Trunks: “¡En el episodio anterior de Dragon Ball, la batalla en Namek se intensifica! Mientras Krillin, Goten, y yo buscábamos las esferas del Dragón en una cueva oculta, un enfrentamiento explosivo se desató entre Bakugou y Dodoria. Bakugou, en un ataque furioso, combinó su Quirk con su técnica de Destello Final, lanzando un devastador rayo de energía que dejó a Dodoria gravemente herido.

Pero Dodoria no se quedó atrás. Con furia, contraatacó con su poderoso Rayo de Dodoria, intentando revertir la situación. La batalla se volvió cada vez más feroz, con cada uno de nosotros luchando para proteger las esferas del Dragón y asegurar el futuro de Namek.

Mientras tanto, Freezer estaba cada vez más desesperado, buscando implacablemente las esferas para cumplir sus propios oscuros objetivos. La presión estaba en su punto máximo y cada movimiento contaba. ¿Podrán nuestros héroes resistir y salvar Namek? ¡No te pierdas el próximo episodio para descubrirlo!”

Bakugou, furioso y con el rostro enrojecido por la ira, se enfrenta a Dodoria con una determinación implacable. A medida que la batalla se intensifica, Bakugou sabe que debe usar su técnica más poderosa para acabar con la amenaza de una vez por todas.

Bakugou: —¡Prepárate para el final, Dodoria! ¡No te dejaré salir de esto!

Bakugou concentra toda su energía y, con un grito de furia, lanza su ataque más potente: el Cañón Galick Final. Primero, Bakugou levanta su puño, rodeado de una aura púrpura que brilla con una intensidad aterradora.

Bakugou: —¡Los Saiyan son una verdadera raza guerrera! ¡No nos provoques!

Bakugou avanza rápidamente hacia Dodoria, impactándolo con un golpe feroz en la cara. Sin darle tiempo para reaccionar, le sigue una serie de rápidos y devastadores puñetazos y patadas, golpeándolo por todo el cuerpo.

Dodoria, tambaleándose por el ataque implacable, intenta defenderse, pero la fuerza de Bakugou es abrumadora. Bakugou, sin detenerse, carga una esfera de energía púrpura en su puño. Con un grito final de determinación, lanza el Cañón Galick Final, una ráfaga de energía concentrada que impacta directamente en el estómago de Dodoria.

La explosión resultante es descomunal, iluminando el área con una explosión de luz púrpura y causando un daño devastador. Dodoria cae al suelo, completamente derrotado, incapaz de seguir combatiendo.

Bakugou se queda en pie, respirando con dificultad pero con una expresión de victoria en su rostro. Krillin, Goten y Trunks observan con alivio mientras la amenaza de Dodoria se disipa.

Krillin: —¡Increíble, Bakugou! ¡Lo lograste!

Goten: —¡Esa fue una técnica impresionante!

Trunks: —¡No hay duda de que has demostrado tu poder!

Mientras el polvo se asienta y la calma vuelve momentáneamente, los héroes saben que la verdadera batalla aún está por venir. Freezer sigue buscando las esferas del Dragón, y el peligro aún no ha terminado.

Bakugou, todavía con su respiración agitada y el sudor recorriendo su frente, se voltea rápidamente hacia Krillin. Su mirada es intensa, llena de determinación mientras el aura de batalla que lo rodea comienza a disiparse.

Bakugou: —¿No deberíamos buscar las demás esferas del Dragón?

Krillin, aún impresionado por el despliegue de poder de Bakugou, asiente con una sonrisa nerviosa, mostrando el radar del Dragón en su mano.

Krillin: —Ya encontramos una más durante el combate. Eso nos deja...

Antes de que Krillin pueda terminar, Goten, que revisa el radar junto a él, interviene con entusiasmo, mirando el dispositivo con atención.

Goten: —¡Nos faltan cuatro esferas más!

Trunks: —No podemos perder tiempo. Si Freezer se adelanta, podríamos estar en problemas serios.

Krillin: —Entonces, vayamos por ellas antes de que ellos puedan reunir más. Hay que dividirnos para hacer esto más rápido.

Bakugou asiente, mirando a sus compañeros con determinación renovada.

Bakugou: —Perfecto, entonces. ¡No dejaremos que Freezer consiga lo que busca!

Los cuatro, conscientes de la urgencia de la situación, se preparan para el siguiente paso en su misión. Cada uno de ellos sabe que el tiempo es crucial, y que deben actuar rápido para evitar que Freezer logre su objetivo.

