uno
Uno: Ira
Knock, knock, el sonido de la puerta retumbó por la oficina, causando un eco lento y silencioso por todo el lugar.
— Pase —Habló alguien adentro de la oficina, revisando .
La chillido de la puerta sonó instantáneamente, y pronto, la imagen de un hombre apareció detrás de ella, buscando con la mirada a su jefe.
— Agente Kim, tenemos información sobre el caso "P" —Habló el hombre que se encontraba detrás de la puerta, uno de rango inferior y rostro genérico, entregando unos documentos a su superior.
El agente Kim, por el contrario, era un hombre con rasgos marcados, probablemente no sería la persona más atractiva del mundo, pero causaba un gran impacto, y era difícil de olvidar, aún si era visto pocos segundos.
El agente Kim dio una sonrisa a medias, y sin esperar demasiado, tomó los documentos que le estaban entregando, comenzando a leerlos con detenimiento.
— El nuevo sospechoso que encontramos podría ser "Ira", su nombre es Park Seojoon, es un profesor de matemáticas en el instituto internacional de corea.
— ¿Por qué está como posible sospechoso? —Preguntó cómo siempre el agente Kim, era casi un protocolo que debía realizar al momento de encontrar pruebas para el caso "P".
— Muchos de sus estudiantes han declarado tenerle miedo a su profesor, algunos dicen que mantiene conductas extrañas, lo cual hizo que nos contactaran, quieren saber si sus sospechas sobre si él es el próximo señor Ira sean ciertas.
El agente Kim reflexionó un poco, analizando con detenimiento cada una de la información recopilada por los empleados a cargo del caso.
— Señor Park, ¿Usted sabe por qué nos encargamos de una misión tan importante como esta? —Preguntó el agente Kim.
— Por supuesto, es nuestro deber con la ciudadanía salvarlos de la catástrofe mundial —Contestó el señor Park, confiado de su respuesta a la pregunta, misma que años atrás respondió de la misma forma.
— Claro señor Park, nuestro labor es para colaborar con el mundo —Dijo el agente Kim, causando una sonrisa en el señor Park —Pero también, lo hacemos con fines científicos, bien dicen, que somos afortunados de vivir en estos años, no cualquier generación ha estado tan cerca de descubrir el gran secreto que por años mi familia ha buscado, el saber que pasará cuando los siete pecados capitales se unan.
— Tiene razón agente Kim, si me permite, comenzaremos con el operativo —Habló el señor Park.
— Por supuesto —Respondió el agente Kim.
El señor Park se retiró de la oficina del agente Kim, y pronto todos sus compañeros de trabajo lo rodearon.
— ¿Qué te dijo? —Preguntó una de las mujeres policías que estaban frente al caso, Jeon Soyeon.
— Nos dio permiso para avanzar con el operativo, lo único que necesitamos ahora es ir a la dirección que nos otorgaron.
— El agente Kim es un buen jefe, sin él no sabríamos que hacer —Habló uno de los policías.
En cuanto notaron cómo la señorita Mina pasaba a un lado de ellos, el señor Park volteó para llamarla.
— ¡Señorita Mina! Que bueno que la encontré, quería avisarle que iremos a investigar sobre el caso 'P', ¿Gusta acompañarnos? —Preguntó el señor Park.
La señorita Mina elevó una ceja —No puedo, muchas gracias por invitarme —Se limitó a decir.
— Oh, bueno, no se preocupe señorita Mina —Dijo el señor Park, dándose la media vuelta para regresar con su equipo.
— Otra vez nos está rechazando —Dijo Jeon Soyeon, con cierta molestia por el comportamiento de la señorita Mina.
— Es una lastima que la persona con más conocimiento acerca del caso P, sea una persona engreída —Dijo otro de los policías.
— Es cierto, su conocimiento no sirve mucho con la personalidad tan agria.
— Por cierto, ¿Leyeron el artículo que publicó ayer la señorita Mina? —Preguntó el señor Park.
— ¿Sobre los síntomas que presentaban los seleccionados? —Preguntó nuevamente Jeon Soyeon.
— Sí, ella ha dicho que desde siglos atrás las personas notaban los comportamientos de los seleccionados, entre ellos, alucinaciones, posiblemente un caso severo de esquizofrenia.
— Ah, sí, recuerdo que también lo mencionó en otro de sus artículos.
— También dijo que de todos los casos conocidos, los seleccionados son personas con una gran belleza, no se ha conocido ningún seleccionado que no sea agraciado.
— Que bueno que conocemos un poco de la información que sabe la señorita Mina, sino, no sabríamos que hacer en los operativos.
— Lo malo, es que nosotros nos encargamos del trabajo sucio, mientras el agente Kim solo revisa los casos.
— Por algo es el jefe —Dijo el señor Park, todos ya se encontraban afuera de las instalaciones.
Kim Namjoon se caracterizaba por ser una persona amable, alguien muy agradable y que nunca se molestaba, básicamente, un buen hombre.
— Moni, ya llegué —Dijo Kim Namjoon, y en cuanto su acompañante se acercó, lo acarició con una sonrisa dibujada.
— ¿Has tenido hambre?, Espera, te serviré un poco de comida —Volvió a hablar Namjoon, buscando entre las cosas la caja de comida para Moni, el cual mostraba su alegría moviendo su cola rápidamente.
Tan pronto como le sirvió de comer a Moni, se acercó a la cocina, tomando un vaso de agua y algunas pastillas de su frasco.
— No sirve de nada que me evites —Escuchó la molesta voz entre los muros.
— Cállate, siento que la cabeza me estallará, lo menos que quiero es que mortifiques —Dijo Namjoon,
Pronto, el reflejo de Namjoon apareció en el espejo que había en su departamento.
— No puedes controlarlo, aún si tomas esas absurdas pastillas para controlarte —Habló la voz.
— Muy pronto, esta situación terminará, y dejaré de escucharte.
— No puedes ocultar lo que eres, eres superior a cualquier persona que conozcas.
— ¡Cállate, yo no soy ningún seleccionado!.
Kim Namjoon se acercó al espejo, mientras cerraba su puño para por fin lanzarle un golpe, haciendo que el espejo se rompiera en mil pedazos, destrozando su propio reflejo.
Su perro, se alejó rápidamente por el sonido fuerte, con un poco de miedo, aunque Namjoon ni siquiera volteó a mirarlo, simplemente soltó un suspiro de alivio.
Una risilla malvada sonó por última vez en la mente de Namjoon, antes de quedar totalmente entre dormido debido al cansancio físico y mental.
El tono de llamada hizo que volviera a levantarse en un instante, aún con un gran dolor de cabeza que lo hizo marearse un poco.
— ¿Qué sucede? —Preguntó, sin siquiera mirar el nombre de la persona que lo llamó.
— Agente Kim, disculpe que lo interrumpa en su descanso, pero al parecer, acaban de reportar que encontraron a uno de los seleccionados.
Al instante el sueño que tenía Namjoon desapareció, comenzando a concentrarse en la conversación.
— ¿De quién se trata? —Preguntó Namjoon.
— Se trata de lujuria.
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