve confundido

— Exacto — ríe Steve corriendo para adelantarse — ¡ Y las reglas serán diferentes ! — recalca bajando primero

El soldado comprende y asintiendo emocionado va arriba — Dejénoslo a nosotros, señor — responde dirigiendo a su grupo

— ¡ Revisare mi puesto ! — informa Steve pasando la mitad de la escalera

— ¡Hey! ¿Eso estará bien? — cuestiona Kuki acercándose al chico de lentes obscuros

— Evitará el caos algunas semanas — responde Unno sin separarse del enmascarado

— ¿Tú qué harás? — le pregunta Nueve a la asiática

— ¿Cómo? — ella duda

— Sí, ya terminamos con Grandfather y Father... así que tú ¿estarás con nosotros o...? — aun si el revolucionario lo cuestiona continúa su camino con el otro

— Yo... creo que los vigilaremos de cerca — sonríe Kuki tras su leve indecisión

Wally asiente mirando a la morena — Para empezar quiero saber qué harás con ella — la incredulidad del chico es obvia y retador mira fijamente al calvito —, no me creo que puedas regresarla a su mundo — recalca casi burlista

— Bueno, si quieres venir hazlo — propone Uno algo indiferente, esperando por Abigail

— Sí, vamos — se anima Tres tomando veloz la mano de la menor —, quiero conocerte un poco más — confiesa amistosamente para la chica, incluso si jala un poco su revoltoso novio no lo suelta, y él se afirma de ella aun si es difícil, en especial estando frente Uno

Abigail asiente guardándose sus inseguridades, entonces ve el nivel de abajo a oscuras, extrañamente todos guardan silencio atentos al británico, él continúa bajando hasta entrar — Vamos — exclama con seriedad mirando el camino al piso 14.

El nivel 15 está más destrozado que cuando pasaron la primera vez, no hay ni un zombi, y considerando la pelea con Grandfather muchos de ellos deben estar arriba, avanzan en silencio hasta que Uno se detiene para voltear y salir corriendo entre los escritorios volteados

— ¿Qué? — pregunta Nueve sin poder retenerlo, y mirando como los remueve

— Hey extraño — sonríe el británico al hombre que apenas mantiene la conciencia entre los escombros

— ¿Cómo? — murmura el adulto medio confuso

— Tu sombra es muy ruidosa — bromea Uno

— No pude dañarla — lamenta Benedicto con tristeza

Y Uno lo ayuda a salir — Lo sé — susurra tomando su mano para que se levante —, gracias — asevera evitando que caiga

Su tío lo mira asombrado, casi incrédulo hasta que nota al resto de chicos con la desmayada rubia — Ya veo — sonríe más tranquilo

— Ven, podrás descansar en el laboratorio — lo invita Nigel, con sincera consideración

Aun así Benedicto niega — Iré a casa — responde acomodando su cabello

— Ah... lo siento, creo que destruí tu apartamento — comenta Uno algo avergonzado exaltando al hombre

— ¡¡ ¿Qué? !! — grita Benedicto buscando su móvil, Chad avanza al siguiente piso mientras Nueve permanece atento a la plática, demasiado interesado

— Veras, pelee con... mi padre... en mi apartamento y seguro el tuyo término dañado, hizo un verdadero escándalo — le sonríe Nigel, no es una sonrisa nerviosa o avergonzada, no, es una clase de inocente satisfacción, como la de un niño que comparte una travesura con su cómplice

La ceja de su tío brinca al fruncir el ceño, mirándolo, aprieta los puños hinchando el pecho para al fin exhalar resignado — Descansaré aquí — musita poniendo en pie un escritorio sentándose

— Ok, pero no tardes — acepta Uno avanzando al siguiente piso

El cansado cuarentón asiente sonriente mirando a los chicos seguir, con especial detenimiento en la delgada adolescente que sigue a su sobrino, Cinco puede sentir su fija mirada en ella así que se detiene, sus miradas se encuentran, es solo unos segundos, pues el mayor se voltea rápidamente evitándola, dejando en ella una desagradable sensación

Para sacarsela corre alcanzando Jen y sobrepasando a Hoagie — Carrera — grita yendo escaleras abajo, esquivando a Kuki y Wally, pasa directamente frente Chad, Nueve e incluso Uno sintiéndose alegre a la vez que agitada

