042
— ¿Entonces quiere cederle el otro cuarenta por ciento de la herencia y un diez por ciento de las acciones de la compañía a su padre?
El alfa asintió ante la pregunta del abogado, la mano del Omega a su lado apretaba su muslo bajo el escritorio.
Había hablado con Jimin, contándole el ahora más grande de sus problemas, ser reconfortado por su Omega definitivamente habia sido la mejor decisión que tomó, ahora sentía sus hombros livianos aún que el sentirse un usurpador seguía ahí, lo correcto seria que su padre obtuviera un cincuenta por ciento, pero el ya le habia otorgado un sesenta por ciento de lo que creyó suyo a su esposo, por lo tanto completaria la herencia con un diez por ciento de las acciones de la compañía.
— Armare el documento para que su padre lo firme en ese caso.
— Muchas gracias, me gustaría pedirle discreción en el asunto, en su momento hablaré del porque de mis decisiones.
— No se preocupe señor Jeon, soy una tumba para usted.
El alfa asintió despidiendo cortés al abogado, dejando salir un suspiro de frustración cuando la oficina quedó sumergida en un silencio.
— Hmm.
Aquel sonidito hecho por el Omega lo hizo voltear llevándose la gran sorpresa al ver la imágen mas hermosa que sus ojos habían podido presenciar esa mañana.
Su Omega había levantado su suéter dejando ver la onda de su vientre, acariciandola con una sonrisa, la verdad es que a pesar de ser dos bebés el vientre de Jimin no se veía demasiado grande, a penas tenía tres meses Pero seguía siendo una pequeña onda.
Con una sonrisa el alfa estiró su mano para tocar la pancita blanquita de su Omega, haciendo que este inmediatamente cerrara los ojos de satisfacción.
— ¿Quieres mimos?.- El castaño asintió con una tierna sonrisa dejando que el alfa acariciara su pancita, haciéndole leves cosquillas con sus dedos y apretando un poco a los costados, como un masaje relajante.- Deberíamos empezar a decorar su habitación.
Los ojos del Omega se abrieron ante aquellas palabras.
— Aún no sabemos su sexo...
— ¿Y eso que?
— Me gustaría que tuvieran una habitación decorada de acuerdo a su sexo...
— ¿Lo dices por los colores y eso?
— Si...
— Mi vida, los colores no tiene género pero si te hace sentir mejor, podemos esperar entonces...
— Yo... Eh... Si, esperemos un poco más...
— Además. Son dos niños.
El cuerpo del Omega se estremeció, ¿Por qué el alfa siempre tenía intuciones con sus hijos? Su casta y ahora su sexo ¿Que clase de brujería era esa?
— No te creó, no hay manera de que sepas eso.
— Son mis hijos, tu lobo ya sabe que son y mi lobo también.
— ¡No seas mentiroso Jungkook!.
El alfa sonrió dejando un beso en el vientre contrario.
— Cuando el médico te lo diga entonces diré que te lo dije.
Niños... Dos varones.
No, eso era estúpido ¿Cómo iba a saber Jungkook aquello?.
— Cariño ¿Crees que deberíamos mudarnos? .- ¿Es que acaso el alfa no pensaba antes de decír las cosas?
— ¿Mudarnos? Creí que te gustaba tu hogar.- El alfa levantó mirada y separó sus manos del vientre del castaño haciendo que este inmediatamente gimiera descontento.- Oye...
— Nuestro hogar Jimin. Y si, si me gusta, es solo que... Pienso en los bebés...
— No lo entiendo...
— Creo que ellos querrán un gran patio donde correr cuando sean bolas peludas con cuatro patas, o una piscina para divertirse, quizás un jardín con flores para jugar, el penthouse no sera un lugar divertido para ellos incluso es peligroso, ¿Que tal si un día se escapan por el ascensor?, me volvería loco si algo les sucediera a mis hijos Jimin...
Entonces los argumentos de Jungkook sonaron tan lindos y acertados que hicieron al Omega suspirar de amor.
— ¿Por qué suspiras así?
— Me gustas. Me gustas mucho Jungkook.
El alfa quedó sin habla ante el castaño y trago grueso cuando el olor dulzón de Jimin llegó a sus fosas nasales.
Omega coqueto.
— Jimin estamos en la oficina...
— No estoy haciendo nada.
— Deja de emanar ese olor, estás alterandome...- Entonces el Omega bajó su sueter y se levantó para tomar asiento en el regazo del alfa.- Cariño...
— Deja de quejarte Jungkook, solo voy saltar un poquito aquí.- Los ojos del alfa se abrieron en sorpresa.
— Jimin piensa en nuestros hijos por la madre luna...
🌖🌕🌔
La omega caminaba por el mercado en busca de los ingredientes necesarios para preparar la sopa que ayudaría a su esposo a mejorar su salud.
Pues hace muchos meses cayó en un estado depresivo y su salud empeoro con el paso del tiempo.
Realmente lo entendía y quizás si no estuviera enamorada ni siquiera lo ayudaría, por su culpa no había visto a su hijo hace muchos años y ansiaba verlo, abrazarlo y pedirle perdón por todo el abuso que sufrió.
Pero ella había sido tan participe de ello que le avergonzaba siquiera pensarlo.
Para su suerte esa mañana...
Las revistas de todo el mercado y posiblemente el país, hablaban del matrimonio de uno de los herederos más codiciados del país.
Jeon Jungkook.
Su loba interior se removió con inquietud lo que la hizo tomar una de esas revistas y comprarlas a pesar de que el dinero no le sobraba.
Sus ojos se abrieron con sorpresa al ver en primera plana a su hijo. Su Omeguita precioso.
Vestía ropas elegantes y su sonrisa era tan hermosa que incluso se la contagiaba, Jimin estaba hecho un Omega hermoso, mucho más de lo que ella pensó.
Iba del brazo de aquel alfa imponente.
Su esposo...
Jimin se había casado...
La felicidad de saber algo de su hijo la invadió y con emoción se apuro con las compras, necesitaba contarle a sus hijas sobre aquello, después de todo ellas nunca habían dejado de buscar a su hermano menor...
🌖🌕🌔
El fuerte impacto de la mano del alfa al estrellarse contra la nalga de su Omega, se escuchó en toda la oficina.
Finalmente una cosa había llevado a la otra y ahora Jimin estaba montandolo de manera lenta y tortuosa, Pero principalmente por petición suya ya que no queria que Jimin estuviera saltando en su estado de embarazo.
~ Vuelve... A decirmelo cariño...
~ Me gustas... Me gustas mucho alfa... Mi alfa...
El castaño se movía de atrás hacia adelante causando un revoltijo de sensaciones en el alfa que no podía controlar.
Por qué su esposo lo excitaba demasiado con solo ser el.
Los movimientos aumentaron agregando el sonido húmedo gracias al lubricante del Omega, las manos del alfa subieron a la cadera y su mirada recorrió lascivemente el cuerpo de su esposo hasta llegar a aquellos ojos dilatados bajo las grandes pestañas obscuras del Omega.
Una preciosura.
El rostro del castaño estaba sonrojado y sus labios brillantes, los mismos que el mismo mordia soltando siseos descontrolados.
Y aún que Jungkook se sentía usado por el Omega, que realmente estaba disfrutandolo demasiado, se sentía malditamente bien ver al omega tan excitado por estar encima de el...
~ Tu me encantas Jimin, me vuelves jodidamente... Loco.
~ Besame alfa, aquí.- Señaló sus pezones hinchados, entonces Jungkook se inclino hacia delante para llevar aquellos pezones a sus labios.
Lamiendo y besando los mismo, hasta que la idea de chuparlos con fuerza paso por su mente, haciendo gritar al Omega de placer y que este apretara sus uñas en sus hombros.
Se sentía bastante bien, hasta que un sabor realmente extraño se apoderó de su boca, era dulce y tenía la escencia del olor de su Omega.
Separó sus labios de aquellos pezones para mirar con detenimiento el lugar ahora más hinchado.
¿Acaso aquello era leche?
Sin embargo no tuvo tiempo de pensar demasiado porque el Omega tomo su mentón y empezó a devorar sus labios al mismo tiempo que empezaba a apretarlo en su interior.
Jimin separó sus labios y ambos se sumergieron en la mirada del otro.
Cómo si todo pasara demasiado lento, como si el tiempo se hubiera detenido a su favor.
Jungkook cerró sus ojos y echó su cabeza hacia atrás mostrando su cuello en señal de sumisión hacia su Omega.
Porque solo Jimin tenía el poder de doblegarlo y convertirlo en un lobo manso y obediente.
Los colmillos del Omega empezaron a salir y sus ganas de morder a su alfa fueron tan grandes que no pudo resistirse.
Dejando una marca igual a la suya en su alfa.
Reclamando a su alfa como suyo por siempre y para siempre, marcado por el, amado y tocado por el.
Nadie podría separar lo que luna había unido.
Amo esta historia, Pero está en la recta final🥺...
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