En la nave de Freezer, el ambiente es tenso. Los fríos pasillos metálicos resuenan con los sonidos de los soldados patrullando y los comandos siendo transmitidos a través de los sistemas de comunicación. En la sala de control, Freezer está sentado en su trono flotante, con una mirada de impaciencia y calculada calma. A su lado, Zarbon sostiene su rastreador, observando cuidadosamente la pantalla con los puntos que indican las energías presentes en Namek.

De repente, la pantalla de Zarbon parpadea y uno de los puntos de energía desaparece. Su expresión cambia de una tranquila concentración a una preocupación palpable.

Zarbon: —Señor Freezer... Hemos perdido la señal de Dodoria.

Freezer abre lentamente sus ojos, que brillan con una mezcla de irritación y sorpresa. Mantiene la compostura, pero un aura de peligro se percibe a su alrededor.

Freezer: —¿Perdido, dices? Qué interesante... Parece que nuestro querido Dodoria ha encontrado más problemas de los que podía manejar.

Zarbon asiente, nervioso por lo que podría implicar esto.

Zarbon: —Podría ser que los habitantes de Namek hayan recibido ayuda inesperada... o tal vez alguno de esos guerreros terrícolas que mencionamos antes.

Freezer: —Oh, esos molestos terrícolas otra vez... Parece que realmente no aprecian lo que podría pasar si siguen interfiriendo.

Freezer se levanta de su trono flotante, flotando ligeramente por la sala. Su rostro se mantiene sereno, pero una sonrisa peligrosa se forma en sus labios.

Freezer: —Zarbon, prepárate. Nosotros mismos nos ocuparemos de este asunto. Asegúrate de que todas las unidades estén en máxima alerta. Y si es necesario... iremos a "dar la bienvenida" a esos intrusos personalmente.

Zarbon: —Entendido, señor Freezer.

Zarbon comienza a dar órdenes a través del sistema de comunicación, mientras Freezer sigue mirando por la ventana de la nave, observando el planeta Namek abajo. La calma antes de la tormenta.

La nave espacial avanza a través del vasto vacío del espacio, acercándose al planeta Namek. El interior de la nave está iluminado por luces tenues y el sonido constante de los motores que mantienen la nave en su curso.

Vegeta está sentado en una de las sillas de control, su actitud impasible mientras revisa los sistemas de la nave. Sus pensamientos están enfocados en la misión que tienen por delante. Izuku, en un rincón de la nave, está inmerso en un entrenamiento mental, meditando con los ojos cerrados para prepararse para el desafío que les espera. Su concentración es profunda, y una ligera aura de energía parece envolverlo mientras trabaja en fortalecer su mente y habilidades.

Kaminari está tratando de seguir el ritmo de Vegeta. Aunque parece un poco abrumado por la situación, su determinación es evidente. Se mueve por la nave con una mezcla de nervios y emoción, tratando de prepararse para lo que vendrá.

Kaminari: —Oye, Vegeta, ¿cuánto falta para llegar a Namek? No puedo esperar para ver qué nos espera allí.

Vegeta lo mira de reojo, con una expresión de impaciencia.

Vegeta: —No te preocupes por eso. Solo asegúrate de estar listo para cuando lleguemos. Namek no es un lugar para los débiles.

Kaminari asiente con determinación y se dirige hacia el área de entrenamiento para practicar su control de energía.

Mientras tanto, Izuku continúa con su entrenamiento mental. Su mente se enfoca en la tarea de aumentar su poder y perfeccionar sus habilidades, consciente de que enfrentar a Freezer y sus secuaces requerirá toda su fuerza y concentración. La atmósfera en la nave es de expectativa y preparación mientras se acercan a su destino.

Izuku abre lentamente los ojos, con una sensación de paz interior y determinación renovada. Se dirige hacia el área de control, donde Vegeta está trabajando en la navegación.

Izuku: —Vegeta, ¿cómo va todo? Estoy listo para lo que venga.

Vegeta: —Bien. Mantente alerta. No sabemos qué tipo de resistencia encontraremos en Namek.

nave continúa su viaje, acercándose al planeta mientras el equipo se prepara para la batalla que se avecina. El ambiente a bordo está cargado de tensión y preparación, reflejando la gravedad de la misión que tienen por delante.

Krillin y Goten aterrizan suavemente sobre una colina rocosa en el planeta Namek, ocultándose detrás de unas formaciones rocosas para no ser detectados. Desde su posición elevada, observan hacia una aldea namekiana que ha sido devastada por las fuerzas de Freezer. La atmósfera es sombría y tensa; la tierra está quemada, y varias casas están destruidas. Los habitantes de la aldea están visiblemente aterrorizados.

En el centro de la aldea, Zarbon, el imponente teniente de Freezer, está de pie frente a un grupo de namekianos. Tiene una sonrisa cruel en su rostro mientras sostiene a un anciano namekiano por el cuello, elevándolo del suelo con una sola mano. El anciano, claramente un líder de la aldea, lucha por respirar.

Zarbon, con una voz fría y autoritaria, exige:

Zarbon: —¡Habla ya, anciano! Dime dónde están las dos esferas del Dragón o te arrepentirás de haberte quedado callado.

El anciano mantiene una mirada desafiante, a pesar de estar al borde de la inconsciencia. Su determinación es evidente; no traicionará a su gente ni revelará la ubicación de las esferas. Zarbon, perdiendo la paciencia, aumenta la presión en su agarre.

Krillin y Goten, observando desde la colina, quedan atónitos y llenos de rabia al presenciar la brutalidad de Zarbon. El corazón de Krillin late con fuerza, sabiendo que no pueden simplemente lanzarse a la acción sin un plan.

Goten, con un tono urgente y ansioso, susurra:

Goten: —¡Krillin! ¡Tenemos que hacer algo! ¡No podemos dejar que lo mate!

Krillin mantiene su mirada fija en la escena, su mente corriendo a toda velocidad mientras busca una forma de intervenir sin revelar su posición.

Krillin: —Lo sé, Goten, lo sé... pero si nos lanzamos sin un plan, podríamos poner a toda la aldea en peligro. Primero debemos encontrar la forma de distraer a Zarbon o alejarnos con las esferas. No podemos enfrentarnos a él directamente sin el apoyo de los demás.

De repente, Zarbon, cansado de esperar, decide acabar con el anciano. Levanta su otra mano, cargando una pequeña esfera de energía mortal, lista para ser disparada a quemarropa.

Zarbon: —Muy bien, tú lo quisiste. Quizás los demás sean más habladores cuando vean lo que le pasa a un líder obstinado como tú.

Antes de que pueda lanzar la esfera de energía, Krillin actúa rápidamente, lanzando una Distracción Solar en dirección a Zarbon para cegarlo momentáneamente. La luz intensa envuelve la zona, sorprendiendo tanto a Zarbon como a los soldados que lo rodean.

Krillin: —¡Goten, ahora! ¡Vamos por las esferas mientras estén cegados!

Goten asiente rápidamente, y los dos se mueven con rapidez y sigilo, aprovechando la confusión momentánea para acercarse al área donde las esferas del Dragón están escondidas, mientras intentan encontrar la manera de salvar a los aldeanos de la cruel tiranía de Freezer y sus hombres.

Zarbon, al darse cuenta de la distracción, se recupera rápidamente de la cegadora luz emitida por la distracción solar y avanza con determinación hacia Krillin y Goten. Su rostro se torna en una mueca de furia mientras se prepara para atacar con su temido movimiento Danza Sangrienta.

Zarbon se mueve con una velocidad impresionante, alcanzando a Krillin y Goten antes de que puedan alejarse. Su ataque comienza con una poderosa patada que impacta a Krillin, enviándolo a volar por los aires y estrellándose contra una pared de roca cercana. Krillin se tambalea por el impacto, pero antes de que pueda recuperarse, zarbon lo sigue con rapidez. 

Con una serie de movimientos fluidos,zarbon lanza cuatro golpes consecutivos que arrollan a Krillin, dejándolo en el suelo, herido y debilitado. Goten observa con horror como su amigo es brutalmente atacado y, sin perder tiempo decide intervenir.

Krillin, con el esfuerzo máximo,se pone de pie a duras penas. Con una expresión de determinación y dolor,levanta su mano derecha y reúne toda su energía. La esfera blanca de energía se forma en su mano,brillante y cargada de poder.

Krillin  : –¡Bombardero Fotonico!

Krillin extiende su mano hacia adelante y dispara una potente onda de energía blanca directamente hacia Zarbon. El ataque impacta de lleno,causando una explosión luminosa y una gran cantidad de daño. Zarbon es arrojado hacia atrás por la fuerza del ataque,tambaleándose pero logrando mantenerse en pie.

Zarbon,furioso por el ataque y viendo que la situación se ha vuelto más complicada, se recompone rápidamente, sacudiendose el polvo y el dolor. Su mirada fija en Krillin y Goten muestra una mezcla de furia y desafio.

