CAPÍTULO 24
El Valor De Hacer La Obra Parte 1:
Solución y Oración

Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.
2 Corintios 7:1

Miércoles 27 de septiembre del 2017.

En la mañana.

Ya había pasado una semana desde el accidente, las cosas estaban más calmadas. Hace dos días fue el sepelio de Glenn y Dinn, todos los compañeros de Dinn estuvimos ahí y todos los amigos y colegas de Glenn también asistieron. (Eclesiastés 7:2)

El día de hoy estábamos libre en la universidad, el decano Rolando Legend cumplía 48 años y declaró el día libre para todos; tremendo decano. Hoy tenía ganas de ejercitarme, desayuné rápidamente y me vestí para salir a correr un poco. Al salir de mi casa me encontré con Kate.

─¿Qué haces aquí afuera? ─le pregunté.

─Perdón, pero no todos tenemos la dicha de tener un decano absoluto ─dijo con una sonrisa en el rostro─. Voy a la preparatoria, a diferencia de otros, yo si tengo clase.

─¡Oye, la envidia es pecado! (1 Corintios 13:4)

─Jajajaja.

Ver su sonrisa era placentero y más a esta hora de la mañana, es una de las mejores formas de empezar el día.

─¿Y esas hojas? ─le pregunté.

─Estoy estudiando sobre el mal uso de plantas medicinales.

─Hablas de...

─¡Sí, hablo de drogas!

─Drogas... ─susurré.

─Si drogas.

─Drogas ─le dije.

─¿JD acaso consumes drogas?

─No, bueno, yo no, pero conozco a alguien que si ─le dije a Kate─. Oye lo siento, tengo que irme. ─Me eché a correr por toda la calle, me volteé y grité─. ¡Bye, te quiero!

Corrí rápidamente a la casa de Max, entiendo que lo que me enseñó la muerte era una visión, pero ¿y si realmente le pasaría eso a Max? Podría salvarle la vida. Tan sólo corría y corría, ya no tenía fuerzas, pero debía continuar, no podía quedarme con la duda de si pasaría o no, tenía que ayudar a mi mejor amigo, obvio, si estaba en problemas... me tomó unos minutos llegar, pero al fin llegué, entré a la casa de Max, subí velozmente las escaleras hasta llegar al cuarto de Max; abrí la puerta y lo vi, inyectándose heroína. Corrí con rapidez hacia él y le quité la jeringa.

─¡Basta! ─le grité─. Esta no es la manera.

─Tú no entiendes JD ─me decía llorando.

─¡Tienes razón, no entiendo! Pero algo si es seguro, esta igual no es la manera, existe un Dios, existe una salida mejor que esta.

─Ya lo sé...

─¡¿Qué?! ─Quedé estupefacto.

Él sabía que había un Dios y aun así se inyectaba todo tipo de drogas, ¿en que rayos estaba pensando Max? Si sabe que hay una salida mejor que esta, ¿por qué se destruye con esta basura?

─¡¿Qué te pasa?! ─le grité─. ¿por qué haces esto?

─Es así como me alivio.

─Esto es un alivio temporal, lo de Dios es eterno.
─Pero JD... ─Continuaba llorando.

─Lo sé, me imagino que el proceso es doloroso, pero Dios sana, Dios cura a todo el que lo necesita. (Salmos 147:3)

Miré al suelo y pude ver todas las drogas que se había metido Max, de la nada comenzó a vomitar, no entendía porque, pero él se veía muy grave, mi deber era ayudarlo. En eso vi que había un frasco de antidepresivos vacío, lo más probable es que Max se lo tomara todo. Coloqué su brazo en mi hombro, lo paré para llevarlo al médico.

─¿JD qué  haces?

─¡Cállate y coopera! ─le dije─. Voy a sacarte de aquí, sólo confía en Dios y en que todo saldrá bien.

Saqué a Max de la casa, un taxi nos paró, ambos íbamos con rumbo al hospital, no iba a permitir que mi mejor amigo se muriera y menos de una sobredosis. Al llegar al hospital el Dr. Wallace lo atendió rápidamente. El Dr. Wallace es el doctor de mi familia, sabía que Max estaría bien es sus brazos. (Si Max está pasando por esto lo más probable es que James se esté tatuando en este momento) pensé.

Al medio día.

Decidí ir tras James, tenía miedo de que hiciera alguna estupidez, corrí rápidamente por todo el hospital, mi objetivo era salvar a James. Corriendo por el hospital me encontré con el pastor Kristian, es curioso, no creí encontrármelo en este lugar y menos porque ayer que lo vi él se veía bueno y sano.

