Quiero que vuelvas a Paris, Sophie.
Tristan.
La carta de Sophie removió todos los sentimientos que aún siento por ella, sus palabras se incrustaron en mi corazón. Después de analizar absolutamente todo sabía que tenía que darle una respuesta y por fin aclarar todo este asunto. Amo a Sophie, con todo mi corazón y estoy seguro de que ella siente lo mismo. Ambos debemos dar ese paso, ella dio el primero ahora yo tengo que seguirla.
Me encuentro fuera de Gallo's, la cafetería en la que trabaja Cristine, la enamorada de George. Mi mejor amigo está loco por esa chica, nunca lo había visto de esa manera. Aunque realmente nunca hubiera imaginado que Bart y Connor también estuvieran idiotizados y mucho menos yo. Los intocables estamos cayendo uno por uno.
Doy una última exhalación para después entrar en la cafetería, busco con mi mirada a Sophie hasta que la encuentro hablando casualmente con Cristine, me acerco lentamente a ellas con las manos enterradas en mis bolsillos. Se ve como si Sophie fuera a responder algo que Cristine le haya preguntado cuando ella se da cuenta d que estoy ahí.
—Hola—La escucho susurrar.
—Hola.
Nos observamos por otros segundos en silencio hasta que Cristine se aclara la garganta.
—Entonces, ¿vas a ordenar algo, Sophie?
—Un café negro, por favor.
—Un capuchino, Cris. Por cierto, George te manda saludos—digo con una sonrisa.
No miento cuando digo que George está loquito por Cristine... Lástima que ésta no lo quiera ver ni en pintura.
—Pues dile a George que se meta sus saludos por el lado oscuro de...—Cristine se interrumpe y luego se aleja rápidamente.
No puedo evitar mirar a Sophie con total atención, sus ojos, su cabello, sus mejillas, su boca... toda ella. Joder, estoy arruinado. Cuando recuerdo porque estoy ahí digo:
—Yo... tengo una respuesta a tu carta, Sophie.
—Yo...
—¿No le has dicho a nadie sobre Bélgica?
—No.
—¿Por qué?
—Creo que lo dejé muy en claro en cada frase de esa carta, Tristan. Tengo miedo.
—Y eso es lo que menos entiendo, Sophie. ¿Por qué tienes miedo?
—No lo sé—Los ojos empiezan a arderme.
—Sophie, no sabes cuánto sonreí luego de haber leído tu carta. Tu... siempre me has querido y yo... ¡joder! Siempre he sido un idiota.
—Eso es mentira, Tristan.
—No es mentira, sé que sufriste luego de que tu madre se fuera. Sé que sufriste por la pérdida que tuvo tu hermana y las actitudes de tu padre y Connor. Sé que sufriste mucho, pequeña y lo que más me carcome el alma es que yo te hice sufrir también. Yo no debí darte ese beso, al menos no de esa manera.
»Tu carta... me hizo sentir la persona más increíble del mundo, ¿sabes por qué? Porque de alguna forma convertiste mis errores en algo bueno, me describiste como el chico que había tomado tu corazón.
Joder, enserio la amo. ¿Cómo pude ser tan idiota? Saco la pequeña figura de la torre Eiffel que mantengo en una pequeña cadena de plata alrededor de mi cuello. Sophie empieza a derramar lágrimas, esta es parte más dura que voy a tener que decir.
»Te diría una y mil veces que no vuelvas a París, Sophie, pero no puedo ser egoísta. Mi corazón grita como loco el que no te deje ir al otro lado del mundo, mi corazón es el egoísta y no quiere que vayas a Bélgica y cumplas uno de tus sueños, mi corazón te quiere aquí conmigo, aferrada a mí, pero mi mente me hace razonar y sé que eso no lo puedo hacer.
—Tristan...
—Quiero que vuelvas a París, Sophie—Me duele decirlo, pero tengo que dejarla ir.
—No me digas eso.
—No me has dejado terminar—limpio sus lágrimas y entrelazo mis dedos con los suyos—. Quiero que vuelvas a París, pero eso no significa que no voy a luchar por ti, Soph.
»Las relaciones a distancia son una mierda, pero sé que podemos, pequeña Pirce. Quiero luchar por ti, por lo nuestro, por todo. Pasaré por encima de cualquiera para estar junto a ti, por esa razón no estoy permitiendo que renuncies a una vida de un futuro bueno por mí.
»Escúchame bien, Sophie, no renuncies a tus sueños por un chico y mucho menos por mí, si tanto dices quererme quiero que tomes tu avión y seas la primera de tu generación. Vas a triunfar por nosotros, como también lo haré yo, ¿ok?
Ella asiente con sus ojos cristalizados.
»Entonces... Sophia Pirce, hermana de uno de mis compañeros de sangre que sé que querrá cortarme las pelotas apenas sepa sobre esto, la luz de mis ojos desde que era un crío y la que me ha hecho cambiar para ser una mejor persona, ¿quieres ser el novio de este idiota?
Cuando ella dice que si la alegría embarga mi interior. Sé que tenemos a Connor, se volverá como loco cuando se entere de todo esto, pero correremos el riesgo. Y también sé que tenemos a la peor enemiga detrás de nosotros... la distancia, pero haremos todo lo posible por seguir juntos. Cuando nos basamos todo a mi alrededor se borra, solo estamos ella y yo, la chica que siempre ha estado en mi corazón.
—¡¿Qué mierda es esto?!
Y es allí cuando todo el encanto se acaba.
Todos recuerdan este momento icónico xD
Espero que les guste.
Nos leemos :)
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro