(21)
La primera semana fue dolorosa para mí no ir hacia él, me mantenía encerrado en mi oficina supervisado bajo mi orden por Lilit para no salir, todos notaron el cambio que hubo de unas horas hacia otras, estaba feliz después de llevar a Simón aquella noche pero después todo mi ambiente de felicidad se derrumbo, todos querían preguntarme sobre los motivos repentino a alejarme de mi pareja, pero ninguno se atrevía a hablar, ni Lilit.
Con Magnus le saltaba con excusas de que estaba en un proyecto para el hotel para no juntarnos en Taki's y las líneas de mi marca comenzaban a empeorar y alargarse más, con ellos trajo los otros efectos secundarios comenzaron a agrietarse mis labios, comenzaron a aparecer ojeras notables bajo mis ojos, y comencé a vomitar sangre, al quinto día comencé a alucinar con Simón y a llorar sin sentido. Catarina me traía remedios, pero ya era dificil ocultar mi estado.
Pude saber de Simón por parte de Lilit, que era informada por mis niños, Simón seguía trabajando bien, decían mis niños, y que un hombre se acercaba de manera sospechosa, pero ellos terminaban espantandolo y acompañando en las sombras a mi mundano cuando salía a otro lugar que no fuera a Taki's, lo hacían por mí, sin siquiera haberme preguntado, sin siquiera esperar mi orden, lo hacían de buena fe, y se los agradecía con todo mi corazón por ser tan buenos.
Hoy, cuando llego la primera semana y el cuarto día de la segunda semana mi estado es deplorable, y Catarina no ha encontrado soluciones, lo peor de todo es que sufrí una emoción intensa negativa el segundo día de la segunda semana cuando me entere que Simón había sido nuevamente golpeado, y que había tenido una pelea con su familia huyendo de casa, todos los vampiros de mi hotel lo buscaron por todos lados, yo iba a salir yo mismo a ir por él, pero apareció en un hotel con otro hombre, con su perdida y ese dolor de que estaba con otra persona, hizo que mi cuerpo reaccionara mas y ahora las líneas negras están en toda mi espalda y abdomen, comenzando a bajar hacia mis muslos, y comenzando bajar por mis brazos.
Al tercer día, exactamente ayer, tuve que contarle a mi clan sobre que estaba sucediendo conmigo porque no podía ocultarlo más, ellos estaban tan preocupados por mí que fue triste verlos preocupado por nuestro futuro, pero pudieron entenderlo, mi sucesora es Lilit, se ha entrenado muy bien desde que la nombre mi mano derecha para ayudarme con el hotel, a pesar de que el día de ayer me suplicara hacer algo por mi porque no estaba preparada para tomar el cargo de esta manera. Pero realmente no se qué hacer.
Así que ahora me encuentro en mi oficina como todas las noches, casi acostado en mi silla del escritorio, he vomitado dos veces en el día, pero puede decir que la alucinaciones ya van dos días que no aparecen, aun las líneas no llegan a subir, pero todo mi torso, brazos y espalda están llenos de ellas, como enredaderas que empiezan y terminan en aquella marca. Estoy esperando de recibir la información de Simón hoy, y saber si está bien con sus heridas, si está trabajando, aunque no estoy preparado para saber que hoy ha estado con otro hombre.
La puerta de mi oficina ha sido golpeada sacándome de mis pensamientos, y Magnus entra a través de ella junto a Alexander, no los he visto desde dos semana y cuatro días, por sus reacciones parecen que les ha sorprendido verme así, ambos caminan hasta mí, cerca de mi escritorio, mientras Magnus agarra mis mejillas y me observa más de cerca
— Ra...Raphael ¿Qué paso contigo?
— Hola Magnus y Alexander ¿Me encuentro tan mal para sus ojos?—pregunto en un susurro.
— ¡Cuéntame todo! ¡Dime todo lo que le dijiste a Cat! —Me pide a gritos alterado— ¡¿Por qué me has ocultado esto por tanto tiempo?!
Alexander cierra la puerta de la oficina y mientras tranquilizamos a Magnus en los sillones, que se encuentra más alterado de lo que creí, comienzo a contarle todo lo sucedido de aquella noche y porque mi estado ha llegado a lo que está ahora, le he pedido que no hable, que no interrumpa, que solo me escuche mientras hablo de mi estado. Se ve tan preocupado mientras hablo que solo puedo ofrecerle un abrazo después de terminar de hablar sintiendo como se aferra a mí, siempre hemos atravesado algunos conflictos en nuestras vidas, nos hemos puesto en problema peligrosos, pero nunca habíamos llegado a pensar ninguno de los dos que esto se presentara.
— Tendrías que habérmelo dicho desde que todo comenzó, desde que la marca comenzó a hacerte esto—susurra Magnus triste.
—Si te lo decía, irías impulsivamente a agobiar a mi mundano y eso está prohibido—murmuro.
Veo una pequeña sonrisa amarga en su cara, lo conozco tanto que sabe que he acertado, Magnus es impulsivo en situaciones, ira de frente a arreglar los problemas y se enfrentara cara a cara, aunque a veces este mal, no medirá sus palabras, puede revelar información prohibida, no puedo permitir eso.
— Además estabas ocupado con tu asunto con Alexander— añado a mis palabras.
— ¡Raphael! — Me grita— ¿Ve el nivel de peligro que estas enfrentando? No es lo mismo que las otras veces, esta vez morirás.
Después de hablar un poco más ambos se marcharon, sin sacar sus preocupaciones de mi encima, dijeron que averiguarían una solución y Magnus me prometió que no iría a Simón, así que estoy de nuevo solo, en la habitación sin poder sacarme la expresión de mi gran amigo, cuando llego, cuando me escucho, lo estaba preocupando en todo sentido, tendría que haber hecho caso a mi razonamiento, cuando me dijo desde el principio que no siguiera mis estúpidos planes para que mi mundano me notara, si lo hubiese escuchado ahora mismo no estaría así. ¿Pero porque no me arrepiento de nada?
No me arrepiento haber ido a Taki's para que me atendiera y me hablara, no me arrepiento haberlo salvado en el callejón cuando dos hombres lo tenían agarrado, no me arrepiento haberme emborrachado y que después el viniera hasta mi hotel para aclarar palabras con malas intensiones por parte de ambos, no me arrepiento que el haya venido al hotel después de que lo golpearon para terminar en mi oficina, en la que estoy ahora, besándolo y tocando. No me arrepiento de nada, solo de haber tenido que acabar todo. Nunca pensé que el "flechazo" podría causar esto tan doloroso.
Vomito un poco después cuando salgo de mi oficina un momento, Lilit está sentada en los sillones de la sala para supervisar que no me vaya, cuando me ve que no he podido llegar a los baños, se levanta y me lleva de nuevo a mi oficina, diciendo que limpiara ella, mi ropa se ha ensuciado de salpicaduras de sangre. Me encuentro tan débil, y puedo ver como a los que me ven les duele verme así, Lilit se ve tan preocupada mientras me apoyo en su cuerpo y me sienta en el sillón, diciendo que me traerá sangre para alimentarme después de limpiar, cerrando la puerta después de que se va.
Me siento tan estúpido porque todo podría parar si hablo con Simón, solo que mis temores me detienen ¿Y si me dice algo malo que haga que me desvanezca por completo? ¿Y si él me termina matando?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro