El "nivel cero" resultó ser más un túnel, que amplio e iluminado se parecía a cualquiera de los pasillos de mantenimiento de las escuelas u hospitales donde Abigail había estado, ella miró al grupo, viniendo con Hoagie y Jenny eran los penúltimos, junto con Nueve que los alcanza dejando a Rachel al final

Todos lo notan aunque nadie se detiene, ni siquiera Chad, que tan apresurado como Uno va varios metros al frente

— Si no tiene carga ¿Por qué la sigues llevando? — pregunta Nueve a Jennifer, solo entonces Cinco cae en cuenta mas es su propia carencia de armas lo que le preocupa, su "equipo" se quedó en su mochila y no tiene caso buscar algo en los bolsillos de esta ropa pues no es suya

— Sirve para bloquear al enemigo — demuestra la apiñonada de difusas pecas, con una tranquilidad y confianza que sorprenden a la menor

— Ah, claro — ríe el enmascarado, y es un sonido es reconfortante para Cinco, aun cuando no es el mismo chico de su mundo le tranquiliza oírlo, en especial por lo que le dijo a la rubia hace un par de minutos —, es raro que tú estés aquí ¿Viniste a ayudar?— él cambia su atención rápidamente al robusto castaño

Que incómodo intenta apresurar su paso — ¿Sigo yo? ¿A qué vienen estos interrogatorios? ¿Estás tratando de separarnos? — cuestiona Hoagie con desagrado, sin mirarlo

— ¿Eh? Entonces ¿Si te consideras parte del equipo? — bromea Nueve, sorprendiendo al chico

— Solo vengo para proteger a Abby — responde toscamente Hoagie, volteándose, su mirada se encuentra con la morena

Cinco le sonríe levemente, sabe que ahora mismo el chico también está desarmado y por lo visto no es bueno en combate, y aun así insiste en tratar de protegerla, eso la anima, pero no es que vaya a depender de él, ya que ella es muy buena en combate cuerpo a cuerpo, estrategia y agilidad así que se enfoca en eso, con esa seguridad le sonríe a Hoagie, que relajado ante esa reacción acelera el paso junto las chicas

El revolucionario mantiene su ritmo y atención en los tres

— ¡A un lado! — repentinamente grita Rachel, pasando entre ellos, rompiendo un poco su formación al ir con Uno y Chad

Nueve también acelera, la razón queda clara al ver las escaleras a la salida, el grupo para frente estas y Cinco observa a los mayores, esperando el plan intrigada, Jenny solo mira arriba, donde está la compuerta

— Alguien cerró las puertas por fuera — Uno revisa los datos desde su celular, los identificadores de los chicos brillan excepto el de Hoagie, que irritado bufa enfadado —, escuchen — pide —, Chad y Nueve al frente, los chicos al medio, Rachel y yo al final ¿entendido? tienen trece segundos.

La orden es concisa y los militares se alistan veloces sin dar oportunidad a la morena o al científico de negarse, Rachel va atrás con el británico en lo que los mayores llegan al frente

— ¿Listos? — pregunta Dickson al salir corriendo en cuanto se abre la compuerta

Jenny toma la mano de Cinco, que a su vez toma a Hoagie intentando pasar lo más cerca de los primeros, evitando obstaculizar a los últimos, sin embargo la compuerta se corre tajante, Rachel empuja al robusto castaño para poder salir, hasta que Uno la carga sacándola antes que se selle la entrada

— Maldito gordo — grita la rubia antes que el joven calvo la baje cubriendo su boca, ella lo mira disgustada entonces nota lo oscuro que está todo

El cuarto parece vacío así que avanzan cuidadosos de mantener ese escalofriante silencio. Nueve señala el camino yendo al frente del grupo, a Cinco esa cocina le parece idéntica a la del otro edificio, por otro lado no hay señas de que los rebeldes hayan pasado por ahí, Chad avanza frente ellos, cauteloso, Uno va a las mesas mirando por encima como si buscara a alguien

el enmascarado llega a la puerta de entrada y de inmediato la revisa junto con su alrededor— Está abierta — susurra apenas audible al salir

Desde atrás Rachel se acerca a Cinco y Uno la detiene, señalándole que permanezca tras él, mientras envía a Dickson al final de la fila, por ahora los únicos con armas funcionales son Nueve, él y Uno por lo que el rubio acepta, aun si tiene que cuidar del molesto castaño

Avergonzado Hoagie observa a Jenny intentar cuidar a Abby y protegerlo a la vez, incluso cuando es el culpable de inutilizar su arma, acomoda sus gafas replegándose a su lado sorprendiéndola, en esa leve iluminación apenas si distingue sus ojos aunque él siempre le ha evitado la mirada, como al resto de las personas que considera molestas o irritantes, quiere disculparse, en serio quiere pero inseguro de cómo hacerlo duda hasta que ella levanta la mano frente a él callándolo, sin mirarlo

La apiñonada está atenta al frente y él busca que vigila encontrándose a Nueve señalando algo en el piso, ellos siguen tras la puerta por lo que aun cuando se asoma sobre el refilón de esta sólo puede ver la punta de una bota, salen rápido y con la mayor cautela posible, parando impactados al ver a varios rebeldes y soldados derrotados en el piso

— Cuídala — Uno empuja a Abigail contra Chad, corriendo al principio del corredor

Cinco se rehúsa y sigue al terco calvo — Espera — el rubio intenta detenerla, yendo tras ella

Hoagie está por ir cuando Jenny le avienta un arma de los caídos, a la vez que toma otra para correr al frente, el castaño no noto cuando se agacho a verlas, sin embargo ahora esa no es su duda — ¿Están muertos? — temeroso afirma el arma corriendo a su lado

— No, aún no, pero están muy sombríos ¿No sé si me entiendes?

La respuesta de la chica lo desconcierta, mas no llega a sobre-analizarlo cuando los tiros suenan desde la entrada, alarmándolos, Rachel empuja al robusto chico para pasar rápidamente, incluso con lo difícil que es evitar a los soldados en el suelo

— No — grita Chad en cuanto los ve, señalando que esperen

Jenny avanza sin importarle, pasa frente Rachel, que apoyada al muro parece ocultarse, todo está oscuro mas los fuertes sonidos de pelea son reconocibles, tres fuertes azotes se escuchan y por cómo sonaron fueron personas, soldados, la pecosa apenas distingue sus manos por la luz del arma, no obstante logra oír los pasos de varios Ciudadanos moverse por la recepción de la torre principal, notoriamente confundidos, Chad retiene a la menor ocultándola entre él y el muro mientras pone su iluminada arma a su espalda, con un temple que asombra a la desertora

Por su lado Cinco logra percibir un poco de la pelea, Uno toma a un soldado por el cuello llevándolo bruscamente contra otro, lanzándolo sobre él, por los movimientos del enemigo es claro que ellos pueden ver y es el británico quien parece pelear algo desorientado, un soldado le apunta a la nuca y casi como instinto el chico calvo se gira tomando el arma antes que el hombre jale el gatillo, usando el fusil como guía patea en el estómago al soldado, sujeta su solapa para lanzarlo al frente donde el tipo se estrella contra otro noqueando a ambos, volteando con el arma en las manos Uno engancha a la de un enemigo barriéndole veloz para patearle en el rostro con todo y casco, lanza ambas armas por el piso distrayendo a los otros mientras corre al ascensor

Las puertas se abren y los soldados voltean apuntando, pero ya es tarde Uno ha saltado sobre ellos llegando frente las puertas principales noqueando al guardia líder para apuntarles con su arma, la de Uno, e impactarles un contundente tiro a cada uno, los enemigos caen y las luces del ascensor se encienden, él apunta expectante pues hace unos segundos estaban apagadas — Lo siento ¿los asuste? — suena la dulce y juvenil voz de Tres por el altavoz del aparato —, vamos, suban rápido, estamos en el quinto piso — agrega algo apresurada

— Es la base de la fuerza de defensa ¿cierto? — pregunta Rachel al joven calvo, que revisa su móvil

— Que importa, todos están ahí — comenta Jenny pidiéndole a la morena que entre

— ¿El ascensor, en serio? ¿Qué asegura que es Sanban? — cuestiona Nueve viniendo del pasillo con varias armas al hombro

— No importa, este lugar no tiene escaleras, la única forma de subir es por este ascensor o el de atrás — explica Uno

— Rápido, tengo el sistema pinchado, pero no es estable — insiste la asiática

— Vayamos por atrás, solos — propone Rachel, desinteresada de la molestia que causa en los demás

— Tardaremos más, la mejor opción es esta — señala el británico yendo primero

Cinco le sigue hasta que Nueve la intercepta, para darle un arma, asombrada lo mira aunque él avanza sin decirle nada — Si hay un montacargas atrás deberíamos asegurarlo ¿no? — el enmascarado consulta a su calvo líder —, puedo ir con "Blondie" — propone aunque su tono entre broma y burla llama la atención del grupo

— Es inaccesible desde este lado — musita Uno organizando al grupo, sigue respirando acelerado

Y Cinco puede sentir el leve aroma a sangre, muy tenue y que parece provenir de él — ¿Te dispararon? — le pregunta al llegar a su lado, checándolo con la mirada, Jenny voltea a verlo preocupada mas al notarse observada rectifica rápidamente, vigilando al frente

— No, ellos no — sonríe el británico mirando adelante

La morena recuerda esta tarde y no sabe qué contestar "¿Siempre fue así de insegura?" se cuestiona tomando valor — Aunque estuvieras roto te seguirías haciendo el héroe ¿no? — sarna Hoagie, entrando de último ante el joven calvo

— Hey, eso es mucho — Cinco le reclama ofendida

Hoagie desvía la vista de la dura mirada de la menor, aunque las puertas se cierran justo tras él — No voy a disculparme — murmura viendo a otro lado, encontrándose con Jenny, que entre él y Cinco sonríe casi divertida, dejándolo asombrado

— Y no tienes porqué, es verdad — sonríe el joven de lentes obscuros avanzando

La morena y el castaño lo miran extrañados, en especial el científico que queda justo frente él — Serás blanco fácil ahí — ríe Nueve atento al rostro del robusto chico, que al notarse frente la entrada se repliega cerca Jen

— Al salir Chad y Rachel a los lados, Nueve a Cinco, Jen y Dos atrás — ordena el joven calvo

— No me llames "Dos" — reclama Hoagie irritado

Jen lo detiene tomándole el hombro — Ya estoy mejor, iré al frente — asegura

— Yo también, mi brazo no duele tanto — exclama Cinco, efusiva, y no miente su herida duele cada vez menos

Sin embargo — Está lleno de ellos — susurra el británico antes de que las puertas se abran

Tras ellas una multitud de soldados los esperan, apuntándoles — Diablos — Hoagie retrocede, y los rubios salen veloces, con su impetuoso líder al frente

Uno avanza disparando salvajemente de tal manera que tumba a las primeras líneas en un parpadeo, brincando sobre ellos y golpeando a otros con el dorso de su arma antes de caer entre la tropa, Chad se agacha disparando a los soldados que se agolpan del lado derecho impidiendo no solo que disparen, también cubre a los chicos en el ascensor

Rachel en cambio se mantiene al margen en lo que el joven calvo destroza la formación del enemigo — ¿No harás nada? — cuestiona Jenny saliendo con los demás

— No, él lo maneja bien — responde la rubia apenas mirándolos, la apiñonada pasa de ella impactando a cualquier soldado a su alcance, Cinco corre esquivando a su escolta sin llegar muy lejos pues la primera puerta tras Chad se abre y ella apunta

Nueve dispara al enemigo al frente, cubriéndola incluso si pocos quedan en pie, Uno patea a la vez que esquiva, impacta uno tras otro a los soldados, y arrancándoles los cascos a un par avanza usando uno a cada mano para estrellarlos contra los otros

Ante Cinco está un adolescente nervioso e inmóvil, encañonado por la morena, en su brazo un listón de colores se anuda como moño — Es aliado — le llama Jenny dejando al resto de enemigos para los otros corriendo a ella

— Sí — musita el temeroso chico, sin haber logrado alistar su arma, Cinco solo retrocede sin dejar de apuntarle

— No le dispares — grita Tres, su voz viene desde el enorme escritorio pegado al muro

Al fondo del cuarto y justo frente el ascensor el enorme mueble era rodeado por los soldados, los múltiples impactos de disparos parecen no haberlo atravesado, ya que además de amplio también es muy grueso, siendo un excelente escudo. Uno suelta a un desmayado soldado viendo a la asiática salir de su escondite, este nivel parece alguna clase de recepción o algo así, pues ese escritorio es lo único en ese espacioso piso, a los lados hay algunas puertas blancas que la menor asume irán a otros cuartos

Wally también sale de su temporal trinchera con el resto de la resistencia o mejor dicho los que quedan, seis o siete chicos que los miran asombrados — Wow — suelta el incrédulo rubio impactado ante los derrotados soldados, cambiando a su arisca actitud reconociendo al calvito — ¿Fuiste tú? — pregunta brusco y Uno solo alza la ceja intrigado

— Se tomaron su tiempo ¿cierto? — bromea Tres sonriendo al ir a ellos, el revoltoso rubio la sigue y Cinco también va evitando a los caídos

— Creo que llegamos a tiempo — sonríe Nueve relajando su actitud al darle una ojeada a los menores

— Justo estábamos por ganar — reclama el australiano, al chico de lentes obscuros

— ¿Cómo entraste al sistema? — pregunta Uno a la asiática, demasiado serio y claramente pasando del revoltoso rubio, Nueve ríe despreocupado mientras va a ellos, aligerando el ambiente para el resto

