Capítulo 25
"El diario"
Hades Klein
20 de mayo 1976.
El sentir, ese dolor agudo en tu pecho que presiona hasta hacerte caer. Nada podría detenerlo, excepto, nunca llegar a sentirlo.
Era tarde por la noche cuanto conducía de mi casa al hospital psiquiátrico a las afueras de la ciudad. La lluvia caía con furia sobre el polvo de nuestros antepasados y mientras una melodía ochentera era mi única compañía, el tiempo no fue mi mejor amigo.
El pequeño animal explotó contra el tren delantero de mi camioneta. Por el impacto, sentí mi corazón dar un brinco, me detuve a corroborar que el daño no fuera tanto, al ver el cuerpo abierto del animal... Mis emociones parecieron congelarse.
No habían nauseas, miedo y mucho menos culpa. La escena era realmente grotesca, aun así, con total indiferencia, me subí al auto y continué hasta el hospital, pasando por encima del ya muerto conejo.
Pronto no tardó en asomarse la gran fachada de un edificio gigante donde había comenzado a trabajar luego de graduarme como el mejor psiquiatra de la universidad. Con uno de los mejores IQ, me he destacado por encima de todos.
Esa misma noche ingresé al turno noche con mi primer paciente.
Hugo Gareth, adolescente problemático con problemas de ira, bipolaridad, depresión y drogas. Incluso sus propios padres lo vieron como una escoria, pero para mí... Ha sido el comienzo de mi experimento. Su accionar era fascinante, lo estudiaba día y noche, probaba medicinas en él y evaluaba su comportamiento. Hugo me ayudaría a hacer historia.
Luego de atender a mi primer paciente luego de una crisis, fui a mi descanso para preparar mis próximos pasos con el segundo paciente. Lila González, adolescente esquizofrénica.
Pero no todo salió lo planeado, como si el mismísimo santo de los santos enviara a uno de sus querubines para molestarme, ella apareció.
En medio de mi descanso, su presencia fue como una luz en la habitación, llevaba su cabello rubio en una coleta y esa estúpida bata resaltaba cada una de sus curvas donde no temía derrapar.
Yo era un joven inexperto cuanto entré a trabajar a este lugar, mi corazón carente de sentimientos y compasión, fue víctima de la cruel jugada del destino cuando me envió a la preciosa Iris. Una mujer perfecta, tan solo un año mayor, capaz de jugar con los deseos físicos y emocionales de cualquier persona.
Esa noche, en mi descanso, hablamos. Actué como un idiota enamorado, pero sabía que ella también estaba interesada en mí. Como una vez dijo:
"La oscuridad de tus ojos es un arma de doble filo Hades."
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17 de febrero 1980.
Todos tenemos un diagnóstico, nadie es completamente libre de la oscuridad que sus traumas atraen. A los diecisiete años comencé la carrera de psiquiatría, me convertí en un ejemplo a seguir cuando la hice en tiempo récord.
"El huérfano que salió adelante"
Siempre me pregunté el por qué mis padres me habían abandonado, me sentía insuficiente. Pero al estar sobre un escenario, recibiendo mi diploma y miles de aplausos entendí que si alguien no había sido suficiente, fueron ellos.
No se atrevieron a ser padres, no estaban preparados y está bien no estarlo, pero lo hubieran pensado antes de traerme a esta vida. Traer a un hijo indeseado a sufrir, es matarlo todos los días de su vida.
Pero solo estoy divagando, ya a nadie le importará mi pasado o historia, solo mi futuro pudriéndome en una cárcel. Lo que había comenzado con falta de empatía al asesinar un animal, acabó en mi diagnóstico... Mi auto diagnóstico.
Al ver la sangre manchando mis manos, sentí exactamente lo mismo... Frío, una gélida sensación congelarme la razón. El cuerpo sin vida del futuro marido de Iris yacía en el suelo con la garganta cortada. Me quise convencer que lo había hecho por amor, que ya no soportaría ver a mi perfecto ángel llegar golpeada por este idiota. Pero la verdad es que era incapaz de sentir algo tan efímero como lo es el amor.
Iris se me había metido en la cabeza, había endulzado mi amargo corazón, todo el deseo se reducía a lo carnal. Algo con lo que soportaría, solo por ella.
