Lee Alex➬ 01/08/2019

ㅡEspera, espera ㅡordené alterada, me senté de un respingo en mi cama e intente ajustar mi oído lo mejor que pude al celularㅡ ¿Dónde rayos estás, Yoora? ㅡmi corazón bombeando rápido y la música ensordeciendo mi calma me hicieron tomar una gran bocanada de aire.

Sus palabras llegaron fuertes y divertidas; pero eso solo empeoraba las cosas:

ㅡEn la fiesta de Rosuk ㅡlas exagerada risitas alcoholizadas que soltaba lograban clavarme un puñal en el estómago que no me dejaba levantarmeㅡ Necesito que nos recojas ㅡvolvió a alzar las voz, volví a sentir el puñal.

ㅡ¿Con quiénes estás? ㅡmis palabras fueron rápidas y el tono se encontraba entre furioso y preocupado, tome la fuerza necesaria para levantarme y empezar a buscar una sudadera y zapatillas.

ㅡHm, soy yo... ㅡla espera en su voz fue suficiente para que ya llevara puesta la sudadera que había sacado de la ropa suciaㅡ Remi, Hasuk, ¡Oh, ahí está Taehyung!; pero Jungkook... ㅡsoltó una risita torpeㅡ Jungkook está a mi lado.

ㅡNo te separes de ellos, estoy en camino ㅡme calzo las zapatillas aún si amarrarlas por completo y me dedico a seguir hablandoㅡ ¿También están ebrios? ㅡes lo único que pregunto cuando voy a salir de mi habitación.

ㅡ¿De qué hablas? Yo no estoy tomada ㅡy las risitas exageradas vuelven a relucir en la conversación.

Yo solo niego con la cabeza para cuando cuelgo la llamada y siento como los puñales se reparten por todo mi cuerpo.

Alex, tienes que solucionar ésto.

Cuando salgo de casa no me molesto en dar muchas explicaciones, "Voy a dar unas vueltas al parque" es lo único que digo para que me crean, después de todo mi apariencia indica de que en efecto, estoy preparada para eso. Llevo un pantalón de chándal,  sudadera y zapatillas deportivas, mi cabello está atado en una coleta floja y mi rostro esta completamente a lo natural.

Parezco lista para un maratón; pero no saben que me voy a la guerra.

Son las 7 p.m y me sorprende que este jueves por la noche Yoora se pensara que una fiesta era lo mejor para perder el tiempo, no, pensándolo bien, no me sorprende que en esa cabeza suya tan liberal haya decidido de que asistir a una fiesta organizada por el más escandalozo anfitrión de todo el vecindario fuera lo esencial.

Y pensándolo mejor, no me sorprendía ninguna parte de la situación, solo me asustaba y preocupaba que unos muchachos de 17 años hubieran decidido beber hasta la estupidez y que la policía se aventurara a intervenir en la fiesta.

Solo me asustaba que los atraparan antes de que llegara.

Oh Rosuk, el anfitrión, gritaba "Vamos a morir de un coma etílico" por cada poro de su descuidado rostro, aquello solo era un punto más para estrujar mi indescutible pavor.

La casa en la que se daba la fiesta era la más grande de nuestro vecindario, la más llamativa y problemática, quedaba a unas cuadras de mi casa y eso solo asustaba un poco más a mi cordura.

Tía Yoorin y mi madre me matarían si supieran que había decidido venir sola a recoger a adolescentes ebrios.

No, en efecto, me matarán si saben que les he mentido. Pero ya tengo las cosas pensadas. Ya sé lo que voy a hacer.

La casa retumba por la fuerte música y en el patio delantero  hay más vasos descartables tirados que gente durmiendo sobre el cesped, en el interior gobiernan las personas que aún no se desmayan (aunque muy pronto lo harán); pero ni siquiera me atrevo a cruzar todo el patio cuando los veo.

Los cinco están en la entrada, con las miradas vivaces; pero asustadas. Me recuerdo que solo son muchachos y que no les puedo simplemente gritar.

Pero también me recuerdo que las cosas no se quedarán así.

Me ven y parecen que han encontrado su salvación; mas sus pasos lentos y torpes logran que un nudo se forme en mi garganta.

Solo soy un año mayor; pero juro que si alguno de ellos era mi hijo me pondría a llorar sin algo que me calmara.

Estoy decepcionada. De ellos y de mí.

ㅡAxel... ㅡYoora parece lo suficiente sobria como para saber que lo que está sucediendo es malo y yo estoy lo suficiente perturbada como para dejar pasar todo.

ㅡLos dejaré en su casa ㅡes mi respuesta, firme e inalterable, es mi decisión.

No me preocupo por sus rostros alterados, no me preocupo por si piensan que están perdidos. Yo ya tomé mi decisión, y esa es que sus padres la tomen.

ㅡPero... ㅡintenta hablar Hasusk, quien rápidamente es callada por Remi.

El silencio se establece cuando empiezo a darle una mirada de chequeo a cada uno, por si hay algo raro o si están lastimados, al final solo me encuentro con cuatro pares de ojos brillando por el alcohol; sin embargo, uno de ellos logra confundirme tanto que soy capaz de escrutarlo con la mirada sin disimulo.

ㅡ¿Tú estás...? ㅡpregunto vacilante.

ㅡNo ㅡresponde neutro. Tiene las manos escondidas en su chaqueta negra y los pies tan firmes en el suelo que logra con solo eso que le crea.

ㅡEntonces supongo que me puedes decir qué es lo que ha sucedido ㅡcomento sin dejar que mi estado sea alterado. Él me mira analizante y parece que está pensando en algo.

No sonríe cuando vuelve a hablar, a partir de ello me destruyo:

ㅡUn trato ㅡpropone. Su mirada se pasea de sus amigos a mí, está pensando que decir. Sigueㅡ: Te lo digo y no nos acusas ㅡdicta más serio de lo común. Todo nos quedamos pasmados ante sus palabras.

Pero yo siente algo más.

Él no me está proponiendo algo, él me está retando. Y me siento intimidada.

Tanto que balbuceo antes de hablar, porque las cosas nunca se me habían complicado tanto como ahora; pero eso no me deja sin palabras:

ㅡPúdrete ㅡsiseo. Con las emociones tan alteradas y los nervios muy estimulados.

No digo nada más cuando comienzo a avanzar, con los pasos malhumorados y el ceño fruncido.

Nunca nadie me había hablado de una forma tan hostil. Se habían burlado y jactado de mí; pero nunca había escuchado un tono tan oscuro y repulsivo como el de aquel muchacho.

En ese momento lo supe.

Jeon Jungkook no solo era sonrisas de compromiso y vagas respuestas, también era un tonto con carácter de mierda.

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Los pensamientos nacen de una mente dolida y sensible que puede llegar a sensibilizarse por todo.

Alex no se encuentra en el mejor momento de su vida y las situaciones la logran alterar como a cualquier persona en la vida real.

Esa es la forma en la que desarrollo a mis personas, es la forma en la que me gusta expresarme.

Gracias por su atención 💜