Zarbon : –¡¿ cómo te atreves a desafiarme, 8nsignificante insecto?! ¡ No me detendré hasta que los aplaste a todos!

Krillin, aún jadeando y adolorido ,se acerca a Goten con una expresión de preocupación.

Krillin  : –Goten ,necesitamos salir de aquí ahora . No podemos enfrentarlo sin el apoyo de los demás. ¡Busca las esferas y asegúrate que estén a salvo!

Goten asiente,entendiendo la gravedad de la situación. Los dos se preparan para un nuevo retiro estratégico Zarbon se recupera y se prepara un n6evo ataque,decido a acabar con ellos antes de que puedan escapar.

Goten, viendo la oportunidad después del ataque de Krillin, decide no dejar que Zarbon se recupere tan fácilmente. Con una expresión decidida, carga hacia Zarbon usando su técnica ¡Asalto!.

Primero, Goten avanza rápidamente hacia Zarbon, lanzando una ráfaga de puñetazos con velocidad y precisión. Zarbon, sorprendido por la ofensiva repentina del joven Saiyan, intenta bloquear los golpes, pero varios de ellos logran conectar, empujándolo hacia atrás.

Zarbon da un paso atrás, furioso por haber sido golpeado por alguien tan joven, y se prepara para contraatacar. Sin embargo, Goten no le da tiempo. Se lanza al aire, elevándose rápidamente mientras prepara su siguiente movimiento. Zarbon, creyendo que puede esquivarlo, sigue los movimientos de Goten con sus ojos, listo para evitar el ataque.

Goten, anticipando la maniobra de Zarbon, dispara una Onda de Ki hacia el suelo a toda velocidad. La explosión de energía debajo de él lo impulsa con fuerza hacia arriba, ganando una velocidad tremenda. Usando esa velocidad, Goten se lanza como un meteoro hacia Zarbon, quien, a pesar de sus reflejos, se ve atrapado por la repentina aceleración de Goten.

Zarbon intenta esquivar, pero no puede reaccionar a tiempo. Goten lo impacta de lleno con su cuerpo, utilizando toda la inercia de su caída y la fuerza de un Saiyan en pleno combate. El golpe es devastador, lanzando a Zarbon hacia atrás y causando un gran daño.

Zarbon es enviado volando hacia una formación rocosa cercana, atravesándola con una explosión de polvo y escombros. Se escucha un fuerte crujido cuando Zarbon choca contra el suelo, claramente aturdido y gravemente herido por el inesperado ataque de Goten.

Goten, aterrizando con una expresión desafiante, se prepara para lo que pueda venir a continuación. Krillin se une a él, respirando con dificultad pero listo para pelear si es necesario.

Krillin: —¡Buen trabajo, Goten! Ese golpe le hará pensarlo dos veces antes de subestimarnos.

Goten: —Gracias, Krillin. ¡Pero debemos estar atentos! ¡No creo que se quede quieto por mucho tiempo!

En la distancia, Zarbon, cubierto de polvo y con heridas visibles, se levanta con una mirada de puro odio en su rostro, su orgullo herido profundamente. La batalla apenas ha comenzado, y es evidente que no se rendirá tan fácilmente.

Zarbon, aún tambaleándose tras el brutal impacto de Goten, se pone de pie lentamente. Su rostro muestra una mezcla de ira y determinación. No dispuesto a ser humillado por un niño Saiyan, decide contraatacar con una de sus técnicas más devastadoras.

Concentrándose, Zarbon extiende una mano hacia adelante, la otra mano apoyándola desde atrás, adoptando una postura similar a la utilizada en la Onda de Demonio Explosiva. Su energía comienza a concentrarse rápidamente, creando un brillo naranja intenso alrededor de su mano extendida.

Zarbon grita con furia mientras la energía crece, y finalmente, lanza su técnica Ráfaga Elegante. Una poderosa ráfaga de energía naranja sale disparada de su mano, dirigiéndose hacia Goten con una velocidad impresionante, rompiendo el suelo a su paso.

Goten, sin embargo, ya estaba preparado para un contraataque. Al ver el destello naranja y sentir la acumulación de energía, utiliza sus reflejos Saiyan. En el último segundo, Goten da un salto rápido hacia un lado, esquivando la ráfaga con facilidad. La explosión de energía pasa rozando el lugar donde estaba momentos antes, golpeando una formación rocosa detrás de él y desintegrándola al instante.

Zarbon, frustrado al ver cómo Goten evade su ataque, grita con furia, sus ojos llenos de odio. Goten, en cambio, aterriza suavemente en el suelo, con una sonrisa confiada.

