Oscuros Recuerdos
I'm back,bitches!! Joder, Italia fue una pasada, y si, me enamoré muchas veces, pero no, no encontré a Ettore jajajaja. Bueno, aquí estoy con un capítulo nuevo y miren por donde, ya vamos por el capítulo 18 y parece que no avanza la historia jajaja, habrá acción, lo prometo. Aquí les dejo un capi protagonizado por Maikel!!!!
Besazos :D
**********
Capítulo 18
MAIKEL (P.D.V)
Cerré la puerta de mi habitación y mientras me dirigía a la ducha, me iba quitándo la ropa hasta quedar completamente desnudo. Me paré en frente del espejo de cuerpo entero que tenía en el baño y me quedé mirándo fijamente mi cuerpo.
Cuando voy por la calle es fácil llamar la atención con las espaldas tan anchas que tenía y las venas que recorrían mis brazos, además de por mi esplendorosa sonrisa y mis increíbles ojos azules. Pero nada de eso me importa a mi. Mi cuerpo para los demás es solamente una escultura, pero para mi, mi cuerpo es un lienzo en el cuál escribo mi historia. Mi cuerpo es aquel que nadie ha visto sin ropa desde la primera vez que me hice un tatuaje. Mi cuerpo es aquel el cuál Nikki fue la última persona que lo vio.
Vivía con seis personas en una casa, compartía momentos importantes con seis personas a las cuáles considero mi familia. Pero nadie, absolutamente nadie, podría jamás descifrar lo que mi cuerpo lleva impreso con tinta;nombres, fechas y últimas palabras. Mi cuerpo estaba lleno de los nombres de todas las personas que había matado,junto a la fecha en la que lo había hecho y las últimas palabras que me dedicaron antes de morir.
Yo no era una persona normal, nisiquiera era como las personas con las que vivían. Ellos habían aceptado su pasado,su presente y su futuro, pero yo no. Yo no había aceptado lo que me había pasado, yo no acepto lo que estoy viviendo y sé que jamás aceptaré lo que haré. No soy una persona normal porque mato gente, pero tampoco soy como las personas con las que vivo porque no me gusta mi trabajo. Soy un alma solitaria, soy una persona que no tiene familia, soy una persona a la que no le queda absolutamente nada y a la cuál, el corazón no le late. Soy una persona distinta a las que mis amigos ven todos los días, soy una persona distinta a la cuál yo veo en el espejo.
Me metí en la ducha y abrí el grifo de agua fría, porque así es como mi cuerpo estaba, frío. Al igual que los cadáveres que había ido dejándo tras de mi en el paso de los años.
Mostraba sonrisas y daba abrazos, sentía cosas por las personas que me rodeaban,pero era como si estuviese muerto. Nada me motivaba en esta vida,porque la única cosa que podía motivarme, sabía que jamás estaría a mi lado.
FLASHBACK
- Cuéntame Maikel, ¿cómo es tu familia? -Preguntó Natasha cuando se sentó delante de mi.
Mi pierna derecha no paraba de temblar y no podía dejar quietas mis manos.
- Son personas muy amables -Respondí después de aclararme la garganta.
Tenía doce años y jamás había estado tan asustado como ahora. Iban a dejarnos salir de este edificio en el cuál habíamos estado cuatro años.
- ¿Te acuerdas de todos ellos?
- Si -Contesté sin pensar.
Los ojos de Natasha se clavaron fijamente en los míos.
- ¿Después de cuatro años sigues pensando en tu familia?
Tragué fuertemente y empecé a sudar. Sabía que había cometido un gran error.
- De vez en cuando pienso en ellos -Susurré intentando tranquilizar mi respiración. No era capaz de mantenerme bajo control.
- Dime el nombre de tu hermana pequeña, Maikel -Dijo Natasha mientras se levantaba para acercarse a mí.
- Melanie.
- ¿Cuántos años tendría ahora?
- Diez.
- ¿Y tu hermana mayor como se llama?
- Julia.
- ¿Cuántos años tendría ahora?
- Dieciséis.
- ¿Y tus padres, Maikel?¿cómo se llaman? -Preguntó mientras se ponía a mi altura.
- Gerard y Leah.
Mis ojos se estaban llenándo de lágrimas.
- ¿Por qué te acuerdas de ellos? son tu pasado y nosotros somos tu presente. Ellos ya no son tu familia,Maikel. Ellos ya no existen para ti.
- Si son mi familia -Contesté sin pensar mirándola fijamente. Toda la rabia que sentía hacia ella se demostraba en mis ojos llenos de lágrimas.
Cuatro años atrás me habían separado de mi familia, cuatro años atrás habían destruido mi infancia y todo mi futuro como una persona normal.
- No son tú familia, Maikel. Ellos dejaron de ser tu familia en el momento en el que te acogimos. Los chicos con los que entrenan, si son tu familia,y puedo decir que yo soy tu madre. Soy la madre de siete increíbles chicos -Dijo con una enorme sonrisa.
- No, tú no eres nuestra madre. Nuestras madres son buenas personas, y tú no les llegas ni a los talones -Grité pegándome a su cara.
Ella sonrió aún más ampliamente antes de colocarse derecha.
- Christopher fue muy rebelde cuando llegó aquí, pero parece que tú supistes esconder bien tu rebeldía durante el paso de los años, y eso es algo que admiro de ti, Maikel. Siempre tuve grandes expectativas contigo. El chico callado que ayuda a todo el mundo pero que a la vez se aleja de todos..siempre fuistes una incógnita para nosotros,pero parece que ya no lo eres más.
Tragué fuertemente. El corazón me iba tan rápido que podía asegurar que ella estaba escuchando mis latidos.
- Te aferras mucho a tu antigua vida y parece que no te quieres dar cuenta de que no vas a volver jamás a esa vida, que nos perteneces. Parece que no te quieres dar cuenta de que fuera de aquí no te queda absolutamente nada y que nosotros somos lo único que tienes en este mundo -Su ceja alzada me produjo escalofríos.
Podía decir lo que quisiese, pero yo sabía que algún día podría volver con mi familia. Me daba igual lo que dijese, porque yo sabía que mi familia seguía viviendo donde siempre lo habían hecho. Mi familia me quería y sabía que jamás se olvidarían de mi. Si, se que llevaba cuatro años secuestrados y que seguramente ellos pensarían que estaba muerto, pero eso no significa que no me recordasen. Yo sabía que mi familia me seguía queriendo, y aunque mi esperanza era baja, podía confiar en que algún día volvería a verlos.
- ¿Sigues teniendo la esperanza de alejarte de nosotros,Maikel? -Preguntó.
Miles de situaciones pasaron por mi cabeza antes de que abriese la boca para contestar, pero mi respuesta llegó demasiado tarde.
- No -Ella sonrió cortante, se acercó a un portátil que había en la sala y lo encendió.Luego lo puso delante de la mesa.
- ¿Qué es eso?
Empecé a hiperventilar.
- ¿Qué es eso, Maikel? contéstame -Susurró muy cerca de mi oído.
- Mi casa.
Se acercó al teclado y luego de pulsar una tecla, la imagen empezó a acercarse y pude ver claramente como una niña rubia de unos diez años corría por el jardín.
- Te presento a Melanie, Maikel. La última vez que la vistes tenía seis añitos -Dijo Natasha antes de apretar otra tecla y que se empezasen a oír sonidos.
Las lágrimas se acumulaban en mis ojos y querían salir. Pero no podía dejarlas salir, eso era lo que Natasha quería.
- Vaya.. tu madre es una mujer muy hermosa -La voz de Natasha no paraba de provocarme escalofríos, pero la voz de mi madre al hablarle a Melanie provocó que empezase a llorar. Echaba tanto de menos su voz- oh, mira.. parece que tu padre y Julia han llegado. La familia al completo está en casa.
Empecé a temblar incontrolablemente y no podía parar de llorar. Estaba viendo a mi familia después de cuatro años.
- ¿Estás llorando, Maikel?¿por qué?¿quieres estar ahí con ellos? -Preguntó mientras me acariciaba la mejilla.
Solamente solté un sollozo desgarrador. No me avergonzaba llorar porque los hombres también lloran.
- Siento decirte que jamás podrás estar con ellos.. ¿y sabes por qué? porque eres nuestro. Mira fijamente la pantalla.
Miré la pantalla y antes de poder darme cuenta de lo que estaba sucediendo, vi como mi casa volaba en pedazos y la risa de mi hermana pequeña ya no se oía.
- Ahora solo nos tienes a nosotros, Maikel. Siempre les enseñamos que no tienen que tener sentimientos y que se olvidasen de su familia. Mira lo que ha pasado por tu culpa, Maikel. Tú acabas de matar a tu familia entera. No le has dado la oportunidad a Melanie de conocer mundo,ni a Julia de poder graduarse. Que hermano más egoísta eres -Susurró en mi oído antes de salir de la sala y dejarme solo viendo como los bomberos llegaban a la que antes había sido mi casa y ahora solo era un lugar donde había explotado una casa.
FIN DEL FLASHBACK
Salí de la ducha y me sequé rápidamente antes de volver a ponerme una camiseta que alejase mi cuerpo de las miradas curiosas.
- Maikel, ¿estás en el baño? -Preguntó Nikki. Sin esperar respuesta abrió la puerta.
- ¿Sabes que podrías encontrarme en bolas? -Pregunté mientras terminaba de ponerme los calzoncillos.
- ¿Sabes que no me importa? -Su sonrisa era siempre la que conseguía alejarme de los oscuros recuerdos- ¿te encuentras bien?
- Perfectamente, princesa -Dije al pasar por su lado.
Nikki era como una hermana para mi. Nikki era la chica a la que había cuidado como si fuese una de mis hermanas. Nikki era la persona que más me importaba en este mundo y por la que daría la vida si hiciese falta.
- ¿Me querías para algo?
- Sólo para decirte que voy a hablar con Natasha para que me dé otra misión y después volver a esta. Esto de estar solamente en un sitio no es bueno para mi -Sonrió mientras se apoyaba en la pared.
Mentía, pero decidí darle su espacio porque ella también sabía cuando yo mentía y no me atosigaba.
- Me parece bien. Tú nunca has sido de las que les gusta estar en un lugar fijo -Sonreí.
Siempre había admirado a Nikki por su entereza y por su forma de afrontar la vida. Ella y Christopher eran las personas más fuertes que conocía. Aunque todos los demás habían aceptado este tipo de vida, Nikki y Christopher habían sido las personas que prácticamente nos habían sacado adelante. Ellos habían matado gente cuando nosotros no habíamos podido, ellos se habían echado las culpas cuando había sido culpa nuestra.
- Siempre me tendrás a mi -Dijo acariciándo mi mejilla cuando se acercó.
- Y tú sabes que siempre me tendrás a mi -Sonreí antes de abrazarla.
Nikki había sido la hermana que nunca pude cuidar,Nikki había sido la amiga que siempre quise tener y Nikki es la persona más increíble que jamás había conocido. Puede que una vez sientese atracción hacia ella, pero el cariño y la amistad que sentiamos los dos, era aún más fuerte que ideas románticas. Era mi hermana,mi mejor amiga y mi familia y nadie jamás podría romper el lazo que nos unía, porque si una cosa tengo clara, es que si sirvo para algo, es para querer a alguien y cuando siento algo, lo siento para toda la vida.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro