Llegué corriendo a la habitación del hospital, aún así tuve cuidado de no maltratar las flores.

Mi familia se encuentra fuera de la habitación, aún no he llegado tarde.

-Llegaste justo a tiempo-Mi hermana se levantó de su asiento, me sacudió la ropa y tomó las flores
-Sigue en labor de parto?
-Sí, la doctora dice que ya está a nada de nacer, así que, ahora a cambiarse-me empujó hasta la sala donde me comentaron que dejarían la ropa idónea para recibir a mi bebé

Salí y me quedé sentado con Angela mientras esperábamos que me llamaran.

-Conozco esa mirada, no tengas miedo-mi hermana menor me tomó la mano
-Crees que podré criar a un bebé?-apreté su mano, necesitaba su apoyo
-Sé que eres capaz de eso, estos meses no has hecho más que demostrar lo feliz que estás por la llegada de mi sobrino o sobrina, has trabajado muchísimo para que todo estuviera bien y es momento de que veas los frutos de ese esfuerzo-me obligó a mirarla a los ojos, le sonreí por lo bien que sus palabras me hicieron sentir
-Gracias, Angie-la abracé

Un enfermero salió de la habitación, nos separamos al notar su presencia.

-Está aquí el padre?
-Soy yo-Ahora sí sentía el corazón latir demasiado rápido
-Acompáñeme, por favor-lo seguí, antes de entrar al cuarto me giré hacia Angie, levantó los pulgares, sonreí al ponerme el cubre bocas y con un suspiro cerré la puerta

El parto había salido bien, sin ningún inconveniente, el bebé resultó ser una hermosa y grande niña, después de mostrársela a Beatrice me la pasaron a mí, era más hermosa de lo que jamás pensé.

-Hola pequeña, yo soy tu papá, te amaré hasta que mi corazón deje de latir y haré lo posible para que jamás te falte algo-deposité un beso en su cabecita, por su parte la bebé tomó mi dedo con su manita

Los enfermeros se la llevaron a limpiar y hacer los respectivos estudios, yo salí para entregar el ramo que había comprado.

Cuando al fin entro, ella está recostada en la cama, notoriamente cansada pero ya no tenía la cara de irritación que meses antes se cargaba.

Habíamos llegado a un acuerdo, tendríamos a la bebé, yo pagaría todos los gastos antes, durante y después del embarazo; si no hubiera sido por todos los proyectos que hice y el apoyo de Rick, probablemente me hubiera rendido rápidamente.

Miré a Beatrice, sentí una punzada en el corazón al notar que me había fallado a mí mismo (y ahora a mi bebé) por no poder encontrar a alguien que me amara, mi hija crecería sin su madre biológica y yo tendría que trabajar aún más duro para que nunca sintiera ese vacío.

Dejé el ramo de lilas, volví a mi realidad y le sonreí a la madre de mi hija cuando me senté de nuevo en la silla a su lado.

-Qué es eso?-preguntó de forma no muy amable
-Gracias por las flores Jason, no debiste molestarte -imité su voz-, son lilas, unas flores que me parecieron muy bonitas. Sabías que el nombre Lila significa hermosa como una flor en árabe?
-Enserio?
-Sí, o al menos eso me dijo el vendedor, me gustó ese significado además de las flores, mi hija se llamará así

Pero no contestó pues una enfermera llegó con un pequeño bulto rosa, jamás había sonreído tanto en mi vida como cuando la pusieron en mis brazos, ya bañadita y con sus ojos abiertos.

Era parecida a mí, tenía rasgos característicos de los Anderson pero podía notar mi esencia en ella. Volvió a tomar mi dedo, solté una lágrima como consecuencia de eso, estaba más que extasiado por la alegría de ver a mi hija.

-Hola, bebé-froté mi nariz con la suya

Soltó un sonido, no sabría como interpretarlo pero quedé fascinado. Todo parecía tan fantasioso, tenía en mis brazos a aquella hermosa criatura a la que podría criar para ser un mejor ser humano y que mejorara el mundo.

-Te amo, mi pequeña Lila-deposité un beso en su frente, la bebé apretó sus manitas
-Eres muy cursi-soltó la mujer que estaba en la habitación
-Y tú demasiado adorable-respondí usando mi distinguido sarcasmo, la magia entre nosotros se agotó hace algunos meses

Llamaron a la puerta, dimos la orden de que la persona entrara, muchos conocidos míos (ya que Beatrice se había rehusado a que alguno de sus conocidos se enterara de su embarazo) ocupaban la sala de espera y estaban más que emocionados por pasar a conocer a mi hija.

-La familia se ha agrandado!-Gritó mi hermana al entrar, su novio la acompañaba, cargaba una bolsa de regalo y un globo
-Así que ahora tenemos a una nueva chica Anderson en la familia!-Arturo, la pareja de mi hermana, me apretó el hombro en un gesto de alegría
-Le trajimos un regalo a mi nueva sobrina...-Ángela dejó las palabras al aire
-Lila, se llama Lila-miré a mi hija, en qué momento se durmió?
-Como las flores, suena muy bonito-contestó Arturo
-Felicidades... -sé que mi hermana estaba por decir "a ambos", pero miró a Beatrice con su cara de molestia y se ahorró el comentario- hermano
-Gracias-respondí, tratando de romper la tensión que la mujer a mi lado creó

Como si fuera consciente de eso, se disculpó por proceder a "dormir" (usando como pretexto el cansancio post-parto), llamó a una enfermera para que le entregara unos somníferos e internamente agradecí aquello.

-Le compramos algo a tu bebé, como nadie sabía si sería niño o niña, compramos algo que pudiera quedarle bien-mi cuñado se disculpó, sonreí al recibir la bolsa
-Ábrela!-dijo mi hermana, se notaba muy emocionada por su sobrina

Hice caso a lo que dijo, dentro de la bolsa de regalo había una ropita de bebé con un gorro a juego, se lo puse para que su cabecita siguiera calentita.

-Muchas gracias, a ambos-les dediqué otra sonrisa
-Estoy orgullosa de ti, serás el mejor papá del mundo-mi hermana me dio un beso en la mejilla antes de salir

Recosté a mi bebé en la cuna que instalaron en la habitación, antes de que pudiera pensar en llamar a una enfermera para pedirle que vistieran a Lila, volvieron a tocar la puerta.

-Pase-dije no tan alto como para despertar a Beatrice pero lo suficiente para que la otra persona me escuchara

Christina entró con una niñita de dos años (Alex, mi ahijada) sujetada de la mano y Richard con un bebé de un año en brazos (Matty, mi otro ahijado), los tres se detuvieron frente a mí.

-Felicidades, hermano, estoy muy orgulloso de ti
-Rick, qué gusto que hayas venido!-abracé a mi mejor amigo, fue de los que más me apoyaron para seguir adelante
-No me perdería esto por nada del mundo-me correspondió
-Hola!-Christina soltó a su hija un momento para abrazarme
-Chris, que gusto verte!-le correspondí
-Cielo, saluda a tu padrino-volvió a tomar la mano de su pequeña hija
-Hola-La pequeña Alexandra sonrió y me abrazó
-Pareces no dejar de crecer, pequeña-La despeiné un poco

La pequeña sonrió y yo la imité, su hermano menor hizo un ruidito de aquellos que los bebés emiten para producirnos gracia a los adultos.

-Cómo estás, campeón?-choqué los cinco con el pequeño pelinegro de ojos hazel

El pequeño Daddario movió su manita a modo de saludo, mi hija comenzó a llorar y eso provocó que él también.

-Es como si nuestros hijos estuvieran conectados jajaja, ahorita vuelvo-Chris se levantó, tomó a su hijo de los brazos de su esposo y salió para poder calmar a mi ahijado
-Alex, entrégale a Jason el regalo que le trajimos al bebé-Rick le dijo eso a su hija mientras le daba una caja de regalo
-Muchas gracias-me permití abrirla, dentro había un osito de peluche con un jersey de Los Patriotas de Nueva Inglaterra
-El sexo de tu bebé era un secreto pero creímos que esto podría gustarle, y le pusimos el jersey porque sabía que heredaría tu afición por el deporte-El hombre de lentes me sonrió
-Esperaba petróleo pero esto está bien jajaja-reí mientras entregaba a Lila el peluche para intentar que dejara de llorar

Mi mejor amigo y yo reímos, siempre hacía esa clase de bromas tontas a modo de sello distinguido a mi persona.

