"Un canto mudo"

Tal vez fue una mañana blanca en la que te escuché. Sin tono, insípida y deforme. El mundo era cruel, mi Ruiseñor. Pero no tanto como nosotros.

Quizá tenías un nombre, un alma, un cuerpo con memorias trastornadas por las calles rojas. La tinta corría a ti, te dibujé con alas caídas. No importaba, al fin, solo era poesía.

Tal vez fue una mañana manchada cuando la tinta gritó con furor y sangró. Se desprendió de tus manos y cayó para escribirme abismos. Escribiste acerca de un mundo cruel, pero nunca tanto como nosotros.

Quizá una noche roja viniste para no volver. Estoy segura que recitaste un par de veces, pero para mí, no cantaste. 

Porque el mundo era cruel, mi Ruiseñor. Pero no tanto como nosotros.