Tomé el cuerpo arrastrándolo hacía el sótano que había preparado con anterioridad para encargarme del cadáver. Todo había sido perfectamente planeado, logré que el hombre venga hasta mi casa, lo esperé vistiendo mi bata del hospital y unos guantes, me rapé completamente para no dejar rastros.
Una vez muerto, comencé la segunda fase de mi plan. Corté su cuerpo extremidad por extremidad con ayuda de algunas herramientas y luego las sumergí en cal viva mientras me encargaba de limpiar la escena del crimen. Mi casa quedó completamente inmaculada, esa misma noche fui a trabajar, le conté a Iris lo sucedido.
Solo había dos posibilidades y ambas estaban perfectamente contempladas:
La primera era que Iris se ajustaría e intentaría delatarme, pero altere su examen psicológico para hacerla ver incapacitada, hasta tenía testigos que la harían ver como una loca y sería encerrada en el hospital psiquiátrico por el asesinato de su marido golpeador. Aquí podría cuidar de ella y tenerla para siempre junto a mí.
La segunda opción, es que me entendería, lograría manipular su perfecta mente para que no me delate y acepte escapar a mi lado. Para comenzar una vida juntos.
¿Cuál eligió? Bueno... Estás fueron sus palabras exactas:
"Nos encontramos en un bucle enfermo Hades, tú me deseas y yo no puedo borrarte de mi mente. El pasado nunca deja de ser pasado, pero hoy me has liberado de él. Hay que marcharnos de aquí."
Y así la historia tomó un rumbo completamente diferente. Esa misma noche, al llegar a casa, la cal viva (expuesta a la temperatura correcta, en pequeñas partes del cuerpo) se había deshecho de casi todos los músculos y tejidos, solo quedaba la parte más difícil, el cráneo y los huesos. Mientras yo me encargaba de enterrarlos en el bosque, Iris sacó los boletos de avión y preparó las maletas.
En la mañana nos marcharíamos a comenzar una nueva vida del otro lado del país, en una pequeña ciudad llamada Arcland.
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17 de enero 1986.
¿Acaso es cierto que para los psicópatas es imposible sentir empatía o amor? ¿A qué se debe esto? Quizás algo genético, psicológico o biológico. Son muchos los estudios que explican tal fenómeno, pero desde mi llegada a este mundo, he tenido el recado de desafiar las leyes básicas ya establecidas.
En esta ocasión, no fui yo quien llegó a cambiar el diagnóstico general de un psicópata. Sino que esta persona fue Persephone, mi querida y preciosa Cori. El fruto del amor poco convencional entre Iris y yo.
Mi primogénita llegó a esta tierra en medio de nuestro escape de la justicia, junto a Iris comenzamos a desempeñar actividades "poco éticas", ambos íbamos en busca de los hijos de grandes funcionarios, los secuestrábamos y analizábamos. Buscábamos la forma de controlar sus mentes, con mi esposa haríamos historia.
Este 17 de enero de 1986, Persephone llegó a nuestras vidas, una preciosa niña de cabello rubio y ojos azules. Cada parte de ella me recuerda a Iris.
Y junto a su nacimiento comienza otra etapa de nuestras vidas, una en la que buscamos dar un golpe que repercuta en la historia de muchas generaciones.
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06 de enero de 1987.
Volví a beber del néctar de los dioses, probé la ambrosía de la ambición. Corrí en círculos por demasiados años y ella llegó a cambiarlo todo.
Hecate, llamada como la triple diosa, mi pequeña niña nació hoy. Ella no me recordaba a Iris, ella era mi propia creación, su cabello negro y ojos oscuros como la noche reflejaban aspectos demasiado similares a mí.
Persephone está por cumplir ya un año de edad, es una jovencita brillante, demasiado inteligente para su edad. No se podía esperar menos, ya que sus padres habían nacido para el más puro éxito.
Como una ofrenda del destino, nuestro querido gobierno nos puso en bandeja de plata lo que faltaba para concluir nuestro plan.
La cárcel "Horsemen Penitentiary N°3", ubicada en una isla limítrofe a nuestra hermosa Arcland. Creada para retener dentro de sus muros a lo peor de lo peor: Asesinos en serie, mafiosos, psicópatas, sociópatas, violadores y mucho más. Durante su inauguración con Iris repasamos los últimos detalles del plan, ella sería la mente maestra afuera y yo... Atacaría la raíz, metería mi mano en sus gargantas y retorcería hasta sus tuétanos. Si quería controlar masas comenzaría por esa que está perturbada.
Me entregaría al gobierno, sería encarcelado allí y comenzaría mi gran plan.
Ellos creerán que atraparon al asesino en serie "Hades", cuando en realidad estaban cavando sus propias tumbas.
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23 de noviembre 1990.
Nunca dije que sería sencillo, los primeros días en este agujero fueron un infierno. Pude ver todo desde otra perspectiva, el gobierno no era tan estúpido, la isla era realmente una fortaleza. Esta se encuentra rodeada por un gran cañón con remolinos que solo son superados por marineros experimentados y antes de este se encuentran los heraldos del mismísimo diablo. Mutaciones bestiales de tiburones ciegos, que son capaces de desgarrar a un humano en un parpadeo.
Con mis contactos he podido informarme de la situación de mi familia. Las niñas están cada vez más grandes y mi esposa se encarga de hacerme llegar lo recursos para proceder con mi plan.
He comenzado a mover masas dentro de la cárcel, muchos de los presos me respetan y tienen como un líder, luego se encuentra otra minoría que se rehúsa a seguirme, si no se arrepienten antes del suceso más importante... Serán alimento para los tiburones.
Todo concluirá en un par de días, la cárcel está comenzando a sobre poblarse de asesinos amigos míos y los policías pierden el control. Muy pronto nos levantaremos, y Horsemen Penitentiary será mía... Será de la próxima generación de jinetes quienes serán financiados por mi fortuna que he ganado en el negocio de venta de órganos.
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20 de abril 1993
Un suceso podría cambiarlo todo, el rumbo de una guerra se volvería paz si tan solo su sonrisa nos alumbrara. Lo he conseguido, con mucho esfuerzo tomamos la isla para nosotros, una vez condicionada traje a mi familia a vivir aquí. Las niñas soñaban con estar en un castillo y siempre las hice sentirse reinas, las diosas de este mundo.
¿Pero a qué precio? El karma atacó donde más dolía y me arrebató a la única persona que siempre me apoyó.
Mi querida Iris, lucia como un ángel caído del cielo, entre sus manos sostenía el ramo de rosas blancas y entre ellas, una roja. Que simbolizaba nuestro amor, como ambos creamos fuego en todos esos años.
Todo permanecía en completo silencio, ya había luchado por demasiados días. Mis rodillas flaquearon ante su partida, ella era el amor de mi vida, la única razón por la que este corazón perturbado conservaba piscas de cordura.
Ella fue mi salvación y mi perdición, como un loco abandonado caí en los brazos de mi compañera de trabajo.
El cáncer tomo su mano y la hizo partir lejos de mí. Sin ella no era nadie, solo un padre deshecho, incapaz de volver a amar.
Tomé una decisión de la que me arrepentiría toda mi vida, dejé a mis pequeñas en Arcland con su madrina, debía alejarlas, porque la onda expansiva de mi próxima maniobra lastimaría a quién carezca de fortaleza. Sin darme cuenta acabé repitiendo la historia de mis padres, pero yo volvería por ellas. Cada navidad le llevaría regalos y pasaría lo más que pueda con mis niñas hasta que crezcan y puedan venir a vivir conmigo. Los jinetes que pronto atacarían.
El mes de abril no volverá a ser lo mismo para mí, el recuerdo de Iris me atormentara por siempre y en nombre de los dos yo haré lo mismo. Continuaré con nuestro plan inicial, arrebatare a los adolescentes de Arcland y cambiaré el rumbo de la historia.
Todo será por ella, por mi ángel.
Por Iris.
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12 de abril 1995.
Ha sucedido todo de acuerdo al plan. Mis jinetes atacaron por primera vez Arcland.
Como sombras se movieron en silencio llevándose a quince adolescentes ya antes estudiados y era hora de comenzar mi estudio para volverlos jinetes.
Abrir sus mentes a este nuevo mundo dirigido por mí. Su nuevo emperador y guía en un lugar donde nos cuentan verdades absurdas, donde el gobierno cubre nuestros ojos con vendas llenas de mentiras y promesas vacías.
Este proyecto lo cambiará todo, mi ejército tomará el control.
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13 de enero 1996.
La debilidad los ha vencido y la muerte no ha tenido piedad. Aún continúo experimentando con los adolescentes vivos del primer ataque, las primeras pruebas han sido grotescas, me vi obligado a abrir la cabeza de uno de ellos para examinar su cerebro. En otro he probado fármacos especializados, pero ha muerto.
Estaba perdido en un bucle hasta que ella me habló, no fue para nada aterrador escuchar a mi Iris susurrarme las respuestas. Así fue como decidí comenzar con pruebas mentales, analizar la inteligencia de los adolescentes y a los más débiles descartarlos.
Ha habido algunos levantamientos de parte de los jinetes que acabaron siendo comida para los tiburones, las reglas son muy claras aquí.
Solo... Solo deseo nunca dejar de escuchar a Iris.
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24 de abril 1999.
La he visto... Al principio solo eran susurros lejanos, ahora alucinaciones. Ella viste su bata de psiquiatra y me sonríe desde la oscuridad de mi mente, siento que me estoy volviendo loco.
Al comenzar a perder la memoria lo entendí, todo está dentro de mi cabeza, pero se escapa como una vertiente por mis oídos. Estoy desarrollando demencia, no me sorprende que todos estos problemas desemboquen en el castigo divino.
Debo correr, caminar y tratar. Sé los pasos a seguir, pero todo se mezcla, ya he buscado un heredero. Mi Cori no está lista, solo es una adolescente.
Héctor tomará mi lugar, el hijo de mi mano derecha, un niño nacido y criado dentro de la cárcel.
Todo saldrá bien... Todo marchará como el plan lo guía, como mi Iris me lo susurra.
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Testamento:
Ha terminado.
Con mi último suspiro me atrevo a escribir esto.
En todos mis años de estudio he dejado diarios donde relato cada instancia de mi vida, estos serán heredados a mis pequeñas Persephone y Hecate. Ellas serán las responsables de llevar mi historia en sus manos.
La demencia me ha incapacitado en demasiados aspectos, hay veces que olvido tener hijas, otras en las que ni siquiera puedo ver bien. Por esa razón elijo la muerte antes que olvidarme de las luces que han alumbrado mi vida. Sufriré más si me quedó esperando que el destino se lleve mi alma perturbada, por esa razón decido adelantar el proceso, todo ya ha quedado sellado.
Héctor se hará cargo de los jinetes, los guiará tal cual yo lo hice, el plan de tomar el control sigue en pie. Él será el líder hasta que una de mis hijas decida hacerse cargo del imperio que su padre les deja.
Persephone... Hija de la sabiduría, el honor y la valentía. A ti te dejó cada uno de mis diarios, podrás quedarte con la casa en las que fueron criadas, más la suma de dinero que su madrina les dará de mi herencia. No pienses que te dejo desamparada, cuando naciste... Conocí lo que era el calor que una hija le da a un padre.
Hecate... Mi pequeña leoncita, tan inocente y pura. A ti te queda mis propiedades en Arcland, más el dinero de la herencia, también las llaves del reino, solo debes reclamar tu corona y Héctor te la dará.
Desde que naciste supe que había algo especial en ti, se trataba de una conexión con mi yo del pasado, ese Hades que creía poder cambiar el mundo. Hoy entiendo que serás tú. Confío en mi más pura creación.
Y por último... Jinetes. Mis queridos seguidores y compañeros.
En sus manos queda el manejo de la isla, respeten y admiren a su líder porque por algo lo es, no cualquiera debe ocupar mi lugar. Entre tantos y tantas, llegará una persona hecha a mi imagen y semejanza, incapaz de sentir empatía, pero muy capaz de cambiar el mundo. No desesperen, reconocerán a su líder cuando este se presente, mientras tanto... Sigan con las cacerías, ganemos más soldados para la batalla que se aproxima.
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Holis caracolis, les dije que este capítulo era especial jsjsjs
AAAAAAA ya sabemos cómo nacieron los jinetes omgg.
Pero no todo es felicidad... Lamento decirles esto, pero se acerca el final :(
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