— Fue fácil — Tres casi presume, su equipo se reúne cerca ella confiados y seguros — Pero el ascensor solo nos trajo aquí, puede bajar, pero no sube más — explica rápidamente esperando que Jenny, Cinco y Hoagie se junten a su grupo

— Las cámaras ¿tú las estás controlando? — cuestiona Nueve sin perder de vista a la morena, Cinco lo sabe y se aproxima tras él, cerca Uno

— Sí, hasta el piso 14, desde ahí están en negro, no creo que estén conectadas — suelta Tres notando la corta tensión del británico

— ¿Solo ellos quedan de tu equipo? — insiste el revolucionario, a la vez Chad abre cada puerta revisando bien los cuartos

A diferencia de Rachel que mira amenazante a los reclutas de Sanban — No queda ninguno de Nueve ¿Cierto?¿Todos cayeron en el primer piso? — es intrigante

— También hemos dejado heridos abajo — Tres es cortante —, los rebeldes fueron primero, abriéndonos paso — aclara para el enmascarado

Y este mira a Uno — ¿Dejaron heridos? ¿Abajo? ¿Eran tus soldados los de abajo? — duda casi nervioso, Cinco lo siente así

— ¿Qué? ah, no — por el contrario Tres capta en seguida —. los tipos en la entrada si eran soldados de Grandfather ¿Por qué crees que envié el ascensor? Mi equipo está en el piso tres, la enfermería — aclara rápidamente

— Este edificio no tiene enfermería — musita Nueve

— ¿Qué? No, aquí está, lo dicen los planos — la pelinegra les muestra el mapa en su teléfono —, vez, dice enfermería — asegura

— Esos no son nuestros planos — indica Uno, Chad vuelve de inmediato y Cinco afirma su arma

— Es una trampa — grita Wally corriendo al ascensor

El británico logra atraparlo del brazo, deteniendo al revoltoso rubio y este se gira apuntándole — Es una trampa desde que entramos — asevera Uno con firmeza y calma antes de soltarlo, el australiano se aparta rápidamente sin bajar el arma, mirándolo confundido, no parece molesto o agresivo es más como una clase de nerviosismo o sorpresa —, hagamos esto, subiremos al piso 16, ustedes irán al ascensor trasero, saldrán por las tropas rebeldes de los primeros edificios, mantengan una formación cerrada.

Es conciso y puede que certero, aun así Cinco niega — Será mejor si solo un pequeño grupo sale, nos comunicaremos con el resto, entre más mejor ¿cierto? — propone sonriente

Uno en cambio va al ascensor abriendo sus puertas, desinteresado de su propuesta

— Mi equipo está entrenado para enfrentarlo, estos chicos son solo novatos, aunque sean más solo estorbaran — explica Nueve, al lado de Cinco

— ¿Es en serio? nos dejarán fuera ¿ahora? No, nunca — Tres va a ellos, junto su grupo — El plan sigue en pie y no seremos solo recaderos.

— Nada confirma que las comunicaciones están saliendo, necesitamos a alguien afuera — dice al fin el británico

Jenny mira sutilmente a Hoagie que se molesta al notarlo

— Bien, de acuerdo, mandaré a un par, pero yo vine expresamente a enfrentarlo — insiste Tres encarando a Uno decidida, fortaleciendo la confianza de su equipo

— Oh, cuánto valor — se mofa Rachel —, no jodas, esto no es solo jugar a las escondidas, ve por tu guardería y lárguense — agrega irritada

— Y una mierda, no seguimos órdenes — reclama Wally, apuntándole a la rubia —, además ¿son idiotas? Kuki ya les dijo que esa cosa no sirve, imbéciles — se burla mirándola irritarse

— Escúchame idiota, a mí no me importa si te lanzan del veinteavo piso solo no te quiero estorbándome sabandija — Mckenzie lo amenaza exaltada —, si esa maldita cosa nos atrapa será su culpa — grita entrando al ascensor

— ¿Qué cosa? ¿Qué pasa? — se interesa Tres, confundida

— Grandfather, está moviendo su sombra por ahí — responde Nueve a su lado

— ¿Su sombra? Es absurdo — se burla un chico de la resistencia

— ¿Cómo? ¡¡¿Qué mierdas puedes saber tú?!! — la furiosa rubia hace al adolescente retroceder amedrentado

— Espera ¿Qué? ¿Eso los atacó? ¿Dónde? — más intrigada Tres pasa de sus discusiones, Cuatro la mira y al ver su seriedad parece considerarlo