Goten: —¡Vas a tener que hacerlo mejor que eso, grandulón!

Krillin, que había observado atentamente la maniobra de Goten, se siente más confiado sabiendo que tienen una oportunidad contra Zarbon. Pero ambos saben que no deben bajar la guardia; Zarbon es un enemigo formidable y peligroso.

Mientras tanto, Zarbon respira con dificultad, pero no parece dispuesto a rendirse. Aún tiene muchos trucos bajo la manga, y la batalla por las esferas del dragón en Namek promete intensificarse aún más.

Zarbon se concentra en Goten y Krillin, preparándose para lanzar otro ataque. Su frustración crece con cada segundo que pasa, ya que no puede acabar con estos molestos guerreros. No se da cuenta de que alguien más se ha unido al combate y se encuentra justo detrás de él.

Bakugou, con una sonrisa desafiante y los ojos llenos de determinación, ha estado observando y esperando el momento perfecto para atacar. Sin hacer ruido, se posiciona detrás de Zarbon, canalizando todo su poder y rabia en sus manos. Sus palmas comienzan a chisporrotear con una energía intensa, generando rayos de electricidad que iluminan su rostro ferozmente concentrado. Está listo para liberar su poderosa técnica.

Bakugou: —¡Estruendo Final!

Una onda masiva de energía sale disparada de sus manos, destrozando el aire a su paso mientras una intensa luz azul-blanca ilumina el campo de batalla. La poderosa ráfaga de energía se lanza directamente hacia Zarbon, quien apenas tiene tiempo de reaccionar.

El ataque golpea a Zarbon en la espalda con una fuerza devastadora. Zarbon suelta un grito de dolor cuando la explosión de energía lo envuelve por completo, enviándolo volando por los aires. La ráfaga continúa avanzando, llevándolo con ella, hasta que finalmente choca contra una montaña cercana, creando una explosión masiva que sacude todo el área.

Cuando el humo y el polvo comienzan a disiparse, Goten y Krillin miran asombrados el resultado del ataque. Bakugou, aún con las manos extendidas, respira pesadamente, con una mezcla de satisfacción y rabia en su rostro.

Bakugou: —Eso es lo que pasa cuando te metes con nosotros… ¡no me subestimen!

Aunque el ataque ha hecho un gran daño, todos saben que no pueden confiarse. Zarbon es un oponente poderoso, y esta batalla aún está lejos de terminar. Sin embargo, con Bakugou demostrando su fuerza, queda claro que no será fácil para Zarbon y los demás soldados de Freezer derrotarlos.

Trunks aparece en la pantalla, con una expresión seria pero con la determinación que lo caracteriza. La cámara gira lentamente a su alrededor, mostrando el paisaje desolado y las cicatrices de la reciente batalla en Namek.

Trunks: —En el próximo episodio de Dragon Ball, la batalla en Namek se intensifica. Con Bakugou demostrando su inmenso poder y derrotando a Zarbon con su técnica Estruendo Final, nuestros guerreros comienzan a ganar ventaja en esta feroz lucha. Pero, el verdadero terror de Freezer aún no se ha desatado.

La escena cambia a Freezer observando los eventos desde su nave con una sonrisa siniestra en su rostro.

Trunks: —Mientras tanto, Freezer, cada vez más impaciente y enfurecido por la pérdida de sus hombres, decide intervenir personalmente. ¿Podrán Goten, Krillin, Trunks y Bakugou enfrentarse a un enemigo tan abrumador?

La escena se traslada a Izuku, Vegeta, y Kaminari acercándose a Namek a bordo de su nave. Vemos a Izuku intensificando su entrenamiento mental, mientras Vegeta y Kaminari se preparan para lo que está por venir.

Trunks: —Con Goku, Izuku, Vegeta, y los demás acercándose a Namek, una confrontación épica se avecina. La desesperación de Freezer se transformará en una furia implacable, y nuestros héroes necesitarán cada onza de su fuerza y habilidades para superar esta prueba.

Las escenas de acción rápidas muestran destellos de combates, técnicas de energía colisionando, y momentos de tensión mientras Freezer empieza a liberar su poder.

Trunks: —¡No se pierdan el próximo episodio de Dragon Ball: "La Desesperación de Freezer"! ¡La guerra en Namek apenas comienza, y el destino del universo está en juego!

La música aumenta en intensidad, y la pantalla se desvanece con el logo de Dragon Ball mientras Trunks termina su narración con determinación.