Prólogo
-No quiero mirar-se cubrió los ojos con sus manos-van a morir y no quiero-negó , con un ápice de tristeza en su voz.
Le quite las manos de los ojos pausando la escena. Y con las manos en sus hombros comencé.
-Para el mundo entero había acabado todo. Todos pensaron que ellos habían muerto que los tenían acabados, que si los mataban de él no quedaría nada, pero todo eso cambio cuando un destello blanco y negro ilumino el cielo.
-¿Y que más paso?-pregunto Isa con interés, mientras los demás estaban bobos escuchando.
-Ellos estaban ahí, convertidos en las criaturas sagradas y él en el medio de ellos-hable con orgullo mostrando lo ocurrido.
-¡¡Wao!!-dijeron asombrados.
-Ya es hora de dormir mañana seguimos-todos suspiraron descontentos.
Se levantaron encaminándose a sus habitaciones pero no antes sin despedirse. Blake se sentó a mi lado y yo sonreí.
-¿Quieres continuar con la historia de ellos donde nos quedamos?-admití.
-Claro, es como ver una película. Además fue el único por ser el señor de la nada que no puede ver nada-dijo casi en broma.
-Muy bien-cree una gran pantalla donde los acontecimientos pasados comenzaron.
-Es una historia un poco injusta, pero hermosa-musito.
-Así es-digo en casi un susurro al ver en la pantalla a aquella chica de ojos violetas y el chico de ojos cian.
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