-Adiós Jason y adiós bebé Lila-Alex agitó su manita y salió a alcanzar a su madre

La bebé no paraba de llorar pese a mi intento de calmarla con el regalo de los Daddario, la tomé en mis brazos, la apoyé en mi hombro y traté de arrullarla para que dejara de llorar, funcionó

-Permíteme tomarles una foto! Tú tomaste la de mis hijos, yo quiero tomar la de mi futura ahijada-Rick sacó una cámara
-Tú serás su padrino?-reí, obviamente lo sería
-Obviamente, ahora sonrían los dos, retrataré  su primera foto

Seguí arrullando a mi bebé, oí el click de la cámara y Rick alzó un pulgar para indicar que ya había tomado la foto.

-Las revelaré en mi estudio personal y te enviaré la copia en cuanto la tenga
-Amor, tengo que ir a cambiar a Matty, puedes quedarte con Alex un momento?-Chris entró a la habitación y ofreció una disculpa por interrumpir
-Debo irme, regreso después-nos estrechamos las manos y nos despedimos con un abrazo

Al poco rato volvieron a tocar la puerta, volví a dar entrada y fue entonces que apareció mi primo Cameron con sus hijos y el resto de mis sobrinos. Mi primo me felicitó, dejó el globo junto al resto de los regalos, los chicos se notaban emocionados por conocer a La nuevo Anderson, así que me senté en una silla para que Zack, Daniel, James, Gabriel y Lance pudieran verla.

-Chicos, saluden a su prima-La bebé ya estaba tranquila

-Es muy pequeña-dijo Gabriel tomando la mano de Lila
-Claro que es pequeña, tonto, es una bebé-contestó James
-Así es, por eso ustedes la van a cuidar, verdad? No dejarán que nadie la moleste jamás
-Nadie la molestará, tío Jason, lo prometemos-comentó Lance
-Serán sus hermanos mayores?
-Pero ella es nuestra prima-dijo Daniel con cierta tristeza
-Pero pueden ser sus hermanos, no sólo existen los de sangre, también están los hermanos que nosotros elegimos, ustedes pueden escoger a Lila como su hermanita
-Lila? Así se llama?-preguntó James
-Sí, ella es Lila Anderson Laville
-Le queda bien el nombre-contestó Lance
-Seremos hermanos mayores!! -gritó Zack emocionado-, Al fin voy a saber que siente Rosemary

Entre todos chocamos los cinco (incluso mis sobrinos insistieron en incluir a mi hija en eso), los chicos la cargaron y se tomaron fotos con ella. La idea de convertirse en hermanos mayores les emocionaba, ya fuera porque sería la primera o la segunda vez.

Más personas vinieron a visitarnos, mi mamá lloró de felicidad al tener a su nieta en sus brazos. Sabía que esto significaba mucho para ella, mi padre había fallecido hace unos  meses y la llegaba de Lila significaba esperanza a toda la familia, porque sería la única nieta que ella podría tener.

Todos se fueron, dejándonos solos a Beatrice, Lila y a mí. Nos vinieron a dejar la comida, ésta se llevó en silencio por unos instantes, pero yo tenía que hacer una pregunta muy importante (tenía una sospecha de cuál sería la respuesta) y estaba dispuesto a enfrentar la realidad.

-Última oportunidad, Betty-Volví a recostar a mi hija en la cuna
-Ya no me llames así, esto se acabó Jason
-Considera que mamá dijo...
-Recuerdo lo de tu mamá, sé que me dijo que podría darme alojamiento en su casa sin ningún problema
-Además, todo indica que la casa ya está lista y podemos irnos los tres
-Jason, ya hablamos de esto-me miró a los ojos, fría e indiferente
-No quieres reconsiderarlo un poco?

No es que yo estuviera enamorado de ella, creí estarlo hasta que descubrí que sólo estaba conmigo porque yo era amigo de Richard. Mi futura familia me importaba, estaba más que decidido a dar mi alma y corazón para que la promesa que le hice a Lila, cuando la sostuve la primera vez, se hiciera realidad.

-No, los doctores dicen que quizá me darán de alta mañana y tú cumplirás con tu parte del trato
-De acuerdo, pero tú también cumple la tuya -la miré serio-, pagaré tu viaje a la parte del mundo donde quisiste, pero no te acercarás a la familia Anderson Laville
-Eres un buen hombre pero no podrás darme lo que quiero y merezco en la vida, acepto cada parte del trato-soltó con crudeza

Me molesté, me enojé tanto que salí de la habitación. Necesitaba calmarme, mi vida estaba por empezar un nuevo capítulo y los comentarios de Beatrice no me detendrían, necesitaba fumar un cigarro. Rick seguía afuera, esperándome para charlar y me siguió cuando salí a la azotea.

-Qué pasó, hermano?
-Nunca soy lo suficientemente bueno, no importa lo que diga o lo que haga, ella no quiere ser parte de esto

-Pero ahora tienes a una gran mujer que, estoy completamente seguro y apostaría mi fortuna a ello, te ama y amará toda la vida-Me sujetó el hombro
-Quién?
-La pequeña de 50 centímetros, ojos marrones, con tu apellido y nombre de flor, la que se encuentra en una cuna y que es tu preciosa hija

Sonreí, mi mejor amigo tenía toda la razón del mundo.

-Tienes razón, Lila será una mujer maravillosa
-No lo dudes-puso su mano en mi hombro
-Cuántos años tiene Matty?-pregunté mientras veíamos la ciudad
-Uno, por qué?-soltó una risa, quizá ya sabía que le diría
-Lo aparto para mi hija-emití una carcajada
-Acepto, sé que educarás bien a Lila y que podría hacer linda pareja con mi hijo-estiró su mano y las estrechamos
-Estoy aterrado, Rick-cubrí mi rostro con las manos
-De qué?
-No sé si lograré darle a mi hija la vida que deseo
-Te estás olvidando de una de las lecciones más importantes que nuestra amistad nos ha dado-se giró para poder verme
-Estoy tan estresado ahora que no tengo cabeza para recordar lecciones durante 13 años-lo imité y reí al darme cuenta lo mucho que llevábamos conociéndonos
-Somos águilas, no tenemos miedo a elevarnos alto aún cuando podamos caer-Rick señaló el lugar donde se verían mis cadenas militares si las usara por fuera de mi camiseta
-Nos dijimos eso luego de una misión en la fuerza aérea-saqué las placas para poder mirarlas, jamás me las quitaba
-Exactamente, recuerdo a un bostoniano visionario que me dijo lo mismo cuando yo tuve mis dudas sobre fundar mi compañía
-Debería conocer a ese sujeto, suena a que es agradable, inteligente y apuesto jajaja
-No lo creo jajaja

Lo empujé y nos reímos juntos otro rato, agradecía el apoyo que me brindaba. Richard siempre fue como el hermano que jamás tuve.

⚜️

Los años fueron pasando, mi hija siguió creciendo y se convirtió en el motor que me impulsaba a seguir avanzando cuando pensaba que todo estaba perdido. Bastaba con que su mano sujetara la mía o que me mirara con ese lindo brillo que sus ojos poseían para que me sintiera motivado a seguir adelante.

⚜️

-A dónde vamos?-sujetaba mi mano mientras seguíamos caminando
-Es una sorpresa, sé paciente

Llegamos al granero del huerto, senté a Lila en una de las mesas de madera.

-Qué es este lugar?-comenzó a balancear sus pies
-Este es un huerto de manzanas, es de la familia y era momento de que lo conocieras
-Puedo tenel las manzanas que yo quiela?-comenzó a aplaudir
-Puedes cortarlas tú misma-La bajé, sujeté su manita y comenzamos a cortar diferentes manzanas

Cortamos tantas que odié la manzana un tiempo, pero Lila parecía emocionada y si ella era feliz, yo lo era doblemente.

-Qué haces?-intentó pararse de puntas para mirar la mesa donde me dedicaba a partir manzanas
-Quiero que pruebes una forma distinta de comer manzanas, los jugos y pays ya me aburrieron-La senté en la isla de la cocina
-Les pones mantequilla de maní?-arrugó la nariz
-No sabrás que no te gusta si no lo pruebas, cómelo y dime que te parece-le di un trozo, lo mordió con sus pocos y pequeños dientes, sonrió al disfrutar el sabor
-Quielo más!!
-Te daré más, ahora toma ese bote y llévalo a la sala, el partido ya empezó

Se fue corriendo y yo me senté a su lado.

Podía parecer bobo o insignificante que un partido y manzanas con mantequilla de maní hicieran tardes inolvidables para mí, pero Lila era lo mejor que me pudo pasar en la vida.

⚜️

Odiaba los festivales de día de las madres por todas las señoras que me miraban por ser el único hombre ahí, aquello provocaba muchos comentarios de parte de las otras madres. No fui fan de ir a los primeros de Lila, pero todo cambió un día.

-Papi, ya será día de las madres
-Lo sé, cariño, tu tía Angela y yo ya compramos ese disfraz que te pidieron
-Quería hablar contigo sobre quién irá al evento-puso sus manos tras su espalda y se balanceó en sus pequeños tobillos

Alcé la vista de mi dibujo, la miré y ella me sonrió tímidamente.

-Quieres que tía Angela te acompañe?
-No
-Entonces la abuela?-la invité a acercarse a mi silla y la senté en mis piernas
-Tampoco-mantenía su mirada baja
-Entonces quién?
-Tú, eres mi mamá pese a lo que las niñas en la escuela dicen-comenzó a mover sus manitas con nerviosismo
-Qué dicen esas huecas niñas?

Eso la hizo reír.

-Dicen que no puedes ser tú mi mamá porque eres niño, pero tú haces todo lo que sus mamás hacen
-Qué hacen sus mamás?
-Les preparan el desayuno, las ayudan con sus tareas, las peinan, les leen cuentos para dormir y las llevan a pasear. Tú haces eso y lo haces mejor que ellas

Me conmovió, Lila siempre había sido diferente al resto de las niñas pero algo había heredado muy bien de mí y eso era el jamás dejar que alguien le hiciera o dijera algo que no le parecía bien.

-Así que quieres que yo te acompañe?
-Sí, por favor
-Cuenta con eso, enana

La abracé y besé sus mejillas.

El día del festival fue sensacional, lucí orgulloso mi título de "mamá" y eso parecía conmover a muchas madres. Ser el único hombre ahí les hizo creer a las profesoras que podrían hacerme "brillar" más, en algún momento me hicieron participar en uno de los bailables, las niñas comenzaron a lanzar flores mientras yo sostenía un arco.

Lila pasó cerca de mí, agitó su mano y siguió bailando, sonreí al verla feliz.

Los festivales de "Día de las madres" se volvieron mis segundos favoritos, claramente adoraba los del "Día del padre", pero yo era ambos en mi pequeña familia.

⚜️

Más años transcurrieron, Lila dejó de ser una niña y se convirtió en una señorita.

Su forma de ser y sus valores hicieron que varios muchachos salieran con ella (aunque hubo unos cuantos que estaban con ella para estar conmigo. Idiotas.), ninguno me gustaba, nadie era digno para ser su novio...pero eso cambió, al menos para mi hija, cuando llegó cierto muchacho inglés.

Nunca me simpatizó, trataba bien a mi hija pero nunca la vi totalmente enamorada. El chico era adinerado y eso le bastaba para creer que podía controlarla.

Lila dejó de ver a su familia como una prioridad, se alejó de nosotros e incluso ella y yo peleábamos casi todos los días. Pasó de no soportar un día sin mí a no pasar un día sin discutir, no soporté eso, así que un día lo cité para aclarar las cosas.

Llegó bastante sonriente, se notaba feliz de que pudiera charlar conmigo, seguramente su egocentrismo no le hizo ver mi desprecio por su persona.

-Hola, señor Jason-entendió su mano, la estreché y se sentó frente a mí, con una sonrisa similar a la del gato de Cheshire
-Buen día, joven Maximilian
-Puede llamarme Max, Sr. Jason
-Realmente no vengo a charlar contigo de forma amistosa

Su semblante cambió sin borrar su falsa sonrisa, se sintió la tensión entre ambos.

-Quiere hablar de Lila, cierto?
-Exactamente, quiero que te quede algo muy claro, Maximilian

Al decir su nombre de esa forma se le borró la sonrisa del rostro.

-Qué sucede?-alzó una ceja tenía una mirada bastante fría
-Sé que no eres bueno para Lila, le estás haciendo un daño gigantesco así que, si de verdad la quieres, hazle el favor de salir de su vida

Se quedó pensando un momento, chasqueó la lengua y después me miró.

-No, amo a su hija y no la alejaré de mí
-Tú obsesión no es amor, entiéndelo
-Sé que continuará sus esfuerzos por hacer que Lila me deje, pero no funcionarán por nuestro enorme e intenso amor por mí
-Quizá tú la quieras, pero ella no a ti, déjala ser feliz
-Será feliz conmigo, se lo demostraré-pidió la cuenta, habíamos ordenado unos cafés pero estaban intactos, estaba por pagar la cuenta pero yo me adelanté

Más días pasaron, Lila seguía distante conmigo y mi única forma de desahogarme (como había sido durante una parte grande de mi vida) fue ese extraño olor y sabor que produce el tabaco. Durante mi época gris con Lila, fue cuando más fumé, pero nunca se lo dije.

...

Pero ante los problemas que tuvimos, existieron momentos hermosos que no hubiera cambiado por nada el mundo.

-Max me compró un vestido para la fiesta y a ti un smoking-Lila colocó una caja sobre la mesa de la sala
-Puedes quedarte el vestido si es lo que quieres, pero devuelve el smoking, yo conseguiré el mío
-Jamás terminará de agradarte, cierto?-suspiró
-No, nunca lo hará, mereces algo mejor, princesa-despeiné un poco su cabello

El día de la aburrida fiesta de Maximilian llegó más rápido de lo previsto, puede que sea la edad o mi rechazo por el muchacho pero si no hubiera sido por las cajetillas de cigarros que llevé conmigo, habría muerto de aburrimiento.

-Su soso compañero ya la dejó?-me acerqué a la castaña muchacha que miraba su bebida como si fuera lo más interesante del mundo
-Hola, papá-me sonrió
-Dónde está ese jovencito?
-Charlando con unos amigos suyos
-Y te dejó sola? Sabes, debes descubrir que el mundo tiene más cosas interesantes, además de esa margarita de fresa, así que podrías conceder una pieza de baile a tu viejo y sabio padre-le ofrecí mi brazo
-Eres sabio pero no viejo jajaja
-Eso ya lo sé jaja

Soltamos una risa, sujetó mi brazo y caminamos hasta la pista. La música comenzó a sonar, usé los conocimientos de baile de salón que adquirí por ir a las fiestas de los Daddario, mi hija y yo comenzamos a danzar al ritmo de algún vals.

Un momento único e irrepetible, ya comenzaba a ser consciente sobre cierta situación en mi vida y fue por eso que lloré cuando terminamos de bailar; quizá no se podría repetir.

-Eres el mejor!-se lanzó a mis brazos luego de que sequé mis lagrimas
-Y tú lo mejor que me pasó en la vida-La estrujé

...

Pero también había nubes en mis días soleados, la temida tormenta cayó en uno de los días en los que me sentía peor.

-Papá, ya tengo la madurez necesaria para tomar mis propias decisiones, yo decido con quien quiero estar!
-Mientras vivas bajo mi techo seguirás mis reglas, quedó claro?
-Quizá ese es el problema!
-No me hables así Lila Anderson Laville! Estás en mi casa, comes por mi trabajo, todo lo que usas fue comprado con mi dinero y exijo respeto!
-Adiós papá...-salió de la casa enojada

Golpeé la pared con frustración, no podía permitirme alejar a aquello que más amaba en el mundo. Mi pequeña y adorable princesa.

-Dale tiempo, es lista y notará su error-Angela salió del patio trasero, por poco había olvidado que había venido a ayudarme con la cena
-Cómo lo sabes?-me acerqué a la puerta que daba al jardín, saqué un cigarrillo y comencé a fumarlo
-Porque es tu hija y muy parecida a ti-ahuyentó un poco el humo que emitía el cigarro, me dio una palmada en la espalda que después se transformó en un abrazo

...

Mi hermana tuvo razón, Lila volvió a casa después de un día fuera, me contó que al fin había terminado con Maximilian. Desde entonces nuestra relación volvió a ser la de antes, Lila cambió, evolucionó un poco como persona y fue de ayuda que nos tuviéramos que ir a Miami.

⚜️

Durante una gran parte de mi vida no había podido dormir, cuando era joven por la escuela y fiestas; cuando tuve a Lila por las eternas noches donde estuve a punto de rendirme por no poder seguir adelante; cuando mi hija creció, por los problemas sentimentales que tuvo y su breve alejamiento de mí; finalmente, no pude dormir aveces por el incomparable dolor por el cáncer; así que cuando cerré mis ojos eternamente estaba agradecido, finalmente podría dormir y descansar

Desperté, el suelo donde me encontraba era blando, todo era tan blanco y deslumbrante, tuve que pellizcarme al oír...¿su voz?

-Pa...pa...papá?-ambos no podíamos creer lo que teníamos de frente
-Mi bebé-la abracé con muchísima fuerza, me lo regresó, al fin estaba conmigo, podía sentir sus brazos a mi alrededor, se sentía tan real...pero esto estaba mal, no podía suceder ahora, pensé que este momento llegaría 60 o más años tarde
-Te he extrañado mucho-No paraba de llorar
-Yo más, mi princesa-sequé sus lágrimas
-Me haces falta
-Cielito, no digas eso, he visto que has hecho cosas increíbles por tu propia cuenta
-Te amo!-volvió a lanzarse a mis brazos, habían sido meses difíciles para ella y yo tenía parte de la culpa
-Sabes, antes de que mis ojos se cerraran para siempre, me alegro de que fueras la última persona que vi-tomé su mano y la besé

Volvió a soltarse a llorar, ambos éramos conscientes de lo mucho que le hacía falta este momento.

-Estoy orgulloso de lo que eres, de lo que te enseñé y de lo que tú misma has sembrado en tu persona
-Pero me equivoqué...-su voz comenzó a fallarle
-Lo sé, pero debes recordar que es de humanos errar; aprende de tus errores pero también recuerda que no debes apresurar tus tiempos-se lo dije de forma que no perdiera el control
-El tiempo no se detiene para nadie, verdad?-sus ojos estaban cristalizados
-Exacto-puse uno de sus mechones tras su oreja

Dos luces surgieron de algún lado, teníamos que comenzar ese camino. Lila miró la luz y su voz tembló antes de hablarme.

-Papá...si algo ocurre...

-Tranquila, ok? Yo estaré a tu lado, siempre lo he estado y lo haré más ahora-la tranquilicé con un abrazo, la solté después de unos minutos
-Te amo. Estoy orgullosa de ti. Es...estoy orgullosa de nosotros-comenzó a llorar

A lo lejos se escuchaba un ruido, algo parecido a una voz pero creo que Lila no lo notó. Esto había sido conmovedor y bastante especial, pero era el momento de seguir adelante.

-Mi niña, creo que ya es hora de irnos-tomé su mano, esto sería doloroso
-Debemos hacerlo?
-Sí, es necesario-me miró, tenía la misma mirada como cuando era pequeña
-Te he extrañado como no imaginas-me abrazó, una lágrima bajó por la mejilla de ambos
-Vámonos-comenzamos a caminar, esto era doloroso pero era necesario

Fue hermoso volver a ver a mi pequeña, ahora sé que ella será feliz.

⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️

FELIZ AÑO NUEVO A TODAS!! 🎊🎈🎆

Espero que pasen una gran celebración, que todos los propósitos que tengan se cumplan y que el 2019 les sonría.

Son personas increíbles, gracias por haber hecho crecer mi historia este año a pasos agigantados. 💖

Les deseo lo mejor a todas 😘

Pd: Creo que debo dejar de dar felicitaciones en esta clase de capítulos 🤔