─¡Pastor Kristian! ¿qué hace aquí? ─le pregunté.

─Estoy recogiendo las medicinas de una de las ancianas de la iglesia, y tú JD, ¿qué haces aquí?

─Vine a traer a mi mejor amigo, pero debo ir por otro ─le contesté, pero tenía algo de prisa.

Terminé de hablar con él y me dirigía a la salida, pero lo más probable es que James ya se hubiera hecho el tatuaje, ¿qué rayos haría entonces? Decidí regresar y pedirle ayuda al pastor Kristian. Al regresar él seguía en la fila esperando los medicamentos, me acerqué a él y le pregunté.

─La Biblia habla en Levítico sobre no hacernos tatuajes ni marcas en la piel, ¿qué pasa si una persona ya se hizo el tatuaje?

─Podrías orar por el tatuaje ─me dijo muy seguro─, dependiendo de lo que signifique el tatuaje, si el tatuaje tiene algún significado la persona que lo tiene simplemente tiene que renunciar a él.

─¿Alguna vez ha orado o ha visto como se ora por un tatuaje?

─Sí, en los encuentros.

─¿Cómo se ora?

─Depende; muchas de las personas que se hacen un tatuaje lo hacen como un pacto, hay quienes lo hacen por diversión o moda sin saber el trasfondo que hay en la imagen que se tatúan ─explicaba el pastor─. Viéndolo desde el aspecto espiritual; por lo tanto, se ora en dirección de que sea cancelado todo pacto con el ocultismo, oscurantismo, etc. Si es un pacto por medio de un acto de iniciación a una pandilla también se ora anulando todo pacto que haya podido realizar la persona, pero para eso la persona tiene que estar dispuesta a renunciar al pacto que haya realizado; en la medida que la persona tenga la disposición se procede a orar y se cancela.

─¿Si es un tatuaje por idolatría la persona podría renunciar y hacerle la oración? ─pregunté intrigado.

─Correcto.

─Por último, ¿qué es ocultismo y oscurantismo?

─Todo lo que tenga que ver con la adivinación, magia negra o blanca, hechicería, etc.

La verdad el pastor Kristian me dejó impresionado por todo lo que sabía, se veía que era un tipo con mucha experiencia, valga la redundancia, es un pastor.

─¿Me ayudaría a orar por alguien? ─le pregunto.

─¡Claro, sólo espera a que me den los medicamentos y nos vamos!

Y así fue, esperé a que el pastor Kristian recogiera los medicamentos ajenos para poder ir a buscar a James y orar por él. ¡Por fin! Ya le habían dado los medicamentos al pastor, ya por fin nos podríamos ir, lo bueno de todo esto es que el pastor tenía carro y llegaríamos más rápido, aunque me sorprendió mucho que simplemente manejará un Kia picanto. Entré al auto de lo más normal, pero fue inevitable que el pastor Kristian preguntara el porque de mi expresión, a lo que le contesté.

─Creí que tendría un...

─¡Un Ferrari! ─Me le quedé mirando un poco atónito, pero la verdad sí, sí esperaba algo como eso.

─Me imagino que está tratando de practicar la humildad ─le dije.

─Te diré algo JD, sólo lo hago porque te considero ─me dijo el pastor─. El no tener cosas caras no me hace humilde, el como yo me comporto y actúo es lo que me hace humilde, quiero en serio que entiendas que humildad no es sinónimo de pobreza; una persona humilde es la que no hace ostentación de sus virtudes, además, hay cosas más importantes que conducir un auto tan caro...

Fui todo el camino pensando y reflexionando lo que me había dicho el pastor, en si tenía toda la razón, no se trataba de vivir en la pobreza, se trataba del como actúas con lo que tienes y como tratas a otros. Rápidamente llegamos al local donde James se había tatuado, pero él no estaba ahí, resultó que se había ido a otro lado. El pastor se tomó la molestia de preguntar hacia donde se había ido James después de hacerse el tatuaje y los jóvenes le respondieron que fue a la universidad por unos papeles.

─¿Cómo es que puede hacer esto por mí? Y no sólo eso, sino que también se toma la molestia de llevarle la medicina a una persona que ni es de su familia ─le dije al pastor.

─Fuimos llamados a servir JD, además si quieres ser una persona importante debes saber que ver por las necesidades de otro es algo esencial. (Mateo 20:26) (Mateo 22:39)

─¡Wuao!

─Quisiera ayudarte más, pero debo llevar la medicina... ¡Ten! ─Él estaba dándome dinero para el taxi─. Dios primero espero que todo salga bien.

El pastor Kristian se fue a llevar la medicina y yo tomé un taxi con rumbo a la universidad para poder encontrar a James y que nada malo le pasara. Al llegar a la universidad estuve por todos lados buscando a James, pero no lo encontraba, de repente recibí una llamada de un número desconocido.

─¡Halo! ─dije.

─.......... ─Pero se quedó en silencio.

─¡Buenas, ¿con quién hablo?! ─pregunté.

─.......... ─Seguían sin responderme.

─¡Bueno ya basta! ¿con quién hablo? ─grité.

─¡Hmmm! Sólo te diré que una acción puede cambiar todo el curso de la historia ─dijo una voz de la nada, sólo dijo eso y colgó.

Eso me preocupó un poco, ¿de qué me estaría hablando? ¿a qué acción se refería? Todo esto era muy estresante. De repente recibo otra llamada.

─¡Escúchame bien, si no tienes nada mejor que hacer deja de molestarme! ─grité.

─¿De qué hablas JD? ─me preguntó el pastor.

─Lo siento pastor, creí que era otra persona.

─Está bien, en fin... estuve investigando acerca del tatuaje de tu amigo y averigüé que fue lo que se hizo; te voy a mandar la foto.

Quedé completamente sorprendido, creí que James se había tatuado el nombre de su papá en el pecho, en ese momento recordé la llamada (una acción puede cambiar todo el curso de la historia).

─El tatuaje es tribal, muchas veces las tribus practican actos satánicos y también suelen hacer pactos ─dijo el pastor.

─¿Tiene idea de cómo pasó todo esto? ─pregunté asombrado.

─¡Al parecer tu amigo iba a hacerse otro tatuaje, pero alguien en el local le recomendó hacerse el que tiene ahora! ─Era algo sorprendente lo que escuchaba, eso me preocupaba mucho─. Muchas veces los mismos tatuadores son partes de estas tribus, lo hacen con la intención de lastimar a otros. ¡Ten cuidado JD!

─Lo tendré ─le respondí y luego colgué.

Jamás me imaginé lo grave que podría ser hacerse un tatuaje. Corrí por toda la universidad buscando a James, pero no lo encontraba; me fui al segundo piso, allí lo vi sentado en el suelo. Algo le estaba pasando a James, pero ¿qué era y por qué? Me dirigí hacia donde estaba él, éste sólo me miraba serio, se notaba que estaba débil.

─¿Te ocurre algo? ─le pregunto.

─Me siento débil, me duele todo el brazo y no sé porque ─respondió James.

Me arrodillé y le abrí la camisa, era notorio su tatuaje, él sólo me miró y se sintió apenado.

─Jamás pensé que te harías un tatuaje, pero si te lo hubieras hecho creía que te harías el nombre de tu papá ─le dije a James─, ¿o sólo tenías ganas de sentir dolor?

─¡Diste en el clavo!

─¡Vamos James! Por alguna razón Dios prohibió hacerse tatuajes, no tienes idea de las cosas malas que te pueden pasar por tener uno.

─No sabía que eras cristiano... estar cerca de Julieth te está ayudando ─dijo James.

─La verdad no, nuestros procesos son muy distintos, pero al final el Dios es el mismo ─le dije─. ¡Escucha! Podrías correr riesgo por un tatuaje, no sabes si han hecho pacto satánico o algo por el estilo; Dios puede ayudarte, pero eso sí sólo tú lo permites, ¿me dejas orar por ti?

─¡Sí!

James se encontraba muy débil para ponerse de pie así que simplemente me senté en el suelo y comencé a orar por su tatuaje, a reprender todo acto maligno que tuvieran preparado los hijos de las tinieblas, oré para romper las cadenas que lo ataban, todo altar levantado para fines malditos contra James los cancelé en el nombre de Jesús, también oré por desánimo, por su falta de amor de padre. Le pedí a Dios que llenara todo el vacío que había en el corazón de James. (Proverbios 17:17)

Lo bueno de todo esto es que James coopero en todo; lo más importante al momento de confiar en que Dios hará algo con tu vida es tener un corazón dispuesto, eso era lo que tenía James, me alegra mucho saber que su alma aún tenía salvación... (Proverbios 3:5-6)

《Lo que sucedió con Max y James resultó ser real, ¿será igual con la vida de Harry y Tony?》