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CAPITULO 13: Relación

Bien ella no podía ayudar mucho en los problemas que tenía Edward, era varios, no le sorprendía que hubiera terminado de esa manera y apenas podía dormir, era extraño verlo tan vulnerable cuando estaba acostumbrada a verlo siempre tranquilo, perfecto como lo era el

Los problemas de Edward empezaron con su madre, que lo había sacado de la estación donde ella trabajaba, al irse y entrar a la escuela para policía todo fue marchando bien hasta que termino su entrenamiento y le dieron su rango actual

Según lo que entendió al graduarse lo ubican en una estación de la ciudad donde provienen, el solicito la de su madre pero la rechazaron a pesar de él buen rendimiento que tuvo, sus superiores se sorprendieron pero les gusto la noticia porque habían insistido en que se quedara en la sede principal de la ciudad, pensé que era una gran oportunidad pero Edward la rechazo

Sus superiores le ofrecieron un trato de ayudarlo a buscar una estación cerca de donde vivía pero tenía que quedarse por unos meses más ayudando en la estación y así fue, le consiguieron un lugar en la estación que quedaba al otro lado de la ciudad, se tardaron un poco porque la solicito se retrasó y por ender ya tenían las vacantes llenas pero lograron su cometido

Al llegar a la ciudad, su madre no se puso contenta por su puesto en otra estación al llegar discutieron, termino molestándose y se fue al parque, le conto que fue ahí donde la vio con Angel, le gusto porque creyó que estaban saliendo

Aun alterado volvió a su casa porque tenía que prepararse para su trabajo, no había un día que no discutiera con su madre hasta que un día le dio el ultimátum de que si no obedecía no podrían vivir bajo el mismo techo, se mudó con su hermano ante ese hecho, tuve que terminar un caso con el que trabajaban para volver a la universidad

Ese fue su segundo problema, retrasado en todas las materias y en esa semana que pareció tenía que entregarlas todas y con la estación al otro lado de la ciudad se le complico bastante por eso April pasaba por el a veces, el otro problema fue en el trabajo porque le asignaron vigilar a una persona sospechosa de robo y lo perdieron de vista por su culpa, April se estaba encargando de buscarlo ya que él estaba ocupado

Luego estaba el asunto de Inés, que ya lo sospechaba, discutió porque intento acercársele y el había notado toda la tensión, solo intento hablar con ella del asunto pero no termino nada bien, no pudo hacerla entrar en razón, ayudarla a dar el siguiente paso, aunque él no era el más indicado

Finalmente hace poco fue a visitar a Isabela con ayuda de su tía pero su madre termino apareciendo y discutieron, si le sumaba a eso la falta de sueño, Edward estaba hecho un desastre

—Sé que no es nada comparado con lo que te sucede a ti pero...

—Está bien, todos tenemos un mal día—me ve de reojo—Una mala semana pero está a punto de terminar, tu madre lo va a entender

—No la conoces, tiene un carácter fuerte, no por nada es la jefa de la estación

—Puedo ayudarte con tus actividades ¿Te quedan muchas?

—Tengo que enviar algunas a los correos—me siento a su lado sin soltar sus manos y me observa

—Hablare con Henry y Inés para que lo resuelvan, solo esta confundida o eso creo, el verte revolvió un poco su cabeza y no la culpa porque mírate—lo veo sonreirme, bajo la vista nerviosa—Las actividades puedes mostrarme y te puedo ayudar, soy más inteligente de lo que aparento

—Me gusta la iniciativa señorita Díaz—apretó nuestras manos inconscientemente al escucharlo—Pero tienes que irte, puedo seguir solo pero gracias por escuchar

— ¿Sabes lo difícil que es que te ofrezca mi ayuda? —lo miro ahora molesta, todo el valor que había reunido para poder ofrecerle su ayuda y el rechazaba—Te vas a dejar ayudar porque no soporto que la persona que me gusta se vea en este estado, lo demacrado no es tu estilo—no sé porque pero comenzó a reír

