Es la noche,Jesse ha regresado después de haber estado por ahí ¿donde? eso no importa ya.

Es la primera vez en todo el día que su madre logra verlo;lo regaña al verlo llegar.

Lo llamo miles de veces,el nunca contesto.

Le dice que estaba preocupada,el esta cansado de oír que se preocupan.

El le grita que no le cree,e intercambian frases hirientes,insultos...

Laurinne tapa sus oídos y cierra sus ojos.

"Si quisieras podrías cambiar!"

"Ni siquiera soy yo!"

Entra como tromba en el baño y toma el primer frasco,va a su habitación,y toma otro frasco mas.

No,no son las pastillas las que lo hacen así...

No,no fue Dolores la que lo hizo así...

No,no fue perder a su padre lo que lo hizo así...

No,el no lo quiere creer,no lo va a creer.

Ya no quiere escuchar mas,solo quiere alejarse...

Pero sigue oyendo los gritos de su madre y las suplicas de su hermana mientras corre escapándose de aquel lugar.

Las llamas otra vez,las voces que se entremezclan en su mente...

Su juventud se desvanece cuando cae al piso en su corrida.

No siente sus pies,no siente su cuerpo...

YA NO SIENTE NADA.

Laurinne se acerca ¿hay lagrimas en sus ojos? Oh,pero ella no debería llorar,no por el...

Su madre grita preocupada,los vecinos están empezando a asomarse...

Las llamas lo consumieron,sus pensamientos lo ahogaron...

"R.I.P A Mi Juventud"