Pos hola :v no tengo nada importante que decir así que.... HAY LIMÓN xD

Lovi: venga ya ha leer.
(~°w°)~~(°w°~)

Y hay estaba yo, abrigado hasta los ojos, frente al árbol del patio trasero esperando a la española para salir de esta prisión y cumplir mi supuesta promesa de "salir un día los dos solos".

¡No era por que yo quería! Solo que... joder, ella era muy insistente.

(~°w°)~ flash back ~(°w°~)

  -  Vamos Lovi~ dijiste que ibamos a salir~ -dijo por millonésima vez.

  -  Recién vienes saliendo de un resfrido... ¿es que quieres pescar otro de nuevo? -pregunté.

  -  ¿Esta preocupado por mi~?

  -  JODER SÌ, digo NO... da igual, no quiero salir.

  -  Pero...

  -  No voy a arriesgarme a enfermar por salir contigo, maldición, ni que fueramos cercanos, ni siquiera somos amigos, ¡No somos nada! -dije sin pensar, la mire y su rostro era un dilema entre sorpresa y tristeza y volví a procesar lo que dije, y eso había sonado demaciado frío y malvado.

  -  Así que... no somos amigos... ni nada... -bajo la vista- ya veo -sonrió con desgana, y eso estrujó mi corazón, nunca había sido tan malo con una mujer.

  -  Oh... Vale -susurré- salgamos esta noche ¿te parece?

(~°w°)~ Fin flash back ~(°w°~)

Y volviendo a la realidad, aquí estoy esperandola para salir.

Vi como ella se acercaba con un chaquetos hasta las rodillas de color café, una bufanda de color rojo le cubría el cuello y parte del mentón.

  -  Lovi~ lo siento por demorar, no fue nada fácil escapar -dijo acercandose.

  -  No importa, ya vamonos -dije caminando hacía la conexión con el exterior.

  -  Vale~ y ¿Donde vamos?

  -  ¿Eso importa? Ya verás -dije.

Una vez fuera admiramos y contemplamos la soledad de la noche y comenzamos a caminar hacía el centro de la ciudad, las luces iluminaban las calles y la gente caminaba sin prisa alguna, nosotros tampoco nos apurabamos.

  -  Lovi... hay mucha gente -susurró Isabel acercandose más a mi.

  -  Es viernes, es lógico -dije mirandola de reojo.

  -  Me voy a perder entre tanta gente.

  -  ¿No es que sueles salir con tus amigos?

  -  Sí, pero nos vamos por otro camino donde casi ni pasan personas -dijo abrazándome el brazo.

  -  Ya veo... y sueltame -reclamé moviendo la extremidad para que se soltará.

  -  Pero me voy ha quedar atrás y me perderé~ -lloriquió.

Suspire y le tomé la mano, ¡Solo para que no se quedara atrás! Me miró con una radiante sonrisa.

Caminamos un poco más y luego entramos a un callejón para nada oscuro y seguimos caminando hasta llegar a una especie de Pub.

  -  ¿Un... pub? -preguntó ella mirandolo con desconfiaza- no soy mucho de ir a estos lugares.

  -  Te va a gustar -dije caminando a la entrada.

Toque la puerta y se abrió una ventanita dejando ver un par de ojos azules.

  -  Contraseña -dijo con voz ronca.

  -  ¿Es necesario decirla? -dije/pregunté.

Y entonces la puerta se abrió, entre casi tirando a Isabel que se negaba a pasar, una vez dentro ella observó el lugar.

El lugar por dentro parecía estar en época de colonia aún, en sus murallas habían cuadros de paísajes españoles y al fondo izquierdo había un escenario que de fondo tenía la bandera española y sobre el escenario un grupo cantando flamenco y una mujer bailando dicho baile, habían mesas todas ocupadas, al fondo derecho una especie de bar. Si, aquel lugar era como estar en España.

  -  Vamos -dije sacando de su trance de sorpresa a Isabel y haciendola seguirme hasta la barra.

Nos sentamos cada uno en una silla y ella seguia contemplando el lugar.

  -  ¿Deseías algo? -preguntó el cantinero obviamente español.

  -  Algo de beber... sin alcohol -dije mirando de reojo a la española que aún no había dicho nada.

  -  Esto... es... hermoso -susurró de repente sin mirarme- es como estar en mi país, ¿como has encontrado un lugar así? Me ha encantado.

  -  Tengo mis contactos -respondí, omitiendo el hecho de que estuve buscando en internet.

  -  Vaya... tenías razón al decir que me gustaría.

  -  Ves, te lo dije.

(~°w°)~~(°w°~)

Luego de estar allí apróximadamente una hora, nos fuímos nuevamente al centro de la ciudad, pasamos por algunas tiendas de ropa y zapatos en las cuales más de alguna se quedó mirando Isabel y lamentandose que estuvieran cerradas. Después de seguir nuestro paseo nos quedamos descansando en una plaza en completo silencio.

En eso vimos a un niño correr hacía nosotros y se detuvo frente a mi, mantuve la vista fija en él y él en mi durante unos segundos.

  -  Lord, my mother sells flowers there -dijo señalando un carrito llenos de flores- If you want to buy flowers for his girlfriend.

Mire al niño, luego al carrito, después a Isabel y nuevamente al niño.

  -  hum... Thank you -susurré sin poder evitar desordenarle el cabello y sonreirle al niño el cual rió y fue corriendo al carrito.

  -  Que tierno eres con los niños -comentó Isabel con una risita- ¿Me vas a comprar flores~? -preguntó mirandome con cara de perro mojado.

  -  No tengo dinero para eso -dije levantandome.

  -  Oh bueno, tampoco quería flores~ -dijo imitandome- ¿y ahora donde vamos?

La mire unos segundos.

  -  ¿Te gustan los claveles? -pregunté.

  -  Son mis favoritos~ -respondió enanchando su sonrisa.

  -  Vamos te compraré algunos.

Caminamos hasta el carrito lleno de flores y la señora nos sonrio.

  -  What do you want? -preguntó con suave voz.

Isabel me miró y yo suspiré.

  -  Carnations ... preferably red -dije.

  -  Carnations... red... oh This is the last -dijo mostrando la flor- It was the present of being tourists and a cute couple -agregó entregandole el clavel a Isabel.

  -  Thank you Mrs -respondío Isabel resiviendo la flor- Bye Bye~

  -  Bye, mademoiselle

Luego de alejarnos un poco decidimos volver a la academía, caminamos a paso lento y en completo silencio, el cual me sirvió para percatarme de algo.

En dos oportunidades han llamado a Isabel como mi novia, y ninguno se dio cuenta de ello.

(~°w°)~~(°w°~)

Ibamos llegando cuando de repente Isabel se detuvo y me miro fijamente, me gire para quedar frente a ella.

  -  Me la he pasado muy bien contigo -dijo acomodándose la bufanda- en verdad me he divertido.

  -  ¿Que haz encontrado de divertido? -pregunté metiendo mis manos en los bolsillo.

  -  No lo se... supongo que todo, siempre que estoy contigo me divierto mucho, y me es agradable estar a tu lado -respondió mirando el clavel.

Me dedique a observarla uno segundos, y por más que quisiera no pude evitar embosar una pequeña sonrisa.

  -  También me agrada estar contigo -susurré desviando la vista.

Sentí como unos brazos me rodeaban el cuello, mire de reojo a Isabel.

  -  Lovino... -dijo ocultando su rostro entre mi cuello y su brazo- ¿Sería muy pronto si te dijo "te amo"? -preguntó

No tuve fuerza de voluntad y mi dignidad, orgullo, y escudo desaparecieron en el momento que la abracé por la cintura.

  -  ¿Tú crees que lo es? -le pregunté.

  -  Lovino... -levantó la vista y mi mirada quedó sostenida con la de ella-  Te amo...

Fueron un segundos unas malditas milésimas de segundo en la que guarde silencio, lo pensé, creo que lo pensé demaciado en pocos segundos, pero a la vez no pensé nada.

  -  Volvamos a la academia -dije separandome de ella- no quiero tener problemas después.

Comencé a caminar e Isabel corrio levemente hasta alcanzarme.

(~°w°)~~(°w°~)

Todo ha seguido tal y como siempre, nada ha cambiado y eso es bueno... supongo, me da igual.

El martes me castigaron por una cosa que hice en Ed. Física por lo que ahora estaba en el gimnasio ordenando las colchonetas que habíamos ocupado en la clase, cuando había casi acabado escucho que alguien cae y se cierra la puerta, me gire y me encontre a Isabel levantandose del suelo.

  -  Malditos idotas... ¡PAR DE IMBÉCILES! -gritó ella, se levantó del suelo y comenzó a forzar la puerta-  ¡Que no habréis la estúpida puerta ahora os juro que antes de mataros los torturare como nunca en su puta vida!

Me quedé quieto donde estaba, nunca se me paso por la cabeza que la española se podría enojar como lo estaba ahora, menos que insultara tanto.

  -  Par de tontos -dijo finalmente creo que algo más calmada.

  -  ¿Isabel? -pregunté son ocultar la sorpresa.

Se giro y abrió los ojos, se arreglo unos mechones de cabello que le molestaban en la cara.

  -  ¿Has escuchado eso? -preguntó avergonzada.

  -  Lo has gritado -respondí.

Hubo un silencio.

  -  Francis y Gilbert no van a abrir esa puerta hasta dentro de una o dos hora... así que estamos encerrados y... solos -dijo sentandose sobre un montón de colchonetas.

  -  Que horrible -comenté sentandome en otro montón frente a ella- mi castigo se extendió por mucho más.

  -  ¿Castigo?

  -  Nada, no importa.

Hubo un largo silencio el cual se me hizo eterno. Me dedique a mirarla mientras ella jugaba con sus manos.

El cabello lo llevaba suelto y caía de forma en ondas por sus hombros y espalda, le llegaba hasta la mitad del ante brazo, tenía puesto el buzo de la escuela el cual le queda algo suelto pero la daba una imagen inocente, las mejillas las tenía sonrojada y sus ojos miraban fijamente sus manos.

La luz comenzó a pestañar rapidamente entonces se escuchó un ruido y la luz se apago.

  -  ¿Se ha cortado la luz? -preguntó Isabel.

  -  No lo se -contesté mirando la ampolleta.

La luz de la ventana superior solo lograba alumbrar levemnte el lugar. Me levanté y camine hasta una silla que había, la tome y coloque bajo la ampolleta.

  -  ¿Que harás? -preguntó ella.

  -  Apaga la luz -ordené.

  -  Esta apagada... -contestó obviando la situación- ... ¡Ah! Vale ya entendí -dijo después y fue a mover el interrumtor.

Me subí a la silla quedando a la altura de la ampolleta, force la vista para tratar de ver mejor.

  -  Creo que la ampolleta se ha quemado -dije bajandome y devolviendo la silla a donde estaba.

  -  Ugh... -susurró Isabel sentandose en el montón de colchonetas- y yo con el miedo que me da la oscuridad.

  -  ¿Encerio? ¿Te da miedo tamaña tontería?

  -   Es más normal de lo que crees.

  -  Vale, lo se, mi hermana menor también le teme... Pero tú eres muy grande para temerle a la oscuridad, los mounstros no existen ¿sabes? Monster Inc. Es solo una película.

  -  Ya se que los mounstros no existen, joder que ¡no es por eso!... es un trauma infantíl.

  -  ... Cuanteme.

  -  Estabamos en casa, era verano y tenía unos 7 años apróximadamente, era de noche y mis tíos estaba de visita, esa noche se quedarón hasta tarde despiertos mis padres y mis tíos, yo estaba durmiendo y mi hermano también... cuando los adultos se fueron a acostar, siento que la puerta se abre, estaba algo dormida y pensé que era mamá, por lo que me quede quieta, entonces la puerta se cerró y decidí seguir con el sueño. Cuando iba a caer en sueños de nuevo siento que me destapan, me hago bolita ya que me dio algo de frío, fue cuando una mano recorrio mi cuerpo y levanto la camiseta de mi hermano que ocupaba para dormir, abrí los ojos y me gire, vi la sombra de una persona que no reconocí, entonces iba a gritar y me tapo la boca, la persona esa se colocó arriba mio afirmando su cuerpo con sus rodillas para no caer sobre mi, sacó un paño y lo amarró al rededor de mi boca, con una mano me tomó las manos sobre la cabeza y con la otra comenzó a tocarme bajo el pijama, bajo mi calzón y me... me... me... empenzó a masturbar itroduciendo sus dedos en mi... el asunto es que... lo mismo se repitio todo un mes, y cada vez me decia que si hablaba me iba a matar... mi tío me había violado durante todo un mes en la oscuridad de la noche... y hasta ahora... eres el único en el mundo que lo sabe.

Sentí un dolor en el pecho, sentía rabia e impotencia ganas de golpear al hijo de puta que le hizo eso. Puede escuchar los sollozos de Isabel, y el pecho me dolio mucho más, me acerqué a ella y la abrazé, no estoy hecho para las muestras de cariño pero era la único que necesitabamos hacer.

  -  ¿Ni tus padres, ni tus amigos o hermano sabe? -pregunté en un susurro.

Ella negó con la cabeza y yo le acaricie la espalda con cariño.

  -  Tengo miedo de la oscuridad... porque me recuerda a eso -dijo sollozando- y aquello aumenta los veranos que va él a casa, porque lo vuelve a hacer, cada vez... peor.

Aprete los dientes y el abrazo.

  -  Si ese hijo de puta vuelve a tocarte un solo pelo más, te juro que lo mato -dije.

Ella rio levemente y me rodeo con sus brazos.

  -  Eres tan lindo y amable, no quiero separarme de ti nunca -dijo.

J O D E R,  s o n r e í.

Nos separamos un poco y nos miramos, ni cuenta nos dimos cuando nos acercamos y nos estabamos besando.

Ella se acercó más haciendo más profundo el beso y huniendo nuestras lenguas en un vals de placer.

Nunca pensé que mi primer beso seria así. Soñaba que fuera en un parque bajo un árbol, no en un sotano con cosas de gimnasia con poca luz.

Mis manos se dirijieron a su cadera y entonces nos separamos, fueron unos segundos en los que respiramos y volvimos al beso.

Quería... pero no me atrevía a levantar su camiseta, por lo que separe un poco el beso y baje por su cuello depositando pequeños besos que fueron respondidos por jadeos de Isabel que jugaba con mi cabello y... enrrollo unos de sus dedos en el rizo... mala idea españolita, mala idea.

De un momento a otro Isabel se encontraba acostada sobre las colchonetas y sin camiseta mientras yo estaba sobre ella besandola en los labios y mis manos masajeando sus senos.

  -  Lovino... Te amo -dijo en el beso Isabel.

Le bese la frente, y volví a sus labios, no, no le diría "Te amo" si no era lo que sentía.

No la amo, es solo una simple atracción, y ya.

Ni cuenta me di cuando quede sin camiseta y cuanto Isabel marcó mi hombro derecho, pero vale eso no importa.

Baje mis manos hasta su cadera y allí me detuve, allí todo quedo en silencio, en un incómodo silencio.

(~°w°)~~(°w°~)

Estaba sentado en un montón de colchonetas mirando la misma oscuridad. Isabel estaba frente a mi sentada mirando sus manos.

La puerta se abrio dejando entrar la luz que nos segó unos segundos.

  -  ¿Como la pasaron los tortolitos? ¿hubo amour? -preguntó la voz del bastardo francés.

  -  Kesesese~ -se rio el macho patatas.

De repente una pelota de goma gigante volo chocando con la cara de ambos pervertidos, haciendolos caer. Mire a Isabel que estaba de pie mirando con odio a sus amigos.

  -  ¿Creen que es divertido estar encerrada una hora? Par de tontos -dijo Isabel caminando a la salida y pisando nada cuidadosa a sus dos amigos.

Yo también iba a salir cuando una mano tomo mi tobillo, baje la vista y emcontre con rostro del francés

  -  Dime que lo hicieron ¿Oui? -dijo con la peor cara de pervertido que tiene.

Me sonroje, estoy seguro.

  -  Eso no te importa ni te incumbe.

Me solte del agarre y seguí mi camino hasta mi habitación.

(~°w°)~~(°w°~)

Una semana ha valido la pena ;u; es el capítulo más largo que haya escrito nunca -aplaude sola-

Lovi: Ya es hora de dormir que son las 04:02 en Chile

Ya es 18 Tiquitiquití(? Hasta luego~

Adiu~