— Te voy a ganar — la reta el enmascarado llevando al británico consigo

Dickson sonríe acelerando, sigue cargando a Rachel por lo que los menores lo adelantan rápidamente, bajando emocionados, aun así él sabe bien que de todos modos Uno los hará esperarlo

Veloz Cinco llega al piso 14, distinguiendo pronto las puertas del ascensor que ahora está custodiado, los soldados la miran extrañados y dispuestos a apuntarle, en especial cuando ven a su General tras ella, nerviosos dudan entre saludarlo o detenerla, ya que "El Revolucionario Nueve" viene detrás, momento en que las puertas se abren ante ella. Abigail corre hacia el vacío cubículo, entrando de golpe metió su brazo para no chocar con la pared, apoyada al muro voltea para ver cuál de los dos chicos gana, pero asustada ve al veinteañero casi chocar con ella, frenando con ambos brazos sobre el muro Nigel evita el impacto — Gane — sonríe agitado, dejándola acorralada frente si

— No, fui yo — sonríe Abigail entre sus brazos, Uno aún se apoya en el muro con un brazo a cada costado de la menor

Agitada pasa su trenza al frente jugando con su ensortijado cabello — No, yo abrí las puertas, sin mi seguirías afuera — murmura Nigel, muy cercano casi inclinándose

— Nadie dijo que la meta fuera entrar — le sonríe Abby alzándose un poco en las puntas de sus pies, mirándolo atenta, sus lentes casi traslucen sus ojos y ella está muy interesada en volver a verlos

Sin embargo, Nueve llega derrapando y estrellándose con Uno se agarra de este para no caer — Segundo lugar — ríe afirmándose de él por sobre sus hombros, colgándose de lado obligándolo a apartarse de la menor para no tirarla

— No, eres tercero — dice Nigel, ambos caen al piso riendo, el enmascarado no suelta al británico de tal manera que termina algo encimado a él

— Si, eres el tercero — sonríe Abigail relajada de oírlos reír

— Consigan un cuarto — se queja Wally llegando antes que Tres, que ríe a su lado abrazándolo cariñosamente al entrar

— Ya tenemos — insinúa el revolucionario señalando dónde están, soltando al fin al otro que sonríe al oírlo, intentando levantarse —, si no te gusta toma las escaleras — agrega más bromista, desatando las carcajadas de la asiática

La cara de Wally no tiene precio es entre shock y bochorno de oírlo, se voltea mirando al británico, que sin un atisbo de vergüenza sonríe acomodando su ropa

— No eres como creía — musita el australiano, asombrado al oír que lo dijo en voz alta

Uno lo observa claramente confundido y Wally no sabe a dónde mirar — ¿Ya se conocían? — se extraña Nueve acostándose en el piso, desinhibido

— Sí — responden Tres y Uno, Wally niega —, lo vio hoy, en la tarde y supongo que se hizo la idea de que es muy serio — ríe la joven

— ¡Es cierto! Ustedes son los roba chicas — bromea el enmascarado en referencia a Cinco y su encuentro

Sonriente Kuki está por aclararlo cuando

— No, de hecho... nos vimos por primera vez en el base de reclutamiento en Sídney, hace 5 años, antes que la destruyeran, el cuarto candidato en la lista, aunque sus calificaciones eran las mejores — explica Uno, pendiente del revoltoso rubio

Y mirándolo bien parece estar en su edad correcta — Si eran las mejores ¿Por qué no me aceptaron? — reclama Wally, enfadado quiere retarlo mas al verse observado le da la espalda reacio

— Obvio, no pasaste una prueba — supone Nueve

— ¡¡ Vete al diablo, yo fui puesto a prueba por ESTÉ !! — Wally señala al británico — Él mismo me hizo el examen y me corrió — insiste menos cohibido

Para la morena casi suena frustrado, como si exigiera una explicación y tal vez es posible que sea así ¿A quién le gustaría ser descartado sin saber porque?

— Lo sé, no servías para mi ejército — asegura Uno, tan calmo como siempre

— ¿Qué? Yo gané todas las pruebas, excepto la tuya y aun así aceptaste al resto ¿Porque no servía? — el australiano se aferra, picado se mantiene al límite del ascensor, Tres los mira cada vez más confundida

El calvito en cambio le sonríe al irritado chico — Eras un opositor y deseabas infiltrarte, fue muy claro, no parabas de mirarme todo el tiempo y querías unirte demasiado, eras muy obvio — asevera convencido

— ¿Qué? ¿Cómo? — musita Wally, liado

— Al final no me equivoque ¿cierto? — le sonríe Uno a Kuki junto a su conflictivo rubio, suena demasiado satisfecho y a Abby le encanta oírlo, pues se siente igual

Kuki abraza por la espalda a su novio, que se voltea avergonzado — Claro que te equivocaste — murmura el ruborizado australiano

— ¡ Por dios ! — grita Jenny viendo al rebelde demasiado cómodo en el piso

Los soldados ríen al verlo, entonces Drilovsky entra bruscamente dispuesto a pisarlo — Compórtate, ahora eres un oficial — le comenta tensando a los soldados

— ¿De qué hablas? — cuestiona el enmascarado levantándose rápidamente —. yo no voy a ser oficial, eso no me interesa, quiero una vida tranquila y simple — asegura dejando entrar al resto

Uno asiente conforme al asomarse afuera para ver si viene Chad

— ¿Qué esperan? vayan y ayuden al General Dickson con la Capitana McKenzie, ¡Por dios! — ordena la apiñonada tan estruendosa que los soldados corren de inmediato, el británico la mira sorprendido y ella le evita la mirada entrando al lado de la morena

Hoagie llega un poco más agotado — Ocho — exhala fatigado sentándose a la orilla de la entrada, evitando que las puertas cierren, esperando por el último

— ¿Tú qué harás Gilligan? — pregunta Jared empujando al rincón a Nueve

— ¿Qué? — duda el robusto castaño

— ¿Qué harás ahora que ya no eres un fugitivo? — insiste Drilovsky

— ¿Qué lo era? — duda el científico — Yo nunca escape, ni era perseguido, sigo viviendo en mi departamento —

Jared no lo puede creer — ¿Qué? ¿Trabajabas para la resistencia y seguías viviendo en la zona élite? — se sorprende o reclama

— De hecho esos informes nunca llegaron a Father — responde Uno sonriendo al ver llegar a Chad, increíblemente el chico aún carga a la rubia

— ¿Ninguno? — se exalta el pelinegro — ¡Tardamos horas escribiendo cada maldito reporte!

— Por supuesto... lo sé, yo los leía diario, nosotros aún necesitábamos esa información, pero de nada nos servía informarles de la resistencia, Hoagie o las fiestas clandestinas — Uno pretende explicar, ofreciéndo su ayuda a Chad con su carga, y este se rehúsa

— Espera ¿Qué? ¿Sabías de nuestra bases desde el principio? — Tres es instantánea al preguntar

— ¿Tienes infiltrados? — Wally luce más asombrado que molesto, pronto ambos miran a Jennifer

La chica de corto cabello negro asiente apenada y algo culpable — La verdad yo también tengo varios de los míos en su equipo, y para ser sinceros no fue muy inteligente ocultarse en las viejas bases del KND, en especial cuando su ex líder supremo trabajaba para Grandfather — suelta Nueve, no es burlista o prepotente, igual para los chicos tampoco es muy amable al decirlo

— Zero conocía cada base, él las encontró y creo ¿Saben? aun si su personalidad KND fue borrada él aún conocía esas cosas, tienen suerte que a ninguno de los dos les importaba como para ocultarlas o vigilar que pasaba en su base de datos — explica Uno cerrando las puertas del ascensor

La pareja queda pensativa, extrañados o analíticos, sin tomárselo a mal — Nigel encontró todo cuando aún era niño, conoce las bases tan bien como si hubiera vivido en ellas — comenta Nueve con cierto orgullo

— De hecho pasamos muchos días en ellas de niños — sonríe Chad, casi presumiendo

Es difícil saber si el enmascarado está sorprendido o algo así, pero para Abigail ese inmediato silencio parece delatarlo — Bien, ya lo decidí — asegura enérgica, intrigando a los demás —, no voy a volver.

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