Capítulo 36
-Esa soy yo. ¿Me extrañaste? Ha pasado un buen tiempo, ¿no lo crees?
-Pues no lo suficiente... - murmuré por lo bajo -. ¿Qué haces por aquí?
-Pasaba a ver a mi hermanito favorito ¿A caso está prohibido? - no le respondí.
Kate, mi hermana mayor, y la mejor cazadora que existe de nuestros tiempos. Es general de una tropa y tiene su propia base un poco lejos de aquí. No permite que ningún sobrenatural viva...
Ella fue la que me influenció en ser cazador y yo la admiraba antes por su fuerza y grandeza... Pero ahora es todo lo contrario. Me repugna; ahora me parece una persona cruel y despiadada que no quiero cerca de ningún ser sobrenatural, sobretodo... no la quiero cerca de Traicie...
-Y dime Jean ¿A cuántos sobrenaturales han matado todo este tiempo? Sé honesto y dime que varios, quiero presumir de lo grandioso que es mi hermano para matar sobrenaturales - se sienta sobre una mesa sonriendo y esperando mi respuesta.
-Pues hazlo, porque hemos matado a tantos que ya hasta he perdido la cuenta - mentí.
Necesitaba convencerla rápido para que se vaya lo antes posible, que este aquí es un peligro total...
-¿Oíste lo que le pasó a Cameron? Sabía que era débil, pero no creí que tanto - ríe a carcajadas a la que nadie se suma -. En serio no comprendo como él pudo ser nuestro jefe alguna vez.
-Tienes razón, fue demasiado débil. Tampoco logro entender porqué fue nuestro jefe.
-Pero no te preocupes, pronto yo asumiré su cargo... - abrí los ojos de par en par.
-¿Qué?
-Lo que escuchaste. Pronto seré la comandante en jefe, todos tendrán que obedecerle y seguir mis órdenes, ¿no es genial? Tu hermana mayor será la más temida por los sobrenaturales pero la más respetada por los humanos. Será lo mejor que nos pueda pasar.
Su mirada llena de gozo y felicidad me hacen estremecer de asco y preocupación. Si eso realmente pasa... estaremos perdidos. Tragué con dificultad, ella no parece notar mi nerviosismo... por suerte. Pero luego un sonido la alerta, o bueno, nos alerta a ambos.
Kate mira hacia los arbustos y entrecierra los ojos. Fingí no haber escuchado nada y me puse en frente de ella para distraerla por si acaso.
-Hey, pronto será el almuerzo, ¿quieres comer algo?
Ella me mira pero se baja de la mesa, me hace a un lado y saca su arma quitándole el seguro. Sentí que el alma iba a salir de mi cuerpo. Apunta hacia los arbustos, lentamente acerqué mi mano a mi arma mientras la miraba desde atrás, pero entonces nos sorprende ver un par de conejos saliendo de Mos arbustos y yéndose saltando con mucha velocidad. Suspiré aliviado y alejé mi mano del arma cuando ella vuelve a ponerle el seguro a la suya y la guarda.
-¿Qué dijiste sobre la comida? - pregunta sonriendo.
Ella pasa junto a mi, los demás la miran serios mientras que yo trataba de respirar de nuevo. Miré hacia los arbustos pero volví con Kate.
Narra Traicie
¿Quién mierda era ella? ¿Realmente pudo ser capaz de escucharme siendo que apenas y me había movido para verla mejor? ¿Comandante en jefe? ¡Toda ella me grita peligro!
Dejé mis pensamientos a un lado para prestar atención al momento en que Jean se aleja para ir con ella.
Me acerqué un poco consiguiendo llamar la atención de Connor que me mira sorprendido y asustado. Voltea a ver a esa chica pero ella no me veía. Quise acercarme pero Connor me detiene con señas desesperada y niega rotundamente. Ladeé la cabeza pero él parecía suplicarme que me fuera, suspiré y di un paso atrás pero esa chica se da la vuelta de repente y dispara hacia mi dirección. Cinco balas resuenan por el bosque.
Todos los demás palidecen, vi a Jean respirando agitado, igual que yo. Bajé la pata que había levantado para esquivar esas balas que por poco y me daban.
-¿Qué te ocurre, Kate? - pregunta Jean.
-Hay algo allí - dice ella segura -. Iré a ver...
-No - Connor se niega rápido -. Quiero decir... yo iré, ustedes sigan viendo lo de la cena que comienza a hacer hambre.
Él se acerca hacia donde yo estoy, me hace una seña al estar cerca y yo salí de allí lo más sigilosa posible. Connor me cubre y lo escuché regresando con los demás y negando haber visto algo. Suspiré aliviada cuando el peso de la presencia de aquella chica desaparece... Diosa, su presencia es aterradora. ¿Cómo supo que estaba allí?
Necesitaba respuesta espero sabia que ahora no era el momento indicado. Mejor esperar a que Jean pueda venir sin que ella amenace con estar presente... en ese momento le preguntaré todo lo que quiero saber.
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