21| Debes Volver
Ser feliz en una farsa, o ser infeliz en la realidad; esa frase se repetía en la cabeza de Alex cada día... Desde que ese "él" de ojos vacíos hablo con él aquel día, ha estado viniendo seguido y diciendo frases como esas, pero solo esa había logrado entrar en su cabeza y quedarse ahí. Empezaba a cuestionarse si esto era real... Y una parte de él lo sabía, esto no es real, pero le trae felicidad y calma ¿Por qué lo abandonaría?.
-Alex.-lo llamo una voz cargada de dulzura.
El castaño bajo su mirada para encontrar ahí a Sam, desnuda y arriba de él, sonriéndole... ¿Por qué cambiaría esto?. El castaño le mostró una sonrisa y la abrazo; juraba que hace unos momentos había oído explosiones y gritos, pero no le tomo importancia, estaba en su momento de felicidad, estaba con su chica.
-Legión ¡Al ataque!.-grito una voz familiar para Alex.
El castaño movió un poco a Sam y busco por la oscura habitación el origen de esa voz, nada, estaban solos ahí. Sam por otro lado no le tomo importancia y empezó a dibujar círculos en el pecho de él con su dedo; desde hace unos minutos el castaño oía muchas cosas, sonidos que venían de la nada.
-Perdoname hermano, pero te necesitamos.-escucho un susurro de parte de una voz femenina.
Alex soltó un grito seguido de esas palabras, la cabeza le ardía, era como si le fueran hundido la cabeza fuego. Sam lo vio confundida y con horror por unos segundos pero luego desapareció; Alex por su parte empezaba a sentir que todo el cuerpo le ardía, sentía que se quemaba por dentro y por fuera, en ese momento deseaba su muerte para dejar de sufrir.
-Tu cabeza creo todo esto... Aunque ya no estás conectado sigues aquí porque lo deseas... Pero tú cabeza no solo es esta hermosa ilusión, debes recordar.-dijo la misma voz desde la nada.
Alex cayó contra el frío "piso" que permanecía en completa oscuridad, el dolor y sufrimiento ya habían abandonado su cuerpo. Una pequeña luz apareció delante de él y sin dudar se comenzó a dirigir a ella, con cada paso que daba unas cuantas voces se oían a su alrededor, persona charlando con total calma... Como si estuvieran en la secundaria, para cuando estuvo a sólo pasos de la luz está lo cegó por unos segundos, y para cuándo recupero la vista todo estaba claro. Estaba en la azotea de la secundaria, a su alrededor habían varios chicos charlando entre sí, y más adelante Sam, apoyada sobre la baranda mientras veía el cielo... La mente de Alex le pidió a gritos que no se acercará a ella, pero sus pies tomaron su propia decisión y caminó hasta quedar al lado de ella. Sam sonrió al ver a Alex de reojo, y este se sentó en la baranda dejando sus pies colgando... Sentía que ya había vivido esto.
-¿Y Megan?.-pregunto Sam.
-Está castigada.-respondió con naturalidad el castaño... A pesar de no saber quien era Megan.
-¿De nuevo?.-dijo con fastidio Sam y Alex rió.-¿Como es que no terminaste también castigado?.-pregunto viéndolo.
-Magia.-respondió a secas el castaño y recibió un golpe de parte de la chica.
El silencio reino entre ambos, era algo tranquilo... Paz antes de la tormenta; ese pensamiento tan fugaz hizo que el Alex sintiera nervios, pero su cuerpo actuando con naturalidad se volteo y bajo de la baranda para apoyarse sobre ella, como lo hacía Sam.
-Sam.-la llamo el castaño y ella volteo a verlo.-Hay algo que he querido decirte desde hace mucho.
Sam dejo de ver el cielo y vio al castaño con curiosidad, este sintió como sus mejillas tomaban color... ¿Qué demonios es esto? ¿Qué pasa?
-Sonará raro... Pero desde que nos conocemos siento que tenemos una conexión, tu, tu me salvaste, Megan también estaba lo sé, pero, tu fuiste quien me quiso salvar, gracias a ti es que tengo está vida.-las palabras salieron torpemente y la chica se ruborizó un poco.-Adonde quiero ir Sam, me gustas... Todo este tiempo me has gustado, me enamore de mi heroína, de ti que siempre has querido el bien para mí, incluso cuando pasamos delante del ba.-las palabras del castaño fueron calladas por un beso de parte de la chica.
El beso duro unos cuantos segundos, la chica abrazaba con fuerza al castaño mientras esté se dejaba llevar, y cuando terminó el beso está lo vio con una sonrisa radiante.
-He esperado tanto porque hagas eso idiota.-dijo sonriendo más y ruborizada.-Megan dijo que tal vez nunca lo dirías porque eres muy idiota.-añadió con una risa tonta.
-¿Espera, eso quiere decir que me amas?.-pregunto esperanzado Alex... Pero algo le decía que esa esperanza moriría.
-¡Yo te amo Alex, moriría por ti!.-dijo casi gritando emocionada.
Alex mostró una sonrisa que nació con naturalidad, era feliz, muy feliz, la chica que le gustaba también gustaba de él; Sam por su parte también sonreía viéndole, abrió su boca para decir algo... Y ninguna palabra salió, Alex vio algo que helo su sangre y destruyó por completo su corazón, una bala... Una bala acaba de salir de un lado de la cabeza de Sam, y seguida de esa otra. Los gritos no se hicieron esperar, ya que más balas fueron disparadas pero ninguna alcanzo a los estudiantes... La única muerte ese día fue la de Sam. El cuerpo sin vida cayó sobre los brazos de Alex y este cayó al piso de rodillas, dolía, las lágrimas no paraban de salir, y su voz se había roto, aunque intentaba gritar nada salía... Hasta que un aullido lleno de dolor salió de su boca, era como el de un animal herido; sentía como si el fuego que lo había consumido hubiera vuelto, deseaba morir de nuevo... Morir al lado de su amada. Le habían arrebatado la felicidad...
El cuerpo de Sam se hizo cenizas en sus brazos y ahora se encontraba cayendo el la oscuridad interminable, aún dolía, su corazón, su cuerpo... Todo dolía, y las lágrimas aún salían. ¿Eso había pasando en la realidad?.
-Murió.-replicó la voz femenina de hace unos momentos.-Murió por tu culpa.
-¡Y-yo no hice nada!.-grito el castaño a la nada.
-Si hiciste algo Alexander.-le replicó y unas imágenes aparecieron en su cabeza... Cuando lo violaron; recordó el dolor.-Apareciste en su vida, por eso murió.
Las imágenes se iban grabando en lo más profundo de su mente, sus padres... Muertos, una mujer rubia abusando de su cuerpo, altercados de los que lo salvaba cierta pelirroja... La muerte de Sam, y en ese momento vio la imagen detenidamente, mientras sostenía el cuerpo sin vida de la chica y gritaba sus ojos se tornaban blancos, totalmente blancos, y fragmentos del piso flotaban.
-Siempre pasaba algo raro cerca de ti... Las cosas se detenían antes de herirte, o si caías del tejado algo iba frenando tu caída, te detenía la nada, y lo más sorprendente, cuando perdías el control las cosas flotaban... Pero ese día lo descubriste, descubriste que eres un kustermen.-delante de Alex apareció su reflejo, vistiendo esa ropas oscuras de siempre... Pero esta vez sus ojos vacíos eran todos blancos.
El de ojos blancos vio inexpresivo al de ojos avellanas; mientras las lágrimas y la expresión de dolor seguían en el rostro de Alex,el otro él acercó su mano con lentitud a su rostro. Alex no se movió, se quedó quieto, y cuando la mano del otro él se posó sobre su cabeza todo su cuerpo volvió a arder; recuerdo tras recuerdo, todo volvía a él, la realidad... Su realidad. La charla con Layonel, lo que escucho, el asesinato de Erick... Todo volvía a él. Todo volvía a estar claro y cerró sus ojos dejando que todos los recuerdo fluyeran.
Para cuando abrió sus ojos vio como su otro "él" se hacía cenizas y se unía a su cuerpo, se sentía algo distinto, como si lo que fuera vuelto acabará de irse de nuevo, y así era... Su triste ilusión de felicidad se había ido. Tardo unos segundos en notar donde estaba, volvía estar en su habitación, pero ahora yacía de pie delante de la cama, mientras que Sam estaba acostada viéndolo.
-Hazlo.-dijo con una voz lujuriosa ella.
-Hazlo.-repitió la voz femenina con seriedad; ahora si la reconocía, esa era la voz de Megan.
Alex chasqueó sus dedos y todo a su alrededor se fragmento como si fuese cristal, la sorpresa se pintó en el rostro de Sam mientras veía como también iba desapareciendo.