— Abajo en la torre tres, se llevó todo un escuadrón ¿verdad Rachel? — explica y cuestiona Nueve —, solo ella escapó — remata, y con esa careta protectora su rostro es un misterio

Sin responder la rubia permanece en la esquina del elevador, con los brazos cruzados

— ¿Eso es todo? ¿Solo porque ella lo dice nosotros debemos creerles? — Cuatro retoma su incredulidad y sonriente mira a Tres, que seria centra su atención en el inexpresivo joven calvo

— Estoy seguro que está aquí — confirma Uno, tan confiado que incluso luce engreído —, ¿Ustedes cerraron la entrada? — pone en duda a los jóvenes, ya que es obvio que él conoce la respuesta

— No ¿Cómo podríamos? — refuta el revoltoso rubio, irritado con su actitud, el mayor sonríe ante su respuesta sorprendiendo y confundiéndolo de nuevo

— Pudo haberlo hecho cualquier otro soldado — se queja Hoagie aún afuera del ascensor

— Ni siquiera los comandantes o generales saben de esos pasadizos, él no les daría la oportunidad de huir, además puedo sentirlo... sigue aquí — responde el británico muy serio, entrando en el cubículo

— ¿De verdad lo crees? He vigilado todas las cámaras, también las grabaciones de los minutos antes de que llegáramos, pero no lo he visto, pudo haber salido antes o puede que ni siquiera esté en el edificio ¿Para qué hacer sistemas de escape si no los vas a usar? — Tres no luce nerviosa o asustada al decirlo, es más como si sobre analizará la posibilidad

— Él sigue aquí — Uno no dice más, atento a la pantalla de su móvil, escribiendo imparable

— Vamos, "puedo sentirlo" ¿Es eso una prueba? Creo que deberíamos ir solos, afuera hay ventanales ¿no? — Cuatro lo dice tan decidido que su equipo duda, intranquilos

— No lo entiendes, no puede salir del edificio, ni subir más allá del piso 16 — sonríe el chico de lentes obscuros

— ¿Qué? ¿Qué mierda es esa? La torre tiene 50 pisos y no se va del 16 ¿Eres idiota? ¿Quién te va a creer eso? — grita Wally exaltado y harto de la soberbia del otro, que explica todo sin siquiera mirarlos, más interesado en el techo del ascensor

— Ahí es donde está la fuente — suelta con desagrado Hoagie, sorprendiendo a los chicos

— ¿Tú sabías eso? — reclama Tres

— ¿Por qué no nos lo dijiste antes? — gruñe Wally

— No lo entiendo, la fuente estaba en el sótano de la escuela, no incluso más abajo — Cinco intenta recordar cuántos pisos bajaron aquella vez

— ¿Eh? ¿Por qué en el 16 y no en otro piso más arriba? ¿Qué diablos hay en los demás pisos? — el australiano insiste en cuestionar al absorto británico

Pero — Es la máxima altura antes que el agua pierda sus propiedades — termina respondiendo el robusto castaño

— ¿Eh? — duda el revoltoso rubio

— Después de ese piso solo es agua común, el resto son laboratorios — aclara el británico, sin mirarlo

— ¡Hey! Sí lo entendí ¿sabes? ¿Laboratorios? ¿No es tu torre la de los laboratorios? — el australiano es todo gritos y preguntas

— Si y no, es... complejo — dice Uno demasiado concentrado en su celular, repentinamente se abre la compuerta de mantenimiento del ascensor, asustándolos por su insonoro movimiento —, Voilá — sonríe, acercándose para mirar arriba —, luce despejado — les anuncia casi emocionado

Aunque los presentes lo miran extrañados — Espera ¿Quieres que?... ¿Quieres que subamos por los cables internos? — pregunta Hoagie, incrédulo

— Sí, es más rápido y directo, no lo sabrá, desconecte las cámaras, micrófonos y sensores del elevador, en los túneles no hay así que si no hacemos ruido llegaremos en total sorpresa — el entusiasmo de Uno se cuela en su voz, intenso y sonriente luce demasiado interesado en llegar furtivamente, riendo Nueve entra al elevador, claramente dando un vistazo al pasadizo

— Si ya está desconectada la seguridad ¿Por qué no solo vamos dentro? — cuestiona Cinco al entrar, mucho más sensata que el dúo

El británico parece desconcertado — Bueno... claro que podrías, pero esto es más... sorpresivo — intenta explicarles

Tres sonríe entrando en el elevador y empujándolo dentro — El 16 ¿verdad? — pregunta y aunque el chico calvo sigue liado asiente —, hagamos ruido — le sonríe ella a Wally, el australiano sonríe emocionado junto con el grupo de adolescentes (su equipo).