A medida de que tomaba el té caliente no podía dejar de pensar. ¿Cómo podría ser que hayamos ganado algo luego de tanto tiempo, era demasiado bueno para ser real? , ¿Cómo pudimos obtener tal poder? Mi curiosidad de entender con claridad todo esto no me dejaba tranquilo a tal punto que supe que algo debía hacer.

¿Qué es esto? Me comencé a preguntar a medida que parecía tener algo en mi bolsillo, moví mi mano para sacar lo que parecía ser el brazalete trasformador, al sacarlo del bolsillo de mi buzo lo guardo en mi mochila probablemente iba a estar más seguro ay.Estaba preparado para irme al colegio, abro la puerta lentamente, para encontrarme con la sorpresa de encontrarme a quien menos esperaba en este momento. Era Lautaro

―Ya deja todo, es hoy la fiesta de Geraldo en la tarde y nos falta preparar todo, mejor que me hagas caso ¿porque si no sabes lo que pasara?―Exclamo de manera enojada y mirándome fijamente a los ojos, a medida que tocaba con la mano su brazalete y encerraba su puño presionándolo fuertemente.

No llego a ni responder cuando me toma del brazo y me lleva rápidamente hacia afuera, apenas cierro la puerta a medida que nos alejamos. Al llegar al Galpón encuentro a Rosita y Max parecen terminar de pintar la pared de un color negro con marrón, mientras que Cristyn sostiene la escalera a Mauro que está poniendo unas decorativas o mejor dichas guirnaldas en la parte de arriba como no queriendo interrumpir me hago a un costado de la escalera. Me pongo una silla para buscar canciones pero solo lograba encontrar tonadas notables y ya pasadas algunas y otras actuales como Macarena, Gasolina, Karol provenzal, una noche en Medellín...

― Geraldo nos llama eso creo, el brazalete mío no deja de sonar, tal vez se trate de el―Dijo Rosita parándose en el medio de todos.

―Aún nos falta terminar y uno de ustedes debe traer a los invitados solo yo iré con Rosita rápidamente y ustedes terminen rápido, cualquier cosa manden un mensaje cuando ya esté todo―Respondí yo levantándome y acercándome a ella.

Nos despedimos y salimos rápidamente hacia el taller donde se encontraría Geraldo, para comprender que estaba sucediendo.

Entramos lentamente ya que parecía estar todo mojado, las paredes parecían trasmitir más frio de lo normal, cruzamos el mini callejón hasta la segunda puerta, así encuentro a Geraldo sentado en un sillón de terciopelo negro.

―Por fin llegaron, se le activo la alerta seguramente a uno de ustedes y acá se activó el modo helado marino pero esto lo sucede cada que se asemeja un peligro muy grave, necesito que todo el resto venga acá ya.―Dijo Geraldo mirándonos fijamente, caminando de un lado al otro a medida que nos miraba de arriba abajo.― ¿No estarán ocultando algo cierto?

Ay espero no se dé cuenta, de lo que planeamos y más como traeremos a todos acá aun si es necesario, tendríamos que cancelar la fiesta de que se tratara lo que nos está hablando.

―Vayamos de una vez entonces Elías, Dale.

―No, Elías tengo que decirte algo antes que te vayas pero no podemos perder más tiempo Rosita adelántate.―Agrego Geraldo firmemente a medida que parecía buscar algo en un cajón.

Rosita se alejó corriendo lo más rápido que podía, parecía tan concentrada que ni la llegue a ver mirar para atrás.

―Lo encontré, toma este es Zicron y por como esta todo creo estará más seguro contigo, tiene algunas mejoras pero más adelante te comentare bien, ahora ve con el resto. Pero recuerda que son un equipo y que es su debe de rangers mantenerse unidos, vuelva lo más deprisa posible.

Tras recibir a Zicron la cual parecía tener luces nuevas, corrí lo más rápido que podía, aunque ya estando cerca una niebla comenzó a cubrir todo, intente usar a Zicron para absorber la niebla pero esta vez parecía tardar bastante, esto me daba mala espina. Lo único que podría hacer era esperar sin poder hacer más, agarre mi celular intentando llamar a Rosita pero nada parecía no contestar.

La niebla ya parecía haberse despejado, continúe yendo lo más deprisa, al llegar al galpón estaba todo oscuro absolutamente no se podía ver nada, de repente la luces se comienza a encender al mismo tiempo, percatándome de que los que estaban frente a mí, eran Lupreptero el androide con el que me había enfrentado hace tiempo y marcenaos y alquimias parados uno en cada esquina, mirándome fijamente, en lo más alejado parecían estar mis amigos quietos e inmóviles como si hubieran sido hipnotizados podría decirse.

Como los iba a combatir, solo me quedaba una cosa por hacer, seria usar el poder de traje violeta, me abalance sobre Marcenaos como queriendo atacarlo, le di un golpe débil con mi brazo y el me arroja fácilmente hacia una esquina donde logro encontrar mi mochila, reviso rápidamente el bolsillo era el momento de transformarme.

― ¡No esta!―exclame yo en voz alta, el brazalete ni la gema estaba acá.

―Que no están tus esperanza de vivir, mejor vete despidiendo este es tu final―Manifestó Alquimias a medida que iba dando grandes pisadas que llegaban a dejar marcas en el suelo―Ya no esperare más prueba un poco de lo que es el nuevo mundo―Dijo ella abalanzándose sobre mí con gran velocidad, golpeándome fuertemente con sus puños.

Me dejo doliendo las muelas, algo mareado por lo que acaba de pasar, apenas logre ponerme de pie.

―Te crees mejor que yo, ahora veras mira lo que yo puedo hacer lo más y de mejor forma que vos―Dijo Marcenaos mirándome fijamente.

Parecía estar en el cuerpo del androide, apenas podía llegar a controlar este cuerpo solo viendo como mi cuerpo era controlado por sí mismo o por el androide tal vez, que comenzó a dar golpear mi cara contra el suelo, mis manos a pisarla con las zapatilla.

― ¡Auch!―Exclame yo a medida que volvía a mi cuerpo, ya verderamente el dolor que sentía en mi rostro, en mis piernas en todo mi ser era agobiante, acaso este es el final.

En aquel momento recuerdo las palabras de Geraldo sobre las nuevas mejoras de Zicron y sin más que perder, esperando que eso funcionara.

―Zicron Actívate

En aquel instante la miniatura robótica comenzó a volar de un lado al otro, expulso una niebla que nos llegó a cubrir a todos, lo único que llegaba a notar eran las luces de él deteniéndose en diferentes puntos con unos ruiditos como de abeja, al cabo de un rato comienza absorber a la neblina lo pude notar porque había logrado despejar un poco, se dirigía hacia mis amigos que estaban inmóviles y se para sobre ellos, sobre cada uno logrando que reaccionaran tras hecho eso, vuela hacia mi mochila y se esconde en el interior.

― ¿Qué sucedió?, lo último que recuerdo es que acababa de llegar y al cabo de unos instantes, los androides estaban frente a nosotros, luego nose que paso―Dijo Rosita a la vez un poco confundida.

―En realidad Zicron nos salvó con una cuantas mejoras creo yo jajá―Dije entre risas alegremente.

―Quedo todo hecho un desastre, pero se puede solucionar, Elías, Rosita, Cristyn y yo nos quedaremos aquí y acomodaremos todo, mientras Lautaro y Mauro Vayan por Geraldo―Dijo Max con una voz firme y decididamente.

Al instante comenzamos a volver a poner algunos adornos caídos, logramos cubrir un poco más el piso disparejo con un asiento, la Playlist de música ya estaba lista, solo había algo que no podía dejar de preocuparme era que paso con el brazalete y gema violeta no podrían caer en malas manos, debía saber dónde se me cayó.

―shhh― dijo Rosita, escuchando un ruido.

Nos quedamos todo en absoluto silencio con la luces apagadas.

― ¡SORPRESA; FELIZ CUMPLEAÑOS!― Exclamamos todos alegremente, presenciando este hermoso momento, volviendo a encender la luz.

―Muchas gracias jóvenes, pero que fue lo que paso que no fueron cuando los mande a llamar y cómo fue que todo se estabilizo en el taller de un momento para el otro.

Al parecer nos habíamos apresurado aún faltaba unos treinta minutos para que llegaran el resto de los invitados por lo que proseguí a responder.

―Te explicare

―No, déjame yo les explico como sucedió todo―Dijo Cristyn sentándose un toque en el sillón de terciopelo.

―Todo empezó cuando se fueron hacia el taller Elías y Rosita.

Flash back de Cristyn

Tras haberse ido Elías y Rosita, proseguimos a seguir ordenando todo limpiando ya dando los últimos retoques, cuando escuchamos afuera mucho alboroto, me fije de reojo antes de avisarle al resto, lo que llegue a ver fue a Marcenaos y Alquimias golpeando buzones y haciendo bailar a la gente apropósito en contra de su voluntad, pero no fueron los único también vi a Lupreptero con su espada moviéndola para todos lados, con eso asegurado de que las cosas podrían empeorar, me acerque al resto

―Chicos los androides están afuera y no podemos dejar andén sueltos de esa manera―Dije yo, con firmeza, a medida que me hacía a un lado―¡¡DRAKUS MYSTIC AMARILLA!! Hora de domar a estas bestias.

Seguidamente me apresure a ir hacia afuera corriendo, saque mi varita de mi cintura decidida a usar el hechizo Capricars ,para apagarlos,me pare frente a ellos mirandolos a sus ojos desagrables y perversos excepto los de La mujer que tenia lindos ojos y dije el hechizo apuntandoles primero a Marcenaos pero no funcionaba el hechizo,entonces guarde la varita, me subi sobre un auto que estaba estacionado y me abalance sobre Marcenaos para darles unos golpes con puños, asi consecutivamente de izquierda a derecha, pero parecía no hacerle ningún rasguño, entonces doy pasos para atras hacia donde estaba el porton y me agacho para luego dar un gran salto a medida que intento un hechizo que estuve practicando "ILUMINFORAZ" tal hechizo lo dejo sin poder ver con claridad, aproveche ese momento para golpearlo lo más que podía, cuando mi traje parecía sufrir algunas modificaciones, se me implemento una espada en la espalda con unas rayas que cubrían cada parte, la parte de mis manos ahora tenían púas, con eso me abalance sobre él y lo ataque con mis púas rápidamente con ambos puños, finalizando con un paso hacia adelante para dar un golpe certero con mi espada y retrocedí nuevamente, de repente siento un golpe fuertemente en mi dorso y en mi pierna arrojándome hacia una pared. Apenas podía levantarme ya débilmente sin más había perdido mis transformaciones por el momento.

Flashback de Max

Tras haberse ido Cristyn hacia afuera, supimos que no nos podíamos quedar sin hacer nada entonces.

―Vamos, no la podemos dejar sola, somos un equipo, ¡Drakus Mystic Azul!

Tras haberme transformado, obverserve como el resto de los chicos se transformaban, estando todos listo, salimos hacia afuera.

Comienzo a notar como Cristyn estaba luchando firmemente contra Marcenaos, entonces me abalanzo sobre Alquimias y le doy un par de patadas, seguidamente saco un martillo con unas púas (sobre la punta derecha y el izquierdo tenia cobre más poderoso que el anterior, era un arma que la había obtenido mediante un par de estudio y combinaciones) dándole un golpe fuertemente a la androide la cual la esquiva con facilidad pero yo no me daba por vencido, intente nuevamente golpearla por fin lográndolo cae hacia atrás, pero se levanta nuevamente y en gran velocidad toma mi martillo y me arroja fuertemente, a medida de que intentaba volver a levantarme, levantando la mirada veo como Lupreptero me amenaza con su espada.

El ranger esmeralda intenta atacarlo a Lupreptero toma la espada de Cristyn la cual estaba inconsciente con mi martillo y da un golpe combinado con ambas armas a Lupreptero el cual, también recibe un gran golpe pero aun así logra destrozar ambas armas con su espada, dando pasos lentamente hacia donde estaba Lautaro para acabarlo, en aquel instante llega Rosita quien entra adentro por alguna razón y al cabo de unos instante sale transformada. Así el Ranger esmeralda y rosada, de paso el Blanco se les sumo, golpearon junto a Lupreptero intentando al menos no caer, dándole juntos golpes pero lo último que pude notar fue eso, luego de eso no recuerdo más nada.

Fin del flashback

―Tras eso supongo quedamos hipnotizados o algo por el estilo―Finalmente dijo Lautaro

― Y bueno cuando yo volví ya se encontraban hipnotizados, intente combatirlo no pude y Zicron me ayudo, eso fue todo sucedió―Afirme aportando una conclusión de lo sucedido.

―Entiendo, primero los felicito por cómo se manejaron y creo por ahora solo nos queda esperar lleguen los invitados, mañana necesito nos reunamos les tengo que decir algunas cositas.

Tras terminar de hablar Geraldo, llegaron los invitados, unas cuantas personas comenzaron a cruzar la puerta, prendí la música y tras largo día, solo podía pensar en bailar y no perder más tiempo, así que me acerque a Cristyn él tome de los brazos y la invite a bailar, ella no lo negó no sé si fue el cansasio o que pero por fin estábamos mirada con mirada, paso por paso bailando.

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