Bulma dedico un mes entero a reconstruir la nave que ella, Krillin y Gohan usaron en su última misión a Namek. Trabajó incansablemente, optimizando cada detalle para asegurarse de que la nave estuviera en perfecto estado. Sabía que la situación era crítica, y que el tiempo era esencial para llegar a Namek y enfrentar la amenaza de Freezer. Mientras tanto, los demás guerreros se preparaban mental y físicamente para la dura batalla que les esperaba.

Una mañana, Bulma, visiblemente cansada pero satisfecha, se acerca a Piccolo, que está meditando cerca de la nave recién reconstruida.

Bulma: "¡Piccolo! ¡He terminado la reconstrucción de la nave! Está lista para partir cuando quieran."

Piccolo: "Excelente trabajo, Bulma. ¿Está todo en orden?"

Bulma: "Sí, la nave está en perfecto estado. He hecho algunas mejoras en el sistema de navegación y en los motores. Deberíamos poder llegar a Namek rápidamente."

Piccolo: "Bien. Goku, Krillin y los demás ya deben estar listos para partir. Avísales que estamos listos para salir."

Bulma: "¡Claro! Iré a decirles de inmediato."

Bulma se dirige hacia el grupo para informarles de la buena noticia, mientras Piccolo revisa los detalles finales de la nave, asegurándose de que todo esté en orden antes de su misión crucial.

Mientras Bulma se dirige al grupo para darles la noticia de la nave lista, Goten y Trunks están jugando a las chapados cerca de la nave. Sus risas y juegos los llevan a entrar sin darse cuenta en la nave recién reparada.

Goten: "¡Trunks, atrápame!"

Trunks: "¡Te tengo, Goten!"

Mientras los dos niños corren y juegan, Krillin y Bakugou llegan a la nave, listos para partir. Sin embargo, en un giro inesperado, Trunks, mientras juega, accidentalmente activa el panel de control.

Trunks: "¡Oops! ¡No quise hacer eso!"

De repente, los motores de la nave comienzan a rugir y la nave empieza a despegar, elevándose lentamente del suelo.

Krillin: "¡Espera! ¡Detenla!"

Bakugou: "¡Maldita sea, ¿qué está pasando?!"

Piccolo y Goku, que estaban observando desde una distancia, se dan cuenta de lo que está sucediendo y se apresuran hacia la nave.

Piccolo: "¡No puede ser! ¡La nave está despegando!"

Goku: "¡Vamos, Piccolo! ¡Tenemos que detenerla antes de que se vaya demasiado lejos!"

Mientras Piccolo y Goku intentan llegar a la nave, la nave ya ha comenzado su ascenso. Goten y Trunks, ajenos al caos, siguen jugando dentro de la nave mientras Krillin y Bakugou se preparan para intentar detener el despegue.

Dentro de la nave, el caos se apodera del grupo mientras la nave sigue ascendiendo.

Bakugou, visiblemente frustrado, se dirige a Trunks:

Bakugou: "¡Maldita sea, Trunks! ¿Qué demonios estás haciendo? ¡Nos estás sacando de aquí antes de tiempo!"

Trunks, aún sorprendido, trata de entender la situación:

Trunks: "¡Lo siento! ¡No quise hacerlo! ¡Estaba jugando y accidentalmente toqué el panel!"

Krillin, intentando mantener la calma en medio del caos, se dirige a Bakugou:

Krillin: "¡Bakugou, cálmate! ¡No es culpa de Trunks! Tenemos que encontrar una manera de estabilizar la nave y asegurarnos de que todos estén a salvo."

Mientras Krillin intenta calmar a Bakugou, se acerca al panel de control para tratar de recuperar el control de la nave.

Krillin: "Trunks, ¿puedes ayudarme a encontrar el sistema de control manual? Necesitamos evitar que esta nave se descontrole."

Bakugou, aunque aún molesto, comienza a calmarse y observa mientras Krillin y Trunks trabajan para solucionar el problema. La nave, aún ascendiendo, se mantiene estable por el momento, pero el grupo sabe que necesitan actuar rápidamente para evitar problemas mayores.

En la Corporación Cápsula, Bulma y Vegeta observan con preocupación la pantalla que muestra la nave alejándose rápidamente hacia Namek.

Bulma, con los brazos cruzados y el ceño fruncido, suspira:

Bulma: "No puedo creer que Trunks haya hecho esto… ¡ni siquiera estaba lista para despegar oficialmente!"

Vegeta, con una expresión severa, comenta con una mezcla de frustración y resignación:

Vegeta: "Ese mocoso… Parece que su imprudencia no tiene límites. Vamos a tener que seguirlos y traerlos de vuelta."

En ese momento, Kaminari y Kirishima llegan corriendo, notando la tensión en el ambiente.

Kirishima, con preocupación en su voz, pregunta:

Kirishima: "¡Bulma! ¿Vegeta! ¿Qué está pasando? ¿Por qué están todos tan tensos?"

Kaminari, mirando la pantalla, añade:

Kaminari: "Esa nave… ¿Es la que estaban reparando? ¿Por qué se está alejando tan rápido?"

Bulma, sin apartar la vista de la pantalla, responde con un tono molesto:

Bulma: "Trunks y Goten entraron a la nave jugando, y ahora, por un error, están rumbo a Namek. Krillin y Bakugou también están a bordo, y no hay forma de traerlos de vuelta hasta que lleguen allí."

Vegeta, con los brazos cruzados, asiente:

Vegeta: "Tendremos que actuar rápido. No podemos permitir que se metan en problemas sin nuestra ayuda. Si Freezer está realmente de vuelta, ellos no están preparados para enfrentarlo solos."

Kaminari y Kirishima intercambian miradas de preocupación mientras el peso de la situación recae sobre ellos.

En el momento en que Kirishima y Kaminari asimilan la gravedad de la situación, sus pensamientos reflejan su preocupación y determinación.

Kirishima (pensando): "Esto no pinta nada bien. Trunks y Goten están en una situación peligrosa y ni siquiera han tenido tiempo para prepararse adecuadamente. Si Freezer está de vuelta, van a necesitar toda la ayuda posible. Tengo que hacer todo lo que pueda para asegurarme de que salgan de esto a salvo."

Kaminari (pensando): "Esto es un desastre total. No sé mucho sobre lo que ha pasado antes, pero parece que Freezer es un gran problema. Trunks y Goten están en la nave, y Krillin y Bakugou también. Necesitamos encontrar una manera de alcanzarlos y asegurarnos de que todo salga bien. No puedo quedarme de brazos cruzados."

Bulma, viendo la urgencia de la situación, se dirige a Goku e Izuku con determinación.

Bulma: "Puedo reconstruir la nave en la que Goku llegó a la Tierra cuando era bebé. No será fácil, pero es nuestra mejor opción para llegar a Namek antes que Freezer."

Vegeta: (Acercándose a Goku e Izuku con una expresión seria) "Escuchen bien, no quiero ver ninguna tontería. Freezer no es un enemigo con el que se pueda jugar. Necesitamos estar completamente preparados antes de enfrentarlo. No subestimen el peligro."

Goku: "No te preocupes, Vegeta. Lo tomaremos en serio. Solo necesitamos asegurarnos de que todo esté listo para cuando lleguemos."

Izuku: "De acuerdo, haremos todo lo necesario para estar listos. No queremos repetir los errores del pasado."

Vegeta: (Asintiendo con determinación) "Bien. Asegúrense de que no haya errores. Freezer no perdona."

Mientras tanto, Bulma y su equipo trabajan arduamente para reconstruir la nave, con la esperanza de que puedan llegar a Namek a tiempo para evitar que Freezer lleve a cabo sus planes.

Durante los siguientes dos meses, Bulma trabajó incansablemente en la reconstrucción de la nave de Goku, recibiendo la valiosa ayuda de Mei Hatsume, quien aportaba su ingenio y habilidades en tecnología avanzada para optimizar el proceso. Cada día, la nave tomaba más forma, acercándose a su completa restauración.

Mientras tanto, All Might llegó a la Corporación Cápsula para observar el progreso y ver cómo todos se estaban preparando para la inminente misión a Namek. Al llegar, vio a Goku y Piccolo sentados en posiciones meditativas, con los ojos cerrados y concentrados, envueltos en un aura de energía mientras llevaban a cabo un entrenamiento mental. Sus espíritus estaban conectados, simulando combates y estrategias para perfeccionar sus habilidades y coordinación.

No muy lejos de allí, Kirishima y Kaminari estaban experimentando un tipo de entrenamiento completamente diferente. Vegeta, sin mostrar ninguna piedad, los sometía a un régimen de entrenamiento brutal. Ambos sufrían bajo la presión, empapados en sudor y luchando por mantenerse en pie, pero la determinación en sus ojos demostraba que no estaban dispuestos a rendirse.

Por otro lado, Izuku entrenaba en la máquina de gravedad, enfrentando una gravedad 200 veces superior a la de la Tierra. Cada movimiento era una lucha titánica, pero Izuku persistía, con el objetivo de volverse lo suficientemente fuerte para enfrentarse a Freezer y proteger a sus amigos. Su cuerpo se adaptaba lentamente a las extremas condiciones, y con cada sesión de entrenamiento, se volvía más poderoso y resistente.

La atmósfera estaba cargada de tensión y anticipación. Todos sabían que no había tiempo que perder y que la batalla que se avecinaba sería una de las más difíciles que jamás enfrentarían.

All Might se acercó a Izuku, quien estaba tomando un breve descanso en la máquina de gravedad después de una intensa sesión de entrenamiento. Su enorme figura proyectaba una sombra sobre el joven héroe mientras se inclinaba ligeramente hacia adelante.

"¡Joven Midoriya!" dijo All Might con su característica voz profunda pero llena de calidez. "He notado que hay otra nave en construcción. ¿Por qué están reconstruyendo la nave en la que llegaste, si ya tienen otra lista para la misión?"

Izuku, todavía respirando con dificultad por el entrenamiento, se secó el sudor de la frente y se enderezó, mostrando su acostumbrado respeto hacia su mentor.

"¡All Might!" respondió Izuku, tratando de recuperar el aliento. "Esa nave es un proyecto de Bulma y Mei. La están reconstruyendo como respaldo en caso de que algo salga mal con la nave principal. Con el regreso de Freezer, queremos estar preparados para cualquier contingencia. Además, Bulma mencionó que la nave tiene un valor sentimental para Goku. Es como si parte de su pasado estuviera con nosotros en esta misión."

Izuku hizo una pausa, mirando a la nave parcialmente reconstruida, y continuó: "Además, si llegamos a necesitar evacuar de emergencia o movernos rápido, tener dos naves nos dará más opciones y flexibilidad. No podemos permitirnos ningún error, especialmente contra un enemigo tan poderoso como Freezer."

Izuku se acercó a la nave recién reconstruida con una bolsa llena de provisiones, asegurándose de que todo lo necesario estuviera listo para el viaje. Vegeta lo seguía de cerca, con los brazos cruzados y una expresión seria, mientras que Kaminari, emocionado pero nervioso, se apresuraba detrás de ellos.

"¿Estás seguro de que empacaste todo, mocoso?" preguntó Vegeta, su voz sonando impaciente. "No quiero que te olvides de algo y nos retrasemos."

Izuku asintió rápidamente. "Sí, Vegeta, revisé la lista dos veces. Estamos listos."

Kaminari, sintiendo la tensión en el aire, intentó calmar la situación con su habitual actitud despreocupada. "Tranquilos, chicos. Con esto, ¡estamos más que preparados!"

Pero en su entusiasmo, Kaminari tropezó con el panel de control al entrar en la cabina de la nave. Sin darse cuenta, su codo golpeó el botón de encendido. De inmediato, los motores de la nave comenzaron a rugir, y la nave empezó a elevarse del suelo.

"¡¿Qué has hecho, idiota?!" gritó Vegeta mientras la nave comenzaba a despegar de manera inesperada.

"¡Lo siento! ¡No fue mi intención!" exclamó Kaminari, intentando desesperadamente detener la nave, pero era demasiado tarde. La nave ya estaba en el aire, ascendiendo rápidamente.

Desde abajo, Bulma observaba la escena con los ojos muy abiertos. "¡Esa nave no estaba lista para despegar!" gritó mientras veía cómo la nave desaparecía en el cielo.

Izuku, intentando mantenerse calmado, tomó el control de la nave. "No hay vuelta atrás ahora. Tendremos que improvisar."

Vegeta frunció el ceño, aunque había un pequeño brillo de aceptación en sus ojos. "Más vale que no nos metas en problemas, chispitas," dijo dirigiéndose a Kaminari, antes de concentrarse en lo que estaba por venir.

En la mente de Kaminari:

"¡Oh, no! ¡La he liado! Esto no puede estar pasando… No puedo creer que haya activado los motores por accidente. ¿Y si esto arruina la misión? Vegeta ya está furioso conmigo… ¿Cómo voy a arreglar esto? ¡Maldición, Kaminari, siempre metiendo la pata en los peores momentos! No puedo dejar que los chicos piensen que soy un inútil. Tengo que encontrar una manera de compensar esto… ¡Tengo que demostrar que también soy útil!"

En la mente de Izuku:

"No podemos darnos el lujo de perder la calma ahora. Kaminari cometió un error, pero esto no cambia lo que debemos hacer. La nave está en el aire, y no tenemos otra opción más que seguir adelante. Tengo que concentrarme en pilotar la nave y asegurarme de que lleguemos a nuestro destino sanos y salvos. Vegeta está aquí, lo que significa que tenemos fuerza de sobra… pero también mucha presión. ¡Tengo que ser fuerte! Entrenar en la máquina de gravedad me ha ayudado a mejorar, pero ahora es el momento de ponerlo a prueba. No puedo fallar, todos dependen de mí."

En Namek, mientras tanto…

Freezer, Zarbon, y Dodoria avanzan por una pequeña aldea namekiana, sus sombras cayendo sobre los atemorizados habitantes. Freezer, con su característica sonrisa fría, observa con desdén a los namekianos que se arrodillan ante él.

Freezer: "Supongo que ya saben lo que venimos a buscar, ¿verdad? Sería prudente entregar las Esferas del Dragón sin oponer resistencia… aunque, claro, me encantaría ver cuánto dolor pueden soportar antes de que decidan cooperar."

Zarbon y Dodoria, flanqueando a Freezer, observan con una mezcla de arrogancia y sadismo mientras los namekianos, temblando, intentan ocultar su miedo.

Dodoria: "¿Qué dices, Zarbon? ¿Deberíamos enseñarles lo que pasa cuando desafían al gran Lord Freezer?"

Zarbon: "Creo que sería un recordatorio apropiado. Estos namekianos parecen olvidar fácilmente su lugar."

Los namekianos se miran entre sí, conscientes de la amenaza que representan estos invasores. Un anciano namekiano da un paso al frente, tratando de negociar en vano.

Anciano Namekiano: "No tenemos lo que buscan… No queremos problemas. Por favor, déjennos en paz."

Freezer: (riendo suavemente) "Oh, qué conmovedor… Pero sabes que no acepto negativas. Quizás un poco de… persuasión ayudará a refrescar sus memorias."

Con una señal de Freezer, Dodoria avanza hacia los namekianos, preparado para iniciar la intimidación física. La situación es crítica y el ambiente en la aldea se carga de tensión, mientras Freezer observa con un placer maligno el sufrimiento que se avecina.

Dodoria, con una risa cruel, apunta su dedo hacia una de las casas de la aldea. Un destello de energía surge de su dedo, lanzando un láser que atraviesa la estructura con facilidad, destruyéndola en una explosión de escombros y polvo. Los namekianos retroceden horrorizados, incapaces de defenderse contra la brutalidad de sus invasores.