—No te entiendo, dijiste que querías ver todas mis facetas—suelta mi mano, yo la veo aun sintiendo el cosquilleo que me provocaba el tener la suya entre las mías—Iré al laboratorio de informática para terminar lo que me falta—seguía rechazando mi ayuda, estúpido Edward ¿Creía que se iba a deshacer de ella? Estaba muy equivocado si era así

—También tengo cosas que hacer ahí—me levanto para comenzar a caminar delante de él que le tomo unos minutos para reaccionar

—Esmeralda hablo enserio—aumento el paso al sentirlo cerca de mí— ¿Puedes dejar de ser tan terca? Me las ingeniare yo solo, no necesito ayuda

—Que irónico, porque lo mismo te he dicho desde que te conozco pero siempre me ignoras ¿Por qué debería escucharte yo?

—Porque soy más razonable que tú y lo sabes—entro al laboratorio que estaba vacío igual que la universidad, era esa parte del día—Esmeralda—siento como me toma de la mano y seguidamente me atrapa entre la pared y su cuerpo

—Me pregunto si solo yo puedo alterarte de esta manera—sonrió al ver su ceño fruncido y su mirada que tenía el mismo brillo que hace unos días— ¿Qué me harás Edward? ¿Mostrar tu verdadera naturaleza?

—Creí que eso ya lo habíamos dejado en el pasado...Escúchame por favor, ya hable contigo sobre este asunto, no podemos hacer esto, cuando todo acabe puedes hacer lo que tú quieras pero en este momento tu eres la prioridad

—Supongo que tenemos prioridades diferentes porque no quiero dejar de sentir y más si es contigo—bajo la vista, tenía miedo, sabía que tarde o temprano me arrebatarían lo que tenía en ese momento, solo le quedaba el disfrutarlo—Me pediste que viviera y es lo que hago en este momento, quiero hacerlo mientras pueda porque sé que no durara para siempre—lo veo para sonreírle—Tranquilo me asegurare de que no te pase nada si Brayan logra arruinarlo—me sorprendo al sentir como me abraza, suspiro para corresponderlo dejado llevar por su olor y la calidez que me ofrecía Edward

—No digas eso, me encargare que sigas viviendo conmigo o sin mí, si él lo arruina yo mismo lo arreglare las veces que haga falta

—Ojala fuera así de simple—no quería promesas que sabía que no cumpliría, lo alejo para escapar de sus brazos y tomar asiento frente a una computadora, me observa desde la puerta— ¿Comenzamos?

—Eres incontrolable—lo veo sentarse a mi lado para verme—Sera mejor que envíes un mensaje antes de que comencemos—sonrió tomando el teléfono que me ofrecí, Esmeralda 2, Edward 0

***

Abre mis ojos porque siento mi estómago rugir tenía hambre ¿Ya era hora de cena? Me incorporo para ver a mi alrededor, extrañada porque no reconocía el lugar ¿Me había secuestrado? Era una habitación que nunca había visto, estaba hecha un desastre porque habían varias hojas regadas por todo la habitación

Tomo una que estaba cerca de la cama donde estaba sentada, era un historial médico ¿Era la habitación de un doctor? ¿Por qué la secuestraria? Al menos que fuera aquella doctora pero Angel le dijo que estaba en prisión

Dirijo mi mirada a una laptop que estaba sobre una mesa pequeña, estaba encendida, en el fondo pudo reconocer a Edward junto a aquel perro, ahora recordaba que se había quedado con Edward en el laboratorio y termino durmiéndose después de ayudarlo con varias cosas, para ese punto ya había oscurecido ¿Por qué estaba en su habitación?

—Despertaste—me sorprendo al ver a Edward de pie en la puerta, estaba con un uniforme de policía, le quedaba muy bien—No te asuste, no intentaste nada conmigo si es lo que crees—los recuerdos de Angel y yo jugando me viene a la cabeza, no soportaría tal vergüenza frente a Edward

—Entonces fuiste tú—por supuesto que no, porque conocía muy bien la sensación, en ese momento se sentía descansada y con hambre

—Mal chiste—se acerca, ahora era consiente que llevaba una bolsa—Es tu ropa, Carlos la trajo para ti, dijo que no tenía nada de qué preocuparte, tu primo no vuelve sino hasta el lunes por la noche—la tomo y lo veo esperando una explicación—no quise llamar tan tarde a tu chofer así que mi hermano nos trajo y le envié un mensaje a Carlos diciéndolo donde estarías, lo leyó esta mañana y me trajo eso ¿Satisfecha?

