— ¡Jungkook por la madre luna!.- El Omega se acercó corriendo hacia donde estaba el alfa.- En la compañía todo es un desastre, hay un gran escándalo, un hombre gritando que lo golpeaste y que te demandará.

El alfa miro a Jin y cerró los ojos tratando de mantener la calma en esos momentos.

— Que haga lo que quiera, no me importa nada más que mi esposo y mis hijos Jin.

— Estoy seguro de que todo saldrá bien, tu padre y Nam están controlando las cosas en la compañía y vendrán enseguida... ¿Que han dicho?.

— Los bebés se adelantaron, es complicado porque es un embarazo gemelar y una cesárea de emergencia yo... Tengo miedo Jin.

Solo en ese momento el Omega pudo visualizar la angustia del alfa en su rostro abatido, la verdad lo complicado de tener embarazos gemelares era justo ese momento, la hora en la que los bebés salieran.

— Mira, Jimin es un Omega valiente y muy fuerte a pesar de que el ni siquiera sea consciente de eso, mira todo lo que ha pasado y aún así está ahí... Luchando para traer sanos y Salvos a sus hijos, es todo un Omega ejemplar...

Jungkook sonrió ante aquello, no podía ser más cierto, Jimin era todo y más, todo lo que estaba bien y lo que necesitaba para vivir.

¡Dios su Omega era lo que más quería en el mundo!.

— Solo procura darle tiempo ¿Sabes?.- El alfa frunció el ceño y volteó a ver al Omega con confusión.

— ¿Tiempo? ¿Tiempo para que?.

— Tiempo para que lo vuelvas a preñar, déjalo disfrutar de un abdomen plano por mucho tiempo después de esto...

El alfa rodó los ojos, no es como si quisiera llenar a Jimin de hijos, o que realmente quisiera un niño alfa y quizas sería suficiente.

Para nada...

— ¿Señor Jeon?.- La voz de una beta enfermera llamó la atención del alfa y este volteó a verla inmediatamente.- Su omega está listo para la cirugía, póngase esto para que pueda presenciarla.

Al alfa se le iluminaron los ojos, toda la preocupación y angustia que sentido fue reemplazada por emoción, la emoción mas hermosa de su vida.

Inmediatamente asintió y con una sonrisa se despidió de Jin.

Hoy por fin sería el día en el que conocería a esos dos cachorritos que se habian robado su corazón, los mismo que tenía que calmar por las noches cuando empezaban a patear con fuerza, a los que acariciaba y besaba a través del vientre de su padre.

¡Dios finalmente iba a ser papá!.

Rápidamente se colocó lo que la enfermera le había dado como medida preventiva para entrar al quirófano y la siguió hacia aquella sala.

La vista que tuvo a primera impresión fue un poco inquietante, Jimin estaba en el centro de la sala con una gran lámpara que apuntaba a su vientre, sus brazos estaban estirados y el miraba fijamente al techo del lugar frío.

Su corazón se estrujó cuando vió el puchero en sus labios y rápidamente se dirigió hacia el tomando su mano y dejando un beso en ella, llamando la atención del Omega que parecía un poco embelesado por seguramente la anestesia.

— Hola mi vida.- El Omega sonrió con su característica y hermosa sonrisa.

— Hola alfita.

— ¿Alfita?.- Por el sonido de los utensilios quirúrgicos y las voces de los presentes, Jungkook supo que la cirugía había comenzado.

— Tengo hambre, quiero ¿Manzanas?

— ¿Manzanas? Mmm ¿Rojas o verdes? Te daré lo que quieras al salir de aquí.

— Amarillas, las luces son amarillas...

El alfa rio ante el estado anestésico del Omega, aprecia confundido e incoherente.

— Te amo Jimin.

El Omega abrió sus ojos con sorpresa, movió sus labios para responder pero un quejido fue lo único que salió al sentir una presión en su vientre.

— Los bebés...

El alfa dirigió su mirada al lugar donde estaba siendo llevada a cabo la cesárea y sonrió al ver lo que parecía el indicio de la salida de uno de los bebés.

— Respira amor, creó que Yoonseun saldrá muy pronto...

— Lindo.- Murmuró el Omega con una sonrisa.

— Su nombre no lo es.

— Oye...

Los ojos del Omega se abrieron al sentir una sensación extraña seguida de un llanto bastante agudo, mientras Jungkook no podía despegar la vista de la pequeñita criatura que lloraba ahora en brazos de una enfermera.

Su lobo aullo con felicidad, su corazón empezó a latir con fuerza, ¡Era papá! Su pequeñito bebé por fin había llegado.

Su cabello aún que estaba pegado a su cabecita por la sangre que tenía en su cuerpito, se notaba que era obscuro, sus manitos estaban empuñadas y sus labios tenían un lindo puchero.

Era a toda una ternurita.

— Yoonseun está aquí bebé, ¿Lo escuchaste?.

El omega no podía responder, su lobo había sentido una angustia repentina, algo estaba mal...

Y eso Jungkook lo sintió.

Por lo que volvió a mirar aquel lugar para darse cuenta que su segunda adoración estaba a punto de salir también.

Pero...

No lloraba...

La mirada del doctor conecto con la suya y rápidamente la sala se sumergió en un silencio en dónde solo se oía a Yoonseun llorar, las enfermeras empezaron a actuar de inmediato dándole palmaditas al bebé pero este parecía no reaccionar.

Es como si hubiera nacido sin vida.

Y eso lo hizo sentir desesperado.

— Yoonmin...- Murmuró el Omega con sus ojos llenos de lágrimas, su intuición lobuna se sentía lastimada, sabía que algo no estaba bien, su bebé no estaba bien.- Mi bebé...

El sollozo del Omega fue lo suficientemente doloroso para que alfa actuará de inmediato, soltó la mano del castaño y empezó a quitarse la vestimenta de seguridad, no sabía porque estaba haciendo aquello, estaba actuando por su instinto lobuno y la desesperación en su corazón.

El no podía perder a uno de sus hijos, ¡Eso jamás!.

Las enfermeras se miraron entre si dando por muerto al cachorro, hasta que el alfa sin camisa en solo pantalones se acercó a ellas y les quitó el cachorro de sus manos.

Era un inexperto cargando a bebés recién nacidos pero su instinto paterno era lo suficientemente fuerte en esos momentos como para hacerlo cargar a su bebé sin equivocación, llevo a su pequeñito a su pecho y con sus ojos cerrados empezó a acariciar su espaldita, tranquilizó su agitado corazón y dejo salir sus feromonas, haciendo que Yoonseun dejara de llorar inmediatamente, porque el se estaba presentando como su padre alfa.

Con cuidado subió al bebé dejando su naricita en la curvatura de su cuello dónde su olor salía, y empezó a hablarle.

— Vamos campeón, estás asustando a papá.- Su mano empezó a darle palmaditas un poco fuertes en su espaldita.- Vamos hijo por favor, por favor mi amor vamos.

Jimin veía todo mientras las lágrimas salían de sus ojos, su olor también empezó a salir como un instinto protector rodeando a su alfa y cachorro.

El alfa abrió sus ojos conectandolos con los de su Omega cuando el olor del mismo llegó a el, así como sintió la respiración agitada se su pequeño en su cuello.

Rápidamente lo alejó de su cuello acomodandolo en sus brazos solo para mirar como el pequeño hizo un puchero empezando a llorar con fuerza.

Dentro del quirófano el personal encargado empezó a celebrar con felicidad mientras el médico terminaba de cerrar la herida del Omega.

El alfa le cedió el bebé a la enfermeras y rápidamente camino hacia su Omega, dejando muchos besos en su frente agradeció al Omega por sus hijos, realmente estaba agradecido por todo lo que Jimin habia traído a su vida.

Porque ahora era feliz y tenía una familia. Era todo lo que alguna vez tanto quiso.

🌖🌕🌔

Es tan difícil dejar ir, soltar y olvidar, que incluso las personas a veces prefieren no hacerlo por el miedo al después, así su presente fuera un completo desastre.

Las personas normalmente siempre tienen miedo a empezar desde cero.

Yoongi era una de esas personas, porque no era un secreto que había estado siguiendo los pasos de Jimin a lo lejos, viendo como su vientre crecía y su relación con el alfa se solidificaba cada vez más.

Mientras el... Observaba en las sombras.

No habia sido necesario huir pues la mafia de la que huía había sido arrestada, sin embargo hace una semana finalmente había tenido una señal de Hoseok y está estaba bastante lejos de Corea...

Entonces decidir entre ir tras Hoseok o quedarse en las sombras para ver el crecimiento de sus hijos era realmente un dilema.

— ¿No te da vergüenza aparecerte aquí?.

El alfa volteo, era increíble que Jungkook pudiera reconocerlo aún y cuando estaba cubierto de pies a cabeza.

— Son mis hijos.- El alfa volteo a ver a los gemelos a través de un vidrio en aquella sala donde habían varios bebés.

— No lo son.

— Tienen mi sangre, incluso estoy seguro de que van a parecerse a mi.

— Pues que mal por ti porque es a mi a quien le dirán papá.

Yoongi apretó sus dientes y miro al alfa que hablaba con indiferencia mirando a los bebés con un brillo en su mirada.

— ¿Por qué haces esto? Yo renuncie a ellos.

En ese momento Jungkook dirigió su mirada a Yoongi con autosuficiencia y dijo:

— Porque quiero dejarte claro que no tienes nada que buscar aquí, mira bien sus nombres ahí...- Señaló el lugar donde sus nombres.- Ellos son Jeon, como yo, no son tus hijos, son mis hijos y Jimin es mi Omega, asi que no creas que alguno te pertenece porque no dudare en hundirte Yoongi.

El alfa se dió la vuelta para entrar al lugar y finalmente acompañado de una enferma llevar a sus hijos a la habitación de su esposo.

Así es... Yoongi tenía que decidir soltar a sus hijos, porque estos ya no eran suyos.

Así que ver cómo Jungkook cargaba a sus bebes con una sonrisa y les besaba sus cabecitas enfundadas en gorros, junto a aquel apellido que tenian sus nombres fue lo unico que necesitó para entender que decision debía tomar.