Dodoria: "¡Así es como tratamos con la resistencia, miserables namekianos! Ahora, ¿quién quiere ser el siguiente?"

Mientras Dodoria se regodea en su acto de destrucción, Freezer se ajusta el rastreador en su ojo, analizando la zona. Su ojo mecánico parpadea cuando finalmente detecta una fuerte señal de energía.

Freezer: "Ah, ahí está… La Esfera del Dragón de tres estrellas. No está muy lejos, justo donde estos tontos pensaban que podrían ocultarla."

Con un gesto de satisfacción, Freezer comienza a flotar lentamente en dirección a la señal, su presencia impone una terrible sensación de desesperanza entre los aldeanos.

Freezer: "Zarbon, Dodoria, asegúrense de que nadie interfiera mientras recojo nuestro premio. Si es necesario, eliminen a todos estos inútiles."

Zarbon asiente con indiferencia, mientras Dodoria se ríe, dispuesto a continuar con su destrucción si es necesario. La situación en la aldea de Namek se vuelve cada vez más desesperante, mientras Freezer se acerca a la Esfera del Dragón, decidido a hacerse con el poder absoluto.

La nave, tras un viaje más accidentado de lo planeado, finalmente comienza a descender sobre el paisaje verde y vasto de Namek. El vehículo se tambalea ligeramente al aterrizar sobre un montículo de tierra cerca de una cueva natural. La compuerta de la nave se abre lentamente, permitiendo que la luz verdosa del planeta inunde el interior.

Trunks (un poco nervioso): "Bueno... parece que aterrizamos sin problemas. Al menos no nos estrellamos."

Bakugou (enojado): "¡Eso fue pura suerte! ¿Qué te pasa, Trunks? ¡Nos lanzaste antes de tiempo y ahora estamos en este agujero verde en medio de la nada!"

Krillin (tratando de calmar la situación): "Calma, Bakugou. Lo importante es que llegamos a Namek. Tenemos que mantenernos concentrados y no hacer ruido. Freezer podría estar en cualquier parte."

Goten (emocionado): "¡Namek se ve genial! ¡Vamos a explorar!"

Krillin (preocupado): "No tan rápido, Goten. Este no es un lugar para jugar. Tenemos que mantenernos juntos y encontrar un plan para localizar a los demás."

Mientras los cuatro salen de la nave, observan el entorno. La cueva natural frente a ellos parece un buen lugar para refugiarse y planear su próximo movimiento. La atmósfera es tensa; saben que están en territorio enemigo y que cualquier paso en falso podría alertar a Freezer y sus secuaces. Sin embargo, la misión es clara: encontrar las Esferas del Dragón antes que Freezer, y sobrevivir en el proceso.

Krillin, con una expresión seria en su rostro, saca el radar del Dragón de su bolsillo y lo enciende. El dispositivo emite un pitido suave mientras la pantalla parpadea, mostrando la ubicación de las Esferas del Dragón en Namek. Sus ojos se ensanchan cuando ve que dos esferas están marcadas justo en la cueva frente a ellos.

Krillin (sorprendido y aliviado): "¡Increíble! Hay dos esferas del Dragón justo aquí, dentro de esa cueva."

Trunks (con entusiasmo): "¡Eso es una gran suerte! Si las encontramos antes que Freezer, tendremos una ventaja."

Bakugou (aún molesto, pero más centrado): "Dejen de perder el tiempo con charla. Si están ahí, ¡vamos a sacarlas antes de que alguien más lo haga!"

Goten (con entusiasmo): "¡Sí, vamos a por ellas!"

Krillin asiente, sabiendo que no pueden perder ni un segundo. Con precaución, los cuatro se adentran en la cueva, conscientes de que aunque las esferas estén cerca, el peligro podría estar más cerca de lo que piensan. La cueva es oscura y fresca, y el sonido de sus pasos resuena en las paredes de piedra. El radar sigue marcando la dirección correcta, guiándolos hacia las dos esferas.

La tensión en el aire es palpable mientras se acercan cada vez más al objetivo. La misión es riesgosa, pero tienen la esperanza de que obtener esas esferas les dará una ventaja crucial en la batalla que se avecina.

Krillin, con el radar en mano, sigue la señal hasta que finalmente encuentra las dos Esferas del Dragón escondidas detrás de unas rocas. Las agarra con cuidado, sintiendo el peso y la energía que emiten. Por un breve momento, sonríe al saber que han logrado encontrarlas sin complicaciones.

Krillin (susurrando emocionado): "¡Las tengo! Ahora solo tenemos que salir de aquí antes de que alguien... ¡Espera!"

De repente, el sonido de pasos pesados y apresurados se escucha desde el fondo de la cueva. Krillin y los demás se giran rápidamente para ver a Dodoria acercándose con una expresión de rabia y confusión. Al ver a Bakugou con su postura desafiante y cabello rubio erizado, Dodoria frunce el ceño y lo confunde inmediatamente.

Dodoria (con voz grave y airada): "¡Vegeta! ¿Qué demonios haces aquí, traidor? ¡Te atreves a venir por más esferas!"

Bakugou (con furia, levantando su puño envuelto en pequeñas explosiones): "¡¿Vegeta?! ¡Viejo gordo, no soy Vegeta! Pero ya que me confundes con él… ¡te daré un buen motivo para recordarme!"

Trunks (interviniendo rápidamente): "¡Bakugou, espera! No podemos luchar contra él aquí, atraeremos a Freezer y los demás."

Krillin (apresurado y nervioso): "Tiene razón. ¡Debemos salir de aquí, rápido! Antes de que Dodoria se dé cuenta de su error."

Goten (mirando a Dodoria con nerviosismo): "¡Sí, no podemos pelear con alguien tan fuerte aquí! Bakugou, por favor, ven..."

Pero Bakugou, desafiando las advertencias, ya se lanza hacia Dodoria, quien lo espera con una sonrisa cruel en su rostro, creyendo que tiene al príncipe saiyajin frente a él. La confusión de Dodoria le da a los otros una ventaja momentánea, pero saben que el tiempo es crucial.

Krillin (apretando las esferas contra su pecho): "¡Vamos, aprovechemos que está distraído! ¡Necesitamos un plan antes de que esto se ponga peor!"

Mientras Bakugou prepara su ataque explosivo, Krillin y los demás se preparan para cualquier eventualidad, sabiendo que su única opción podría ser escapar mientras Dodoria sigue confundido.

Bakugou se encuentra de pie, su energía acumulándose en su cuerpo mientras extiende sus brazos hacia adelante. Una intensa aura púrpura envuelve su figura, brillando con furia y determinación.

Bakugou (gritando con fuerza): "¡Cañón Explosión Final!"

Desencadena una poderosa onda de energía de su ataque, el Cañón Galick, directamente hacia Dodoria. La ráfaga de poder atraviesa el aire, dejando un rastro luminoso mientras avanza a gran velocidad. Sin embargo, Dodoria, con una expresión de burla y desprecio, da un salto rápido hacia adelante y desvía el ataque con una fuerte patada, dispersando la energía por los alrededores.

Dodoria (con una risa sardónica): "¡Es todo lo que tienes, insecto?! ¡Ahora es mi turno!"

Dodoria levanta las manos y carga una esfera de energía de color amarillo-naranja que crece rápidamente entre sus palmas. Con un grito feroz, lanza la esfera, que se convierte en una larga ráfaga de energía dirigiéndose hacia Bakugou.

Bakugou apenas logra esquivar el ataque principal, pero las ondas de Ki que siguen son demasiado rápidas y lo golpean, enviándolo al suelo. Se esfuerza por levantarse, pero el daño es considerable.

Mientras tanto, Krillin, Goten, y Trunks aprovechan la distracción. Con las dos Esferas del Dragón en mano, toman vuelo rápidamente, alejándose de la cueva para buscar las otras esferas.

Krillin (volando a toda velocidad, mirando hacia atrás con preocupación): "¡Espero que Bakugou pueda resistir lo suficiente! Tenemos que encontrar las otras esferas rápido."

Trunks (con seriedad): "Sabemos que Freezer también está tras ellas. ¡Debemos ser rápidos antes de que sea demasiado tarde!"

Goten (mirando hacia adelante, decidido): "¡Vamos! ¡Hay que mantenernos concentrados!"

Los tres continúan su vuelo sobre los vastos paisajes de Namek, mientras Bakugou se recupera y se prepara para seguir luchando, su determinación ardiendo a pesar del dolor que siente.

Bakugou siente la ira crecer dentro de él,alimentada por demor el deseo de demostrar su superioridad. Su respiración se vuelve más pesada mientras activa su Quirk,explosi9nes chiprando alrededor de sus manos. Sin perder tiempo, empieza a cargar toda su energía vital ,combinandola con du poder explosivo. Sus manos se posicionan hacia los costados, acumulando un aura brillante que se intens8fica con cada segundo.

Bakugou (gritando con furia):" ¡DESTELLO FINAL!"

Con un rugido feroz, extiende sus brazos hacia adelante,concentrando todo el poder acumulado en sus manos y disparando un enorme Rayo de energía de color amarillo. La ráfaga atraviesa en el aire,dejando un rastro cegador de luz mientras se dirige hacia Dodoria. El Rayo de energía es tan intenso que hace temblar el suelo de Namek, arrancando rocas del suelo y creando ondas de choque en todas direcciones.

Dodoria apenas tiempo de reaccionar cuando el poderoso Rayo lo golpea de lleno. El impacto es tan Devastador que una explosion masiva se desata, levantando una nube de polvo y escombros mientras el aire se llena de una intensa luz amarilla.

Cuando la explosión empieza a dispersarse,Dodoria emerge de entre los escombros, claramente herido y furioso. Su rostro está contorsionado de rabia , y su cuerpo muestra signos del daño recibido. 

Dodoria (gritando enojado): "¡Maldito mocoso! ¡ no te vas a salir con la tuya!"

Sin perder un momento, Dodoria carga su próximo ataque. Lleva sus brazos hacia atrás,  concentrando su energía mientras se aura se intensifica . Luego, con un grito, lanza sus brazos hacia adelante, liberando un poderoso Rayo de Dodoria. La onda de energía, de color rojo intenso, se dirige a toda velocidad hacia Bakugou,  quien apenas tiene tiempo para reaccionar.

El ataque de Dodoria impacta de lleno, provocando una explosión masiva que envuelve a Bakugou en un destello de luz. La tierra tiembla bajo la fuerza del golpe, mientras una columna de humo y energía se eleva hacia el cielo.

Dodoria (riendo maliciosamente) :"¡ Veremos cuanto más puedes soportar, insecto!"

Mientras el humo se disipa,la figura de Bakugou se mantiene en pie,  respirando con dificultad, pero con una determinación implacable en sus ojos. Aunque herido, su espíritu de lucha sigue ardiendo, y está listo para continuar la Batalla sin importar lo que venga

Krillin: "¡En el último episodio, las cosas se pusieron muy serias! Con Bakugou enfurecido y enfrentándose a Dodoria, la batalla se intensificó a un nivel completamente nuevo. Bakugou mostró una increíble fuerza con su Destello Final, un ataque tan devastador que hizo temblar la tierra. Sin embargo, Dodoria no se quedó atrás y respondió con su potente Rayo de Dodoria, lanzando una ráfaga de energía que desató una explosión masiva.

Mientras tanto, Goku, Izuku, y el resto del equipo se estaban preparando para su viaje hacia Namek. Con Trunks, Goten, y Bakugou ya en el planeta, la situación se complicó aún más. La nave de Bulma, ahora lista para el viaje, estaba en pleno funcionamiento, pero los desafíos en Namek apenas están comenzando.

¿Qué otras sorpresas nos esperan en esta épica confrontación? ¿Podrán Krillin y el resto del equipo superar estos obstáculos y recuperar las Esferas del Dragón antes de que sea demasiado tarde? ¡No te pierdas el próximo episodio para descubrirlo!"