—No lo suficiente, es la primera vez que duermo fuera de mi casa y encima en la habitación de un hombre—bajo la vista nerviosa por la situación

—Juro que no toque ni una hebra de cabello, ni siquiera dormí aquí fue en el sofá de la sala—ese hecho me decepciono un poco, si había una persona con la que no le molestaría dormir seria Edward, el imaginarse así le gustaba

— ¿Cómo es desear a alguien? —me ve sorprendido, inevitablemente me vino a la mente a Edward sin camisa igual yo ambos tocándonos de una manera muy intimida— ¿Cómo es?

— ¿Tienes hambre? Debería ducharte y luego comer, mi hermano salió temprano así que no te preocupes por sentirte incomoda—le tomo la mano antes de que pudiera escapar—No me hagas esto

—Edward seguro lo haz sentido antes, respóndeme ¿Se siente bien? Mi experiencia en las relaciones es muy corta y más cuando es deseada

—Pregúntale a Emma, seguro sabe responderte mejor que yo, no pienses en esas cosas si no te gustan—era cierto no me gustaba, pensaba que era un acto repugnante pero imaginármelo con Edward de esa manera era diferente

—Igual quiero saber de ti, no leí mucho del asunto porque me repugna, hasta en los libros me saltaba esas partes

— ¿No es muy temprano para hablar de eso? —frunzo el ceño viéndolo—Bien, solo lo repetiré una vez—me gustaba verlo avergonzado—Desear a alguien, es cuando vez a una persona y el tiempo que estas con ella no es suficiente siempre quiere mas, el solo besarla te provoca una sensación casi electrizante recorrer tu cuerpo, sientes una sensación extraña en todo tu cuerpo un poco dolorosa pero quieres más, una ráfaga de aire caliente te envuelve y puedes sentir que tu piel quema pero no es dolorosa, el aire te falta pero sientes que todo tu cuerpo se enciende y solo hay una manera de apagar ese fuego—se libera de mi agarre—Estoy en la cocina, el baño es la puerta al salir de tu derecha—lo veo salir dejándome un poco anonada por la explicación

Algo parecido le sucedió con Edward cuando se besaron en el auto, quería más del pero ¿Debía satisfacer lo que su cuerpo le pedía? El hecho le daba terror aunque no debía temer si se trataba de Edward pero igual tenía miedo, no se le había pasado por la cabeza tener algo así con una persona y que le gustara

—Se puede sentir incomodo—me levanto para salir y dirigirme a la puerta que me indico para comenzar a desnudarme, observo mi cuerpo ¿Qué le podía provocar a Edward con eso? No debería pensar en esas cosas

***

Edward no me había dejado de observa, seria por el vestido morado oscuro que llevaba, Carlos no conocía mis gusto definitivamente, por suerte el vestido solo mostraba mis piernas que a diferencia del resto de su cuerpo era decente

—Tengo que ir a trabajar ¿Llamo a Carlos para que venga por ti? —Veo mi comida, estaba muy buena pero mi hambre se había esfumado

—Ya le enviare un mensaje y a Albert, se suponía que nos viéramos hoy a primera hora, será imposible—dejo el cubierto para arreglar las mangas de mi vestido que cubría parte de mi mano, solía llevar guantes que cubrieran mis muñecas por unas marcas que solía tener en ellas, Brayan solía atarlas

— ¿No vas a comer más? Si dices que cocino pésimo ambos sabemos que es mentira, no comiste nada Esmeralda

—Porque no tengo hambre—saco mi celular para enviarle el mensaje a Carlos—Lo esperare cerca para que puedas irte—me sorprendo al verlo a mi lado—Edward el espacio personal es muy importante

—Ya pasamos por esa etapa, ahora—lo veo tomar un poco de mi comida para extenderme el cubierto—Come, no te moverás hasta que lo hagas

—No soy una niña ¿Por qué no dejas el jueguito y dejas que me vaya?

—No es un juego—me ve—Si lo haces puedo enseñarte algo que me gusta hacer aunque hace mucho que no lo hago—eso no funcionaría conmigo ¿Qué se creía?

—Edward no tienes poder sobre mí, es una lástima supongo—me levanto pero él me toma del brazo antes de que me marchara—Basta

—Sé que te va a gustar otra primera vez—No sabía si solo me imaginaba cosas pero solo pude pensar en Edward y yo sin camisas en una habitación

—Más te vale que valga la pena—abro la boca para dejar que comience a alimentarme, se sentía bien ser consentida, hace años no me sentía de esa manera—Terminamos—lo veo tomar un sorbo de mi jugo, frunzo el ceño porque era la mejor parte de la comida, me gustaba jugar con el hielo—Oye eso debería estar tomándolo yo, eres un...—me sorprende tomándome de la nuca para unir nuestros labios y hacerlo siento el frio contra ellos sacado un leve gemido, una extraña sensación recorre mi cuerpo, me gustaba, si pensarlo correspondo sintiendo como el hielo que llevaba se derretía entre nuestro beso, era delicioso, podía sentir el saber del jugo en su boca y el frio que salía de ella invadiendo la cálida de la mía

— ¿Te gusto tu primera vez? —Se levanta para entregarme el vaso de jugo—vamos se me hará tarde—lo veo molesta por dejarme de esta manera, no era justo ¿Eso era todo?

—Que cruel eres, todo este tiempo engañada—lo sigo que se estaba dirigiendo hacia su habitación—Estas siendo muy injusto, creí que lo tuyo era la justicia

—Te ofrecí un trato y ambos cumplimos nuestras partes ¿Qué parte es injusta?

—Todo, me merezco más que eso—lo veo recoger las hojas esparcidas por la habitación, tenía curiosidad de porque tenía esos expedientes médicos pero estaba más interesada en porque me sentía así— ¿Ahora me ignoras?

—No creo que quieras discutir por esto—guarda las hojas en una carpeta para meterlas en su bolso junto a su laptop—Vamos se me hará tarde—me pongo frente a la puerta para cortarle el paso—Esmeralda

— ¿Qué me hiciste? Quiero aprenderlo para intentarlo, se supone que me enseñas y estas ignorando a un aprendiz—sonríe al escuchar mis palabras—Ed

—No tiene nada de complicado pero si no quieres que pase más de un beso es mejor que no lo hagas seguido, basta con hielo o helado funciona muy bien, te sientes así porque el interior del cuerpo humano es cálido, el frio es una sensación diferente a lo que estás acostumbrado

—Entiendo ¿Qué hace en caso de que quieras más? —sonríe y veo como deja su bolso de lado para luego tomarme de la cintura

—Intenta complacerte—sonrió uniendo nuestros labios para seguir lo que dejamos en la cocina, no se cansaría de besar a Edward y de sentirlo cerca, le gustaba dejarse llevar por su roce, dejar que todos sus sentidos se concentraran en cada sensación

Siento como sin dejar de besarme nos movemos lentamente hasta sentir como toco una superficie acolchonada, subo una de mis manos hasta su nuca para profundizar más el beso y la otra la entrelazo con él para poder sentirlo más cerca, nuestras piernas se entrelazan para poder sentirnos el uno del otro

Poco a poco siento como la mano de Edward se aventura a dejarme cintura para depositarse sobre mi pierna, provocando estragos en todo mi cuerpo, su manos se sentía más cálida de lo normal ¿Era esa sensación de la que él hablaba? Que sentía su cuerpo entero arder aunque por ahora solo se podía concentrar en la mano de Edward subir y bajar en su pierna, sacándome varios suspiro aparte de sus fogosos besos que habían aumentado el ritmo

Podía sentir como en mi vientre se acumulaba una sensación extraña, un poco dolorosa pero le gustaba esa sensación, quería mas de ella, libero la mano de Edward para comenzar desabrochar los primeros botes de su camina y dejar una abertura para mi mano, comienzo a acariciar su pecho sintiendo como ese delicioso dolor aumentaba un poco más pero siento como dejo de respirar al sentir un bulto entre mis piernas provocando un leve jalón en mi sexo

—Esmeralda—siento como Edward deja de besarme para verme, su cabello antes arreglado, estaba vuelto un desastre y su respiración estaba acelerada igual que la mía, desde mi perspectiva parecía un Dios griego, sus ojos brillaban con intensidad pero noto como frunce el ceño dirigiendo su mirada mi mano que la había depositado sobre la cama— ¿Qué sucede? —siento como si mano toma mi rostro limpiando unas lágrimas que caían, apenas era consciente del temblor de mi cuerpo, como me faltaba el aire y como mi cuerpo no respondía mas a mis acciones, la cabeza comenzaba a dolerme—Lo siento yo...

—Está bien—por fin puedo recuperar mi voz y lo sostengo del brazo al notar que tenía pensando moverse—No quiero que te muevas, no odio esto Edward, nada de lo que me haces sentir pero mi cuerpo dice otra cosa creí que...

—Está bien—me sonríe para besarme la frente—Te dije que tenemos que ir con cuidado y lo más lento que podamos, detengamos mientras pueda arreglar mi vida y tu tus sentimientos, es normal porque no lo ha experimentado—tenía razón a pesar de mi edad, nunca había sentido nada de eso, todo era nuevo para mí—Dejemos para después esas primeras veces

—No me gusta que tengas la razón siempre—No quería pero sabía que me tenía que acostumbrar a todo eso aunque fuera frustrante

—Tienes que acostúmbrate porque pasa seguido ¿Puedo moverme? —asiento porque si seguía viéndolo aun en contra de mi cuerpo pensaba continuar por la visión que me ofrecía, al segundo que lo veo alejarse me arrepiento pero unos minutos después aparece frente a mi ahora con su cabellos nuevamente arreglado igual de su ropa—Vamos, quiero darte algo—me ayuda a sentarme y toma mi mano, luego me veo como me coloca una pulsera con varias figuras de pájaros pequeños parecía cada unos iba haciendo un movimiento diferente simulando que estaba volando

— ¿Una pulsera? ¿Dónde la conseguiste?

—La compre en una ocasión que salí en la capital, observa que no es cualquier ave, me recordó a tí cuando los vi—si era diferente por el color que tenía—Es un gorrión hembra, un dato interesante que aprendí de ellas es que para atraer a su pareja lo trata mal y molesta con el—frunzo el ceño al entender—No te molestes de esa manera terminaste atrayéndome a mi además al igual que ella aprenderás volar con toda la libertad que quieras—siento como me abraza—Lo prometo—se escucha la corneta de un auto—Debe ser Carlos, vamos—me besa la mejilla para levantarse y tomar su bolso—Ya voy tarde ¿Me llevas?

—Por supuesto—me levanto para pasar por su lado—Gracias—lo veo sonreír al seguirme, me gustaba bastante la pulsera y era un regalo de Edward otra razón más para conservarlo muy bien

***

No tuvo problemas con Brayan, parecía que no se había enterado de nada, estaba ocupado con varios asuntos según lo que le informo Gilberto aunque no le dijo que exactamente pero a ella no le importaba nada de lo que tuviera que ver con su primo

Pero si tuvo un pequeño problema esa mañana cuando regreso a la universidad que fue Emma, gracias a la inteligencia de Carlos tuvo que inventar que tuvieron que hacer una actividad junta y se quedaron en su casa aprovechando para tener una noche de chicas, lo hizo por si terminaban llamándola o algo así

Emma si accedió pero esa mañana la lleno de mil preguntas de donde había estado metida el fin de semana porque Albert le dijo que había cancelado su cita en el parque para el día siguiente, no pudo mentirle a su amiga y le conto donde estuvo pero solo provoco más preguntas que le advirtió que le respondería a la hora de almorzar

Al principio le dio vergüenza contarle pero no le dio detalles de lo que hicieron o más bien de lo que no hicieron pero no fue capaz de decirle porque el decepcionante final, se preguntaba si sería capaz de contarle a Emma todo lo que pasaba en su vida, un día tendría que despedirse y sin ningún motivo

—Meck pero creí que tenías algunos problemas con los hombres

—Lo sé por eso no pude continuar pero Edward lo comprendió—le muestro mi pulsera—Me regalo esto, te reirías si te digiera el significado

—Son gorriones ¿No? —Asiento—leí que en su época de buscar pareja...—frunzo el ceño al ver que sabía, ella solo ríe—No puedo creerlo

—Es un imbécil ¿Por qué me dice que fue mi única manera de atraerlo?

—Sabes que desde que lo conoces no ha sido precisamente amable con él, tiene mucho sintiendo que te compare además me gustan esas aves

—No las he visto y no las quiero conocer tampoco—la veo sonreír pero no era cualquier sonría, sabia de que venía—No sea lo que sea

—Ni siquiera me has dejado decirte mi idea—se acerca—El zoológico está a un par de horas de viaje de aquí, podemos invitar a todos, solo para celebrar el regreso de Edward

—Sabes que Brayan no le gusta que salga mucho, ya lo conoces

—Ese primo tuyo es un aguafiestas pero déjamelo a mí, podrás llevar a tu hermano, apuesto a que no ha ido a uno antes—era cierto pero Brayan ni loco la dejaría salir con Emma y sus amigos, no les agradaba, ni siquiera sabía si con Emma solo fingía pero no quería tentar a la suerte

—No puedo ya me arriesgue a que me descubriera con Edward

—Pero no te arrepentiste, te sobreprotege mucho ¿Y si lo invitamos a el? —el solo hecho de imaginar a Brayan, Angel y Edward en una misma habitación me provocaba nauseas, no podría terminar bien

—Perdiste la cabeza, llevar a Brayan a un zoológico con ustedes es una locura

—A mí no me lo parece—veo a Angel que se sienta al lado de Emma y besa su mejillas para verme—Es cierto podríamos conocerlo mejor y nos dará más confianza—no sabía si hablaba enserio o solo era otra broma de Angel

—No puedes hablar enserio, no aceptaría y tampoco quiero que lo haga

—Solo lo conoceremos, Nunca he visto una estrella como el, controla una gran empresa sería un honor conocerlo—sospechaba porque lo quería conocer, aunque no sabía para quien resultaba una ventaja

—Podría ser cuando nos aligeremos de tareas, en un mes estaría bien y alquilamos algún camioneta aunque tu familia debe tener muchas y...

—No pueden conocerlo Emma, sabes cómo es, apenas y te dirige la palabra—Convencer a Angel era un caso perdido pero con Emma era diferente

—Quiero que tenga más confianza si nos conoce más, te dará la libertad que tú quieres—ojala y fuera tan sencillo, su amiga no sabía nada—Y quién sabe si conoce a Edward poco a poco

—Basta—eso dos hombres no podía conocerse, ni en pintura, no quería que conociera a ninguno, ya le había advertido que no le agradaba pero si iba Henry lo reconocería al instante o si lo mencionaba, no sabía que iba a hacer en su contra, no quería nada de eso—Olvídate del tema, dije que no

—Tampoco es para que te alteres—frunzo el ceño viendo a Angel que sonreía burlonamente, no estaba jugando quería conocerlo pero sabía que a través de ella no lo iba a lograr—Solo pensábamos que sería divertido y quién sabe si le caemos bien pueda aceptar que salgas más, además todos me adoran cuando me conocen—Esos dos se odiarían si cruzaran palabra

—Angel ya deja el tema de una buena vez, no conocerás a Brayan y ya

—Bien pero sabes que pasara tarde o temprano

—Angel—vemos a Edward que se acercaba a paso rápido a nuestra mesa— ¿Podrías contestas el celular? —parecía alterado por algo

—Lo siento se me acabo la batería ¿Para que soy bueno? —noto como recorrer la mesa con una mirada y sus ojos se quedan fijos en mí, parecía preocupado

—Lo encontré, el nombre—veo a Angel levantarse repentinamente para tomar el papel que Edward le estaba ofreciendo, me lanza una mirada para luego sonreírme ¿Qué estaban planeando esos dos? 

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