Apariencia de ángel, personalidad de demonio
Al lado de cada nombre de las misiones he puesto quién es el encargado. Espero que disfruten:)
Que tengan unos felices reyes!!!!!!
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Capítulo 6
EIDAN (P.D.V) --> Nikki.
Apagué el despertador de un golpe. Abrí los ojos y me quedé mirándo el techo de mi habitación. La cabeza me dolía horrores debido a todo lo que había dormido.
- ¡Chicos, el desayuno está listo!
Me giré hacia un lado y amortigué el sonido de la voz de mi madre con la almohada. No tenía ganas de levantarme, quería seguir tumbado en la cama, sintiendo que era verano, que podía levantarme e irme hacia la playa, que podía pasarme todo el día fuera de casa entrándo solamente para ducharme,comer y dormir; quería irme de fiesta.
Pasaron unos minutos antes de que por fin decidiese levantarme de la cama y entrar al baño para darme una ducha rápida. Si iba a ir a clase, por lo menos tenía que estar presentable, nadie sabe quien se te puede poner por delante.
*
- Chicos, tengo que viajar hasta Miami. Estaré fuera hasta el sábado por la noche -Anunció nuestra madre.
Mi cabeza se levantó con la misma del plato. ¿Madre fuera?¿casa sola con tres adolescentes?¿casa sola con el capitán del equipo, a cargo?
Escondí una sonrisa.
- ¿Cuándo te vas? -Pregunté. Esperaba que no se notase lo ansioso que estaba porque se fuese de una vez. No me malinterpreten, adoro a mi madre, pero joder, ¿cuántas oportunidades habían de que una madre se fuese de viaje por trabajo y dejáse a sus hijos solos? pocas, muy pocas.
- Pues mi vuelo sale en cinco horas -Sonrió mordiéndose el labio y me miró alzándo una ceja- Eidan..
Si, conocía ese tono como la palma de mi mano. Ahora vendría la charla de 'no fiestas mientras yo esté fuera'
- Lo sé mamá, no fiestas mientras estés fuera -Sonreí como un verdadero angelito.
Soltó un suspiro y se pasó las manos por la cara.
- Cariño, se que estás en la edad de ir a fiestas y pasártelo en grande, yo también tuve tu edad, pero... no quiero que hagas fiestas, en serio, hay cosas que podrían romperse y además, sabes que no me gusta que hagas fiestas sin que yo esté aquí.
Solté un bufido. Dios, ¿en serio me estaba dándo ésta charla ora vez?
- Mamá, te lo he dicho cientos de veces, los que vienen a mis fiestas, vienen bajo su responsabilidad, si se quieren chutar cualquier cosa no es problema mío y estés o no estés tú aquí, no va a hacer la diferencia.
Vale, la había cagado desde el momento en que solté la palabra 'chutar' ¿por qué? sus ojos ahora estaban duros y se había cruzado de brazos.
- No se te ocurra montar una fiesta mientras yo no esté dentro de esta casa ¿te queda claro? me da igual si sus padres dan consentimiento o si ellos son mayores de edad, aquí no se celebran fiestas y punto, ¿me has entendido Eidan?
Suspiré irritado.
- ¿Qué si me has entendido?
Odiaba cuando me repetía las cosas.
- Si mamá, lo he entendido perfectamente. Nada de fiestas mientras tú no estés aquí.
- Bien, me encanta saber que tengo un hijo tan responsable que no pensaba hacer fiestas mientras yo no estuviese aquí -Su sonrisa era enorme.
- Si mamá, me encanta ver como te autoconvences -Sonreí.
Ella soltó una carcajada, y después de darnos un beso a los tres, subió para empacar.
- Genial Eidan, nos has dejado sin fiesta -Susurró Luca soltándo la cuchara con la que se comía sus cereales.
Me pasé las manos por la cara en vez de hacerlo por el pelo, como realmente tenía ganas, pero claro, si lo hacia, me destrozaría el peinado y tendría que volver a mi habitación a hacermelo y eso tomaría como casi diez minutos dejarlo tan perfecto.
- No te preocupes hermano, se me ocurrirá algo.
Luca se levantó y después de dejar sus cosas en el lavavajillas, salió de casa.
Levanté la vista y la clavé en David, nuestro hermano mayor. Pero claro, al ser trillizos que fuese mayor o no, eso daba realmente igual.
- ¿Y tú?¿no dices nada? -Pregunté. Me exasperaba ver como mi hermano era asi de geek.
- No tengo nada que decir. Hicieses fiesta o no, yo no iba a bajar -Se encogió de hombros sin levantar la vista de su comida.
Negué exasperado y me levanté.
- Te doy cinco minutos para salir, no quiero llegar tarde -Susurré furioso.
Salí de mi casa dándo un portazo y me centé en el coche a esperar a que mi hermano saliese. No entendía por qué era así y por qué se portaba tan retraído con su propia familia.. de verdad,¿por qué era tan diferente a mi o a Luca? incluso Luca teniendo la personalidad que tiene, es más agradable para estar que con David.
*
ALICIA (P.D.V) --> Christopher.
El chófer me dejó en la puerta del instituto, como siempre, y me encaminaba hacia la entrada cuando le vi.
- Buenos días -Dijo al pasar por mi lado.
Una parte de mi quería ir hacia él y pegarle la hostia de su vida, pero la otra parte más sensata y orgullosa, fue la que ganó. Respiré profundamente y adopté su ritmo.
- Buenos días, Eidan -Sonreí hacia él.
Le odiaba con todas mis ganas, pero no debía demostrarlo. Tenía que dejar ver que los reyes del instituto tenían una buena amistad. No corrían rumores sobre nosotros, por lo cuál, yo no debía avivar ninguno.
Eidan se paró y me miró frunciendo el ceño.
- ¿Me acabas de responder al saludo? -Su tono era enteramente de sorpresa y yo no hice otra cosa que sonreír falsamente.
- ¿Por qué no iba a hacerlo? seguimos siendo amigos.
Él entrecerró los ojos hacia a mi y después de mirar a nuestro alrededor con disimulo,sonrió también.
- Vaya, vaya, parece que la princesita no quiere que sepan lo que realmente pasó.
Apreté los dientes fuertemente. Maldito estúpido.
- Eidan -Hasta me costaba decir su nombre- por el bien de los dos, será mejor que esa noche quede entre nosotros.
- ¿Por qué? -Se cruzó de brazos y alzó una ceja hacia a mi- sabes que los chicos nunca resultan perjudicados.. por lo cuál.. ¿por qué debería callarme?
- Si alguna vez te importé aunque sea un poquito -Aquello estaba siendo humillante- será mejor que no digas nada.
- Me sorprende lo que estoy viendo, Alicia. ¿De verdad estás rebajandote a hablar conmigo? -Se acercó a mi para hablarme al oído- ¿realmente Alicia Madison tiene tanto miedo a las habladurías?
Apreté la mandíbula hasta tal punto que pensé que me la rompería.
- Eidan, me quedan tres años en este infierno, asi que más te vale que no digas nada, no quiero que la gente hable de mi.
- Eso es difícil, ya la gente habla -Se encogió de hombros colocándose derecho.
- Pero no quiero que me miren ni con lástima, ni pensando que no tuve lo suficiente que tiene que tener una mujer para amarrar al mítico capitán de fútbol. Esto es demasiado duro para mí, Eidan, te lo estoy pidiendo como la amiga que una vez fui para ti.
- ¿En serio alguna vez fuiste mi amiga? Alicia, realmente no tuvistes lo que hacía falta para amarrarme, asi que ahora no vengas pidiendo que no diga nada. Yo no tuve la culpa de lo que pasó, la tuviste tu.
Y así, sin más, se fue dejándome con la boca abierta. Eidan puede tener aspecto de ángel, y puede que cuando hables con él, realmente lo parezca. Pero Eidan es un demonio con la apariencia de un ángel.
Todo el mundo alrededor me miraba, por lo cuál, colocándo una sonrisa en mi cara, entré.No tenía que dar un espectáculo con las ganas que tenía de gritar.
DAVID (P.D.V) --> Héctor.
La miré pasar por mi lado y me escondí un poco más en la taquilla. No quería que me viese. Realmente me avergonzaba que esa chica me mirase y viese la apariencia que tienen mis hermanos y notase la personalidad que tengo; retraido,asustadizo y tímido. Realmente dudaba que ella supiese que yo extistía.
- ¿De qué te escondes?
Me giré de golpe y me encontré con Luca mirándome con el ceño fruncido.
- De nada -Cogí mis cosas y cerré de un golpe la taquilla para empezar a andar a paso rápido. Quería alejarme lo más posible de él.
Iba tan ensimismado en mi mundo que no vi que choqué contra alguien.
- Lo siento -Susurré rápidamente mientras cogía mis cosas.
- Soy Héctor, estoy en clase contigo -Susurró mientras cogía sus cosas también.
Era el chico nuevo, el ruso que había llegado ayer al instituto. ¿Qué quería?¿hacer amigos?
- Yo soy David, y se que estás en clase conmigo -Cogí mis cosas y seguí caminando a paso rápido.
HÉCTOR (P.D.V)
Tenía ganas de ir tras ese chaval y pegarle un puñetazo para que espabilase.. ¿realmente me acababa de dejar aquí como un imbécil?
- No se lo tengas en cuenta, mi hermano es así de raro.
Me giré para encontrarme con la réplica de mi misión, Luca.
- No pasa nada -Bajé la cabeza y me eché a caminar rápido en dirección contraria.
- Oye chaval, que te estoy hablando -Su brazo me paró- no sigas el mismo camino de mi hermano, en serio, estás a tiempo de cambiar, tienes muchísimas personas a tu alrededor y puedes socializarte. Eres nuevo en el instituto, cambia y ya de paso cambia a tu hermana también.
Tenía ganas de soltar una risita. Si él supiese lo que habíamos cambiado nosotros para estar aquí ahora hablándo con él.
- Soy así y no puedo cambiar. Me gusta como soy.
Me solté de su brazo y seguí caminando con la cabeza gacha y esquivándo a la gente. El cuello me iba a empezar a doler muchísimo.
NIKKI (P.D.V)
Me senté en mi lugar en el momento exacto en el que el profesor entró en el aula y cerró la puerta trás de si.
- Buenos días.
Y ahí estaba el inagotable Eidan sonriendome desde -miré mi reloj- las 8:00 de la mañana.
- Buenos días.
No le sonreí. ¿Para qué? nadie en su sano juicio está de buen humor a esta hora.
Echaba en falta a Maikel, sin él ésta hora iba a ser inacabable, pero claro, él ahora tenía clase con Kevin. Matemáticas.
- ¿Y tu hermano?
- En matemáticas -Bajé la cabeza y la apoyé en la mesa. No había dormido mucho y despertarme tan luego no era normal en mi.
- Esta semana estoy solo en casa.
Solté una ligera risita y levanté la cabeza para mirarle con una ceja alzada.
- ¿De verdad crees que voy a tener algo contigo habiéndote conocido justamente ayer? -Mi tono tenía un deje de 'me caes mal' que aparentemente él no notó.
- No lo digo por eso -Su sonrisa fue aun más ancha- digo que voy a estar solo en casa y que tenía pensado hacer una fiesta.
Sonreí y alcé las cejas expectante. ¿Una fiesta? dios ¡si!
- ¿Cuándo?¿a qué hora?¿qué tengo que llevar? -Mis preguntas salieron de carrerilla mientras apoyaba los codos en la mesa y abría los ojos.
Si dios, quería una buena fiesta.
- El viernes, a las ... no sé... ¿ocho te parece bien? y no tienes que llevar nada, tú al menos no.
Su sonrisa abarcaba toda su cara a la vez que me guiñaba un ojo. Vale, esto podía hacerlo sin tener una arcada; me recosté contra la silla y me mordí el labio mientras alzaba una ceja.
- Estaré encantada de asistir a esa fiesta.
- Y yo encantado de que estés allí.
Eidan no era como realmente se mostraba a simple vista. Este chico era algo más.. su apariencia de 'ay que bueno soy' no me la tragaba y pensaba descubrir que se escondía bajo éste aparentemente cordial capitán de fútbol.
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