En el atardecer el aroma de Simón viene entrando por mi sistema, estoy en mi habitación dándome un baño relajante en una tina que viene en cada habitación del hotel, pero puedo sentir el aroma de mi pareja subiendo a la habitación como dijo que haría, que vendría para estar un rato conmigo, pero no es algo que me hace moverse de donde estoy porque sé que Simón sabe que estoy acá, en este lugar, y entrara de todas formas. 

Después de unos momentos escucho como la puerta se está abriendo, al volver mi vista no puedo evitar sonreír al ver a Simón desnudo mientras cierra la puerta y se mete conmigo a este estrecho lugar, dándome la espalda sentándose entre mis piernas y tirando su cuerpo hacia atrás apoyándose en mi.

— Creí que estabas leyendo, pero me encontré la grata sorpresa de que estabas aquí, y mi mente voló mientras me estaba acercando a la puerta.

Mis manos suben por los costados del cuerpo de Simón, para posicionarse en su abdomen como si lo estuviera abrazando, el momento es tan relajante, y cada vez es más relajante que antes porque Simón esta acompañándome ahora mismo en este lugar, en un momento intimo de parejas. 

Con una de mis manos agarro una de su mano y la llevo a mis labios para besar sus nudillos con suavidad, me imagino como seria sus manos si tuviera un anillo en sus dedos, un anillo de compromiso. Es muy rápido de mi parte imaginar aquello, no han pasado ni tres o cuatro meses junto a Simón, pero ya lo estoy imaginando comprometido conmigo, cuando en unas semanas tendré que desaparecer de su vida.

— ¿Abriste la caja, Rapha?

—No, lo guarde para no abrirlo por ahora.

— Es un regalo que me dio papá cuando era niño, es especial para mí, así que cuídalo porque ahora te lo di a ti y eso significa que te aprecio mucho.

Subo mi mano que estaba en su mano a su rostro para agarrar sus mejillas y voltearlo un poco hacia mi cara para besarlo con lentitud, tratando de que entienda mis agradecimientos. Es que estoy tan feliz de escuchar esas palabras salir de su boca porque antes creí que no podría tener esta cercanía con él, porque habían muchos motivos que no podían hacerlo, por su naturaleza de que es mundano, después porque empezamos mal, nuestras diferencias y después nuestra corta cercanía en la cual estuve casi al punto de mi muerte. 

Ahora me es irreal que estemos de este modo, tan bien, tan juntos y él confiándome algo de su vida diciendo que me aprecia. Conmueve tanto mis sentimientos que no puedo definir como me siento, que solo quiero besarlo y abrazarlo tanto para demostrarle mi cariño, es el mejor destinado como pareja que pude imaginar.

—Gracias por confiarme algo tan importante para ti, lo cuidare mucho—susurro entre sus labios— yo también te aprecio mucho, bebé.

De esta manera me es imposible saber que llegara un día y lo tendré que dejar a ir, no soy capaz de alejarme de mi pareja, no soy capaz ahora que me ha aceptado y correspondido mis sentimientos. Tampoco soy capaz de mentirle sobre mi ida, tengo que contarle la verdad de mi situación para que no crea que lo dejo porque no lo quiero, no quiero que se quede con una idea de que lo estoy dejando y martille su cabeza con suposiciones malas. Quiero que le quede en claro que estoy tan satisfecho con tenerlo, que me costó obtenerlo como mi pareja, y que acá a siempre será mi primera y única opción, que estoy tan estúpidamente enamorado que no puedo ni decirle todas las clases de sentimientos que son dedicadas a él.

— Sabes, cuando era un niño, papá y yo éramos muy unidos, éramos como grandes amigos y papá me dijo que algún día el tendría que irse. No sabía cuando ni como, pero que esperaba que yo entendiera que debía hacerlo. No lo entendí al principio, me costó y me enojé, pero ahora pude entenderlo. No todo me rodeaba a mí, era algo que él debía hacer, debía irse y no a un lugar, sino de este mundo—susurra en voz baja—, se fue diciéndome que sea feliz.

Me sorprendo sobre el tema que ha tocado, porque desde que llevamos encontrándonos rara veces hablamos de su familia, más que para contarme como su madre y hermana han hecho cosas no buenas y el está pagando por esos errores, o como han creado un vinculo que lo hacen sentir excluido. De su padre es la primera vez que lo nombra o habla de él y me hace pensar que algo le sucede para ponerse en este estado de ánimo tan triste como está ahora.

— Tu padre debe haber sido un buen hombre...

— Si, si siguiera vivo todo lo que pasa en mi familia sería distinto.

— Lamentarse ahora por algo que está pasando no va a sacar nada bueno, no debes recordar a tu padre solo porque si él estuviera todo sería mejor— le comento—, ahora me tienes a mí.

Veo como Simón se mueve en el pequeño lugar que estamos, el agua ha comenzado a rebalsar un poco por sus movimientos ya que está girando y se está subiendo a mis piernas para sentarse sobre ellas y así poder mirarme a la cara. Su desnudes y que ahora sus partes intimas están sobre la mía hacen que no pueda evitar suspirar. Simón ni siquiera nota como me estoy sintiendo ahora teniéndolo así, y yo debo controlar mis emociones porque todo su rostro me indica de que algo le está sucediendo, se encuentra un poco mas decaído, triste, ni siquiera parece que quiera hacer algo en este lugar.

— ¿Sucede algo?

— He estado escuchando últimamente por estos pasillos, que pronto te vas a ir—me dice con un tinte de tristeza— ¿Es cierto? ¿Me vas a dejar antes de irte? Creí que tú y yo teníamos química, que teníamos algo especial, pero...

Lo hago callar con un beso, atrayendo su cuerpo hacia mí apretando una de mis manos en su espalda y la otra en su cuello. No creí que eso le estuviera molestando, que también estuviera atento a lo que se está comentando en los pasillos cuando muchas veces parece distraído con su alrededor o asombrado con nuevas cosas que descubre, pero más me sorprende que el haya dicho que tenemos algo especial, porque a pesar de que estamos juntos siempre tengo una pequeña inseguridad de que él acabara la relación porque sus sentimientos pueden desaparecer cuando se aburra de mí. 

Aunque ahora me conmueve saber que no es así y me hace dar cuenta que Simón como mi pareja está desarrollando los sentimientos de nuestra unión, los está aceptando y los está mostrando, y ni siquiera se cuestiona sobre ello, solamente lo está aceptando.

— Nunca dudes nunca de mis sentimientos sobre ti, nunca, o deberé hacerte callar—susurro sobre sus labios—, me costó tanto conquistarte y estar a tu lado, que no quiero que nunca dudes de mí...

— Pero...

— Solo estaba pensando en cómo decirte sobre todo lo que está por suceder y que no reaccionaras así, como lo estás haciendo ahora.

— ¿Entonces me lo cuentas ahora o después de pedirte perdón por mis malas reacciones con mi cuerpo?

Los labios de Simón ha bajado a mi cuello mientras mi mano han bajado a su cadera, una risa sale de mis labios al caer en cuenta que mi mundano ha vuelto a ponerse bien y entusiasta con hacer algo intimo acá en el baño. Sus cambios de emociones son muy rápidos, de tristeza y preocupación a lo que está ahora, con ganas de tener relaciones sexuales de nuevo.

"Me encantas Simón"

N/a: ¡Termine de cursar! Así que voy a empezar a actualizar mas seguido, capaz cuatro veces por semana ya que la historia la tengo finalizada. Gracias por leer, y tengan una buen final de cursado.