Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 13

Al día siguiente, Emma se despierta muy temprano. Después del encuentro con Fabio, le costó conciliar el sueño, pero eso no ha impedido que abra los ojos con las primeras luces del alba. La noche ha transcurrido sin sueños que la agitaran, o al menos no era capaz de recordarlos. Pero la curiosidad por saber qué quería decirle Fabio, hace que se despierte algo nerviosa.

Cuando se ducha y se viste, se dirige a la habitación de la señora Gina, pero la puerta sigue cerrada, así que se dirige a la cocina y toma su desayuno en compañía del personal de servicio.

Al terminar el último trago de su café, recibe un mensaje de WhatsApp desde el número de Roger:

Roger: Buenos días. Cuando estés disponible, acude al despacho de Fabio, por favor.

Emma: Voy enseguida.

Mira la hora en la pantalla del móvil y comprueba que sólo son las 7 y media de la mañana. Supone que Fabio no se habrá despertado todavía, si anoche se quedó trabajando.

Abre la puerta después de tocar con los nudillos, y se encuentra a Fabio y a Roger de pie, delante de la mesa del despacho, uno frente a otro, ambos con las manos en los bolsillos:

—¿Se puede? —pregunta con timidez.

—Adelante —responde Fabio.

—¿Cómo estás, baby? —le pregunta Roger con una amplia sonrisa.

—Bien, gracias. La señora Gina todavía no se ha levantado —explica Emma.

—Ni lo hará hasta dentro de varias horas. Le gusta disfrutar de las resacas —bromea Roger.

—Queremos hablar contigo —interviene Fabio con tono serio, rompiendo el momento distendido.

—¿Qué ocurre? —pregunta Emma preocupada.

—¡Oh, vamos, Fabio! No vuelvas a ponerte en plan poli malo, que asustas a la chica.

Roger se acerca hasta Emma y le pasa su brazo por el hombro.

—No pretendo asustarla —se defiende Fabio —: Pero es un asunto serio.

—Pero, ¿qué pasa? —vuelve a preguntar Emma.

Sin dejar de rodearle con su brazo, Roger empieza a hablarle, lo que provoca que Emma se ponga todavía más nerviosa. 

—Tómatelo como un gesto de confianza —le explica —: Es una muestra de que confiamos plenamente en ti. Ha sido idea mía, pero Fabio está de acuerdo, y ya sabes lo desconfiado que es. Así que, piensa que es algo que valoraríamos mucho y que te lo proponemos a ti porque sabemos que no nos vas a fallar.

Emma mira a ambos hombres desconcertada. No es capaz de entender lo que Roger trata de decirle, ni se puede hacer una idea de cuál es el motivo de aquel sermón sobre la confianza. Necesita más información, pero ambos se han quedado callados. Así que pregunta:

—Perdona, pero no entiendo nada. ¿De qué gesto estás hablando? ¿Qué me queréis pedir? 

—Puede que te resulte extraño. De hecho, puede que lo sea. Pero estamos ante una situación de emergencia y necesitamos una solución rápida. Creemos que tú eres la persona más indicada para sacarnos de este apuro. De no ser así, no te lo pediríamos —sigue explicando Roger.

—Pero, ¿qué? ¿De qué hablas? —vuelve a preguntar Emma desconcertada.

—Queremos que te hagas pasar por la novia de Paolo —dice Fabio.

—¿¡Qué!? —exclama Emma sorprendida. 

—Será temporalmente —aclara Fabio —: Se han filtrado rumores a la prensa sobre la homosexualidad de Paolo y ahora mismo está a punto de lanzar su carrera deportiva. No puede permitirse ningún escándalo.

—No tendrás que hacer nada —le explica Roger —:Os haremos un par de fotos y las mandaremos a la prensa, para confirmar el noviazgo de Paolo...

—¡Yo no quiero salir en la prensa! —protesta Emma interrumpiendo a Roger.

—No te preocupes, nadie sabrá tu identidad. Las haremos de forma que no se vea tu rostro y daremos datos falsos. Simplemente es para acallar los rumores —sigue hablando Roger.

Emma se queda pensando, sin terminar de creerse aquella propuesta. Por un momento piensa que se trata de una broma:

—¿Estáis hablando en serio? —pregunta Emma.

—Incluiríamos una  bonificación económica en tu nómina por...

—¡No quiero dinero! —interrumpe Emma a Fabio algo enfadada.

—Sería para agradecerte el favor —añade Roger.

Se produce un incómodo silencio mientras Emma sigue intentando asimilar esa propuesta, y se pone a caminar por el despacho, de un lado a otro. Los dos hermanos se miran y es Fabio quien habla de nuevo: 

—Por supuesto, no estás obligada a hacerlo, Emma. Sólo te lo pedimos como un favor.

—Entonces, ¿por qué quieres pagarme? —pregunta Emma parándose en seco —: ¡Los favores no se pagan! 

—Tiene razón... —dice Roger.

—Sí, claro —admite Fabio —:Pensé que sería una forma de agradecerte...

—No quiero que aparezca mi nombre, ni mi cara, ni nada relacionado conmigo —empieza a decir Emma —:Y por supuesto, no tendré que hacer nada..., nada que sea de novios, ya me entendéis.

—Por supuesto —interviene Roger —:Sólo será un par de fotos y se harán de forma que nadie te pueda reconocer, tranquila.

—Vale.

—Gracias Emma —dice Fabio.

—Muy bien, pues vamos a buscar a Paolo. El fotógrafo está a punto de llegar —dice Roger.

—¡¿Ahora?! Pero...

—Tranquila —dice Fabio —:El fotógrafo vendrá con un estilista y traerán todo lo necesario para carecterizarte, para buscar el mejor ángulo... Hará todo lo necesario para que nadie sepa quién es la pareja de Paolo.

Los dos hombres salen del despacho para encargarse de los trámites oportunos, mientras Emma se queda allí parada, sin reaccionar, sin ser del todo consciente de lo que acaba de ocurrir. Desde el hall, Fabio se da cuenta de que Emma no se ha movido de allí, así que vuelve sobre sus pasos y se acerca hasta la joven. Ella lo mira sin saber qué decir, pero Fabio escoge las palabras más adecuadas para tranquilizarla: 

—Yo hablo con mi madre, tranquila —le dice. Al ver que Emma no reacciona, le pone las manos suavemente sobre los hombros y añade —:No sabes cómo agradezco tu ayuda, Emma. No sabíamos si pedirte algo así, pero sabía que podríamos contar contigo. Muchas gracias, de verdad.

—De nada —contesta Emma, casi en un susurro.

—Puedes ir a la zona de la piscina, nosotros acudiremos enseguida.

Fabio se dirige de nuevo hacia la puerta del despacho y Emma sigue sin moverse. Antes de salir, Fabio se gira hacia ella y le sonríe. Emma respira profundamente y le devuelve la sonrisa. 


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro