Narrador Omnisciente...

—¿Desean comprar alguna golosina?.—Gritaba una señora mayor de edad paseando con su carrito, mientras que los chicos estaban sentados en su lugar, Hermione leía el diario, Ron comía y mientras los hermanos Potter escuchaban atentamente.

—Hola jóvenes, ¿Desean alguna golosinas?.—Pregunto la señora.

—Unos drugos y unas varitas de regalis.—Ron pidió asercandose a la señora.

—Harry, ¿me compras unos chocolates?.—Le preguntó su hermana mientras el se asomaba sobre la puerta con Ron, la señora se los entregó pero Ron se quejo viendo su dinero.—Creo que serán los drugos.

—No yo las pago.—Se ofreció su amigo.

—Solo los drugus.—Se decidió Ron volviendo a su lugar.

Narra Harry.

Me aserque al carrito de dulces para comprar los míos y los de mi hermana mientras eleni un grupo de chicas se asercaron allevamtar la vista la observe era hermosa.

—Dos calabazas, por favor.—Le pidió a la señora, ella me miró y con sus amigas supongo se rieron al verme. La señora me preguntó si quería algo y negué sentándome al lado de mi hermana.

—¿Y mis dulces?.—Pregunto y la mire apenado, bufo cruzándose de brazos.

—Esto es horrible, ¿Cómo que no saben quién conjuro la marca?, ¿Acaso no había seguridad?.—Pregunto una molesta Hermione sobre la notícia. A decir verdad había crecido mucho igual que mi hermana, tenía un muy parecido a mi madre lo digo por qué a veces miraba sus fotos y tenía su color de cabello y me daba gracia ya que a veces la confundían con otra hermana de Ron.

—Mucha según papá.—Le contesto Ron con su boca llena, La hermana de Harry rodo sus ojos ante su educación.—Por eso les preocupa.—Ami y Ami hermana nos empezó a picar la cicatriz, la mía en mi frente lado derecho y la de mi hermana en su muñeca lado izquierdo.—Sucedio en sus narices.

—Oigan, ¿Les está doliendo sus cicatrices?.—Nos preguntó Hermione.—¿Verdad?.

—Estamos bien.—Le contesto mi hermana.

—Creo que Sirius debería saber lo de sus sueños, y lo del campeonato.—Nos comento Hermione, ambos nos miramos dando a entender que yo le escribiría la carta por ambos ya que mi padrino Sirius Black le cayó muy bien ai hermana y además la quiere mucho, en mi regazo tenía su carta escribí su nombre y se la entregué a Hedwik mi lechuza, para que se la entregará, ella alzó vuelo y se dirijio al destino de la carta.

Narra Elena.

Luego de un largo viaje en tren llegamos, en el cielo se veía aterrizar un par de caballos algo desiquilabrados, luego del agua salió un barco todos exclamabamos al ver las escenas nunca vimos algo así, Hagrid estaba de guía para que los caballos pudieran aterrizar venía bien pero al darse vuelta un rato y volver a su postura los caballos se desnivelaron y el también tirándose al piso por las dudas de chocarlos. Luego de esas entradas nos dirigimos al gran comedor Hermione se sentó a mi lado mientras que Harry y Ron juntos frente nuestro.

—Ahora que todos estamos aquí, les tengo que contar algo.—Empezo hablar Dumbledore, mientras que las puertas eran habiertas por Filch que entraba corriendo por el largo pasillo.—Este castillo no solo será su hogar, si no también el de varios invitados especiales ya que howarts ah sido...—No pudo seguir ya que Filch llegó a su lado algo cansado, le contó que las visitas estaban listas para ingresar y el profesor le asintio para que el vaya a decirles que se preparen para entrar, luego de eso volvió corriendo, afuera se escuchaba mucha tormenta, por los truenos.—Como les decía, Howarts a sido elejido para la sede de un lejendario evento, "el torneo de los tres magos"—Toda la mesa comenzó a susurrar.—Para aquellos que no lo sepan el torneo de los tres magos reune a tres magos de tres escuelas...—Me diriji a mi hermano.

—Este año será tranquilo Harry.—Le comenté sonriente.

—Esperemos.—Comento el, volví a sentarme.

—...Reune a tres magos de distintas escuelas para unas pruebas mágicas y que quede claro si son elejidos estarán solos, y créanme cuando digo que este torneo no es para los asustadizos , pero hablaremos luego, por ahora demoles la bienvenidas a las señoritas de la escuela de magia de Beauxbatons.—Dijo presentándolas y las puertas se abrieron dejando ver a un grupo de chicas con su uniforme celeste.—...Y a su directora Madame Maxine.—Termino de presentar y las chicas entraron haciendo una reverencia hacia el costado como saludando, mientras largan mariposas.

—Miren eso.—Susurro Ron viendo los traseros de las chicas Hermione y yo lo miramos molestas.

—Valla esa mujer es enorme.—Exclamo sorprendido Seamus viendo a la mujer gigante. Las chicas empezaron a correr para separarse y dos chicas al final llegaron una dando vueltas y la más pequeña unas volteretas hasta llegar al profesor y todos aplaudimos, bueno menos Hermione y yo obvio los muchachos estaban eufóricos, la mujer enorme llegó a Dumbledore y este tomo su mano y la beso como todo caballero.

—Y ahora a nuestros amigos del norte, recibamos orgullosos a los hijos de Dumstrung y su director Higor Carcarog.—Exclamo y un grupo de chicos entraron con un bastón golpeando el piso todo muy coordinados, Hermione y yo nos miramos, luego los chicos corrieron e hicieron dos volteretas y uno desde su varita lanzo fuego haciendo salir un ave, y más atrás venía Krum todo con su tapado.—Miren es Victor.—Exclamo sorprendido y atrás de él venía Higor al llegar se abrazo con Dumbledore amistosamente.

—Higor.—Saludo Dumbledore.

—Albus.—Dijo el otro riendo y palmeando la espalda de su amigo.

Narrador Omnisciente... "Mesa de profesorores".

Ya todos nos encontraban en la mesa sentados, Higor al lado de Snape mientras que el mencionado le servía se miraban con unas caras de matarse. El profesor Dumbledore en el medio mientras que Madame Maxine a su lado.

—Profesor Dumbledore, mis caballos han volado desde muy lejos.—Le explico ella en su tono frances.—Necesitan atención.

—Descuida, Hagrid es nuestro guarda bosque cuidara muy bien de ellos.—Le explico Dumbledore Hagird la saludo con su mano, a su lado el profesor pequeño le quitó una pasa de uvas.

—Pero sabe mesie Hagrid, ellos solo toman vino de malta.—Le hizo recordar. Justo el profesor enano Hiba a tomar su copa de vino pero fue detenida ya que Hagrid se la pincho con el tenedor quejándose se quitó el tenedor.—Eres un tonto.—Se molesto sobando su mano.

En el medio colocaron una torre el profesor Dumbledore se asercó a explicar.—Su atención por favor.—Todos en el salón hicieron silencio.—Quisiera decir unas palabras, la gloria eternaes lo que le espera al estudiante que gane el torneo de los tres magos pero para lograrlo debera sobrevivir a tres pruebas en extremo riesgo...—Explico.

—Fantastico.—Exclamaron los hermanos Weasley.

—...Por está razón el ministerio decidió aplicar una nueva regla, para explicar todo esto tenemos al director del departamento de cooperación mágica, Bartemius Crach.—Presento Dumbledore al hombre de bigote, mientras que otro hombre se asercaba saliendo de la puerta. En eso el techo empezó a tronar y asustar a los chicos el hombre del ojo de vidrio salió de su escondite apunto su varita al techo y calmo todo se asercó al profesor Dumbledore.

—Ya vieron es ojo loco mudi.—Explico Ron a sus amigos.

—¿Por qué le dicen así?.—Le preguntó su amiga, hermana de Harry.

—Alastor Moody, ¿El cazador?.—Pregunto su otro amiga Hermione.

—De magos tenebrosos por el las seldas de Azkaban están repletas.—Les volvió a explicar.—Dicen que ya está completamente loco.

—¿Que creen que esté tomando?.—Pregunto de nuevo su amiga Elena, observando al hombre que ingreso.

—No creo que sea jugo de calabaza.—Le contesto su hermano.

—Estipudo techo.—Se quejo el.

—Gracias amigo.—Le agradeció Dumbledore.

—Despues de un largo análisis, el ministerio decidió que por su seguridad a ningún estudiante menor de 17 años se le permitirá participar...—No pudo seguir ya que todos los chicos se empezaron a quejar sobre dicha regla que estaba contando...—Y la decisión a Sido definitiva—El hombre se puso nervioso ante tanto griterío y el profesor Dumbledore a asercó.—¡Silencio!.—Grito haciendo cayar a sus estudiantes, mientras que el asercaba su mano a la lápida y la sacaba haciendo ver un caliz con su llama azul.

—El cáliz del fuego, quien desee participar solo debe escribir su nombre en un pedazo de papel y lanzarlo a la llama antes del jueves a esta misma hora piensenlo con mucho cuidado, de ser elejidos ya no hay escapatoria, el torneo de los tres magos da comienzo.—Termino de explicar el profesor Dumbledore.

Esa misma noche un hombre de cabello negro y barba se asoma a la puerta del gran comedor, para luego entrar de espaldas y fijarse de que nadie lo vea, al entrar giro y sonrió asercandose al cáliz colocando un solo papel con los dos nombres de los niños que sobrevivieron.

"A los Hermanos Potter no saben lo que les esperan los siguientes días".

1528 palabras.