CAPÍTULO 29
Cara a Cara:
¡La Batalla De Una Noche!

Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?
1 Juan 4:20

En la noche.

Habían pasado algunas horas y Logan en ese tiempo hizo que Julieth y yo nos sintiéramos a gusto. Nos preparó para comer a ambos y nos trató como a reyes, me sentía mucho mejor estando aquí que estando en mi propia casa. Al estar aquí se podía respirar paz. Después de terminar de comer me senté en el sofá a analizar todo lo que estaba pasando. Comencé por el día de ayer. Primero: Max realmente consumía droga y pude impedir que se hiciera daño. Segundo: James logró hacerse un tatuaje y pude orar para que nada malo le pasara. Tercero: Harry sufría de depresión y con ayuda de los demás logramos ayudarlo. Cuarto: Tony tenía deudas y era la razón por la cual se la pasaba apostando tanto dinero, pero Dios le suplió y pudo pagar todo lo que debía.

Luego quedó analizar lo que había pasado hoy. Primero: Leonie y Sean robando en la cafetería, por suerte y se logró que aceptaran a Cristo como su señor y salvador. Segundo: pude hablar con Nicole, tan sólo espero que las palabras que Kate y yo le dimos no caiga en saco roto. Tercero: el hecho de que hayan echado a Julieth de la casa y mi loca decisión de irme con ella, pero en la visión no pasaba nada de eso, no entendía el porque había sucedido eso. (Sólo te diré que una acción puede cambiar todo el curso de la historia). Era eso... algo que hice cambió toda la historia, pero no la cambié del todo, algunas cosas realmente estaban pasando, pero no de la misma forma.

─Pero... si todos mis amigos de cierto modo pasaron por lo que vi eso quiere decir que Lu... o no. ─Corrí inmediatamente a buscar mi celular que estaba en el comedor, apenas lo conseguí llamé a Teddy; ojalá me respondiera rápido─. ¡¿Halo Teddy?!

─¡Qué onda JD! ¿Qué sucede?

─Necesito de tu ayuda ─le dije─. ¿Sabes dónde vive Logan?

─¡Claro! ¿Porqué?

─Quiero que vengas a su casa y pases por mí para que me lleves a otro lado ─le dije un poco perturbado─. ¡Es urgente Teddy, algo de vida o muerte!

─¡Está bien, estaré allí en un par de minutos!

Me quedé en la sala esperando a que Teddy llegara a la casa de Logan, mientras estaba Julieth conversando con Gina; Logan había salido a comprar algunas cosas que faltaban en la casa. Esperar a Teddy se estaba poniendo algo tedioso, ojalá llegara rápido, había muchas cosas que debían de cambiar el día de hoy. De la nada se escucha el sonido de un claxon, era el mismo claxon desesperante que tenía el auto de Teddy.

─Julieth, hazme el favor de decirle a Logan que me fui porque tengo algunas cosas que hacer, probablemente llegue más tarde ─le dije a mi hermana─. ¡Te cuidas!

─¡Vale JD!

Le di un abrazo a mi hermana y salí de prisa hacia el auto de Teddy, al entrar al auto éste lo encendió, cuando íbamos en el camino dijo.

─¿A dónde vamos?

Le mostré a Teddy la dirección del psiquiátrico donde estaba la mamá de Lucas, era hora de impedir todo el maltrato que Rolly le hacía a esa pobre mujer.

─¿Conoces a alguien que esté internado en el psiquiátrico? ─me preguntó Teddy.

─¡Qué esté internado no, pero sí conozco a alguien que va a ese lugar!

─¡Ok vale!

Teddy condujo hacia el psiquiátrico a toda velocidad, eso era algo bueno, ojalá llegáramos antes de que el desalmado de Rolly se fuera de allí, aún no podía creer todas las cosas que él hacía; y yo que quería ser como él. (Proverbios 24:1-2)

Al llegar Teddy se estacionó al frente del psiquiátrico, se podía ver dentro del auto como Rolly salía del lugar. Teddy se bajó del auto y yo también me bajé.

─¡Ahhh! ¿Rolly qué haces aquí? ─preguntó Teddy.

─¡Ah, bueno... yo; ya saben... estoy haciendo mi práctica en este psiquiátrico ─respondió Rolly un poco nervioso.

Teddy no dudo en fulminarlo con la mirada, como si con esa excusa estúpida podría engañar a alguien.

─¡Que yo sepa estudiamos psicología, no psiquiatría, en fin... las prácticas se hacen en institutos públicos y es un psiquiátrico privado! ─dijo Teddy.

─¡Porque no le dices lo que realmente haces aquí! ─le grité a Rolly─. Porque no le dices que tienes en este lugar a la madre de Lucas y que pagas para que la tengan sedada.

─¡Qué! ─dijo Teddy sorprendido.

─No sé de que estás hablando ─dijo Rolly, de verdad que era tremendo cretino, creo que sería más fácil si confesaba las atrocidades que había cometido.

Me acerqué a él y lo tomé por el cuello de su camisa presionando su cuerpo contra la pared, realmente estaba molesto y este sínico se estaba haciendo el idiota y eso me molestaba aún más.

─¡Eres un desgraciado y maldito egoísta! ─le grité a Rolly─. ¡Sólo te la vives pensando en ti sin importante el cómo viven los demás, créeme... lo que le has hecho a Lucas y a su madre no tiene perdón! Y yo que creí que eras un buen tipo, hasta te veía como a un hermano, que pena me das.

─¡Tú a mí no me conoces, sólo estás hablando por hablar y no, no me arrepiento de nada, Lucas se merece estar donde está y su madre igual! ─dijo el desgraciado de Rolly─. Y no importa que quieras decirme, al final mi padre va a estar de mi lado, yo lo controlo con un dedo y tú no puedes hacer nada para detenerme.

Teddy se mostró muy sorprendido por las palabras del desgraciado de Rolly, creo que ni yo esperaba que dijera todo eso. Sabía que tenía que actuar diferente, pero no me contuve.

─¡Eres una basura! ─le dije a Rolly, después lo escupí, él todo enojado me intentó golpear, pero lo detuve─. ¡No te atrevas a ponerme un mano encima maldito desgraciado, yo no soy Lucas, yo si me voy a defender!

Teddy se interpuso entre nosotros dos para evitar que esto llegara a mayores, la verdad yo tampoco quería que se fuera al extremo, pero tanta frialdad me estaba enfadando.

─¡Eres un completo estúpido, tan sólo le arruinas la vida a las personas que realmente deberías cuidar! ─le grité a Rolly─. ¡Ellos son tu familia! No esos malditos enfermos con los que te juntas. (1 Corintios 15:33)

─¡Vas a ver Duncan, esta me la vas a pagar! ─me gritó Rolly.

─¡Pues yo no te tengo miedo, ni, aunque le pidieras ayuda a tu secta satánica me echaría a correr! ─le dije a Rolly─. Vengan como quieran.

─¡¿Secta satánica?! ─dijo Teddy sorprendido─. ¡¿Rolly quién eres?! ─Teddy verdaderamente está estupefacto por todo lo que estaba escuchando, no lo culpo; igual de sorprendido estuve yo cuando me enteré─. ¡JD ve al auto! ─me dijo él.

─Pero...

─Pero nada, ¡ve al auto!

Era extraño, pero jamás había visto a Teddy así, así que decidí hacerle caso, no ha de ser que la seriedad que tenía se convirtiera en rabia y la agarrara conmigo.

─¡Escúchame bien lo que te voy a decir Rolly! ─dijo Teddy─. Estoy completamente asombrado por todo lo que he tenido que escuchar, yo jamás pensé que fueras de esa manera, yo también sentía admiración por ti, pero ahora que se todo esto no sé que decir; yo no soy cristiano, Rolly, pero creo que estás eligiendo el camino equivocado.

─Tú a mí no me conoces.

─Tienes razón, no te conozco, pero eso no te justifica de ninguna manera, espero y recapacites ─le dijo Teddy a Rolly, luego dejó que se fuera y Teddy caminó hacia el auto, entró en él y estuvo callado por un buen rato.

Dentro del auto de Teddy todo estaba en tensión, una tensión que probablemente se pudiera cortar con un cuchillo, la verdad era algo triste lo que pasaba con Rolly, definitivamente, caras vemos, corazones no sabemos.

─¿Cómo supiste que Rolly hacía todo esto? ─me preguntó Teddy.

─Un amigo me lo dijo ─fue lo que le respondí─. No tienes ni idea de todo lo que este chico ha hecho... lamento haber actuado así, pero son muchas las cosas malas que ha hecho; el pobre Lucas viviendo en las calles como un indigente, su madre sedada en un psiquiátrico por doctores negligentes y ni hablar de su padre.

─Es obvio que Rolando está loco, el tipo dio el día libre por su cumpleaños ─dijo Teddy todo serio─. Se nota que es un tipo igual que el hijo, que sólo ve por sí mismo, eso o es un viejo despistado que muy poco le importa las cosas a su alrededor. ─Era algo triste, aunque no creo que juzgar al padre de Rolly arreglaría nada.

─No podemos hacer nada en estos momentos por Rolly ─le dije a Teddy─, pero podemos hacer algo por Lucas.

─¡Tienes razón, vamos por él!

Teddy encendió el auto y fuimos en busca de Lucas...

《¿Lograrán Teddy y JD encontrar a Lucas y hacer algo por su vida?》