-¿Eso decides?.-pregunto Sam viéndolo.
-En la realidad... Hay una especie de familia esperándome.-dijo cortante este.
Sam sonrió viéndolo mientras que Alex evitó verla... Si la veía iba a titubear y dudar de esto, y no podía darse ese lujo.
-Te amare por siempre Sam.-susurro Alex sin verla.
-Y yo a ti.- respondió está y desapareció.
Todo al rededor de Alex se hizo añicos, la realidad que su propia mente había creo acababa de colapsar. Vio por última vez a su alrededor, la que alguna vez fue su habitación, el sitio que alguna vez fue su casa... Ya era hora de despertar, el odio acababa de renacer en él.
.
.
.
.
Alex abrió sus ojos repentinamente, cerca de él estaba Megan, quien acababa de retroceder para darle un poco es espacio, pero había algo distinto, los ojos de Alex estaban en blanco.
-Alex.-lo llamo Megan y éste lo vio.-Ya hazlo.-dijo a secas y este asintió con su cabeza.
Alex se puso de pie y floto sobre la camioneta, quedando a una buena altura del piso. Jake y Abel que peleaban juntos se veían cansados, y Abel tenía varías heridas; Mika e Isaac por su lado peleaban bien, pero sus fuerzas estaban cesando, los cuatros iban a perder, pero habían acabado con 4 seres ya. Los cuatros retrocedieron y quedaron de espaldas contra la camiones, y en ese momento el psíquico se posicionó delante de ellos; Jake y Mika lo vieron sorprendidos, Isaac y Abel lo vieron agradecidos, el juego acababa de cambiar e iban a ganar. Alex estiró su mano al frente y cerró su puño, seguido de eso los huesos de los seres salieron disparados, moviendo su mano para apuntar a las paredes los seres fueron estampado contra ellas, y poco a poco empezaron a formar parte de ellas, siendo cubiertos con las paredes del estacionamiento.
-¿Por qué no le hiciste eso a los que nos atacaron hace tres meses?.-replicó Jake.
-Mucho desgaste.- se limitó a contestar Alex y un pequeño hilo de sangre salió de su nariz.
-¡Vámonos!.-grito Megan en el asiento del conductor.
Todos se subieron al auto, Megan quedó al volante, a su lado iba Isaac, y al lado de este Desal, a quien le empezaba a crecer algo en el lugar donde se suponía que estaba su mano; por su lado Mika, Alex y Jake iban en la parte trasera. El auto encendió y con velocidad salieron del estacionamiento, después de salir del sitio Jake creo un gran muro de hielo para bloquear la salida y Alex hizo lo mismo con concreto. Mientras se iban alejando Mika presionó un botón.
-Disfruta los fuegos artificiales.-dijo Jake y vio a Alex.
Alex lo vio con confusión y luego escucho una explosión, vio a dónde estaba la torre L'abitare... O donde solía estar. Las explosiones venían de lo más bajo y lograron hacer colapsar por completo la estructura... La sede de investigación principal de ESDEK acaba de ser destruida y eso dibujo una sonrisa en el rostro de todos los que iban en el auto. Ganaron
-¡Ganamos!.-grito Jake y el resto soltó un grito de victoria.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
De lo más profundo de las ruinas de la torre L'abitare algo se alzó entre los escombros; una mano con un montón de raspones se asomó; se movía. Una rubia que estaba cerca de ahí movió los escombros sin moverse, solo con sus poderes, y dejó a la vista a un niño que se veía asustado... Y horrendo, le faltaban partes del cuerpo y tenía muchas heridas, incluso un ojo le faltaba, pero a pesar de todo eso seguía vivo, a medias
-¡Mi lady!.-grito una pelinegra.-Aquí hay algunos, aún con vida.-añadió.
-Bien, aún no perdemos.-dijo la rubia a secas.-Alex pagará por esto.
Ambas mujeres se vieron por unos segundos, ya no era una opción dejar vivo al castaño o lavarle el cerebro, ahora estaba claro, ESDEK debía matar al psíquico, y ahora tendrían ayuda...
Continuará...
————————————————
Wuenas wuenas amigos, se podría decir que este es el fin... Del segundo arco (xd). Bueno chicos, primero: les agradezco de corazón que hayan llegado hasta aquí, y espero que hayan disfrutado lo que va de historia; segundo: estrellita y compartir ayuda mucho (XD). Bueno chicos eso es todo por ahora, hasta la próxima.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro