Sunoo como era alumno nuevo, se sentó junto a Riki y sus amigos mientras esperaban a Jake, congenió con Jungwon al instante y se llevaron bastante bien.

El rubio llegó luego de un rato y saludó amablemente al sunoo, aunque eran muy diferentes se llevaron bastante bien.

–¿como se conocieron con el Riki? –preguntó Jake.

–Los dos vamos a la misma academia de danza, solo que yo iba en danza contemporánea y el en danza urbana.

–A mi pollito lo molestaban mucho en su otro colegio, así que hablamos con mi suegri y lo cambiamos acá.

–Era un liceo de puros hombres, te juro que hacían medio show si les dabas desodorante en barra. –dijo sunoo haciendo reír al resto.

–¿te ha tratado mal este cabro chico? Porque si es así le tiro las orejas noma.

Riki le dió una mala mirada a Sunghoon y este solo se encogió de hombros.

–No chiquillos, tranqui. El Riki se ha portado un siete conmigo.

Los cinco estaban almorzando lo más tranqui cuando sintieron murmullos en la entrada de la cafetería, al parecer era el grupo de los populares que rápidamente Jay se había integrado ahí.

–¿Ese de ahí no es tu primo Sunghoon? –preguntó Jungwon.

–Si, al parecer se integró bastante bien.

–¡oye, pelo de Barbie! –gritó Jay desde la otra esquina del casino.

–Creo que te habla a ti Jake, eri el único rubio en todo el casino. –dijo el Riki

–No me digai. –habló con sarcasmo rodando los ojos.– No lo pesquis noma, quiere puro llamar la atención.

–En vola mirando desde acá, estaría encantao' de ser tu Ken.

Jake se atoró con el jugo.

En eso los ruidos coquetos y chiflidos empezaron a sonar por todo el lugar, haciendo que el pequeño australiano se encogiera en su puesto, ocultándose en el pecho de su mejor amigo con las orejas rojas de la vergüenza.

Sunghoon le dedicó una mala mirada a Jay, diciéndole que la cortara porque lo estaba pasando mal, este solo se encogió de hombros mirándole con desdén.

–Oye Jake. –todos miraron a Heeseung quien había llegado.– me doy cuenta que se te está incomodando mucho acá, y no se si me querías acompañar al gimnasio, el profe de básquet me encargó unas cosas.

–A-ah, yo... –volteó a ver a sus amigos que sabía que no les caía bien pero raramente le dieron el pase de ir.– si, te lo agradecería bastante.

Sunoo le dijo que dejara ahí nomás la bandeja que ellos se la llevaban luego y este agradeció con una sonrisa. Cuando el dúo se fue el pequeño nuevo integrante notó como todos estaban molestos.

–¿ocurrió algo? ¿Por qué de repente están todos amurrados? –preguntó extrañado haciendo puchero con sus labios.

–No es nada wawita. –Riki le dió un beso en el cachete.– solo que ese tipo no nos cae muy bien, nunca había notado al Jake y ahora está como si nada con él.

–¿y por qué les cae mal? –preguntó el pelirosa.

–Es lolero. –dijo Jungwon.

–aaah, con razón. Debe tener las medias red flags.

–Lo único que tengo claro es que, el wn le hace algo no la cuenta dos veces. –dijo el jungwon.

–Nosotros mismos le sacamos la chucha. –dijo Sunghoon esta vez.

–Ta bien, apruebo. –sunoo alzó el pulgar en modo de aprobación.